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Con cuidado atrapé a bolita, no le gustaba que lo molestará cuando salía a pasear a menos que le pusiera una correa. Bolita me quería mucho solo cuando le convenía, y en ese momento me quería por el suave ronroneo que se escuchó, guarde con cuidado la carta en la bolsita de mi vestido y seguí a la señora Potter a la enorme mesa en forma de rectángulo.

Esperamos un momento, la tarta se vio deliciosa pero no podíamos empezar porque James no bajaba. Nerviosa moví los pies, adelante y atrás, bolita dormía en mi regazo, acaricie su suave pelaje blanco.

— ¡Mamá! ¡No puedo atraparla! ¡La snitch es muy rápida!

La señora Potter se asustó o eso creí cuando su rostro a perlado se puso pálido un momento. Me pidió volver otro día, que ella me diría cual para poder merendar más tranquilamente. Me acompaño a la puerta con bolita en mis brazos y me sonrió con dulzura antes de volver a su casa y cerrar la puerta.

¿Qué es una snitch?

Al volver a casa me olvidé de la carta, deje a bolita en su cama y me acosté en la mía pensando que tipo de juguete podría ser una snitch para asustar a la señora Potter. Mi hermano y hermana tenían juguetes a control remoto que molestaban mucho a las visitas, a veces papá los escondía para evitar eso pero mis hermanos siempre los encontraban. Tal vez era un juguete a control remoto o con baterías que una vez funcionaba era difícil apagar.

Busca en el diccionario eso siempre decía mi abuelo cuando no comprendía una palabra. Baje de la cama, busque entre mis libros de la escuela el más pequeño de color rojo, lo abrí y fui directos la S.

Después de un momento no encontré nada, confundida busque de nuevo, tal vez con N, pero obteniendo el mismo resultado. Intenté con la T pero nada, bufé molesta, se suponía que el diccionario contenía todas las palabras escritas por el hombre.

Indispuesta a darme por vencida, baje las escaleras. Toque con cuidado la espalda de mi madre, cuando ella estaba en la cocina no le gustan que la tomarán por sorpresa. Una vez vi que papá lo hizo para sorprenderla y casi le caí encima la sopa hirviendo.

— ¿Qué pasa?

— Mami ¿Qué es una snitch?

Mi madre era una fuente de sabiduría, lo sabía todo como mis abuelos, incluso más que mi papá.

— ¿Dónde lo escuchaste?

— De...un...vecino — dudaba el decirle, por pena.

— Y ¿Qué fue lo que dijo?

— Que no podía atraparla, que era muy rápida — al ver el brillo en los ojos de mi mamá supe con certeza que me daría la respuesta.

— Debe ser un juguete con baterías — sonrió — ¿A dónde fuiste hace un momento?

— Ah...bueno, fui...me encontré con la señora Potter y...James

— Ya veo.

— Me invitó a merendar, pero James no atrapó la snitch y me dijo que después podíamos merendar.

Baje la mirada viendo mis manos nerviosa, pero mi madre me acarició la cabeza y cuando la vi mi mamá me sonrió con amor, ella me entendía y yo a ella. Mi papá decía que teníamos una conexión.

— Bueno, cuando te invite hay que hacer nuestras galletas especiales para que las pruebe James.

— ¡Si!

Emocionada, me acerque al refrigerador buscando los ingredientes, nos faltaba el chocolate. Recorrí las alacenas de la parte de abajo, harina, una sonrisa se formó en mi rostro, faltaban pocos ingredientes y le comenté a mamá, ella solo sonrió, le encantaba ir de compras. Las dos siempre nos divertimos en ellas.