Dedicado a miradasuperfolladora mi amante del HyunMin soft-porn ✨

Seunggie🐕
Hey HyunJin Hyung, ven a mi cama, quiero dormir contigo hoy. 🥺

HyunJin se encuentra a sí mismo sonriendo después de leer aquel mensaje de su mejor amigo. Así que, sin pensarlo mucho, solo camina hacia la habitación del alfa en silencio. Han dormido juntos en tantas ocasiones que ya no era extraño compartir la misma cama y las mismas almohadas con el otro, solo disfrutando de la calidez del cuerpo ajeno acurrucado con el propio.

Quizás al principio fue incómodo, no para ellos, pero sí para el resto del grupo. Que un omega y un alfa durmieran juntos en la misma cama podría traer consecuencias muy graves y perjudiciales para el resto, sin embargo, dichos temores nunca llegaron. A pesar de las múltiples veces que intentaron evitar que sucediera, ambos encontraron la manera de escapar de la injusta vigilancia impuesta sobre ellos, y terminar en la cama del otro.

SeungMin amaba tanto el olor afrutado del omega de HyunJin que, simplemente, no podía evitar seguir el imaginario camino aromático que lo guiaba hacia el pequeño chico. El aroma se filtra en su nariz y atonta tanto al alfa más joven que es imposible no ceder ante él, solo dejándose llevar por la frescura y la comodidad que lo hacía sentir. Quizás para el omega fue igual, ya que una versión más joven del alfa halló a su pequeño amigo omega olfateando y haciendo cosquillas en su cuello tantas veces, que las dudas de si el sentimiento era mutuo se disiparon rápidamente.

Luego, cansados de las escurridizas almas gemelas, solo los dejaron ser. Después de todo, ellos realmente duermen juntos; se acuestan al lado del otro, acurrucados en el calor del otro, perdidos en sus sueños profundos. Tratar de separarlos, era como evitar que dos mitades de un todo se encuentren.

Cuando SeungMin sugirió dormir juntos, el omega recién había terminado de ducharse, por lo que, con el cabello todavía húmedo giró el picaporte de la habitación en la que el alfa se queda. El picante olor de la canela envuelve sus sentidos una vez pone un pie dentro, lo cual lo hace tomar una bocanada grande de aire y suspirar encantado.

SeungMin siempre huele a tranquilidad y calidez, huele como a casa, y siempre logra relajar los nudos tensos en los hombros de HyunJin, sin importar qué tan ajetreado haya estado el día o qué molesto se haya sentido antes, solo tener el perfume natural del alfa alrededor vuelve todo más llevadero. El alfa lo escucha y lo huele entrar, solo levanta la cabeza en su encuentro y se hace a un lado en la cama para permitirle entrar. Cuando el omega está a su lado, SeungMin no pierde el tiempo y deja un suave beso en su frente como saludo, escuchando la risita de HyunJin ante el contacto.

—¿Te pusiste algo de endulzador de olor? Hueles más rico que siempre. —el alfa murmura, enterrando la nariz en su cien antes de inclinar la cabeza hacia su cuello.

HyunJin lo deja oler, encantado, secretamente amando el ruido de su respiración chocando con su piel en busca de profundizar su olfateo. SeungMin siempre fue tan confianzudo, incluso cuando los Hyungs lo regañaban por tomar ese tipo de osadías con él, porque, de nuevo, son alfa y omega; y un alfa no puede olfatear de esa forma a un omega no reclamado.

A ninguno les importó, honestamente, pero para no perturbar la paz del grupo, comenzaron a hacerlo en la privacidad de sus habitaciones. Y fue más íntimo, un momento de ellos, solo ellos dos sintiéndose en sus narices y en sus lobos. Reducir su relación a almas gemelas es un eufemismo, la compatibilidad de sus lobos va más allá de lo normal, que realmente pueden considerarse destinados a ser.

Con los miembros hay matches, un par muy buenos de ellos, por eso la dinámica del grupo fue tan buena desde el inicio.

