01x01
Una producción de
Director: respaldoRS
Productor ejecutivo: respaldoRS
Protagonizado por X-316 y Ayeka
Antagonizado por ???
Año Skan 4314, Planeta Praink
Una capsula de escape cae en ese desértico planeta con pocos arboles, donde no hay civilización ni árboles en ningún lugar, con un cielo café.
Luego de unos minutos, la capsula se abre y de ella sale una criatura humanoide de piel azul, cabello corto oscuro, ojos igual de oscuros y ropa marrón tosiendo mucho para luego caer al suelo y quedarse ahí unos segundos.
—¡Alguien me escucha? —pregunta nuestro protagonista, X-316, sin embargo, nadie responde—. Praink... Yo voy a sobrevivir.
Dicho eso, lleno de seguridad, el Skan empieza a caminar, en busca de agua.
X-316 (quién trae ropa roja de prisionero y no tiene su brazo robótico <el izquierdo>) despierta asustado debido al sonido de unas alarmas, en una celda de paredes azules y una formada por una red de energía dorada que le impide escapar.
"¿Qué ocurre?", se pregunta a sí mismo.
Los guardias que custodian la celda desde fuera empiezan a disparar hacia un objetivo, pero de un segundo a otro, el prisionero ya no los escucha.
Con incertidumbre, X-316 se levanta para contemplar como la puerta se abre y de ella entra una chica Skan (alienígena de piel azul) con la tiara morada de Ayeka en la cabeza, por lo que se altera y la encara:
—¿Quién eres? ¿Por qué traes eso en la cabeza?
—Tenemos que irnos —responde y desactiva la red que lo encierra.
—No iré a ningún lado con alguien que roba la tiara de Ayeka, ¿Quién eres?
La chica susurra unas palabras y una energía roja recorre su cuerpo, transformándose en Ayeka (alienígena de piel anaranjada y ropajes grises), confundiendo al Skan:
—¡No intentes engañarme! —advierte X-316—. Dámela y te dejaré ir ilesa.
—Hey, soy yo, de verdad —intenta convencer la chica, sin embargo, el convicto no le cree.
—Entrégamela —señala a la tiara.
—Aunque quisiera no puedo.
—¿Por qué?
—Luego te lo explico, la nave más cercana está en la tercera puerta por la derecha, quinta puerta a la izquierda y cuarta a la derecha.
—¿Qué razón habría para confiar en ti?
—¿Prefieres encargarte solo de las decenas de guardias que vienen? —se va por la izquierda, dejando la puerta abierta.
Desconfiado, X-316 sale por la puerta y se va hacia la derecha, pero de una de las puertas salen tres guardias que al verlo le disparan ondas aturdidoras, por lo que el apresado empieza a correr hacia atrás, donde se abre una puerta desde la cuál sale un soldado que es inmediatamente golpeado y noqueado por el Skan con su brazo derecho (y único brazo), el cual toma su arma y cruza la puerta para evitar los disparos de los demás guardias.
Los guardias sin dejar de apuntar a dicha puerta se acercan lentamente, dejando a X-316 con solo una opción, crear una distracción, así que toma el arma del guardia que noqueó y dispara hacia los paneles de control de las demás celdas, desde donde empiezan a salir varios apresados, quienes atacan a los guardias, lo cual aprovecha para recorrer los pasillos en búsqueda de la bóveda.
Al encontrarla luego de abrir muchas puertas, busca un cajón que dice "X-316" y lo abre, sacando primero su casco, al cual lanza una pequeña sonrisa y luego saca su traje.
Minutos más tarde, un grupo de cinco guardias corren por un pasillo debido a que los prófugos liberaron a más prisioneros, pero en eso, una pared es atravesada por un guardia que cae noqueado y del agujero que dejó, sale X-316, quién los mira y se coloca en pose de pelea.
Los guardias corren hacia el Skan al igual que este hacia ellos, luego nuestro protagonista salta hacia la pared izquierda del pasillo y se impulsa desde ella para caer a la par que golpea al primer guardia, después da una vuelta en el suelo y le patea el pie al segundo guardia provocando su caída.
El tercer guardia trata de disparar al prófugo, pero este da una patada hacia arriba quitándole el arma para luego agarrar el arma y disparar en el rostro.
El cuarto guardia al igual que el quinto disparan hacia X-316, quién esquiva a duras penas los disparos y lanza al tercer guardia hacia el cuarto para por último saltar hacia el quinto enemigo y darle un rodillazo en el mentón, haciéndolo caer inconsciente.
X-316 respira un par de segundos luego de noquear al quinto guardia, pero en eso, se ve forzado a esquivar un golpe del recién levantado cuarto guardia, el cual intenta dar otro golpe que el Skan atrapa con la intención de golpear a su atacante con su propia mano, cosa que logra hacer con facilidad para seguir con un rodillazo en el abdomen y rematar ahorcándolo contra la pared durante unos veinte segundos con tal de hacer sufrir al guardia solo para terminar rompiéndole el cuello con un apretón.
