"quiero tener un hijo contigo"

Maldita sea, porque seguía dándole vueltas al asunto, por que no sólo lo ignoraba y ya.
Estúpido Zaphiri, como se le ocurre hacerle semejante proposición, debió decirle que estaba loco y después encerrarlo en un ataúd de hielo debido a su proposición indecorosa y...y...y...no lo hizo.
Solo se había asustado, aunque no lo aparentara, le dió una rápida mirada y se dió la media vuelta para ir a su templo, no dijo ni si ni no.
-un bebé....
La idea no le parecía tan descabellada, sería lindo tener un hijo, carne de su carne, después de todo por algo los Dioses le habían dado la oportunidad de poder concebir...no.
Cómo se sentiría cargarlo, tocar unas manos tan pequeñas, verlo moverse, sonreír y....no,no,no! En qué carajos estaba pensando! Esa vida no era para él, él era un caballero de Athena, dedicado solo a luchar y proteger la tierra, nada más. Él no podía tener familia o una vida normal... verdad.
Desganado decidió mejor salir y dar una vuelta, estar encerrado en su templo lo estaba volviendo incoherente.
Bajo las escaleras poco a poco, al llegar a escorpión se detuvo unos segundos, dudando si entrar o no, le pareció ridícula la idea y entro, no había nadie ahí, el templo estaba vacío y lo sabía porque por algún extraño motivo se encaminó al área privada a revisar, Zaphiri no estaba. Elevó los hombros restando importancia y continuó su camino.
El pueblo de rodorio estaba muy activo, la gente corria de un lado a otro llevando canastas, flores y demás, se preparaban para celebrar la derrota de Hades.
No le gustaba mucho convivir con la gente pero tampoco deseaba pensar tonterías en su templo. Tras comprar algunas golosinas se sentó en la fuente a observar, de verdad los pobladores eran muy escandalosos.
Observo a unos jóvenes discutir por ver quién se acercaba primero a una chica, la cual les miraba de reojo jugando con su pelo, más discreta no podría ser. Al fondo el panadero diacutia con su vecino sobre la gracia del perro de éste, a nadie le gusta que ensucien su entrada, gracias a Athena estaban prohibidos los animales en el santuario.
Continuó admirando el paisaje hasta que su vista se clavó en unos niños que jugaban un par de metros adelante,los chicos gritaban  emocionados corriendo de un lado a otro, persiguiendose, vio como se empujaban, corrían entre los puestos, entren la gente, gritando a todo pulmón.
Tsk! Chasqueo la lengua molesto, otro motivo para no querer un niño, odiaba el escándalo,no soportaría que un mocoso se la viviera corriendo por toda la casa  de acuario, o peor aún, en su biblioteca,agarrando sus libros con las manos sucias y llenas de mocos, wakh!
-niños, dejen de correr.
-ahhhhh!
Por que gritaban y sonreían, que no ven que los están regañando, tsk! Definitivamente nunca dejaría a su hijo juntarse con esos mocosos, él si lo educaría como es debido.
Cansado se paró, iría a la librería a ver qué tenian de nuevo.

Matemáticas, historia, literatura, pese a ser un local pequeño estaba bien surtido, comenzó a caminar entre los estantes mirando los título, tomo un par y avanzó al siguiente,al final se hizo de unos dies.
-señor Krest, es un placer volver a verlo.
-gracias, igualmente.
-serian todos.
-si.
El hombre comenzó a empacarlos, sorprendiendo se por uno...valla, quién lo diría.
Terminó de pagar y continuó su recorrido, ah! Que cansado y pensar que tendría que bajar en la noche con el resto de sus compañeros, después de todo la fiesta era en su honor.
-valla, sí que fuiste por muchas cosas.
-mmm....hola Itia.
-hola.
El guerrero de libra lo saludo con una sonrisa en el rostro, se llevaba muy bien con él, la verdad era algo así como su amigo, platicaron un rato y continuó el camino, la casa de escorpio seguía vacía, le resto importancia y continuó.
Dejo las cosas y se fue a dar un baño, ahí, en la tina, continuaba pensando, mirando todo a su alrededor. El lugar no era apto para un niño, muchos frascos de vidrio, algunas navajas, no tenía una nica para el bebé y...los pañales sucios olían horrible.
-mmm....tal vez si muebo ese mueble podría poner una tinita para él...
Pero también faltaban otras cosas, su habitación, la cuna, un corralito en la biblioteca...
Terminó de ducharse y salió a revisar su templo.
Por obvias razones la cuna tendría que estar al lado de su cama, o en el cuarto de enfrente, tendría que arreglarlo, cambiar las cortinas, pintarlo de un color claro... demonios, era mucho trabajo, ah pero no lo haría solo Zaphiri tendría que ayudarlo o si no...
Abrió los ojos asustado, que carajos estaba pensando! De verdad contemplaba la idea de tener un bebé con ese bicho rastrero?!
-....n...o...
Sacudió la cabeza desesperado y salió a su jardín. Tenía que calmarse, no podía concebir la ideas de procrear un hijo con él. En primera por que casi no se hablaban, la verdad sólo se saludaban en reuniones y ya, podía jurar que la charla más larga que había sostenido fue el día de ayer cuando se acercó para pedirle que tuvieran un hijo.
-estupido...
Que forma tan directa de pedir las cosas, aunque sabía, por sus compañeros, que Zaphiri era así, directo y consiso, como también...
-pues...no es feo...
Y claro que no(bueno ninguno ahí es feo) alto, atlético, perfil de Dios griego,con un cabello tan negro como la noche y una mirada tan fría e intimidante que podría rivalizar con la suya. También era alguien muy fuerte, no olvidaba como había llegado justo en el momento exacto para ayudarle contra wyver, siendo honesto de no ser por el estaría muerto.
-como sabía que estaba ahí?
Recordaba que al entrar al castillo de Hades, Zaphiri había tomado otro rumbo, pero por alguna razón apareció justo en el momento exacto, apartir de ahí continuaron avanzando... juntos, peleando lado a lado.
-...mmm....no sería un mal padre...
Y de nuevo su cabeza comenzaba a maquilar ideas.
Si vas a tener un hijo es obvio que necesitas un compañero leal y responsable, que no te deje botado.
Zaphiri era muy responsable, jamás había oído que fallara en alguna misión, o dejara botado a alguno de sus subordinados, tampoco se metía en problemas como Francisca o Paris, tal vez no hablaba mucho, pero el tampoco lo hacía.
-...el podría cuidarlo en el día mientras yo leo..
Pues si...no, como padre también tendría que ayudar, se dividirían las tareas, Zaphiri podría bañarlo y cambiar sus pañales, por que eso sí que no lo iba a hacer. Por su parte el lo alimentaria y cuidaría en la noche, cuando creciera entre los dos lo entrenarían, se preguntaba cómo sería, tendría un cosmos frío como el de él o uno cálido como Zaphiri.
-...ojalá y sea tan alto como él...
Al final terminó suspirando.
Mierda! La idea de tener un hijo con ese bicho rastrero ya le gustaba.

