PARECÍA MENTIRA QUE EL CURSO HUBIERA TERMINADO y que el verano por fin llegara. El resto del curso se pasó volando para Violet y cuando quiso darse cuenta estaba de nuevo junto a sus padres y hermano. Cassandra oficialmente había terminado su séptimo curso en Hogwarts y tras recoger todas sus pertenencias desapareció de sus vidas no sin antes esconder en la habitación de su hermana una carta ( encantada para que solo ella pudiera leerla ) y decir a su madre cuanto la detestaba añadiendo que se iba a vivir con su novia, bruja nacida de una familia muggles. Aquella noche ni su padre pudo calmar los gritos e ira de Margaret Yaxley.

La relación de Regulus y Violet no era oficial en esos momentos, ni siquiera ellos sabían qué eran, novios, amigos con derecho... De lo que estaban seguros era de que no eran solo amigos. A principios de verano solían mandarse por lo menos dos cartas a la semana, pero con el paso del tiempo las cartas comenzaron a ser más cortas y menos regulares. Lo único que pensaba la pelirroja era si había dicho o actuado mal, si había conocido a alguna persona más bella, inteligente o interesante que ella. Gracias a su madre sus inseguridades la habían acompañado desde pequeña y por una vez que sentía que lo que hacía era correcto, ocurría eso.

No quería hablar de ese tema con nadie, eran tantas las dudas, miedos e inseguridades que tenía, que simplemente se limitaba a callarse y fingir estar bien. Pero no lo estaba. Era como si haber vivido tantos momentos buenos hiciera que ahora tuviese que pasarlo mal. Primero ver como poco a poco Regulus se distanciaba de ella, también que su hermana se fuera y más tarde notar como su hermano siempre llevaba manga larga en su presencia sin importar el calor que hiciera. Pensó en preguntar por Regulus pero cuando visitó su casa y los señores Black le confirmaron que no se encontraba ahí ya que estaba ocupado una sensación asfixiante se apoderó de ella. Al fin y al cabo, su propio hermano, Sirius, le había advertido a finales de mayo sobre ello.

Era una tarde tranquila en la que ya comenzaba a notarse el calor del mes que se avecinaba. Violet había decidido darse un pequeño descanso de estudiar para los exámenes finales de su curso dando un paseo por los alrededores de Hogwarts. A lo largo del camino se cruzó con alguna que otra persona, pero no la pararon hasta que llevaba más de la mitad del terreno recorrido. Su cabello era largo, como de costumbre, y sus ojos eran imposibles de olvidar ya que eran idénticos a los de su hermano Regulus.

―Que increíble casualidad haberte encontrado Violet. Llevaba tiempo intentando hablar contigo pero por razones desconocidas siempre que te localizaba acababas escapándote y yo malherido, que cosas ¿no?

―Tal vez Black deberías haber pillado la indirecta de que no quería hablar contigo. Pero como siempre tardas más que las personas normales en procesar la información te lo pondré fácil. No quiero nada contigo ni de ti.

―Ahora ya sé por qué le gustas tanto a mi hermano, no le van las que se muerden la lengua, ¡ay! Perdona mejor me callo, iba a decir un chiste pero siendo como eres seguro que le encontrarías el doble sentido y no te haría mucha gracia...

―Por favor, dime ya lo que quieres. Pero luego me dejas en paz.

―Por supuesto preciosa, además, he quedado con una pelirroja preciosa, no querría hacerla esperar. Volviendo al tema, Violet, tienes que tener cuidado. Sé que no has escuchado a tu hermana y sinceramente solo hago ésto porque le importas a ella y a Regulus, pero corren tiempos peligrosos y no es que te rodees con la mejor gente del mundo. A lo que voy es que tu hermano ya ha elegido el mal camino y me temo que mi hermano va a hacer la misma estupidez. Por eso te pido que hagas lo que hagas, piensa en lo correcto. Se acerca tu turno de elegir y solo tú tienes que tomar la decisión, está en tu poder hacer lo correcto o no.

Las palabras del mayor de los Black sonaban tan serias y pensadas que parecía estar hablando con otra persona. Era tan... Tan poco Sirius.

―Ya te dejo tranquila, pero... Una última cosa, cuida de Regulus ¿vale? En el fondo, fondo, fondo, es un buen chico que se deja guiar por la harpía de nuestra querida madre. Adiós linda.

Era muy fácil para él decir eso, Sirius ya había pasado por la parte difícil. Ya había elegido y optó por huir de su hogar, desde el punto de vista de Violet había sido por una parte valiente, sí, se había revelado e ido. Pero por otra parte también fue un cobarde huyendo de sus problemas, dejando a su hermano atrás. Tal vez las cosas hubieran sido distintas si él se hubiera quedado a pesar de todo y proteger a Regulus de todos aquellos ideales erróneos de la pureza de sangre. En esos tiempos si por lo menos un miembro de una familia no de unía al Señor Tenebroso, esa familia era considerada traidores de sangre por no apoyar la causa.

La metamorfomaga fue educada con unas ideas erróneas y falsas. Se dio cuenta de eso cuando llegó a Hogwarts, fuesen quien fuesen tus padres, magos o muggles, valían tanto como ella. Hacían magia como ella. Y los muggles al fin y al cabo eran personas de carne y hueso como ella, con problemas e ideas, sentimientos y emociones, con amigos y familia. Que no tuvieran magia no les hacía inferiores, en todo caso tendrían que recibir más merito. Hacían todo sin magia, cocinar, limpiar, luchar, sanar, educar... Pero todos esos pensamientos tenía que guardárselos para si misma. Ya que mataban a aquellos que pensaran así, por lo tanto fingía delante de todos.

Sus padres habían anunciado días atrás el compromiso de su hermano Maximus y Evelyn Rowle. La boda estaba planeada para noviembre de ese mismo año ( a la que no podría asistir ya que estaría en Hogwarts ) pero ambas familias iban a organizar una cena para celebrar la unión esa misma semana. Solamente las familias y miembros más cercanos a los prometidos iban a asistir. Tal vez por eso su padre estaba tan tenso cada vez que hablaban. Deseaba que llegara el día del evento para poder ver al menor de los Black. Pero lo que no sabía era que su vida estaba a punto de cambiar para siempre.

¡Como prometí en este capítulo aparece Sirius! Además de la pequeña mención de su crush por una pelirroja ( wink wink ). Pero las cosas ya comienzan a ponerse interesantes y puedo asegurar que en el siguiente capítulo el caos se va a desatar. Como dato curioso el apellido Rowle pertenece a los Sagrados Veintiocho. Sé que no ha ocurrido mucho en este capítulo pero quería mostrar el dilema interno que nuestra querida metamorfomaga tiene. Puede que piense de una manera pero fue educada de otra y cada persona espera algo de ella, siendo la pobre incapaz de actuar.