El segundo guardia despertando le apunta con su arma a X-316, pero este es más rápido y lo mata con la arma de su cuarto compañero.
Al volver al camino indicado por la supuesta Ayeka, nuestro protagonista abre la cuarta puerta a la derecha y se encuentra con una nave explotada en medio de un batallón entre prófugos y guardias Skan.
El cazarrecompensas cierra la puerta y corre por el pasillo mientras piensa "Si en realidad se trata de Ayeka, más le vale no haber vuelto a morir, ahora toca ubicar el hangar", luego de unos segundos de recorrer los pasillos buscando dicho lugar, se escucha una explosión que hace temblar toda la estructura y para conveniencia de la trama, el temblor quiebra el piso haciéndolo caer en el hangar.
—Bingo —celebra X-316.
Al avanzar, es golpeado muy fuerte por un ser hecho de piedra, al que reconoce como Raincut, de los defensores intergalácticos, el equipo que frustró su plan de conquistar el planeta Skan.
—A ti te estábamos esperando —inicia Captain Revolution a un lado de Raincut y le apunta con su arma a X-316—. Vuelve a tu celda y no tendré que derrotarte de nuevo, tienes un brazo menos, me será más fácil.
—Dile eso a los guardias que maté —provoca X-316.
—Última advertencia.
X-316 mira fijamente al capitán, pero en eso, tanto él como Raincut reciben un ataque de energía morada que los empuja a una pared y luego esa misma energía se manifiesta en sus cuerpos y les impide levantarse.
—Imposible... —susurra el capitán al ver a Ayeka viva. 8
—No tienes idea de lo que es posible —dice Ayeka y apunta sus manos hacia lo alto de la estructura para luego agrietarla y hacerla caer tanto sobre el capitán cómo sobre Raincut.
—Rápido, a esa nave —señala Ayeka y corre junto a X-316.
Al despegar la nave, la pareja de prófugos es perseguidos por una nave que el Skan logra reconocer cómo la nave de combate de Reims, otro miembro de los defensores intergalácticos, así que procede a esquivar con dificultad sus disparos.
—Yo me encargo —dice Ayeka y luego de unos segundos con los ojos cerrados intentando (ya que al nunca haber estado en en esa nave le cuesta más manifestarse ahí) se teletransporta hacia la nave de Reims (alienígena pequeño humanoide con apariencia similar a la de un panda rojo), donde ve a Laner (alienígena alada humanoide de piel clara y cabello negro corto) sentada en el asiento del copiloto.
Al saber que Laner es la más peligrosa debido a sus habilidades telepáticas, Ayeka apunta su mano derecha hacia ella y usando su telequinesis hace que se golpee el rostro contra el co-panel de control de la nave para luego apuntar su otra mano hacia Reims y lanzarlo hacia una pared, dejando así que la nave empiece a estrellarse sin control, por lo que se teletransporta de vuelta a la otra nave dejándolos a su suerte.
X-316 al ver a la chica de vuelta activa la velocidad suprema y así logran salir de ahí con éxito.
—Admito que pensé que fue una mala idea —revela Ayeka y se recuesta en el asiento—, pero la fuga de hecho nos hizo más fácil el escapar —X-316 suelta una pequeña risa y luego le apunta con un arma—... Aún no me crees.
—No sé cómo podría creerte.
—Entre el capitán y el terrus se las arreglaron para quitarte la tiara, la cual la cuál integraste al pecho de tu armadura... Antes de eso, cuando la granada cayó, a la par que te salvaba conjuré un hechizo para anclar mi consciencia a la tiara, asegurando así su supervivencia, de lo contrario, ni la tiara habría sobrevivido.
—Siempre estuviste ahí...
—Lamento no haberte dado una señal clara
Al escuchar eso, el Skan solo abraza a Ayeka, la cual corresponde silenciosamente.
—Pensé que te había perdido...
—Aquí estoy, nunca me fui —X-316 la besa por unos segundos.
—¿Significa que ahora si algo le pasa a la tiara, tu...?
—No nos preocupemos por eso ahora —le sonríe—. Hay que preocuparnos por qué cosa haremos, a donde iremos.
—Barajemos opciones —prende una pantalla—. Descartemos sistemas afiliados al Senado Universal y/o esclavizados por el imperio Fénix.
—Eso deja sólo los sistemas libres.
—Haremos una parada en el planeta Rowell, pasaremos la noche ahí y mañana partiremos a primera hora para evitar que si el Fénix se entera que escapé, envíe a alguien y nos atrapen —Ayeka solo lo mira sonriendo—. ¿Qué ocurre?