Los ocho lobos tienen almas entrelazadas, un par mejor que otro, pero ninguno tan perfecto como la conexión de HyunJin y SeungMin. No fue difícil notarlo, la forma en que sus aromas parecen encajar y cómo logran saber lo que el otro está diciendo o pensando, cómo pueden sentir la presencia del otro cuando ni siquiera ha entrado a la habitación. Ellos sienten a sus lobos responder sus llamadas como nadie más puede hacerlo.

HyunJin pasea un nariz en la glándula odorífica del alfa también, ambos compartiendo un momento íntimo donde llenan sus narices con el perfume del otro, y complacen el deseo de sus lobos internos. No tienen que decir nada, solo dejan que sus lobos se reconozcan en el silencio de la habitación.

—No, pero quizás es mi nueva crema.

—Me gusta, por favor no dejes de usarla. —SeungMin pide con grandes ojos de cachorro y una bonita sonrisa en sus labios.

El corazón del omega bombea feroz por esa mirada, solo siendo capaz de asentir para asegurarle que no suspenderá su uso. El alfa felizmente envuelve su cuerpo de nuevo, sus grandes manos yendo a su espalda desnuda, ya que, HyunJin duerme sin camisa para más comodidad.

A SeungMin parece no importarle, para tristeza del omega. En el interior de su mente, HyunJin desea que a SeungMin le importara lo suficiente como para tocarlo de otra manera que no fuera la amistosa de siempre. Porque, al contrario de la creencia popular de los Hyungs que aseguran que el alfa de SeungMin está enamorado de su omega, y que por eso difieren tanto de dejarlos dormir juntos por temor a que intente algo contra él, en realidad es HyunJin quien siente algo por su amigo.

Fue casual y sin preverlo, solo sucedió un día y el omega no pudo frenar el estallido de emociones alrededor del alfa. SeungMin lamentablemente no siente lo mismo, o al menos eso cree. El alfa no ha demostrado indicios de corresponderle, aunque él tampoco trató de hacerse notar en aquel sentido. Desea tanto que el alfa lo mire, pero también está medianamente bien siendo su amigo. Si puede tenerlo de ese modo, abrazando cada porción de su cuerpo y obteniendo sus sonrisas adormiladas por la mañana, entonces él no va a quejarse, aunque fuera platónicamente.

Sigue siendo su SeungMin, aunque no sea suyo como tal.

En algún punto entre la amena charla sobre lo que hicieron durante el día, lo mucho que se divirtieron jugando con los demás, y lo que quieren hacer al día siguiente, ambos cayeron dormidos.

Compartir cama con el alfa no solo significa dormir con el olor de la canela arrullando su nariz, también significa sentir el calor de su cuerpo envolviendo el suyo. SeungMin se convierte en otra ajustada cobija y, HyunJin no iba a decirlo en voz alta, pero ama tanto tener el peso de los brazos ajenos en su cuerpo, casi tanto como ama levantarse y ser lo primero que el alfa vea en la mañana. Su omega se siente protegido en esos brazos y el apretado agarre de sus manos en su cintura. Los dedos del alfa siempre parecen encontrar un buen lugar de descanso, anclados a la curva de su cintura o su cadera con tanta naturalidad, que el omega siente que, en realidad, lo es. Y esa vez no fue una excepción.

HyunJin no tiene el sueño pesado, pero tampoco demasiado ligero, quizás lo suficientemente en medio como para levantarse por un brusco movimiento a su espalda y un ruido incesante en su nuca. En su sueño algo lo sacude, pero no sabe qué es, se escucha algo, pero no puede identificarlo, solo sabe que empieza a tener calor por todas partes. Y cuando abre lentamente los ojos, y la bruma adormilada de su sueño se dispersa un poco, se da cuenta que viene del alfa. Detrás de él reconoce un gruñido inconforme, y el ajuste de los largos dedos del alfa en su cintura, haciendo un puño la orilla de su short de dormir. Se siente un poco aturdido por la explosión de olor que pegó en su nariz, removiendo su cuerpo por la incomodidad ante ello.

—¿SeungMinnie? —sin embargo, el alfa no responde, por lo que gira la mitad superior de su torso para intentar asomar su cabeza sobre su hombro. El aludido sigue en su profundo sueño, aunque tiene las cejas fruncidas y los labios entreabiertos, sin dejar de moverse detrás de él.

