Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

#CDFx 20


Me juego mucho esta noche con la emisión de Corazón de Fénix, lo sé, no es ningún secreto que el puñetero reconocimiento a mi labor como locutora casi se carga mi relación con Jaime. Sin embargo, y aun siendo mis últimos segundos de vida antes de cruzar las ondas, me arriesgo con todo y pongo en jaque al país entero. No voy a entrar al aire a las diez en punto.

     Necesito ver el informe pericial de los bomberos.

     —¿Qué haces, Sofía? —me pregunta Jaime, preocupado, cuando ve que soy yo la que golpea el cristal de Macarena con mi móvil encendido, en alto, para indicarle la canción que ha de poner. ¿Por qué es imposible que en este programa sigamos una sencilla escaleta?—. Está sonando la cabecera, nos toca entrar.

     —Necesito unos minutos. —Y no rogaré por ellos a Macarena, el cristal hoy lo termino de romper yo.

     Pero ni caso.

     El piloto de conexión sigue encendido, Macarena se ha cruzado de brazos, literalmente. La muy hija de puta se las va a cobrar todas conmigo en el día que menos me conviene,  cuando más daño puede hacerme. 

     Pues bien, ante todo soy una  profesional. 

     Me siento de nuevo aparentando una calma que estoy muy lejos de tener y me dirigo al micrófono. Que empiece por cobrarse mi intervención.

     —BUENAS NOCHES,  MIS QUERIDOS FÉNIX. ESPERO QUE OS QUEDÉIS A NUESTRO LADO EN ESTE PROGRAMA TAN ESPECIAL PARA NOSOTROS, POR SER NUESTRO EXAMEN FINAL DE LOS PREMIOS NACIONALES RED-ONDAS. 

     Muevo la mano en dirección a Jaime, como él hiciera el primer día para motivarme a hablar. Hoy quiero que él lo haga por mí,  me inspiro con las réplicas.

     Mi compañero está atento a mi petición, algo que ya no me resulta ninguna novedad cuando no deja de mirarme un solo segundo. 

     Y hoy además lo tengo al lado por si necesita espabilar con una colleja.

    —¿ESPECIAL? ¿VAS A DELEITARNOS CON ALGUNA DE TUS CONFESIONES IN EXTREMIS,  SOFÍA? PORQUE TODAVÍA NO SABEMOS LOS RESULTADOS DE LA NOMINACIÓN —me dice Jaime sonriendo. Y yo no sabía hasta qué extremo necesitaba ver su guiño de ojo para reconocerle su apoyo.

    —POR SUPUESTO. HE RECORDADO ESE LADO COTILLA QUE TIENES, JAIME, Y ME GUSTARIA ALIMENTARLO DELANTE DE NUESTROS FÉNIX, RECUERDA QUE CUANDO TE HAS IDO ESTA TARDE DE MI CASA NO ES QUE HAYAMOS COMIDO DEMASIADO DESDE ANOCHE.

     Por su cara de bobo, Jaime no sabe si quitarse los cascos y cortar la emisión, cosa que me vendría muy bien para mi propósito de parar el programa, o si por el contrario hablar y pedir un receso para echarme en cara mi poca profesionalidad con los jueces oyendo mis líos de cama, lo que de igual modo me concedería esos minutos que busco y que no he conseguido con la pausa musical  que debía darme Macarena.

     ¿No dicen que si no puedes con tu enemigo, te unas a él? En realidad de unirme a alguien, enemigo o no, prefiero hacerlo con Jaime, más exactamente por la boca y en un beso muy prolongado cuya visión le doliese a Macarena, pero estoy segura de que no tendría en ella el mismo efecto estomacal que haber oído de mí, la tonta y manipulable de Sofía, y en abierto para todo el país, que Jaime y yo estamos juntos, como más de un Fénix dio por hecho en estos días con sus propuestas o consejos para nosotros.

     —BUENO, VERÁS, SOFÍA… —Jaime se repone de la impresión, como el experto comunicador que es, para no quedarse callado—: YA SACIÉ CONTIGO CADA PARTE DE MÍ, ANOCHE —aclara Jaime para todos sus oyentes despistados o cortos de dobles sentidos.

     O gente que ha querido lastimarme.