—Me encanta cuando planeas así, hagamos eso.
—Perfecto —detiene la nave y la desvía un poco para luego volver a activar la velocidad suprema—. Falta un buen rato y tengo sueño, ¿Tu no?.
—Al ser una tiara durante tanto tiempo no gasté energía así que aún tengo.
—Muy bien —se va a dormir a unos asientos de tripulación.
Una hora humana después
La nave se detiene frente a un planeta en su mayoría blanco con toques verde oscuro y marrón.
—¿No iremos por los demás en algún momento? —consulta Ayeka mientras X-316 hace descender la nave.
—No creo que sea buena idea, el Senado o la dinastía Fénix deben estar esperando que, si alguno se libera, intente liberar al resto.
—Entiendo.
—Además, fuera de tu hermano, ninguno nos importaba realmente —echa una risa y Ayeka igual lo hace.
La nave se adentra en una especie de ciudad formada por árboles cuyos troncos son muy gruesos y lisos, los cuales desprenden hojas verdes enormes con mucha firmeza que los habitantes usan para construir sus distintos establecimientos u hogares.
Al girar en una intersección que los lleva a un hangar para naves bastante natural, un habitante Row, alienígenas humanoides con enormes alas en la espalda, cuello largo y cabeza pequeña sin nariz, con ojos oscuros y en este caso, de color blanco vuela hacia delante de la nave para indicarle a X-316 donde puede aterrizar, indicaciones que el Skan obedece.
—Asumo que habrá que actuar pacíficamente para no llamar la atención —supone Ayeka.
—Asumes bien —se para del asiento y ambos bajan de la nave, donde ven al Row que les indicó dónde aterrizar, esperándolos.
—U'Chat Tomaro (Bienvenidos) —saluda el Row.
—¿Skanriss? —consulta X-316 haciendo referencia a su lenguaje, pero el Row hace un gesto de negación.
—Enat Rowell —aclara el Row.
—Mau kel Rowell, lamut xan nut (Yo hablo Rowell, pero ella no) —explica X-316.
—Nut bein alat (No habrá problema) —empiezan a caminar—. ¿Gu jam tak om Rowell? (¿Qué los trae a Rowell?).
—Umslat (Vacaciones).
—Seint, le mal tirristek ujal (Comprendo, por favor regístrense primero).
X-316 y Ayeka proceden a dirigirse a la aduana de registro de inmigración al planeta Rowell, donde colocan sus datos y luego de un rato, se les permite el paso.
—¿Qué hacemos ahora? —pregunta Ayeka contemplando la arquitectura del planeta.
—Para empezar, necesito un brazo —Ayeka se ríe y él también—. Se donde ir.
Dicho eso, la pareja se desvía en una intersección y luego de caminar por unos minutos, entran a un establecimiento cuya entrada está conformada por ventanas de un leve color anaranjado y una puerta de vidrio normal, en el interior, se puede notar que es una tienda de extremidades artificiales cuyas paredes son grises con mostradores de un marrón cálido al igual que el piso.
Al fondo de esa enorme sala hay un mostrador donde un Row está hablando con otro.
—Uchutma Nalikan —ve al Skan y a Ayeka—. ¿X-316? ¡Pero que sorpresa!
—¿Qué tal, Bing? —saluda X-316.
—Todo bien, gracias —mira a Ayeka—. Usted debe ser Ayeka —sale del mostrador y hace una pequeña reverencia frente a ella—. Es un gusto finalmente conocerla. Su amado habla mucho de usted.
—¿De verdad? —se sorprende Ayeka y mira a X-316.
—Pasemos a lo que nos compete —elude el Skan.
—Claro... Asumo que vienes por un brazo izquierdo —supone Bing mirando el faltante brazo de X-316.
—Correcto.
—Y asumo que vienes por el mejor modelo.
—¿No tendrás alguno que me permita modificarlo de modo que pueda convertirlo en armas? —pregunta haciendo referencia al brazo que se le fue arrancado.
—No he oído de ninguno así.
—Entonces muéstrame lo mejor que tengas.
Dicho eso, los tres entran a la bodega, una habitación de paredes y piso gris oscuro, en donde hay múltiples vitrinas cubiertas por telas.
