Si me preguntas, llevo escribiendo desde los nueve y a los catorce comencé a tomármelo en serio, pero no fue hasta los veintidós que desarrollé en mi mente una lista de trucos que facilitaron mi proceso. Ahora, a los veintitrés, tengo establecida una rutina que me permiten tener un avance decente en mis historias. Por supuesto, debo aclarar que este método no le funciona a todo el mundo, porque cada quien trabaja distinto. Hace un tiempo les compartí mi método para organizar una historia. Este es uno para el proceso de escritura.

Lo primero, es el procesador de texto.

Con el procesador de texto me refiero al programa que utilizas para escribir. El más común es Word, pero existen otros que pueden ayudarte.

Scrivener, para MAC.

ZenWriter, para WINDOWS.

Ahora, de Scrivener no puedo hablar mucho. No conozco el programa ni puedo instalarlo en mi computadora, pero si tienes una MAC ese programa es útil. He visto algunas reseñas y es super cómodo.

ZenWriter, por otro lado, es una maravilla de programa. Evita distracciones, te permite personalizar el fondo, cambiar la letra y su tamaño, crear tu propio playlist y que al teclear se escuche como una vieja maquinilla o gotas de lluvia. Además, puedes colocarlo para vista nocturna o diurna. Lo mejor de todo es que elimina la barra de la computadora, por lo que solo es tu texto y tú, trabajando en solitario y en armonía. No internet, no programas, no nada. Solo tu historia y tú. Abajo les muestro una captura del programa.

Por desgracia, este programa que solía ser gratuito ahora es de paga. Sin embargo, me las arreglé para conseguir una versión gratuita que protejo como mi mayor tesoro (de no ser por este programa y su política de anti distracciones no habría avanzado tanto con mi actual proyecto trabajándolo en Word, donde las distracciones están al máximo). Si alguno está interesado, si ha sido seducido por su inagotable encanto, me pueden contactar por mensaje privado, aquí mismo en Wattpad, y les haré llegar el enlace.

Otra gran desventaja del ZenWriter, que podría considerarse mejor como una ventaja, es que, contrario al Word, no te marca los errores. Eso, para el programa, es una tarea que no existe. Si eres de los que dependen de la línea roja para saber si cometiste algún error, te aviso que el programa guarda tu texto en un documento que puede abrirse en Word. Solo debes ir a Documents, buscar la carpeta con el nombre ZenWriter, abrirlo y revisar los errores.

Aún así, es bueno conocer los códigos para las letras acentuadas, así podremos mantener la ortografía incluso en un programa que se niega a corregirlos.

Aquí les va la lista:

Recuerden que, contrario a la creencia popular, las mayúsculas se acentúan SIEMPRE.

Ahora, otro código importante es el de la raya o guion largo. El guion se utiliza para la creación de diálogos o para aislar un elemento. Por ejemplo, cuando en un diálogo hay también una acción.

El código para el guion largo es alt + 0151 (—). Ahora, si como yo utilizan la fuente (estilo de letra) palatino linotype, el guion se verá más pequeño, aunque seguirá contando como guion largo. Les muestro una comparación.

Si al usar esta fuente, o cualquier otra que les haga ver el guion largo alt + 0151 más corto, descubren que quieren verlo lo más largo posible (prohibido no mal pensar), pueden usar el siguiente código: 2015 alt + x. El alt + x reemplazará el 2015 automáticamente por el guion (asegúrense que la x esté en mayúsculas y que el caps lock no esté activado o no les funcionará)

Muchos utilizan el – como guion y no lo es. En matemáticas, es el símbolo de menos o el símbolo de negativo. En la novela, el guion correcto es el largo (―).

Otro fantástico truco quequiero mostrarles se llama Writeometer y es una app. Pesa apenas 14 MB y es muyfácil de usar. Con esta app, puedes seguir el progreso de tu avance. 

Como pueden ver (que es dificil de ignorar porque, mierda, que imagen tan giganteee), la aplicación calcula estratégicamente cuanto tardarás en completar tu meta basándose en los datos que le proveas (todo dependerá de las palabras que establezcas como meta final y cuantas hagas al día). Puedes establecerte una cantidad con la que estés cómodo y con la que puedas cumplir. Incluso puedes activar las notificaciones: al establecer una hora fija en la que te sentarás a escribir, la aplicación te enviará recordatorios. Ya no más la excusa de «lo olvidé». ¡No, señor!

Quizá estos «trucos» les parecen básicos, quizás hasta inútiles, pero les contaré mi experiencia: para una persona que contaba con una pésima rutina y alguien que se distrae con el zumbido de una mosca, todas las herramientas que acabo de presentarles me han ayudado y lo veo día con día. La comodidad para escribir ahora es plena, el proceso agradable (salvo por aquellos días cuando me doy cuenta de que he metido la pata y debo detenerme para iniciar otra etapa de planeación) y el avance es vasto. A veces, pequeños pasos te llevan mucho más pronto al destino que los grandes. Espero que esto les haya servido de algo. Lofiuuuuuuuuuu ♥ Nos leemos pronto, ricuras 7u7