La noche del final
—Jimin está extraño—suspiró Yoongi cuando entró en copas—. Namjoon, ya no sé qué hacer, te juro que estoy desesperado.
—¿Han hablado?
—No, toda plática termina en gritos y enojo, Jihoon lo escucha gritar, también Chaewon, no quiero que ellos escuchen eso, son nuestros problemas, pero, se está volviendo insoportable.
—Yoongi—suspiró—. Te lo dije hace años, cuando viniste hacía mí con consejos, tú y Jimin puede que se amén, pero no creo que sean buenos el uno para el otro.
—Ese día estaba dispuesto a terminar todo, pero él me dijo que esperaba a Jihoon, no lo iba a abandonar Namjoon, no me enseñaron eso en mi familia.
—¿Y que es lo que te enseñaron? ¿A tener un matrimonio que es un infierno y aguantar sólo por tus hijos? No, eso no está bien, ni Jimin, ni tú son felices, se nota Yoongi, ya no es como antes, debes tomar una decisión.
—Mira Namjoon, no conoces a Jimin, está pasando por una mala racha, pero todo va a cambiar, llevamos más de siete años juntos, no siempre fue terrible.
—Yoongi, nos conocemos desde hace décadas, eres mi mejor amigo, pero has cambiado mucho, ya no eres el mismo de antes, eras amable, siempre estabas riendo, divertido y tranquilo, ahora estás molesto la mayor parte del tiempo y te ves miserable, sé que lo amas y que amas a tus hijos, pero se están haciendo daño.
Yoongi tragó en seco, miró la bebida que tenía en las manos.
—Creo que Jimin está viendo a otra persona.
—¿Qué? ¿Por qué dices eso?
—Ha cambiado mucho, se cuida al ver el celular, lo he visto hablar por teléfono en el baño, un día dijo que estaba con Taehyung y llegaría tarde, pero Tae estaba con JungKook, me los tope en casa de mis padres, quiero decirle algo, pero Namjoon, le tengo miedo, es una bomba que explota a cualquier provocación. Ya no sé cómo hablar con él sin pelear. Me preguntó si hice algo mal, pero, no hallo la respuesta, siempre trate de ser lo mejor para él y ahora, sé que me dejará y eso me duele.
Namjoon suspiró pesadamente. —Lo mejor es que ambos sean felices y no siempre pueden lograrlo estando juntos.
—Pediré otra ronda.
Yoongi no se sentía seguro de su relación, con Jimin las cosas siempre fueron diferentes, había un marcado antes y después de que ellos comenzarán a salir, se enamoró de él a primera vista, le gustaba lo atractivo que era, pero también, que fuera dulce y divertido, le atraía de una forma increíble, salir con él fue especial, le causaba sensaciones que lo mantenían al borde.
Pudo ver en Jimin lo que no muchos veían, vio a través de él, de ese caparazón, de una máscara que presentaba ante el mundo, sabía sobre sus problemas emocionales, sobre sus traumas, sus miedos y quiso ser ese sostén que le ayudará a estar bien, quiso darle todo el amor que necesitaba, pero, en el camino se quedó sin nada.
Tener una familia no ayudó en nada, amaba a sus hijos con todo su corazón, pero la crianza era complicada, más cuando ellos no podían ponerse de acuerdo, había luchas de intereses y egoísmo. Su relación de pareja estaba desapareciendo poco a poco.
Llegó en la madrugada, había bebido y hablado con Namjoon, ahora pensaba que su mejor amigo tenía razón, entre él y Jimin las cosas no estaban bien y eso tenía que cambiar, por el bien de Jihoon y Chaewon. Entró a la casa y se sorprendió de ver a Jimin esperando en la sala, con una copa de vino y fumando.
—Al fin llegas ¿Dónde estabas?
—Salí a beber con Namjoon.
—Debiste avisarme.
—Lo siento, me quedé sin carga ¿Me estabas esperando?
—Necesito hablar contigo de algo importante.
Jimin estaba nervioso, podía verlo a simple vista. Se sentó en el sillón frente a él.
—También quiero hablar contigo, pero empieza tú.
—Yoongi—boqueo—. Hice algo malo.
—¿Qué fue lo que hiciste?
—Hace unos días yo...me realice un aborto.
La sangre huyó de su cuerpo, comenzaba a sentir escalofríos, miró a Jimin boquiabierto.