     Porque Macarena corta de inmediato la explicación de Jaime con la canción que yo le ordené de Robbie Williams, Sin Remordimientos. Demostrado queda que no ha reaccionado demasiado bien a sus palabras y se ha visto incapaz de pensar por ella misma para seguir haciéndome daño

     —¿A qué ha venido eso? —pregunta Jaime retirando los cascos de sus oídos cuando yo hago lo mismo. No parece enfadado, pero tampoco me sonríe.

     —Quiero leer este informe. —No contesto a su pregunta porque me inclino a coger el dossier del suelo, donde aún estaba. 

     —Hablo de tu confesión, Sofía, ¿eres consciente de que, hoy más que nunca, están pendientes de todo cuanto dices en el aire?

     —Si hablas de los jueces, esto es mucho más importante ahora —digo abriendo la carpeta. 

     —¿Más todavía?

     No haré caso a la advertencia del abuelo, lo comparto con Jaime y lo pongo sobre la mesa para que lo lea junto a mí.

    Vaya  y decía que su lado cotilla estaba satisfecho, no ha tardado en acercárselo a los ojos. Sonrío, necesitaré esmerarme más cuando lleguemos a casa.

    Ambos leemos rápido,  sobre todo los formalismos iniciales que hablan del solicitante del informe, la firma y titulación de cada inspector técnico encargado de la evaluación, en este caso han sido dos, y el reporte de fecha, hora y duración del propio incendio, hasta dar con la causa, más que probable, acreditada, demostrada y firmada por la Oficina Técnica de Investigación Forense de la ciudad de…bla, bla, bla…

     —Aquí —señala Jaime con el mismo entusiasmo que yo tengo, al ver el objeto de dicho dictamen.

     El corazón me va a mil por horas, y creo que se me detiene justo al llegar a la palabra INTENCIONALIDAD.

     Mi reacción no es otra que agarrar el brazo de Jaime, él responde con un grito mudo al agarre de mis uñas.

    —Lo siento —murmuro todavía con el corazón en la boca.

    —Mira esto. —Jaime no repara ya en el pellizco que le he dado,  sus ojos, y su dedo acusador, no se apartan de las palabras ACELERANTES, COMBUSTIBLES y QUÍMICOS.

     Yo he dado un paso más allá, leo la posterior descripción del patrón de combustión, de forma irregular, sobre la superficie localizada como punto de origen. También alcanzo a descifrar la composición química del producto inflamable utilizado, identificada como hipoclorito de sodio,  presente en cualquier limpiador clorado, asequible sin manipulación experta.

     ¡Joder, no puedo seguir leyendo!

     De repente mi móvil, encima de la mesa, se ilumina revelando la llamada entrante de mi madre. No miro a Macarena para que me diga el tiempo que me queda, he oído tantas veces al buenorro de Robbie que sé que dispongo de un minuto y medio.

     —Al fin, Sofía. Tenía la esperanza de que me lo cogieras en la pausa.

     —Mamá, ahora no puedo pararme a darte explicaciones sobre Jaime.

     Él,  que escucha su nombre, se gira a mirarme, y por supuesto lo hace sonriendo, pero yo, como quiero que esta llamada termine antes de que lo haga No Regrets, pongo el manos libres esta vez.

     —De repente estás en boca de todos, hija.

     —Lo supongo, mamá —admito sin vergüenza alguna mientras sujeto la mano de Jaime en complicidad. ¡Acabamos de darle a nuestros oyentes lo que tanto nos pedían oir, hemos resuelto nuestra tensión sexual!—, nosotros revelamos el secreto.

      —No hablo de cómo te come Jaime, Sofía. El motivo por el que estás saliendo en la cadena nacional es otro. 

    —¿Qué?

     Uy, eso ya es más serio, y no me refiero a que mi madre me hable sin tapujos.

     La radio es un medio pasado de moda entre las nuevas generaciones y la información a través de ella no les llega a todos, pero la televisión es el escaparate de Internet y sus redes sociales, ya que muchos programas televisivos, incluidos los informativos,  se nutren de las historias que encuentran en los perfiles. Por tanto, en boca de todos, es ¡todos!

     —Es muy raro, Sofi. Porque eres objeto de burla al tiempo que hay quien se solidariza contigo por tu adicción al alcohol.

     —No entiendo nada, mamá.

