-Umemiya Hajime-

"Lo único que recuerdo de aquella familia era el como me arrebataban a mi hermano menor, como sujetaba su cabeza con mis manos, como apretaba su cuerpo con mis brazos en mi pecho."

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Al llegar al final de aquellos escalones, Hiiragi abrió una puerta, dándonos paso a la azotea de aquel lugar tan nombrado.
Los chicos y yo, nos asombramos al ver aquel lugar, parecía un área de relajación total.
Seguí con mi vista a Hiiragi, tenía curiosidad del lugar y de conocer a aquel líder que todos adoraban.

Umemiya.- Habló el de cabello cenizo. -Pasó algo grave. -Hablaba levemente nervioso y serio.

Ya lo sé. -Habló otro chico, no lograba fijarme bien en él, Sugishita, tapaba mi vista a él, por lo tanto, traté de alzarme de puntillas, ya que no quería llamar la atención, al no lograrlo, cambié de dirección y me coloqué a un lado de él.

Una vez con el área despejada, divisé un chico de cabellera blanca, su voz se oía tan animada al hablar, escuchaba como protestaba por no tener más espacio para sus cultivos.

¿Qué debería poner aquí?. -Preguntaba el albino al cenizo.

Shishi...-El de cabellos alzados trataba de comunicarse con él, pero era caso perdido.

Sin darnos cuenta, ya nos encontrábamos sentados en un rincón de su cómodo lugar, escuchándolo hablar de plantas.
Hiiragi se quejaba del porqué no se podía hablar con él.

Me encontraba distraída viendo el rostro de ciertos chicos, pude notar las pecas de Nirei, el como los ojos de Umemiya brillaban al hablar de plantas, el perfil tan definido de Suo, el color de cabello tan agradable de Hiiragi, lo tranquilo que es Sugishita y sin dejar de lado, a mi amigo, Sakura, la división de sus colores es tan llamativa, no pude evitar agarrar un leve tono rosado y rojizo en mis mejillas.

¿Tienes fiebre?. -Hiiragi posó su mano en mi frente al darse cuenta de mi. -Es que estás un poco roja.

Negué suavemente con mi cabeza y manos. -Tranquilo, estoy bien, solo estaba distraída. -Sonreí ante la delicadeza de el mismo.

Aquel chico que nos acompañaba y había sido atacado, no soportó la presión de retener todo, así que de golpe contó lo sucedido.

Gracias. -Esbozó Umemiya con una sonrisa cálida.

¿Así que fueron ustedes? -Se acercó el chico de ojos azules claros a nosotros, mientras nos miraba.

Sakura se había puesto a la defensiva, por mi parte, no importaba mucho y Sugishita escuchaba atento.

Umemiya colocó su mano sobre la cabeza de Sakura, mientras lo despeinaba, al igual que en Sugishita.

Mientras que a mi, me acomodaba unos mechones de cabello detrás de mi oreja.

Me parece bien lo que hicieron al ayudar a uno de los nuestros, sin embargo...-Dejó de hablar de golpe, al sentir un enorme ruido, en forma de llamado.

¿Qué sucede?. -Pregunté algo curiosa y levemente exaltada, esperaba terminar el día de forma tranquila.

Al asomarnos, divisamos un chico de baja estatura con un megáfono, tenía en su mano libre, un compañero de la Fuurin, sujeto de su cabello.

Al momento de ver aquello, sentí el ambiente muy tenso, vi que Umemiya no era el mismo chico con aquella actitud.
Sin pensarlo comenzamos a bajar los escalones, esperando llegar a encarar al que molestaba.

Pelea conmigo, Umemiya, pelea, pelea, pelea. -Provocaba de forma irritante al grande.

¿Quién es?. -Le pregunté a Hiiragi.

Tomiyama Choji. -Se tensó al decirlo. -El jefe de Shishitoren.

Oh, ya veo, se ve más bajito que yo. -Hablé leve.

Me fijé como Nirei se escondía detrás de Suo, mientras que Sakura se moría por pelear.

