02 | HELADO DE VAINILLA
Dio un largo suspiro, se tocó la sien mientras trataba de alguna manera de no matar a esos estupidos que tenía como policías. Después de la confusión con los heladeros y los verdaderos vendedores de drogas. En la tienda se formó una batalla campal, miles de disparos por aquí y por allá. Destruyendo la tienda por completo y lleno de helado de vainilla todo el suelo.
- Déjenme darles un consejo. - dijo el oficial YoonGi acercándose a ambos chicos. - Si ustedes planean trabajar por su cuenta, sin ninguna orden oficial. Al menos asegúrense de detener a los correctos. - aunque el pelinegro tenía una leve sonrisa en su rostro se notaba el enojo por su entrecejo y la vena que estaba apunto de reventar en su frente. Pues esta no era la única vez que fallaban, de alguna manera fracasaban en misiones fáciles.
- Pero... es que... - los dos comenzaron a balbucear al no saber qué contestar. - Es que nuestra inteligencia se desvió un poco. - trató de defenderse JungKook.
- Esperen, ¿Inteligencia? - ver a su mayor enojado comenzaba aterrarlos. - Mira a tu alrededor Jeon. Ya estoy harto de sus torpezas ya no las quiero, lo unico que me interesa es ser el hazme reír del gurú, además de que... - fue interrumpido al tono de "Anti-Romantic" del pelinegro.
- Disculpe. - contestó el teléfono. - ¿Diga? - era su mamá
"Hola JungKook".
- M-Mamá no puedo hablar, el jefe me está regañando ahora. Yo te llamaré después. - termino de decir y colgó la llamada.
- Les estaba diciendo qué... - otra vez fue interrumpido por un celular, su celular. - Aquí, YoonGi. - la señora Jeon de nuevo: "Hola jefe, ¿JungKook está con usted?" - Sí, aquí está. - "¿Me permite hablar con él, por favor?" - YoonGi confundido le pasa su teléfono al pelinegro. - Es para ti.
- Gracias. - tosio un poco. - Mama, sigo con el jefe.
- Ya no hay respeto.
- No, no esta feliz. Nonono, no es necesario que vengas a hablar con él. Escucha, me tengo que ir, te amo mamá. - colgó y le paso su celular a Min que estaba frente a él sorprendido no sabiendo qué decir. - Gracias, jefecito.
- Ustedes, vayan, ustedes están. Solo ordenen este lugar. Espero un informe completo en mi escritorio mañana. - ambos oficiales asintieron. - Mientras tanto yo consultaré en el gurú si hay vacantes... en Irak. - salió de ahí con algo de dificultad por todo el helado esparcido.
- El dúo dinámico vuelve a atacar. - dijo un chico con lentes. - Así se hace Batman y Robin. - ante esto JungKook y HoSeok comenzaron a reírse sarcásticamente.
- O Mighty Boy y Ground zero - MinHo, compañero de HyunJin se unió a la conversación. Ese comentario hizo que se rieran más fuerte.
- Adiós chicos. - se fueron dejando un mal sabor en la boca en JungKook y HoSeok, quienes habian dejado de reírse cuando se fueron. Ahora Jung solo los miraba con odio.
- Me castran. - se había sentido ofendido que lo compararan con Ground Zero ese héroe era un completo dolor en el trasero en el anime.
- No le tomes importancia, Hobi Hyung. Hay que ordenar este lugar.
- Bien.
- Ok, tu limpia el piso, recoges todo el helado y yo iré a calentar el auto.
- Esta- ¿espera que?
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- Recibimos esto del señor Shield, presidente del consejo de cruceros Shield fue entregado en su casa. - YoonGi estaba dando una reunión con luces apagadas y una pantalla que mostraba imágenes con respecto al caso. - Las chicas de la foto son sus hijas y herederas de la fortuna wilson. Podrían ser las próximas secuestradas. El señor Shield nos ha permitido vigilar a sus hijas, se iniciara un operativo y si el secuestrador ataca esta vez, estaremos listos. - las luces se prenden. Terminando la reunión, pero antes de que todos se fueran. - Las hermanas Shield llegarán a Corea esta mañana ¿Quién irá a recibirlas?
Nadie contestó de hecho hasta evitaron la mirada o otros fingían escribir algo. YoonGi sonrió. - Entiendo. Obviamente todos han leído el perfil de las chicas. Aunque alguno tiene que ir.
- No creo que sea buena idea, Hobi Hyung. - el pecoso caminaba rápidamente para poder estar al mismo paso que su compañero. - ¡Hobi Hyung!
- No me interesa, JungKook. Merecemos este caso tanto como el cuatrochi y joto.
- Lo se, pero no quiero interrumpir al jefe en plena reunión.
- Pero alguien debe enfrentarse a él.
- ¿Qué? - tarde, el chico con un rayo en la cabeza ya había entrado a la habitación donde estaba YoonGi.
- ¡Jefe!
- ¿Que? - ese "¿Que?" Fue suficiente para asustarle y mandar al frente al pelinegro a que hablara por ambos.
- Ah, ammm. Que si nos deja ayudarlo en el caso.
- Hecho.
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