    Aunque Jaime sí parece hacerlo, se ha levantado y ha salido de la cabina para entrar en la de Macarena. ¿Por qué no partí el cristal antes?, así podría ahora enterarme qué es eso que se reclaman a gritos.

     Recibo la foto que me envía mi madre.

     —¿Sofi, sigues ahí?

     Mi madre, la foto en la que se me ve vomitando en un baño público e incluso la identidad del causante del incendio, que acabo de descubrir, hace un minuto y medio exacto, pasan de inmediato a un segundo plano. 

     Quiero colgar la llamada.

     —Tranquila, mamá, todavía tengo un micro con el que defenderme esta noche —le digo mientras estoy pendiente de la escena ante mis ojos.

     —Espera, Sofi, tranquilízate tú, no será tan malo, mujer,…

     Pues eso aún no lo sé, era mi noche ideal y no contaba con estar en boca de todos por motivo ajeno a mi nominación o, más recientemente, a mi relación con Jaime. Y no he estado tanto tiempo esperando para tener a ambos como para que se me escapen ahora de entre los dedos.

     Podría imaginarme los diálogos entre Jaime y Macarena como si fuera una peli del cine mudo, pero no quiero que mi imaginación me juegue una mala pasada cuando veo que ella suplica por un beso de Jaime, pisoteando así su orgullo y amor propio, porque él lo que hace es deshacerse de su agarre antes de que pueda echarle las manos al cuello. Macarena a cambio le da una bofetada que él no evita, pudiendo haberlo hecho. Descubro así la expresión de un hombre arrepentido, cuyo rostro ha bajado por la vergüenza. Eso solo significa una cosa. Con su consentimiento, Jaime pretende expiar su culpa. 

     Ahora menos que nunca necesito subtítulos de la escena silenciosa para entender lo que ha pasado entre ellos, estos dos tienen un pasado reciente. aunque para Macarena esté más cerca de ser un presente obsesivo, porque termina llorando cuando Jaime regresa a nuestra cabina.

     Definitivamente, yo no dejaré que ella, con sus actos y su llanto, se cargue mi futuro.

     —Macarena tendrá que justificarse ante la directiva. Por su imprudencia, la emisora podría quedarse sin nominación —dice Jaime volviendo a colocarse los cascos, pero no se sienta al momento. Antes devuelve la silla a su posición original, frente a mí, alejándose para no hacerme más daño.

     ¿Es que no ve que así me lo hace más? ¡Coño, que nuestra vela sigue encendida, agrandando ese abismo entre nosotros!

     —¿Imprudencia? Llámalo por su nombre, Jaime, ha sido una cochinada.

     —Lo siento. —Y sigue pidiendo perdón.

      —Eso ya no importa. Podré sola con esto —miento para tratar de convencerme yo misma, para así expulsar de mi cabeza el temor de perderlos a los dos. Mi premio y su amor—. Ahora me escucharán a mí.

     Y tal como lo digo, me pongo los cascos y abro mi micro. Ya es hora de que deje de ponerme excusas por ese miedo a no ser suficiente, como locutora o como mujer. Una foto bochornosa no podrá conmigo, y el pasado de Jaime y Macarena no podrá con nosotros. Tenemos un futuro

     —BUENAS NOCHES, DE NUEVO, QUERIDOS FÉNIX, SENTIMOS LA ESPERA, YA ESTAMOS DE VUELTA CON TODOS VOSOTROS, Y YO EN PARTICULAR ESTOY DISPUESTA A DAROS CUALQUIER EXPLICACIÓN QUE ME PIDAIS, POR TELÉFONO,  WHATSAPP O VUESTRA FORTUITA INTERVENCIÓN EN ESTA CHARLA

     —SOFÍA,  POR FAVOR —interrumpe Jaime, el pobre no es consciente de lo blanco que está—, DEBERÍAMOS CEÑIRNOS AL PROGRAMA Y NO HABLAR DE NADA QUE NO TENGA CORAZÓN.

     Rompo, con mucho cuidado de hacer ruido, la escaleta delante de su cara, y a continuación le guiño yo el ojo. 

