Puedes poner la cancion como fondo y leer, sera una buena experiencia

"El mar es tan grande y capaz de guardar los mas grandes secretos"

Algunas personas tenemos un propósito en este mundo, algunos no saben el porque ni cual es ese propósito, a otros nos criaron teniendo en cuenta y repitiendo ese propósito, entrenado y sabiendo a que somos mandados y al que nos enfrentamos, pasamos el tiempo repitiendo una y otra vez en nuestras mentes a lo que se nos manda. 

Pero nadie me dijo cuanto iba a disfrutar esto.

 Sus manos se posan en mi cintura y yo inconscientemente lo tomo del cuello para sostenerme cuando siento que el agua llega a mis hombros, mi ropa interior se pega a mi cuerpo por la humedad, siento como sus labios rozan mi oreja y susurra: 

— Abre los ojos Summer. 

Y lo hago. 

Mis ojos se abren esperando ahogarme, pero lo que mis ojos ven a continuación es lo mas hermoso que he visto, no me ahogo, no me hundo, solo floto y respiro perfectamente a pesar de estar rodeada de agua y ver como pequeños peces pasan de un lado al otro, sus manos en mi cintura se aprietan un poco mas y me hacen mirarlo. 

— ¿Que es esto? 

— Cuando controlas el agua controlas todo a su alrededor, estamos dentro del mar pero...en medio de una burbuja de aire. 

— Eso es imposible Regen — digo. 

— Gotita, ya deberías saber que todo es posible. 

— Solo contigo — digo burlandome. 

El me mira y me acerca mas a el, en otro momento pudo verse como posesivo.

 — Solo conmigo. 

El no me suelta y yo no lo suelto a el, solo veo como floto y el azul infinito del mar pasa por debajo de mis pies dándome a saber que hay mas profundidad de la que el propio humano conoce, alzo mi mano y toco la pequeña burbuja, mi mano se llena un poco de agua pero no trapaza mas haya. Es tan confuso y hermoso a la vez. 

Me permito mirar al chico que tengo en frente, observar cada detalle de el, párese igual de sorprendido que yo por sus capacidades.

— Parece que haces mas que solo sacar agua y brillitos por las manos — me burlo. 

Sonríe, tan dulcemente como un niño y me toma de la cintura con mas fuerza como un hombre, quizás la combinación perfecta y quizás es lo que me llama tanto la atención de el.

 — Quiero mostrarte algo — murmura. 

Suelta mi cintura y yo entro en pánico, me toma de la mano con fuerza para que me sienta segura, sonrió al verlo feliz, me señala al frente y alcanzo a ver una pequeña corriente, lo miro nuevamente entrando en pánico y sonríe.

 — Vamos a vivir los dos gotita, toma mi mano con fuerza y no me sueltes. 

— Vamos a morir — grito de miedo. 

— Toma respiración — me dice — uno...dos...¡Tres! 

La pequeña burbuja de aire se abre por completo dejándome en el mar abierto, siento un jalón cuando entramos en la corriente, aprieto con mas fuerza mi mano para no soltarlo, el abre la boca sonriendo como si el agua no le afectara. "pues es creado del agua idiota" 

Cierro los ojos cuando mi mano se suelta de la de el, automáticamente tomo mis rodillas y las pego a mi pecho, quiero gritar pero la presion del agua no me deja, si algo odio es dejarme llevar por las cosas y no pensar antes, el agua me lleva como si fuera un trapo y mis ganas de querer salir de ahí empiezan a ser mayores. 

La presión del agua vuelve a ser mas grande y de repente este termina y los rayos del sol del atardecer me reciben, el agua me lanza hacia el cielo, a esa altura puedo ver cuan grande es el mar y cual pequeña soy yo. 

Grito con fuerza riendo y sintiendo la adrenalina en mi, el mar me expulso sacándome volando como si fuese un trampolín, aun así lo disfruto, mi pelo se alza a mi lado y alzo las manos dejándome llevar por la adrenalina, un segundo grito de chico se une al mio y veo en frente de mi, como Regen aparece alzando los brazos igual de emocionado que yo. 

Me toma la mano rápidamente antes de caer al agua, esta me recibe y las manos de Regen me toman para sacarme a la superficie, quedo pegada a su pecho con el corazón latiendome al mil. 

— Eso...¡Eso fue maravilloso! — grito alzando las manos por encima de mi.

El sonríe tomando con fuerza mi cintura, alzo la cabeza hacia atrás y dejo que mis ojos se pierdan en el azul del cielo, siento como el se carcajea ante mi emoción. 

Bajo la mirada y le doy una dulce sonrisa de boca cerrada, el me sonríe mostrándome lo perfecto de su dentadura, pongo los ojos en blanco y sonríe mas, enredo mis manos en su cuello por miedo a ahogarme en el mar, no se nadar la verdad, el nota eso y aprovecha para tomarme de la cintira igual que al inicio. 

