Yakko no pudo haber mostrado una sonrisa más tierna cuando vió regresar a su amigo agarrando las manos a sus hermanos, y a estos comiendo felices algodón de azúcar.

-Wow, se divirtieron, ¿eh?- el mayor de los Warners se acercó hacia les recién llegades, ayudando a cargar los premios que Wakko y Dot habían ganado en la visita con Max a la feria.

-¡Max es genial! Nos acompañó a la montaña rusa, nos mostró los mejores puestos de juegos y conoce muchos restaurantes geniales!- Wakko seguía nombrando lo bien que se lo había pasado entre mordiscos al dulce.

-¡Estoy de acuerdo! Yakko, aprobamos totalmente tu relación romántica con Max.- comentó la hermana Warner antes de retirarse con su hermano a descansar después de un largo día, dejando a dos adolescentes totalmente sonrojados.