      —EN ESA FOTO QUE VIAJA AHORA MISMO POR TODAS LAS REDES DEL PAÍS, YA SEA COMO NOTICIA, MEME O PUBLICIDAD DE ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, JAIME, TE DIGO YO QUE HABÍA MUCHO CORAZÓN, SOLO QUE EN REALIDAD ACABABA DE EXPULSARLO POR LA BOCA Y SE ME IBA POR EL RETRETE. 

     —NO QUIERES DEJARLO PASAR, ¿VERDAD?  —dice él apenado.

     —¿Y QUE EN CUALQUIER MOMENTO HAYA GENTE QUE SE SIENTA CON DERECHO A RECORDÁRMELO? NO, TIENE QUE SER HOY, CUANDO DEN LOS NOMINADOS  AL ACABAR LAS EMISIONES DEL DÍA —digo mirando la hora en mi teléfono—. ASÍ QUE HAGAMOS DE ESTE PROGRAMA, PARA BIEN O PARA MAL, MEMORIA RADIOFÓNICA DE ESTE PAÍS. 

    —ENTIENDO —admite Jaime sin volver a cuestionarme, o no, porque me pregunta a continuación: ¿Y PREFIERES QUE LAS INDISCRECIONES TE LLEGUEN POR LLAMADAS O WHATSAPP? —Él lucha por no sonreír, lo intuyo en la tensión de sus mejillas.

    Yo lucho por no arrojarle la vela a la cabeza, está motivando a la audiencia cuando lo que menos necesito es que quieran saber demasiado.

     —Sabes que eso es como preguntarme si prefiero morir quemada o congelada, ¿no?

     La cara de Jaime al fin explota en una sonrisa.

     —No vas a morir,  drama queen, solo das un paso al frente para que te apedreen con tu consentimiento.

     Ya, y que salga viva luego sería un milagro.

     —Se te dan mejor los consejos de amor, cuernos y camas que los de autoestima y valoración, porque sigo hecha una mierda.

     —Soy capaz de hacer mejor tantas otras cosas, que llegaríamos al cierre de emisión y todavía estaría enumerándolas —dice salvando la distancia de la mesa hasta que noto su aliento colapsar mis sentidos, eso y que el cabrón ha apagado la vela para que yo no olvide ese aroma—. Y no eres una mierda, Sofía, no tengo por costumbre revolcarme en ella.

     Creo que Jaime acaba de provocar a esa audiencia despistada o lenta en pillar sus dobleces, porque  una oleada de llamadas y entradas de WhatsApp se adivinan tras el interruptor rojo.

    —ENTONCES, QUE NUESTROS OYENTES LLAMEN AL 677 45 24 377 Y DECIDAN SI QUIEREN QUE ME ARRANQUE EL CORAZÓN Y LES ENTREGUE CON ÉL MIS EXPLICACIONES DE LA FOTO, O QUE TÚ TE ARRANQUES LAS PELOTAS Y ME HABLES DE TUS HABILIDADES, AHORA QUE ESTAREMOS JUNTOS.

     Jaime coge mi mano y la besa con detenimiento. Un dulce y estremecedor beso que me acalora sin remedio. ¡Puto aroma de canela, que sigue impregnado en mi piel!

     —BUENAS NOCHES —dice Jaime como si no hubiera erizado los vellos de todo mi cuerpo con ese beso. De buena gana me agachaba a comprobar,  por debajo de la mesa, si él también está cachondo—, CORAZÓN DE FENIX QUIERE OIR TU VOZ.

     —Soy Candela y a mi lado está Asier.

     —Entiendo que Asier es tu pareja, ¿no?, de lo contrario no lo hubieras nombrado para saber de la foto de Sofía.

     —Sí,  lo es, él es de los que votaría por ver cómo entregas tus gónadas a Sofía —miro con los ojos muy abiertos a Jaime, ¡ay, joder!, que ahora medio país querrá castrarlo si no se porta bien conmigo

     —¿Y tú no votarías? —pregunta Jaime entrelazando sus dedos con los míos, riendo.

     Es un puto máquina de la comunicación, al menos de la “locución verbal sin verse afectado por los picotazos de avispas en el estómago, estando en directo”. Me acaricia, para seducirme, y sigue hablando como si estuviera dando el parte meteorológico.

     Pues desde ya te digo que esto se está poniendo calentito.