Umemiya intentaba evitar a toda costa un desafío por parte del más bajo, sin embargo éste le lanzó una fuerte patada, los chicos y yo nos sorprendimos tanto, incluso al ver que Umemiya había detenido el ataque en el mismo lugar que estaba y con una mano.

De a poco comenzaron a llegar un grupo de Shishitoren, me fijé que ahí estaba Togame, el de tono de voz lento.

Sin embargo el bajo se quejó de que ellos aparecieran, como si fuesen a defenderlo, sin esperarlo, ya habían formado parejas para peleas, ¿batallas?, pensé.

¿No les da asco ensuciarse? -Pregunté al aire para que todos me escuchasen.

Vaya, aquí estás princesa. -Me dirigió la palabra el de cabello negro que vestía chaqueta naranja.

Si pierdes, me aseguraré de todas formas, de rematarte. Lo miré con superioridad.

De todas formas, adoraría ensuciarme de ti. -Me enseñó una sonrisa arrogante el de Shishitoren.-Piénsalo, preciosa, y no hablo necesariamente de una pelea. -Mostró su lengua.

Ya me encontraba algo irritada, chasqueé mi lengua.

¿Qué paaó linda?, ¿sin palabras?. -Burló el alto pelinegro.

Ja, es que pienso ahorrar mis preciadas paalabras a que usarlas con alguien tan idiota como tú. -Me crucé de brazos, mirándolo fija.

Ya veo, difícil. -Gruñó rendido.

No podremos pelear ahora, Choji, pronto anochecerá y por la oscuridad no podrás ver las caras destruídas. -Cambió de tema Togame.

Claro, no podrás ver tu propia cara. -Habló Sakura.

Finalizando la conversación los chicos de chaquetas naranjas se fueron, mientras que nosotros nos reuniríamos en el local de Kotoha.

Una vez ahí, Kotoha se dispuso a darnos comida, mientras que a Suo, le daba un té.

Esperábamos a Umemiya, por lo tanto conversábamos sobre Shishitoren y la ocasionada pelea que habría.

Cuando Umemiya llegó, nos enteramos que consideraba a Kotoha como su hermana menor, ya que se criaron en el mismo orfanato.

Ya que finalizó aquella charla y comida, decidimos volver a nuestros respectivos hogares.

(T/N), ¿te acompaño a casa?, ya es algo tarde. -Escuché cierta voz, volteé a ver de quién se trataba, no era nada más, ni nada menos que mi amigo de la infancia.

Está bien, vamos, no tengo problema. -Le sonreí, mientras agarraba de forma suave su brazo.

Creo que hoy fue un día muy cansado. -Hablé cortando el silencio entre aquel chico y yo. -Estás muy callado. -Lo miré. -¿Sucede algo?. -Pregunté seria.

Bueno, para serte sincero, no pude soportar como Suo se acerca tanto a ti. -Habló sonrojado y levemente enojado.

¿Solo eso? -Me sorprendí ante su declaración.

Ya habíamos llegado a mi casa, no tenía muchas ganas de nada.

Sin embargo, sentí como Sakura entraba detrás de mi, cerrando la puerta, acercándose a mi, tomando de mis muñecas.

(T/N), perdón. -Escuché antes de sentir aquella suavidad sobre mis labios.

No supe cómo actuar, así que me dejé llevar, desde que la adolescencia había pasado por nosotros, sentía esas ganas inmensas por mi amigo.

Me solté de su agarre y posé mi mano detrás de su cabellera, presionando ligeramente contra mi.

Al terminar aquel beso, se pudo divisar nuestros sonrojos.

¡Lo lamento!. -Habló el de 2 colores.

Shh, no es necesario. -Lo abracé.

Sentí como su tensión se esparcía, dejando a un chico más tranquilo.

Sin esperarlo, me acerqué a él y estampé mis labios sobre el chico, nuevamente.

Siendo sincera, estaba teniendo aquellos días de necesidad.

Sakura...-Dijé tímida.

