ERA UNA COSTUMBRE PARA VIOLET VISITAR EL CEMENTERIO, TANTO QUE HASTA LOS EMPLEADOS QUE MANTENÍAN EL RECINTO LIMPIO ESPERABAN EL VERLA LLEGAR. Era una visita habitual, aparecía todos los meses el mismo día a la misma hora aparte de las ocasiones especiales como el aniversario de su boda o el cumpleaños de Regulus. Iba dejando huellas en la nieve a cada paso que daba mientras se adentraba en el cementerio de la familia Black ( en el que, por cierto, había muchas tumbas a causa de ser una amplia y antigua familia y de los muchos niños que murieron siendo jóvenes debido a la procreación en muchos casos entre familiares ).

Apenas aparecía gente por ese sitio, es más, la mujer dudaba que muchos supieran del lugar. Solamente hubo movimiento de magos durante el funeral de Orión y más tarde Walburga Black, y no volvió a encontrarse con ninguna persona desde entonces. Todas las tumbas siempre estaban pulcras y sin decoración a excepción de la del menor de los Black, la cual tenía un centro de flores violetas y un marco de fotos encantado para que no se volara ni estropeara. El ambiente inspiraba tristeza y melancolía por lo que Violet se esforzaba por mantener la compostura intentando que su cabello no cambiara de color ( porque, para ella, ver sus mechones tornar un tono grisáceo significaba que todos esos sentimientos tristes realmente estaban ahí ).

Esa vez cambió el centro de flores por uno nuevo notando que alguien había dejado un ramo un tanto improvisado de flores del campo. Inconscientemente sonrió sabiendo de quién se trataba, comprendiendo que daba igual lo que uno u otro hubiera hecho, siempre tendría aprecio por Regulus. También limpió el cristal del marco de fotos que tenía un poco de escarcha dejándolo en su sitio y simplemente se quedó allí, observando la inscripción de la lápida en silencio.

REGULUS ARCTURUS BLACK

16 ABRIL 1961 - 26 DICIEMBRE 1979

amado hijo y esposo

la estrella más brillante de nuestro cielo

A Violet se le hacía muy raro hablar con una tumba que realmente estaba vacía ( ya que el cuerpo nunca fue encontrado ), pero con el tiempo se dio cuenta de que la constante presión que sentía en el pecho se disolvía un poco al contarle a su difunto marido cómo le había ido el día a ella y a los gemelos. Y daba igual los años que pasaran que ella siempre notaba alguna lágrima traicionera caer por su rostro, creando un río de pena que solamente mostraba en ese lugar. Solía pasar una hora hablando o solamente llorando en silencio cuando realmente estaba nostálgica, pero algún día, se decía, ya no iría solamente a llorarle, sino que tal vez recordaría todos los momentos buenos que tuvo a su lado y la tristeza sería distinta.

Alguna vez también se encontraba algún ratón o gato que se había colado entre los barrotes rondando por ahí  y debía sacarlo para que no estropeara nada y ese día fue el caso. Por lo que, decidiendo que llevaba mucho rato fuera de casa teniendo a sus sobrinos y queriendo pasar el máximo tiempo posible antes de que regresaran a Hogwarts, agarró entre sus brazos al peludo animal anaranjado ( dando gracias a Merlín que fuera un felino y no un ratón o rata ) y salió de allí dejándolo fuera tras acariciarlo y que este ronroneara moviendo su cabeza hacia las manos de la mujer.

Finalmente vio como el animal se marchaba hacia otro gato y ella desapareció del lugar para llegar hasta la cocina de su casa.

(...)

LAS VACACIONES DE NAVIDAD HABÍAN TERMINADO y los dos muchachos de cabellos blancos como la nieve que los rodeaba regresaban al tren que los llevaría a Hogwarts para seguir con su curso. Violet se había despedido de ellos y en esos instantes observaba cómo los vagones comenzaban a moverse dejando atrás una barrera de humo. Estaba bastante preocupada, no lo iba a negar. Pocos días después de Navidad Idylla le había confesado que sus sueños estaban empeorando a pesar de tomar las pociones de Snape y su té. La mayor Yaxley era consciente de que sus poderes iban a más y tenían que encontrar una cura o remedio para que la muchacha no perdiera el control ni la cordura.

Sabía que su sobrina se cerraría aún más no por miedo al rechazo o a que le hicieran daño ( que también estaba a veces, no lo negaría ), sino a hacerle daño a alguien. Las visiones tenían distintas fases de desarrollo, comenzaban con soñar algún color, forma u objeto . Después todo tomaba forma siendo visiones más complejas aunque subjetivas con simbolismos, siendo esa la fase de la joven. Más adelante se volvían más precisas pero también más realistas, significando que Idylla podría sentir dolor físico a pesar de no ser real. Y por último, la fase más peligrosa, una en la que, si perdiera el control puede que no pudiera despertar por si misma, vagando entre la vida y la muerte hasta que su sufrimiento terminara de cualquier manera.

La metamorfomaga no era una experta en este tema pero había recopilado toda la investigación familiar, leyendas, libros... que había relacionado con el tema. Le aterraba que su pequeña acabara como su abuela, puede que tuviera ayuda que la fallecida no tuvo en su momento pero, ¿sería suficiente? Tenía que seguir buscando respuestas, nunca se rendiría. El tiempo estaba desapareciendo y no podía perderlo con cosas tan triviales para ella como la carta que le habían mandado desde el Ministerio para hacerle unas preguntas respecto a la huída de Sirius Black.

Porque sí, parecía que ella era una sospechosa de ser la posible complice del hombre solamente por haber estado casada con su difunto hermano. Y eso demostraba a la mujer lo desesperados que estaban, que no tenían ni idea de lo que sucedía, que no tenían el control de la situación.

El Ministerio de Magia estaba jugando a un juego del que no tenían ni idea y estaban en clara desventaja. Oh, y quién diría que pasarían los años y el juego no cambiaría a pesar de los distintos jugadores.

Un capítulo un poco intenso de emociones y hacerme caso cuando os digo que en un par de capítulos ( más o menos, todavía lo estoy estructurando ) habrá una gran revelación, bastante importante, algunos me odiaréis, otros me amaréis... Pero es vital para la trama y lo tenía planeado desde que comencé la historia. Tranquilos, no voy a matar a nadie ( por ahora ) pero lo que se viene va a crear muchos conflictos tanto internos como entre los personajes.

Y cuando finalmente llegue a publicar eso podré actualizar Black & Red, de la cual ya tengo terminados un par de capítulos, así que me esforzaré por publicar los nuevos de Yaxley durante la próxima semana para poder seguir con mi querida Coraline. Además, próximamente sabremos la versión de los hechos de Idylla en Bad Dream y cuando tenga todas las historias al día podré comenzar el primer acto de Dark Times, ambientado en Harry Potter y el cáliz de fuego.