    —Yo llamo para darle todo mi apoyo a Sofía, es una gran entusiasta de su profesión y no se merece que una foto acabe con su carrera. Lo digo yo, que la prensa me tiene frita por culpa de la fama de Asier con tanto montaje con él y sus actrices.

     —Un momento, ¿hablas de Asier Llanes, el director de cine? —pregunta Jaime contento de la difusión que toma nuestro programa.

     —El mismo —dice orgullosa ella.

     —No me ocurrirá nada, Candela, aunque siempre podré volver a Risas Contigo —le aseguro mientras acaricio los dedos de Jaime. Ya no tengo miedo al fracaso que suponga regresar por la puerta de atrás.

     —Me alegro de tu entereza, y también quiero mandarte el apoyo de mi amiga Noelia, ella piensa como Asier, y quiere ver a Jaime arrastrado a tus pies. Pero solo cuando tengas tu premio bajo el brazo, ella es de muchos premios también. 

     —¿La actriz Noelia Arenas?, joder Sofía, eso sí que es tener apoyo de las grandes esferas —dice un admirado Jaime, besando mi mano—. Y solo por eso les haré a Noelia Arenas a tu chico una promesa que asegure mi relación con Sofía, ¿qué te parece, Candela?

     ¡Ay!, que me da la sensación de que este va a declararse en directo.

     —Genial, sois mi pareja favorita después de Noelia y Samuel.

     —No hace falta que lo hagas, Jaime —le pido yo alarmada—, ¿cuándo se ha convertido Corazón de Fénix en un espejo de nosotros, para que todo el mundo se identifique con nuestra relación? 

     —Pues desde el primer día de colaboración —interrumpe Candela, para nada sorprendida por mi pregunta.

      —Serán muchos más los oyentes que necesiten que hablemos de ellos,  nuestros problemas no tienen interés, Candela —le recuerdo yo, que para algo soy la locutora del programa.

     —¿Lo dices en serio? ¡Si hasta hay foros de vosotros en los que opinamos y apostamos  los que no podemos entrar en directo cada noche!

     Retiro la mano que Jaime acariciaba para llevármela a la boca.

     —¿Ves, Sofía? —me cuestiona Jaime—, no puedo fallarles a tus oyentes, o ese foro caerá en el olvido. 

     Jaime no se levanta y no clava la rodilla en el suelo como esperaba que hiciera para su declaración. Cierro los ojos por un instante, será peor lo que tenga en mente.

     —Está bien —acepto—, habla.

     Nuestras miradas conectan, como lo hace su voz con los miles de oídos tras las ondas.

      —Estoy dispuesto a dormir cada noche, del resto de mi vida, en el lado izquierdo de la cama. —Y acompaña la promesa con su maravilloso guiño de ojo que me deja embobada—, Y AHORA SÍ, QUERIDOS FÉNIX, A QUEMAR ESE FORO CON VUESTRAS CONJETURAS SOBRE LO QUE ACABO DE DECIRLE A SOFÍA. NOS HABLAMOS EN UN INSTANTE.

     Jaime da paso a la cuña publicitaria y se quita los cascos, naturalmente, yo también lo hago.

     —Toda la vida es mucho tiempo para lo que te queda a tu edad —digo aceptado de nuevo que me coja de la mano, detengo la vista en la unión que mantenemos y sonrío.

     —Y tendré un carácter de mierda al despertar, todos los días, por dormir incómodo.

     —No sé si quiero eso para el resto de mi vida —finjo pensar.

     —¿El qué?, ¿dormir a mi lado o despertar conmigo? —pregunta besando mi mano mientras sonríe.

     —Dejarte pasarlo tan mal.

     —Tú preocúpate de agotarme cada noche, para que yo despierte cada mañana pensando en ti.

     La pausa de publicidad termina y ambos nos volvemos a colocar los cascos, nos sonreímos en complicidad. Es ahora que sobran las palabras entre nosotros para prometemos comenzar nuestras vidas, juntos, esa misma noche.

🎧🎙🎧🎙🎧🎙🎧🎙🎧🎙🎧🎙🎧🎙🎧

Como cada noche, bienvenido a tu programa, mi querido Fénix, aquí daremos voz a tu opinión, pregunta o propuesta en el amor.

Queremos oír tu sonrisa.

Hoy el tema será;  PROMESAS POR CUMPLIR 

Cuéntanos:   

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro