Magui frotó sus ojos para evitar derramar más lágrimas.
El viejo Stand había estado en la familia desde hace 8 años.
Todavía recuerdo el día en que mi hermana lo trajo a la casa, mi padre estaba muy enfadado por que el no le había dado la autorización y ella encariñada con el animalejo no lo dejo sacarlo de la casa.

Yo por otra parte era un caso fatalmente diferente al de Magui, ya que por alguna razón inexplicable los gatos no son %100 de mi agrado.
Pero con Stand nos llevábamos bien, si es que nos mirábamos era por accidente.

— Mamá, iré a casa —.Le informe a mi madre que estaba ocupada consolando a Magui.

—Claro cariño, descansa —. Respondió ella.

Y así luego de despedirme del resto de las muchachas con un beso en la mejilla, monte en mi carro y conduci en dirección a casa, acompañada por la musica del radió.

El trayecto era monótono y de vez en cuando desviaba un poco la vista de la carretera para observar las casas o edificios de la ciudad.

De pequeña solía mirar dentro de las ventanas y espiar a la gente mientras hacia sus quehaceres, por suerte nunca vi nada "Fuera de lo normal".

El sueño comenzó a derrotar me, y al llegar a casa lo primero que hice fue arrojarme sobre la cama y dormir. Dormí muy profundamente.

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Al despertarme mire el reloj, marcaba las 11:25 am. ¡11:25 am!

Maldita sea.

Insultando a todo lo que se cruzaba por mi camino, corrí al baño e ingrese a la ducha, donde sin pensarlo me coloque shampoo.
El shampoo genero muchísima espuma, y al estar un poco dormida aun no note que ingresaba a mis ojos.
Hasta que empezaron a arder.

Torpe y desesperadamente busque una toalla, hasta que fui a dar con una y la utilice para refregar bien mis ojos. 

Enjuague mi cabello, y lo cepille descuidadamente.

Al salir de la duche, me envolví en una toalla y corrí en dirección a mi cuarto, donde elegí  algo de ropa y al colocarmela junto con los zapatos salí de la casa, obviamente cerrando todo con llave.

Entre en el carro y luego de dejar mi bolso junto al asiento del copiloto, lo encendí.

¿Que hora es?

Desviando mi vista del camino un segundo, observe el reloj del carro que marcaba las 12:03.

Maldita sea.

Mi celular comenzó a sonar, pero ignorándolo completamente seguí conduciendo a toda velocidad. O lo intente, no quiero morir hoy.

Al llegar a la iglesia, luego de estacionar el carro, ingrese en esta rápidamente sin prestar mucha atención a la fachada externa.

—¡Llegas tarde! —.Me recrimino Stela apenas me vio surcar las puertas.

—Shh —.La callo el padre. -Esta es la casa del señor.

Stela atisbo a decir algo en contra del hombre que sostenía un par de papeles cerca del altar, pero prefirió no decir nada y se llamo al silencio.

—¿Tu eres Rosie verdad? —Me pregunto una mujer de al menos 30 años tomando me del hombro sutilmente.

—Si, soy yo.

—Tu lugar es por aquí.

Luego de colocarme al lado de las demás damas de honor de Stela, la mujer continuó organizando el ensayo de la boda. Indicando cosas como: quien se coloca en que lugar, quien lee los salmos, como ingresara la novia, etc etc.

***
Hola!
Capitulo un poco aburrido lo se, pero les tengo una sorpresa para el próximo <3 Se que les encantará.

Voten y comenten por favor :)