Llegó la noche y los héroes del mundo bajaron al pueblo, junto al patriarca y su diosa, la gente los recibió con gritos y aplaudos.
Tuvo que estar paradote por una hora y media en la cual la diosa se aventó un discurso muy aburrido, según su opinión. Cuando terminó comenzó la fiesta, algunas señoritas no perdieron la oportunidad para pedirle a los caballeros que bailarán con ellas, los cuales educadamente aceptaban.
Krest se desplazó hasta el final de la plaza, la verdad no tenía ganas de estar ahí, preferiría estar en su biblioteca leyendo, tomo una cerveza y continuó mirando.
Los gemelos mayores, Hakurei y Héctor, habían iniciado una competencia para ver quién bebia más cerveza, Francisca no tardó en unirse.
Sage e Ilias molestaban a Lugonis, al cual ya le temblaba el párpado y podía jurar estaba a nada de atacarlos con sus rosas.
Itia y Gateguard hablaban  animadamente con unas jovencitas, mientras Paris y Aeras bailaban con otras. El patriarca y Athena conversaban animadamente con las personas del pueblo, todo lucia bien hasta que se dió cuenta de algo...donde estaba Zaphiri?
Su mirada viajo de un lado a otro, hombres bebiendo, gente bailando, chicas mirándole con cara de enamoradas, Athena y el patriarca entrando en la competencia de tragos de los otros dos...o.O...woaho! Ya había visto todo. Comenzó a caminar buscando de reojo al bicho.
Se sorprendió mucho al encontrarlo ya que, no estaba ni bebiendo, ni bailando o comiendo, no, Zaphiri estaba...jugando con los niños!
Los pequeños corrían al rededor del moreno, uno de ellos traía su casco y capa, otro se colgaba de su mano hablando cual cotorra, el chico soltó un grito de alegría cuando Zaphiri lo cargo en brazos y lo aventó hacia arriba, agarrándolo antes de caer.
Los otros no tardaron en gritar emocionados y estirar las manos para que los aventara. Krest continuó mirando por un rato, parece que de verdad le agradaban los niños, al final se retiró a platicar con Lugonis y Ashura.

El día siguiente transcurrió normal, al menos para el porque la mayoría de sus compañeros y diosa tenían una resaca de los mil diablos.
Se ducho, acomodo los libros y observo su nueva adquisición...un libro infantil.
-...pues... sería lindo...
Esto era absurdo e idiota, pero pese a ello...lo... quería...hacer....
Terminó de arreglarse y bajó a la casa de escorpio, solo por fastidiar anunció su presencia con voz fuerte y clara en capricornio y sagitario, ganándose un gruñido de parte de esos dos.

Zaphiri recién salía del baño, había entrenado toda la mañana solo, sus compañeros de seguro tenían resaca, se colocó el pantaloncillo que usaba para dormir y fue a la cocina por un vaso de agua.
-mmm...para el camino.
Tomo una de sus amadas manzanas y regreso a su habitación, estaba por abrir la puerta cuando unos toquidos en la entrada principal lo sorprendieron...quién sería a esa hora?
Su sorpresa aumento al ver a Krest ahí, el chico no dijo nada, solo lo miro y Zaphiri lo dejo pasar.
-...yo...sobre lo que dijiste, tengo una duda, por que yo? Por que quieres tener un hijo conmigo?
La verdad tenía curiosidad, Zaphiri era un hombre que despertaba su curiosidad en todos los sentidos.
Los ojos del cubo se abrieron sorprendidos y un rubor cubrió su cara, antes de que la puerta se cerrará y ambos fueran a la habitación.
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Y se acabó
La actualización fue rápida por que ya la tenía en mente y dije...para que esperar.
Ese Krest...sí que se resistió😒
El siguiente lo subo mañana, pero de una vez les digo que lleva Lemon...admitanlo, lo desean!😆