—¡AHHHHHHHH!.

—¡AHHHHHHHH!.

Es lo único que ambos pueden emitir, YoonGi sonriendo y Hoseok con sus ojos cerrados, sus manos se encontraron en todo el ajetreo, sujetándose entre sí como si la vida dependiera de ello...

Aunque podría.

Las tazas giraban como un torbellino, las personas aglutinadas en la cabina no hacían más que gritar y otras...aguantando las ganas de vomitar, Min YoonGi estaba atento a cada uno de los individuos. Cuidando de que los fluidos gástricos—También conocidos como vómitos.—no cayeran de lleno sobre el o sobre HoSeok.

Quizás debió pensar muy bien su elección como primer juego de la tarde, aunque no le importaba mucho. Pero, algo que caracterizaba a YoonGi y su lobo era el orgullo...y en verdad Min YoonGi se ha tenido que rebajar a ser cualquier cosa por el Omega.

Porque lo valía y lo vale.

Vale la pena hacer locuras por la persona que le gusta, vale la pena atentar contra su propia vida—en términos exagerados—si es por el amor de su vida, vale la pena olvidarse del orgullo y reputación—no muy buena—por el chico que le roba los suspiros de cada día, vale la pena asumir la culpa con la frente en alto por el chico que hace latir su corazón desenfrenado. Por el chico que su corazón decidió amar.

Porque el corazón es el mecanismo que se encarga de manejar el sentimiento más poderoso de todos:

El Amor.

Amor, una simple palabra...es la breve explicación del torbellino de Sensaciones que un chico o chica primerizo o conocedor de dicha experiencia siente cuando nos atrae una persona. Banal y mínima para aquellos ignorantes o carentes del sentimiento, importante y especial para aquellos alfas, omegas y betas que tienden a sentirlo por lo menos una vez en su vida...

Y YoonGi en verdad se siente afortunado de encontrar el amor de esta manera, con percances y tropiezos pero...un amor a fin de cuentas.

Por otro lado, hoseok no es un veterano, pero si conoce el amor y su significado...pero. Exceptuando la parte teórica de dicha palabra. En la práctica, fracasa. Es decir, ¿Que se podría esperar de un chico Omega, virgen. Que nunca a sentido tales síntomas?...

—Eso fue...—. Comenzó el alfa.

—Asombroso...—. Terminó el Omega, para desviar su mirada a su acompañante. Notando como su cabello estaba despeinado y totalmente desordenado, probablemente a causa del viento que provocó los giros del juego—. ¿Quieres ir a comer algo?—. Preguntó.

YoonGi, que hasta ahora mantenía su vista plantada en el frente, lo miró. Esbozando una pequeña sonrisa—. Si, claro.

[…]

—Sigo insistiendo en que, todos los algodones de azúcar saben exactamente igual—. Dijo YoonGi, mirando la mencionada, como si fuera una fórmula muy díficil y sin explicación—. No importa el color.

Aunque los algodones de azúcar no tenían mucha ciencia...solo azúcar y una máquina preparadora de estás bastaba.

HoSeok, le daba un buen mordisco al suyo, degustando y disfrutando de la nube azucarada

—Mentira, el verde sabe mejor que todos los algodones del planeta—repuso hoseok, soltando un sonido gustoso por el sabor que bailaba en su paladar.

—Solo porque es tú color favorito, nada más.

—¡Shhht!, Todos aman el color verde YoonGi...

—Pero a mi me gus-...

—Todos.

—...Si tú lo dices...

[🐺🐺🐺🐺🐺🐺🐺🐺🐺]

Lobitos/as! Aquí les dejo un nuevo capítulo, espero y sea de su total agrado...

Una pregunta:

¿Coinciden con hobi?, ¿Les gusta el verde?.

¿Creen que los algodones de azúcar sepan diferente solo por su color?.

En fin, gracias por sus votos, comentarios y todo el amor que le dan...en serio siento que no las/os merezco. 💝

Para aquellos que estaban informados del próximo proyecto...quiero que sepáis—y discúlpenme por este cambio repentino—que el proyecto planteado no será realizado...lo lamento de verdad, tengo que pensarlo bien...

Pero, como compensación se estará publicando un One-shot al finalizar esta historia.

Gracias por su atención.

Feliz día/tarde/noche 🐾 🐾💕.