-¿Shishitoren?-

"Los gritos me desagradaban, ver me desagradaba, pensar me agobiaba, sentir me desesperaba, no sabía qué hacer."

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Me dejó un poco confundida las palabras de Suo. Sin embargo, me dediqué a ver la situación, divisaba el salón y se notaba aquella tensión en el ambiente por la pelea que se acababa de formar; sentí una mirada fija en mi, rápidamente busqué el provocante de ello, se trataba de un chico de cabello rosa, tenía piercings, no negaré que se me había hecho atractivo eso, sus ojos eran verdes.

Aquel chico esperaba que lo mirase, así dándome una cálida sonrisa, le respondí el gesto, sin darme cuenta de la mirada amenazante que me daba Suo.
Me puse de cunclillas a la altura de Nirei, mientras dejaba la parte restante de mi falda caer por el medio de ambas para procurar que no se me viese nada, y colocando mis manos sobre mis rodillas, miré y le pregunté a Nirei.

Nirei, ¿cómo se llama aquel chico de allá?. -Señalé sutilmente donde se encontraba el pelirosa.

Oh, él es, Kiryuu Mitsuki. -Respondió mientras miraba el lugar señalado. Le sonreí y agradecí por la respuesta.

Luego de eso, volví a acomodarme en una buena postura, dejando ver mi firmeza y delicadeza, no me gustaría que me conociesen como una chica ruda.

Dirigí mi mirada hacia Sakura y Sugishita, al parecer ya habían intercambiado golpes, cuando de repente el de cabellos largos iba a estamparle un golpe a Sakura, éste se dejó caer, gracias a un resbalón, teniendo así la ventaja de impulsarse y clavarle una fuerte patada, provocando un leve patrón de sangre en su nariz.

Iban a seguir, pero sonó fuertemente el altavoz de aquel salón, dejando escuchar una voz un tanto peculiar, se escuchaba animada, me giré a ver el resto de chicos, dándome cuenta en lo formados, tranquilos y atentos que estaban.

Aquel parlante hablaba sobre disfrutar nuestra juventud, _como si tener 18 años no fuera aburrido, pensé_, también hablaba sobre comer granizado y sobretodo defender la ciudad.

Una vez terminada la gran charla, un chico mayor se acercó a la puerta del salón provocando que todos saliéramos, bajando a la entrada principal, encontrándonos con los chicos que habían acudido en la pelea de ayer.

Se tardaron demasiado, muy lentos. -El chico de cabello ceniza se quejaba mientras decía el número que marcaba el cronómetro.

No sabía o quizá no recordaba el nombre de él, así que me aseguré de preguntarle a Nirei, dijo que se llamaba Hiiragi.

Hiiragi dio órdenes de que por grupos saldríamos a patrullar la ciudad.
Pero que gracias a Sakura, ya que era cercana a él, formaría parte de su grupo.

Tonto, por tu culpa me toca este grupo, yo quería ir con el de cabello rosa o el de audífonos. -Me quejé al lado de Sakura, haciendo un leve puchero.

Suo se acercó y me sonrió.
Quizá te guste estar más en este grupo, que en el de ellos, linda. -Habló suavemente, este chico me ponía de una forma boba y creo que se notaba, me limité a sonrojarme, Sakura notó la situación y rápidamente me agarró de la cintura, apartándome de Suo.

Caminábamos por las calles, mientras que Hiiragi se quejaba por tener que vigilar a los chicos que antes habían peleado en el salón.

Una de nuestras tareas, fue ayudar a pintar y cubrir unos grafitis de un local, pinté suave sobre la superficie, dejando todo en orden y sin manchas, al finalizar nos dieron un pequeño aperitivo como muestra de agradecimiento, iba al lado de Suo, mientras que Nirei iba a su otro lado, pude fijarme como Suo le ofreció su aperitivo a Nirei.

¿No te gusta? -Pregunté al ver la linda situación.

Prefiero el té. -Contestó sonriente.

Llegamos a una área limitada de la ciudad, me pareció curioso.