—¿Qué? —negó—. Estabas embarazado ¿Y no me dijiste?
—Lo siento.
—Abortaste a mi hijo y me dices lo siento, ni siquiera me dijiste, Dios...Jimin...
Jimin bajo la mirada, Yoongi sintió el peor dolor en su pecho al darse cuenta de lo que Jimin no podía decir, sus sospechas regresaron a él.
—No era mi hijo ¿Verdad?
—Nosotros no estábamos bien. No es sólo mi culpa.
—Me engañaste.
—¡Tú me obligaste a hacerlo!
Su cordura se fue al carajo en ese momento. Yoongi lo miró con desprecio, dándose cuenta de la realidad de la persona que estaba frente a él.
—¡Me engañaste, quedaste embarazado de otro y me culpas a mí!
—Nuestra relación no estaba bien, no es mi culpa, en él encontré lo que no veía en ti.
Yoongi se levantó, caminando desesperado.
—¡Y aún así yo jamás te fallé! Yo sabía que estábamos muy mal, pero, jamás te engañé, me esforcé mucho para salvar nuestra relación, y tú, simplemente te fuiste a revolcar con otro en vez de terminar esto.
Jimin se levantó, tratando de llegar a él, pero Yoongi retrocedió.
—No estaba pensando bien, no me puedes culpar, además no sé si realmente tú nunca me engañaste.
—¿Sabes qué es lo más gracioso? Nuestras peleas siempre fueron debido a tus celos enfermos, y tú fuiste quien terminaste siendo el maldito infiel. No piensas en nadie más que en ti Jimin, eres un maldito egoísta que usa a las personas para sentirse mejor.
Jimin negó con lágrimas en los ojos. —Nunca te use, yo te amo Yoongi, esto sólo es un problema más, pero podemos seguir adelante.
—Estas de joda, ¿Crees que me quedaré contigo después de esto? He dejado que me humilles, que te burles de mí, me he hechado la culpa para hacerte sentir mejor, pero no perdonaré esto, tu no me amas, jamás me has amado. No sabes que es eso.
—¿Me vas a dejar? Dijiste que no lo harías, que nuestro amor podría con todo.
—¡Jimin, me engañaste! En tú cabeza ¿Entiendes lo que es eso? Dejaste que alguien más te tocará, y después venías a casa a decirme que odiabas tu vida, maldición, me quitaste todo. Luché para darte todo en esta vida.
—¡¿Y crees que está es la vida que quería?! —soltó lleno de molestia—. ¡Yo no quiero esta vida, no quiero tener a un maldito hombre como tú! No eres nadie Min Yoongi, jamás pudiste darme lo que quería. ¡Te odio, aborrresco mi vida contigo! ¡No quería hijos, fue un maldito error haberme quedado embarazado a propósito para retenerte!
—¡¿Qué?! —su cuerpo entero temblaba—. ¿Hiciste eso? ¡Jimin, carajo! Son nuestros hijos. ¡¿No nos amas?!
—¡No lo sé! —gritó de forma desconsolada—. No sé si lo hago.
Yoongi negó con el dolor en sus ojos, que empezó a desbordarse en forma de lágrimas.
—Nos iremos de tu vida entonces, podrás hacer lo que quieras, ni ellos ni yo debemos vivir esto.
—No lo harás ¡No me los quitarás!
Yoongi vio a Jimin desmoronarse por completo, la bomba que por mucho tiempo tuvo miedo de tener cerca, estaba explotando por fin, sus manos temblaron, su rostro se volvió rojo, sus ojos demostraban ira pura, se acercó a él de forma amenazadora y le propinó un golpe en el rostro, fue el primero, de muchos que llegaron después, Yoongi trato de detenerlo, pero era imposible, fue como si Jimin desquitará años de odio en él, no pudo moverse porque algo se rompió entre ellos, porque algo en su interior cambio, porque se sentía tan dolido y cansado que no podía moverse, sólo lloró, sollozo mientras Jimin le golpeaba en el cuerpo. De una cachetada volvió su cabeza entonces lo vió.
Vió aquellos pequeños ojos oscuros llenos de miedo, Jihoon estaba temblando y llorando ¿Por qué no lo habían escuchado antes? Tenía un teléfono en la mano, Yoongi tomó las manos de Jimin y lo aventó, Jimin cayó de nalgas en el piso.
—¿Por qué me empujas? —sollozo perdido.
Yoongi sabía que tenía que ir hacia Jihoon, pero en vez de eso se arrastró al piso, sentandose para llorar todo lo que no pudo llorar en la relación. El dolor de la falta de confianza de Jimin, cada reclamo, cada grito, cada humillación, que su familia y amigos pensaran que él era el problema, cada palabra hiriente, el no saber cómo ayudarlo, todo, le golpeó como una ráfaga de balas en el pecho. La puerta de la entrada se abrió y Namjoon los miró.
—¿Qué está pasando? Jihoon me llamo, se escucharon gritos y...¿Yoongi estás bien? Te sangra la nariz.
Namjoon negó al ver que ninguno le contestaba, se encaminó a tomar en brazo a Jihoon para llevarlo a su habitación y calmarlo.
—Yoongi....perdóname, lo siento—Jimin se acercaba a él, lo tomó de las mejillas y le suplicó—. Te juro que esto va a cambiar, buscaré ayuda y.... todo estará bien, te lo prometo, por favor, te amo, Yoongi te amo y no quiero perderte.
—Esto se acabó Jimin, en verdad se terminó.
Yoongi se levantó, fue al baño para lavar su rostro, ni siquiera pudo mirarse al espejo, entonces saco su teléfono.
—Papá, te necesito....
Todo fue confuso después de eso, no recordaba mucho, los tratos entre ellos, el que Jimin accediera a entrar a una terapia para poder quedarse con los niños, Yoongi no estaba seguro si era lo ideal, pero tenía miedo de que Jimin se hiciera daño, aún lo amaba, aún se preocupaba, los papeles de divorcio se formaron con acuerdos claro, que sólo su padre y sus abogados sabían, Yoongi hablo con Jihoon, fue la conversación más dura que tuvo, porque su hijo no quería estar al lado de Jimin, le aseguró que todo estaría bien, confiaba en que Jimin no le haría daño. No le dijo a nadie, estaba avergonzado, no quería enfrentarse a nada, pero, todos le culparon por abandonar a su familia.
—Vengo por lo que me falta, necesito unas cosas ¿Los niños?
Entró a la casa que ahora se sentía tétrica.
—En casa de mamá, ella...yo le conté todo lo que pasó, me dijo que me tomara unos días.
—¿Le dijiste la verdad o tú versión?
—Ella me conoce, sabe que yo la jodí...Jihoon irá a terapia y yo también.
—Bien, porque ese fue el trato, si no lo haces te quitaré a los niños, ni siquiera sé por qué accedo a dejarlos contigo.
Jimin lucía tan frágil, tan desdichado.
—Lo sé, lo haré bien...Yoongi, lo siento yo...
—No, ya no digas nada. No me interesa saberlo.
—Por favor...
Jamás fue bueno para negarse a esos ojos, nunca, Jimin se acercó y tomó su mano, sus labios temblaban.
—Te lo pido, cambiaré, haré todo mejor.
—No.
—Yoongi...—susurró entre sus labios.
Yoongi tomó su nuca y lo besó, era débil, mucho, estaba molesto y enojado consigo mismo, pero, no se detuvo, se dió cuenta que estaba igual de enfermo que él. El sexo fue eso, sólo sexo, algo desesperado, frío y con un sentimiento de culpa que los atormentaba.
Cuando todo acabo, cuando se levantó de aquella cama dónde habían compartido sus noches, cuando se vistió, ni siquiera lo miró.
—Vendré por los niños mañana, adiós.
—Yoongi, por favor.
—Manda la hoja de sesiones antes del viernes, sino, ya sabes las consecuencias Jimin, ¿Entendiste?
—Sí, lo entiendo. Yo...
—No me llames si no es para algo de los niños—ni siquiera lo miraba.
—Jamás me habías hablado así.
—¿Crees que mereces algo más? Agradece que no te quite a los niños y destruí tu vida, nos vemos después.
La relación entre ellos fue fría, Yoongi no volvió a tratarlo con cariño, pero, no pudieron separarse del todo, porque aún se atraían, cada vez que estaban juntos, Yoongi se sentía un idiota, pero, no podía parar, y tampoco perdonar. Estaban jodidamente enfermos.
Bueno, ya se sabe lo que realmente pasó. Espero que les haya gustado. Gracias 💜
🖤🖤🖤
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