En un movimiento rápido, sentí como el chico sujetaba mi cintura y me acercaba a él.

Besó con fuerza, mientras su lengua recorría mi boca, se sentía tan cálida, nuestras respiraciones comenzaban a acelerarse.

Agarré su mano, mientras la posaba encima de mi pecho, continuando aquel beso lleno de deseo.

Inconscientemente solté un leve quejido sobre los labios de Sakura, provocando un tema ahí abajo en él.

Sin pensarlo, posé mi mano sobre su bulto, movía despacio mi mano encima de su ropa.

Caminamos despacio a la sala, mientras Sakura se sentaba, yo me acomodaba en su regazo, sintiendo su erecto miembro debajo de mi.

Entre besos, él y yo comenzamos a despojarnos de nuestras ropas, dejando nuestros torsos desnudos, sentí como el chico tomaba uno de mis pezones entre sus dedos, acercando su boca al mismo.
Solté un gemido leve al sentir su lengua probar cierta parte de mi, comenzó a lamer y chupar, para luego dejar una mordida suave.

Sus besos recorrían mi cuello y clavículas, este chico me estaba calentando tanto.

Mientras él provocaba más, yo movía mis caderas de forma suave sobre él, haciendo fricción en nuestras partes, sentía lo caliente y mojada que estaba.

¿Puedo?. -Dije con un tono agitado.

Me bajé de su regazo, mientras me arrodillaba para él, comencé a desabotonar su pantalón, dejando ver su ropa interior de color negra, mientras se sentía aquel duro lugar, vi como Sakura me ayudaba a bajar mejor la ropa, dejando a la vista su erecta parte.

Lo tomé en mis manos y lo moví con cuidado, se veía su punta brillar a causa del líquido, sin pensarlo pasé mi lengua en él, provocando un quejido por parte del chico.

Lamí y chupé su punta, mojándolo aún más, ya lista, llevé el resto a mi boca, saboreándolo por completo; sentí como éste me agarraba del cabello y empujaba despacio.

Si-sigue, me encanta. -Habló entre jadeos.

Lo saqué de la boca y subí a besarlo, necesitaba que él me tocara.

Agarré sus manos y las posé en mis caderas, volví a besarlo y por iniciativa comenzó a recorrer sus manos debajo de mi falda, bajando mi ropa interior, con sus dedos buscó cierta parte de mi y comenzó a masajearla.

Mmm.-Gemí suave al sentir su tacto en mi zona.

Estás tan mojada, necesitaba tanto tenerte. -Confesó el de cabello bicolor, mientras introducía un dedo dentro de mi, haciendo que me acostumbre a un segundo dedo.

Sakura... -Me quejé al ver como movía tan bien sus dedos. -Te quiero dentro.-Se notaba mi necesidad.

Por suerte Sakura cargaba con él un preservativo, se lo colocó con cuidado y me agarró de las caderas.

Me acomodé encima de él y de a poco sentí como entraba en mi, me iba sentando de a poco en aquel chico.

D-duele. -Me quejé un poco al sentir como me abría.

Está bien, linda, podemos ir despacio. -Acarició mi mejilla.

Una vez acostumbrada al miembro de él, comencé a moverme despacio encima, mientras me apoyaba en mis manos sobre su pecho.

Se podía escuchar los gemidos de ambos en la sala, aquel sonido de nuestras pieles chocando y nuestros fluídos salir.

Creo que... creo que voy a...-Decía entre cortada, tensándome sobre él, apretando mi interior con su pene dentro de mi, dejé escapar mi líquido sobre él, empapándolo, y sintiendo como él terminaba.

Me dolían las caderas, abracé a Sakura y me acomodé en él, no tenía fuerzas, así que él me cargó a la habitación, una vez ahí, me ayudó a bañarme, luego él y caímos rendidos en mi cama.

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Aclaro que T/N vive sola en casita, ya que tuvo problemas con su familia, que de a poco la estoy desarrollando en el comienzo de los capítulos.

Espero les haya gustado y si no es así, me disculpo.
Abrazos*♡