Capítulo 1: Recuerdos
[ATENCIÓN: esto es una secuela de OldmanLogan:el depredador de dioses. Si no quiere hacerse spoilers, no continuar, ahora sí, comencemos]
-Mierda- exclamó un hombre con chaqueta café y pelo blanco por la edad- Mierda-
Este hombre corría por unos callejones, con garras sobresaliendo de sus nudillos y sangre brotando de estos.
-Mierda...-
El hombre parecía cansado, además de herido, tenía la cara desgarrada, el muslo atravesado, el estómago igual que el muslo y un ojo reventado.
-¡¡MIERDA!!- gritó este llegando de repente a un callejón sin salida.
Volteo hacia atrás, algo le estaba persiguiendo, y le alcanzó tras este inesperado suceso.
-HOLA LOGAN- escuchó en la oscuridad del callejón, al frente suyo. El mutante miraba como podía con su único ojo disponible, apretando los dientes. Y temblando. La oscuridad no mostraba su silueta, pero podía ver sus ojos rojos, sus ojos resplandeciendo y apunto de disparar. Sus garras empezaban a derretirse frente a este ser, y sin armas con la cual defenderse, fue víctima de los rayos mortales mientras gritaba adolorido.
-¡¡¡¡MIERDA!!!- gritó el mutante de garras despertando. Estaba en su cama, sudando, sin ninguna herida en su cuerpo.- Mierda....- se sujetó de la cabeza, mientras respiraba agitado- Otra puta pesadilla-
Sin llegar a hablar más, se puso sus pantalones de cuero, y salió del edificio donde estaba. Logan, más conocido como Wolverine, caminaba por una ciudad donde no había nadie, donde el silencio abordaba a más no poder. En este ciudad ya no había nadie, no porque no pudieran estar, sino que ya nadie quería estar.
El centro de EEUU, la ciudad que nunca duerme, muerta. Muerta cual árbol caído, muerta cual animal abatido a balas...
-(Ya han pasado diez años...)- pensó Logan mientras caminaba-(El mundo se ha recuperado poco a poco, pero no significa que ya todo esté bien. El país está en crisis, su poder ha bajado y economia. Todos los países que augeaban al mundo económicamente en si están acabados, Francia, Reino Unido, Rusia, Japon... el único que aún sigue siendo potencia es China. La cual ya se volvió la primera sin Estados Unidos en marcha y Rusia e Japón.)-
Logan llegó donde parqueaba su moto. Dentro del bar más cercano a su casa. No había nadie, por lo cual no había inconvenientes en dejarlo donde quisiera. Aunque pudo haberlo dejado en la entrada de su casa, no lo hizo. Porque lo había olvidado en el bar tras ayer estar bebiendo hasta poder irse a dormir. El alcohol tardaba en pudrirse, y el vino mucho más. Teniendo en cuenta que en ese antiguo bar frecuentaban muchos personas, aún conservaban bastante alcohol en su depósito. Aunque el lobezno ya se ha tragado el 90%, de lo que pudo haber durado aún más de 3 años...ayer.
Se subió en su moto, y empezó a conducir por la ciudad. Hasta llegar donde estaba en New York, el santuario de la hechicera suprema.
Entro sin llamar, y vio que no había nadie.
-(Ya me lo temia)-penso para si Logan.
Hace unas semanas que, sin decir nada, Wanda desapareció. No sabía dónde estaba, siquiera Betty Ross, su mejor amiga, lo sabía.
-(Aunque teniendo en cuenta su trabajo de Hechicera Suprema, no me molestaré)-
Logan solo empezó a recorrer el santuario, aburrido, y bastante agobiado. La pesadilla que había tenido...no había sido la primera vez que la tenia. Todas las noches la tenía, poder ver a ese ser mirándolo, con sus ojos rojos, sin poder nada. Podia verlo torturandole a él de formas inimaginables, sin poder hacer nada. Todos las putas noches desde hace 10 años.
Ahora mismo buscaba algo de Consuelo, o compañía tal vez. Pero Wanda no estaba, y Betty estaba muy lejos para visitarla.
-(Ese maldito)- recordaba el lobezno- (Desde ese día intentamos encontrarlo, o amenos yo. Pero Betty y Wanda...no quieren hacerlo. Piensan que no deberíamos, piensan que no podríamos hacer algo contra eso)- Logan paro seco para ver una pintura del santuario- (No las culpo, porque aunque me duela, sé que tienen razón... pero me niego a aceptarlo)-
Logan fue hacia donde estaban las armas mágicas del santuario, no para verlas, sino para sentarse en una mesa que se encontraba cerca. Curiosamente una de las pocas cosas normales en el santuario.
Abrió una cerveza que tenia en el bolsillo, recordando plenamente el día donde ellos planeaban atacar a ese ser y a Doomsday.
-(¿Qué habrá pasado con él?)- pensó el longevo ahora recordado al hombre que les ayudó ese día-(¿como se llamaba? ¿Bizarro?)-recordaba con dificultad. -(Hace diez años tuvo que irse a Tierra 15, para regresar a su hogar. Él necesitaba volver para ayudar a su gente a reconstruir su mundo)- Logan recordó vagamente eso.
Tragó toda la lata y luego la aplastó contra su cabeza, para después dormirse encima de la mesa. No había tomado mucho y aún así ahora estaba ebrio, o a lo mejor el alcohol de ayer volvió a activarse tras beber una nueva lata.
-Mierda- Logan estaba nuevamente en el mismo sueño, recorriendo callejones sin poder hacer nada más que huir-Mierda- estaba tambaleándose, su pierna estaba atravesada y no se regeneraba su herida.-¿Po-r q-que?- se preguntó logan casi llorando. Termino nuevamente en un callejón sin salida, pero esta vez observo en el suelo, a su dulce esposa y hijo de 1 año muertos. - No, no, no...- repitió desesperado. Atrás suyo sonaron nuevamente pasos, y al girar, lo vio como siempre en sus sueños, a Tares. El ser que mató a su familia, que trajo ruina a su mundo y antiguos compañeros.-Te mataré...¡¡¡Te matare!!!- grito Logan con lágrimas y una furia insaciable. Intento sacar sus garras, pero por más que quisiera, nada salía. Sus garras no salían por nada del mundo.- ¡¡Mierda!!¿Po-por qué??-
-Oh~ Logan- le hablo Tares con voz profunda y recóndita- Cuando tienes la capacidad de hacer algo, tienes esperanza, cuando esa capacidad realmente es nula, ¿ves como chillan los héroes?- Tares le sonrio con una gran malicia, sus dientes se expandieron, y su sonrisa se tornó en la de un demonio peor que Mephisto. Sus ojos rojos, brillaban con más intensidad, hasta que dispararon un rayo calorífico que atravesó el cráneo de Logan.
Logan despertó, ¿cuánto tiempo se había quedado ahí? No le dio importancia a eso. Su sueño, su respiración, incluso sus ojos en lagrimas, su cuerpo temblando, desmotraban que tenia miedo, miedo como nunca. No miedo de perder a alguien, sino de encontrarse con él otra vez. No malinterpreten, Logan quiere encontrarlo, matarlo, pero en el fondo sabe que le aterra tan solo ver su cara, recordarla, ver cómo fue capaz de burlarse todos como maestro de ajedrez y dios de oscuridad.
-Demonios- se quejó mirando su mano, viendo impotente algo importante. Sus garras desde aquel día....no han vuelto a salir. No es capaz de sacarlas, no es capaz de siquiera hacer eso. Aunque quiera matarlo con toda su Alma, si no es capaz de siquiera sacar su unica arma, ¿qué podría hacer él?.
Logan empezó a irse del lugar, no tenía más que perder ahí. Era un día más en el cual la hechicera no apareció, a saber donde podria estar. Mirando el cielo que ya era nocturno, empezó a sentir nostalgia de los viejos tiempos.
- Cariño, perdóname por ser tan egoísta contigo y mi pequeño, perdóname por no haberte salvado, perdóname por no haber hecho algo, perdóname por no poder vengarte, perdón... por no morir-
Logan se marchó a su hogar para volver a dormir. Se subió en su moto, y empezó a conducir.
.........
.....
- ¿qué te parece?- le preguntó un hombre de traje azul y rojo a una chica de capa roja y ropa de mismo color con rosa.
-¿funciona, verdad?- le preguntó la mujer a lo que el hombre asintió.
- Sin dudas....- le dijo el mismo, mientras su capa empezaba a hondear de una manera sobrenatural, como si la capa tuviera vida propia. Lo que estaban viendo ambos, era una nave de gran tamaño, con alas extensas y de color negra- Con esto...podremos navegar el multiverso, y volar en segundos hacia planetas de ser necesario-
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