—Estos modelos son muy exclusivos y por tanto no los tenemos en exhibición, pero este es el mejor de ellos —explica Bing refiriéndose a la vitrina del centro y la destapa, dejando ver un brazo metálico plateado con líneas negras —la escena cambia a una del Skan con el brazo colocado, el cuál al estar en funcionamiento prende azul sus líneas negras—. Fabricado con el mejor metal de la galaxia, extraído del borde inferior casi en los rincones desconocidos —el skan mueve el brazo en un círculo vertical para ajustarlo bien—. Otorga a su portador mayor fuerza tanto ofensiva como defensiva —Ayeka para probarlo conjura una espada de magia morada y la lanza de arriba hacia abajo contra X-316, el cual se cubre sin problema con su brazo metálico, entonces la bruja aumenta su fuerza, haciendo retroceder al skan—. Por si esa fuerza fuera poco, el brazo también cuenta con propulsores pequeños, pero potentes en su costado derecho para apoyar en el bloqueo —los propulsores se apuntan y le otorgan a X-316 la suficiente fuerza para deshacer la espada—. Y por último la joya de la corona, el disparador en su palma —nuestro protagonista apunta su palma hacia Ayeka, la cual crea un campo de fuerza morado frente a ella, entonces un agujero se abre en la palma del brazo metálico y en el enciende una luz azul que produce un pitido, sin embargo, al disparar, X-316 sale disparado hacia atrás—. Obviamente se necesita práctica con eso, pero cuando no tienes armas es bastante útil... Entonces... ¿Qué opinas? —X-316 mira detenidamente el brazo.
—Me lo llevo y de paso quiero renovar un poco mi armadura.
El recién renovado exsoldado skan y la bruja Ayeka salen de la tienda después de haber pagado con el primero portando su traje renovado:
—Necesitamos dinero —menciona Ayeka.
—Se donde conseguirlo... Traje de bruja, iremos a un lugar relativamente peligroso.
Caída la noche, X-316 vistiendo su traje de combate y Ayeka vistiendo su túnica gris caminan por una hoja enorme que conecta dos árboles. Al llegar al otro tronco, los dos Row de color negro que vigilan la entrada los detienen, a lo que el skan responde mostrando una tarjeta, cosa que hace que los guardias les abran el paso.
Al entrar, X-316 presiona un botón y el aparente ascensor empieza a subir, dejándolos en un piso bastante elegante donde hay muchos alienígenas, la mayoría Row, discutiendo o divirtiéndose.
El dúo se acerca a una mesa donde hay un Row de color plateado en el medio, quién inicia:
—Hace mucho no te veía por aquí, ¿Buscas trabajo?
—Creo que es obvio —responde X-316.
—¿Cuánta paga te gustaría?
—Lo suficiente para cambiar una nave de combate Skan por una nave de combate de último modelo sin registrar.
—Eso es demasiado... Lo más que puedo ofrecerte son quinientos parcex.
—Eso no es ni la mitad, novecientos.
—seiscientos.
—ochocientos cincuenta.
—Setecientos, última oferta.
—No aceptaré menos de mi última exigencia.
—Bien, fuera de mi establecimiento —los guardias Row le apuntan a la pareja de mercenarios.
X-316 mira a Ayeka y empiezan a caminar hacia la salida, pero son detenidos por un hombre de piel anaranjada idéntica a la de Ayeka.
—Es un Wardall... —susurra Ayeka, X-316 mira atrás del hombre y ve a una mujer Wardall de vestido rojo con toques dorados, pelo castaño largo y con una mirada de seguridad, la cual les dice:
—Yo les puedo pagar lo que quieren e incluso más.
—Duquesa Limball...
—¿La conoces? —pregunta X-316.
—Nunca en persona obviamente.
—Por favor ayúdenme, en mi propio planeta estoy en peligro, si aceptan la misión que les encomendaré les pagaré por adelantado el cambio de nave —suplica la duquesa, haciendo a X-316 y Ayeka cruzar miradas por unos segundos.
—¿De qué se trata la misión? —consulta Ayeka.
Creditos:
X-316
Ayeka
Duquesa Limball
Bing
Mafioso Row
Recepcionista Row
Captain Revolution
Soldado de procedencia sorpresa
Minutos más tarde
El mafioso Row luego de que nuestros protagonistas se fueran junto a la duquesa y sus guardias, prende un holograma en el que ve a un soldado del ejército del Fénix.
—Sus objetivos clasificados como Skan X-316 y Wardall Ayeka se encuentran en Row, aparentemente la duquesa Wardall Limball los contratará así que posiblemente se muevan a Ward pronto —informa el mafioso.
—Se lo informaré a mis superiores, si lo que dices resulta ser cierto, se te pagará bien —corta la comunicación y con ello la escena.
Producción
Director: respaldoRS
Productor ejecutivo: respaldoRS
Director de efectos visuales,
diseñador de portada,
banner y de los personajes: respaldoRS
Inicio de pre-producción
(idear el capítulo):
Mediados de 2022
Final de pre-producción del capítulo:
25 de Noviembre del 2022
Inicio de producción
(escritura):
11 de Octubre del 2022
Final de producción:
25 de Noviembre del 2022
Inicio de post-producción
(edición):
25 de Noviembre del 2022
Final de post-producción:
3 de Abril de 2023
Presenta:
Una serie original de Wattpad:
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