Los chicos hablaban y yo me acerqué al área dividida por un corto tunel, vi un chico golpeado siendo perseguido por otros 3 chicos de chaquetas naranjas, necesitaba ayuda, lo notaba.

Sin decir nada, actué por impulso propio, corrí hacia el chico, que por su carrera había tropezado y caído; al ver que uno de ellos iba a golpearlo, jalé de la ropa del chico lastimado, sacándolo fuera de la cercanía de ellos, mientras soltaba una patada lo suficientemente firme dobre el pecho del golpeador, para que no se acercara más.

Levanté al chico y corrí junto a él hacia los demás, sentí como nos perseguían, sobre todo el que era intenso, qué chillón era.- Tan grandote y tan quejica.- Solté en voz alta, mientras volteaba a sacarle la lengua.

Pude sentir como aquel chico que se las daba de fuerte, sujetaba el borde de mi uniforme. -Te voy a dar hasta 3, para que me sueltes... y ya llevas 2. -Hablé seria.

¿Por qué debería hacerlo?, después de todo, sigues en territorio ajeno, linda.-Hablaron los otros dos chicos detrás de él.

Juraba que iba a golpearlo, pero Sakura y Sugishita se adelantaron esta vez, dándole 1 patada doble en su cara, haciendo que este quede en el suelo.

Los chicos se pusieron delante de mi, Sakura sabía que podía defenderme sola, pero lo noté enojado.

El resto de chicos se acercaron un poco y logré escuchar como Nirei hablaba del problema que había causado dn el territorio de Shishitoren.

¡¿Sabes lo que acabas de provocar (T/N)?! -Estaba aterrado el pobre chico rubio.
¡¿Cómo se te ocurre invadir territorio ajeno o mucho peor, pegarle a uno de ellos?! -Me regañaba Nirei de forma asustadiza.

Suo calmaba a Nirei, mientras que yo me disculpaba con Hiiragi, puesto que no sabía.

Al divisar nuevamente el área, me fijé que otro integrante había llegado, según escuché era Togame Jo.

Estaban hablando, quizá "negociando", no pude evitar verlo, era lindo, pero notaba una vibra algo extraña de él.

Listo, "Othello-Kun", si te gano; me quedo con la princesa de allá. -Le dijo a Sakura, mientras me señalaba.

Ya te escuché y tampoco soy un estúpido objeto. -Le sonreí de forma brusca, mientras me acercaba a él, posando mi dedo índice en su pecho. -Si realmente me quieres a mi, prometo humillarte. -Lo desafié.

Vaya, y creí que eras la princesita protegida de ellos. -Se sorprendió al escucharme desafiánte.

Como sea, nos vemos. -Habló de manera general.
Espero volver a verte, preciosa. -Habló al último dejándome una recorrida con su mirada.

(T/N), tus medias se desacomodaron, permíteme ayudarte. -Se me acercó Suo, ¿cómo sabía la forma en la que tenía mis medias?.

Claro, está bien, gracias. -Vi como Suo se arrodillaba y acomodaba mis blancas medias holgadas, dejándome unas suaves caricias por una de mis piernas.

Al terminar, se levantó y sacudió con delicadeza su pantalón, una vez hecho eso, posó su mano sobre mi hombro y me dijo al oído.
-Tienes unas lindas bragas, y las fresas son deliciosas.- Me sonrojé ante tal habla, era lo que menos me esperaba.

Sin embargo, evadí el tema, me acerqué a los chicos que estaban siendo regañados por Hiiragi, haciendo que éste último nos dirija a la Fuurin, debía hablar con el superior.

Una vez en el sitio, ahí nos encontrábamos, subiendo los escalones con pesadez, mi primer día y ya conocería al que está en la cima, qué gran avance.

Me acerqué a Sakura y le pregunté. -¿No te emociona saber quién será el líder?.

Quizá, un poco, pero ya sabremos a quién hay que superar. -Me miró contento.

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Holi, ¿Les está gustando? unu