— Deberíamos volver a casa — digo

 — Si, deberíamos gotita — susurra. 

La luz del sol hace que ambos seamos sombras rodeados de azul, su mano se separa de mi cintura y toma mi pelo, el rojo de este y el tono blanco de su piel contrastan artisticamente. 

— Es un bonito color — dice. 

— Eso ya lo dijiste — me burlo. 

— ¿si? — pregunta sonriendo — Me parece que te lo diré siempre. 

Bajo la mirada tratando de controlar mi sonrojo. 

— Se esta haciendo de noche Regen, en verdad deberíamos volver — murmuro. 

— Volvamos a la orilla, pero no a casa — me dice jalandome. 

— ¿Que dices? Debemos volver a casa...mi casa — enfatizo.

 — Vamos a otro lugar, después vamos a nuestra casa — sonríe. 

Pongo los ojos en blanco y eso no parece importarle porque me jala de la mano guiándome a la orilla. 

— Vamos gotita, que eres hermosa para ser tan amargada. 

Las luces de la ciudad llegan y a lo lejos puedo ver a los turistas levantando sus cosas y como van a los hoteles, mi pelo rojizo gotea por lo húmedo dejando un camino de pequeñas manchas por la arena.

 Ahora esta esta esta mas tibia que caliente, la playera de Regen se me pega al cuerpo pero me tapa lo suficiente, el parece contento de no traer playera y cada que le digo que pasemos a una tienda a comprarle una el frunce el ceño y se aleja caminando. 

"Ahora que si sabes caminar huyes maldito"

Cuando estoy a punto de girar a la calle de mi casa, el me toma de la mano y me jala negando con la cabeza, intento jalarme pero la gente se me queda mirando y no quiero que piensen que aquí don lluvia me esta secuestrando o algo peor. 

— Ni siquiera conoces el pueblo idiota — le digo. 

— Por eso te traje gotita — dice como si fuera lo mas obvio — ¿A donde vas cuando te quieres sentir feliz? 

Ahora la que le jala la mano soy yo, pasamos uno que otro puesto de ropa hasta llegar al puesto de comida. 

— Cuando quiero estar feliz vengo acá — sonrío — No hay nada mejor que comer. 

— ¿Comer te hace feliz? — me pregunta con una ceja alzada. 

— También dormir, pero puesto que no quieres ir a casa, la comida es la mejor opción —sonrío y me dirijo al señor que atiende — Deme dos ordenes de lo de siempre y un refresco grande. 

— Pero yo no quiero eso — me reclama. 

— Eso es para mi — digo — tu pide lo que quieras, pero no te olvides que comer mucho engorda — digo. 

— ¿Y tu no estas comiendo mucho? — pregunta con una ceja alzada. 

— ¿Que dices? Si pedí poquito, apenas una probada.

 El sonríe mientras me alega que no quiere nada pero que si quiere ayudarme a comer, al final acepto de mala gana pero tomo lo mas que puedo aunque mis mejillas parezcan globos, lo hago antes de que se acabe mi comida. 

Al final el termina diciendo que casi no comió porque todo me lo comí yo ¿como cree? 

Pongo los ojos en blanco y ambos nos despedimos del señor de la comida, caminamos por el parque del pueblo, esta vació y un poco oscuro, nadie del pueblo viene acá a pesar de que este parque este precioso, hay una pequeña fuente en medio del parque pero se desgasta día a día y esta toda sucia de basura. 

Hay pequeñas banquetas de color verde y me siento en una, Regen me mira y hace lo mismo, noto como hace una mueca de alivio cuando se sienta. 

— Yo no sabia que caminar cansaba tanto — dice.

Sonrío y me permito observar el cielo que empieza a llenarse de pequeñas luces blancas, el lo nota también y señala emocionado. 

— ¿Pusieron focos en el cielo? — me pregunta.

 — Son estrellas, cada noche aparecen y iluminan el cielo — repito las palabras de mi padre— La que mas brilla es posible que si le pides un deseo te lo cumpla — digo. 

— ¿Que es un deseo? 

— Pedir algo que quieras con fuerza, solo confiá en que se cumpla — digo. 

Noto como el mira al cielo y cierra los ojos, el perfil que tiene es perfecto, se que no es humano, un humano no podría hacer lo que el hace ¿entonces que es?

 Abre los ojos y sonríe.

 — ¿Que has pedido? — digo curiosa — No, mejor no lo digas, si dices los deseos no se cumplen...¿que has pedido?

 — No lo se...solo cerré los ojos, supongo que otra noche sera — me dice levantándose, me extiende la mano — Vamos a casa Summer. 

Si...definitivamente no estaba preparada para esto y ojala me hubiese dado cuenta de todo antes, antes de la sangre derramada y del caos.