https://youtu.be/Wl7pKRwcuso

Cuando Shaojie estaba en el ejército, su instructor siempre le decía "La guerra es para los fuertes, los débiles son los que mueren". En lo personal Shaojie nunca se consideró un hombre fuerte, es más, cuando se enlisto, su desempeño era inferior a los soldados promedio, después de unas cuantas batallas, una pregunta invadió su mente "¿Por qué sigo vivo?" Y en ese momento se percató de que no era un soldado débil, era de los fuertes, pero algo había algo que no podía entender, aquellos "fuertes" que se enlistaron con él, estaban muertos, entonces ¿que es la fuerza? ¿Cómo se reconoce a un soldado fuerte?

— Teniente —Sheng se escucha ansioso— la recluta ha dejado de sangrar, su respiración se regula.

— Perfecto —dice el hombre mientras mira el pasillo de la nave desde el resguardo de una esquina— prepara la extracción, me asegurare de acabar esto pronto.

El teniente avanza hacia una puerta, se cubre con la pared de al lado y con una mano abre la puerta lentamente, con extremo cuidado asoma la cabeza, no ve señales del enemigo, dentro de la habitación ve unas computadores con pantallas holográficas, luce como el centro de mando de la nave, es extraño que el enemigo no este cuidando un lugar tan importante. De súbito escucha unos pasos al exterior de la sala ¡Es una trampa! Se esconde preparado para disparar a lo primero que aparezca, pero los pasos se han alejado ¿intenta retirarse?

— ¿Cuál es su situación? —pregunta Sheng un poco más tranquilo.

— Jugamos a las escondidas —dice mientras se acerca a otra puerta, en cuanto la abre el alíen que parece energía toma forma física y se esconde en la habitación.

Al instante Shaojie retrocede a la sala del otro lado y saca la granada de su cintura— la explosión es mía —le advierte a su equipo.

En cuanto se detiene la explosión abandona la sala para cambiar de cobertura, estando en el pasillo espera ver al enemigo, pero no encuentra señales de que este alli, desea pensar que ha muerto, pero algo no está bien. Se aproxima a la habitación que exploto por la granada, el humo ya se dispersó pero no ve al enemigo, aún existen lugares de cobertura, no debe bajar la guardia.

Al entrar en la sala se coloca a cubierto detrás de una consola que parece estar manejando el tanque de energía, detrás de este se puede ver al alíen, la intuición de Shaojie no se equivocó.

El teniente dispara una ráfaga de balas, pero el alíen se mueve hacia la derecha del tanque y devuelve unos disparos, Shaojie tiene dificultad para esquivarlos a causa del peso de su arma, la herida no es profunda gracias al grosor de su blindaje.

"¿Quiénes son fuertes?" Su mente se recuerda preguntándose eso cada mañana al despertar, pero el hoy en día ya sabe la respuesta.

— Es matar o morir —se dice a si mismo antes de comenzar a avanzar disparando.

La criatura retrocede por las balas, pero en el intento su pierna se lastima, retrasandolo y causando que reciba la lluvia de balas.

— Aquí Teniente Shaojie Zhang, hemos acabado oficialmente con el ataque.

Sheng y Shaojie llevan a Binta al skyranger.

— Perdón —dice Sheng avergonzado— debí acompañarlo.

— ¿Debiste? ¿Qué te decía tu intuición?

— Que me quedara, que si avanzaba yo iba a... —decirlo le genera un nudo en la garganta.

— Ibas a morir —completa el teniente.

— Si —afirma aun avergonzado.

— ¿Sabes quienes sobreviven en la guerra? —le pregunta al soldado.

— Los fuertes señor, eso es bien sabido.

— ¿Quiénes son los fuertes? —le pregunta al instante.

Cuando llegan al skyranger otra nave está a su lado, desde la base han enviado un equipo médico para atender a la recluta Binta.

— Los fuertes —-retoma la conversación Shaojie— son aquellos que saben cuál es el momento en que deben arriesgar su vida y cuando preservarla.

— ¿Eso es la fuerza? —se siente confundido.

— Créeme que suena fácil, pero no lo es —Shaojie mira al equipo médico— ve con ellos, también tuviste contacto con el veneno, yo me encargare de traer el cadáver de Sam y reportar el informe.

— Entendido —dice antes

Shaojie camina hasta encontrar a su difunto compañero, antes de levantarlo se saca la armadura, y se quita la chaqueta para cubrir lo que queda de la cabeza del solado, luego nuevamente se coloca la protección, aunque usarla por si sola es molesto, especialmente por el roce con la herida que tiene.

— Te prometo que depositare el dinero en la cuenta, quizá no me escuchas, pero si existe algo como la otra vida y estas por acá, felicidades por la misión cumplida.

Tras decir esas palabras levanta el cadáver y lo regresa al skyranger.