Llevo 22 horas despierta y lo único que he hecho es llorar.
Llorar y desahogarme bajo las mantas de mi cama.
No veo un astibo de luz por ningún lado, solo veo dolor, dolor que me ha causado la vida.

Las cartas de me enviaron y los regálos son demasiados bonitos y eso me hace comprender que si no fuese salido del auto a tiempo ya no estuviera en este mundo como una persona, si no como el recuerdo de lo que un día fui.

La tarjeta de Daniel es la que más he leído, no lo culpo de nada, nadie sabe quién rayos puso esa maldita bomba en el auto.

Lloro al recordar el vivido momento.
Sentada en mi cama, con las cartitas en mi mano, sintiendome sola. Lo único que hago es llorar.

No he visto a papá, no me da la cara, la servidumbre es la que siempre está al pendiente y Jessica es la que me informa todo.

Las horas pasan y sigo en la misma posición.
Todo me recuerda a aquella vez que perdí a la mejor amiga de este puto mundo y por ello me maldigo una y otra vez.
He perdido una madre, he perdido una amiga, he perdido una carrera y he estado a punto de morir.

<<¿Qué más sigue?>>

Limpio mis lágrimas y surgen más al recordar <<dulces sueños gatita>>

Odio tanto esa maldita voz.

Miro el reloj aue marca 3:40am y me acuesto mirando el techo.

El sueño me gana y vuelvo a dormir.

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Jessica.

Alyx es la chica más hermosa que he podido cuidar, durante todo este tiempo he sido su nana, la he cuidado y a veces siento que no es suficiente.

Su madre huyó como una vil cobarde, o tal vez no fue cobardía solo cumplió con el rol que le estipulaba el mi jefe.

Siempre he querido dañar a ese hombre a "Alex Evans" <<Maldito>>.
Es tan terco, testarudo, obstinado, orgulloso, egocéntrico y demás que he luchado miles de veces por dañarlo de alguna manera.
Es el tipo de hombre que cualquier mujer ve por la calle y se enamora pero dentro de ese ser está algo llamado maldad. Pero yo cai en la tentación de diablo y ahora estoy pagando el precio.

Él sabe que no le tengo miedo y no descansaré hasta verlo destruido.

Y hablando del Rey de Roma, entra a mi habitación a largos pasos.

-Dime que no tuviste nada que ver.- me pregunta y en sus ojos veo odio puro.- ¡DIME!.

-¿Tanto desconfías de mi?.- sinrío y me pega de la pared.

-¡Lleva horas despierta y aún no consigo al maldito culpable!.- me grita.- Y a la que más veo sospechosa es a ti ¡Maldita puta!.

-¡Puta y todo pero te dí dos hijas!.- lo señalo con el dedo índice.

-¡Las cuales perdiste!.- me hecha en cara.

-Las perdí porque tu orgullo no dejó que una puta sirvienta fuese la madre de esas criaturas.- le clavo un dedo en el pecho.- Me has condenado y me he cobrado pero es suficiente maldito bastardo.

-¿Bastardo, yo?.- se burla.- Bastarda otra, que me ha arrebatado a mi hija en mi propia casa.- me encuella.- ¡Eres una puta basura!, me ha dolído lo de Brenda y lo único que espero es que no le hagas nada a Alyx porque te aseguro que tus días estan contado.- me suelta.

-Vamos, correme como haces con los demás empleados.- lo reto.

-Eso es dejarte la vía libre.- Clava el azul de sus ojos en la esmeralda de los mios.- Y no quiero darles explicaciones a mi hija y por más que odie tenerte aquí me hace sentir seguro, eres una amenza.- cierra la puerta y yo ahogo un sollozo, no puedo creer que en algún momento me haya enamorado de esa bestia.

Arreglo mi ropa y bajo, encuentro a Alyx con mi hermana menor. <<Hela>>.

Mis padres siempre fueron de clase media y yo como toda adolescente hormonal me les descarrilé y agarré la mala vida, donde todo es alcohol, sexo, droga y más... A los 17 años comencé a trabajar en un bar y ahí fue donde conocí a Alex, él hombre que me prometió tantas cosas. Cuando quedé embarazada mi familia me dió la espalda y Alex no estaba preparado para tener hijos y en mi vientre estaban dos. Todo se fue por la borda y aquí quedé como la nana de Alyx ya que a Brenda se la llevó otra familia por negocio.
Mis padres murieron y yo tuve que cuidar a Hela, cosa que me cuesta medio sueldo.

-Señoritas.- saludo.

-Hola, Jess.- saluda mi hermana.

-Hola.- es lo único que contesta mi hija.

-¿Como te encuentras?.- le pregunto ya que se ve triste.

-Bien.- se esfuerza en sonreír.

-Las dejo.

Me encamino a la cocina y el sonido del celular de la casa me hace regresar por la sala secundaria.

-Casa de los Evans.- descuelgo.

-¿Jessica?.- pregunta Silvana.

-Si.

-Ay amor.- suspira.- Todo fue un éxito con lo que pediste.

-Te pedí un susto, no que la mataras.- me cruzo de brazo.

-Tranquila mujer.- se ríe al otro lado de la línea.- Fue todo un show, tenías que ver la cara del ogro ese, era un espectaculo.

-¿Cuanto te debo?.- cuestiono, ya este tema me harta.

-Déjalo así, con todo el desastre basta y sobra.

-Cuando yo te diga que es un susto ¡es un susto!.- me altero.- Casi que mue...

-¿Que susto?.- me preguntan desde atrás tensandome toda  y se quién es.

Cuelgo.

-Hice una pregunta, ¿de qué susto hablas, Jessica?.- volteo para ver la pequeña de ojos celeste.

-De un asunto familiar.- sonrío.

-No sabía que los empleados podían hablar con sus "familiares".- hace comillas en el aire.- Por el teléfono de casa.

-Mala mía.- digo.- Lo siento, no volverá a pasar.

-Espero que no.- masculla.- Y ahora dime, ¿que susto?. Sabes perfectamente que cualquier cosa sospechosa te pone en riesgo después de lo me pasó.

-Lo sé corazón.- me las apaño para llorar.- Jamás, jamás haría algo en tu contra mi niña.- mis lágrimas ruedan por mis ojos.- No puedo creer que desconfíes de mi, siendo yo la única figura materna que has visto siempre.- se me quiebra la voz.

-No lo sé, ya no confío ni en mi sombra.- suelta dura como un acero.- ¿No has visto a papá?.

-Si amor.- me limpio las lágrimas.- Debe de estar en el despacho.

Se da vuelta para irse pero se vuelve hacia mi.

-No quiero que llames ni recibas llamadas de nadie, ¿quedó claro?.- enarca una ceja.

-Si.

-Bien.

Se va.

Tan hija de puta como su padre.
Dios mío que la vida está dandome donde más me duele.

Odio a ese hombre y mi hija, resulta ser identica a él.

Silvana es mi tía menor, la cual hace cualquier cosa por dinero ya está hambrienta de money.
Su esposo es un embajador y aún así ella siempre quiere más.

La muerte de mi hija Brenda se salió de control, todo fue un caos ya que contrató a la persona menos indicada, yo quería un secuestro y todo resueltó ser una violación y matanza que dejaron a Alyx con algúnos traumas.

Me encamino nuevamente a la cocina y la llegar a mi destino choco con el ser que más detesto.

-¿Dónde está mi hija?.- pregunta puñalando mi corazón al decir <<Mi hija>>.

-Debe de estar buscandote en el despacho.- miro a Susan la cocinera.- Pasticho para la cena de Alyx.

Alex se va y yo me ocupo en preparar la cena de mi niña.

Al estar todo listo, subo para llevarle su alimentación.
Al entrar la encuentro pegada en la lapto con el ceño fruncido.

-Aquí está la cena cariño.- informo y no me presta mucha atención porque sigue mirando su lapto.- ¿Qué miras?.

-Un vídeo algo sospechoso.- dice sin mirarme.

-¿De quién?.

-De Silvana con la mujer que llevó el auto.

Mis alarmas se alteran y me le acerco.

-¿Qué hacen que la ponen como sospechosa?.- cuestiono lo más casual.

-¿Conociste a tía Silvana?.- me pregunta mirandome por primera vez.

-Claro.- sonrío.- Es una mujer de cara amargada y corazón noble.- miento.- ¿Por qué?.

-Es que en el vídeo demuestra que Silvana hablaba minutos antes con la mujer que nos entregó el F1.- piensa por un momento - Pero a la vez parecen muy buenas amigas así que no hay nada que las ponga en evidencia.- suspira.

Pone a rodar el vídeo y se ven algo comprometedoras pero saben disimular muy bien.

<<Tía Silvana es la mejor>>

Alyx, se harta del tema y apaga la lapto.

-Papá me dijo que tengo que volver a la prepa la próxima semana.- habla mientras come.

-Ya es hora es que dejes todo esto atrás y sigas adelante, cariño.- le acaricio la cara.- No es muy bonito que a último año bajes las notas.

Hace una mueca.

-Pero...

-Hija.- es interrumpida por su padre que entra a la habitanción con cara de pocos amigos.- Jessica sal de la habitación.

-Como ordene, señor.

Salgo y me pongo a planchar una sabanas que tengo en espera desde hace días.

Me joden las actitudes de Alex, lo odio con toda mi vida. Y por eso es que le hago lo que le hago, sin importar a quién me lleve por delante.

Camino a mi habitación cuando ya está todo listo.

Entro y...

-¿Silvana está metida en el accidente?.- pregunta mi jefe antes de que cierre la puerta, luce pijama y se ve jodidamente bueno.

-No sé de qué hablas.- le resto importancia.

-Claro.- se aleja y yo termino de cerrar la puerta con pestillo, ya Hela está dormida y lo único que quiero es descansar.

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Alex.

Pensé que las cosas entre Jessica y yo si funcionarían, la conocí en un bar de media luna y bastó con verla para enamorarme.
Mis padres no aprobaron nuestra relación y nosotros la mantuvimos clandestinamente.

Su familia era de clase media y ellos tampoco apoyaron nuestra relación.
Eramos de clases muy distintas pero eso no nos importó.

Cuando Jessica resultó embarazada, me sentí muy feliz pero ella solo quería abortar sin que yo me enterará.
Busque ayuda, la llevé a los mejores médicos, le dí lo que ella pedía y aún así no bastó.
Cuando cumplío siete meses de embarazo lo volvió a intentar, poniendo así a las dos niñas en peligro.

Todo fue tan rápido que la cesarea era lo único que podía salvar a mis hijas.

Con tanto dolor y desepción, la tomé como la nana de sus propias hijas.

Quería verla como una esclava. Esa mujer estaba mal de la cabeza.

<<¿Quién en su vida hace algo tan retorcido?>>

Metí a muchas mujeres en está casa, delante de ella y eso no me hace culpable.

Ella es una escoria que no merece ni vivir.

A Brenda, se la tuve que dar a mi familia lejana para que la cuidaran y yo solo me quedé con Alyx.
Mi otra hija venía todos los fin de semanas para compartir.
Tuvimos que montar una mentira de que todos eramos amigos y con el tipo Brenda y Alyx eran mejores amigas.

Hasta que pasó el accidente y más nunca la pude ver.

Me levanto y busco la ventana que da al jardín.

Me duele mucho verla mal, sé que está preocupada y yo también lo estoy. Sé lo que hubiera pasado si mi bebé no fuese salido del auto.

Pero tarde o temprano encontraré al mal nacido o a la perra que hizo todo ese show.

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Holaa, otro capítulo de Ya No Duele.
¿Qué les parecio en capítulo anterior?
Haganme lo saber en los comentarios por favor.
Y si te está gustando la historia, vota por ella.

Disculpen los errores en la ortogafía.

Esté capítulo me gusta mucho, tiene tanto que revelar.
Tantas cosas que nuestra protagonista no sabe.

Se les quiere mucho.

Besitos.
Dou.