No era tosco, pero el omega siente la cara calentarse al darse cuenta de qué es en realidad. El alfa trata de restregarse en él, lento, pero al mismo tiempo desesperado, parece más un cachorro intentando frotarse contra algo, lo que sea que estuviera alcance, y el omega lo está. HyunJin se congela ante el gemido roto que escapa de los labios junto al empuje particularmente fuerte contra su trasero. Entonces puede sentirlo, la erección que presionaba su muslo, ahora se acomoda en la raja de su culo, acariciando con más firmeza.

El primer pensamiento que llega a su cabeza es detenerlo, pero su omega difiere ante ello.

—SeungMin —llama de nuevo, sintiendo la vergüenza y el pánico revolver su estómago—. Oye, despierta, Seung-...

—Justo así, HyunJin Hyung. —el nuevo gemido roto que escapa del alfa lo deja atónito.

Entonces, ¿Em alfa está teniendo un sueño húmedo con él? HyunJin no está desorientado por el conocimiento de SeungMin soñando con él, en realidad, el alfa suele contarle la gran mayoría de sus sueños, y él es el protagonista de muchos de sus escenarios. Cosas tan inocentes como ambos paseando en una montaña en sus formas de lobos, o corriendo libres en un prado abierto lleno de flores silvestres, también yendo a aquella cafetería a la vuelta de la secundarias en la que estudiaron.

HyunJin nunca quiso buscar un sentimiento más profundo subyacente de esos sueños que, para otros, pueden ser claros y románticos, para él solo son sueños.

El alfa los cuenta con esa enorme sonrisa en su rostro, pero con un tono platónico que acaba con cualquier esperanza ilusa del omega. Todavía le gusta oírlo parlotear sobre el nuevo escenario imaginario que su subconsciente creó mientras dormía, secretamente amando la forma en que sus ojos brillan mientras habla.

No obstante, ahora no era un sueño tierno, ni mucho menos inocente. Y HyunJin se siente avergonzado por gustarle la nueva información del alfa teniendo un sueño húmedo sobre él.

¿Quizás hay una ventana abierta, después de todo?

—SeungMin-ah —intenta de nuevo, esa vez pellizcando con suavidad el brazo que abraza su cintura y mantiene su espalda pegada contra su pecho—. Oye-...

—Tan bueno —el omega siente un apretón en su vientre ante el quejido del alfa—. Te sientes... bien... HyunJin.

El aludido traga saliva, y aprieta la boca ante el nuevo empujón del alfa. Con su polla dura ya bien acomodada entre sus nalgas, puede sentir a su lubricante natural comenzar a brotar de su agujero. SeungMin se frota más y más, gruñendo en su sueño y rasguñando la tela del short de HyunJin fuera de él. Para su vergüenza, HyunJin se encuentra a sí mismo comenzando a crecer en su ropa interior. Su propio pene se sacude por el sonido de los gruñidos y el llamado del alfa.

—HyunJinnie... Tan bueno...

—¿Sí? —decide aventurarse a responder. El alfa se queja, sollozando un poco y ante eso, el omega sostiene la mano que sigue apretando su short para acercarla a su boca—. ¿Me siento tan bien, SeungMinnie?

El alfa jadea en su sueño, repitiendo cortos y rápidos sí con voz airada, quizás por la forma en que HyunJin lame sus dedos. Presiona dos de ellos en la parte plana de su lengua, saboreando la piel salada, antes de encerrarlos en sus carnosos labios y chuparlos. No quiere hacer nada demasiado atrevido que pudiera alarmar al alfa y finalmente despertarlo, pero, si chupar sus dedos como si su vida dependiera de ello no lo hace, entonces probablemente nada lo haría.

Sabe que está mal aprovechar ese pequeño momento de vulnerabilidad, está seguro que cuando ambos estén más que despiertos, se va a arrepentir colosalmente, pero decide que puede correr el riesgo si puede tener al alfa gimiendo de ese modo por él, solo un momento.

Así que, deja que SeungMin siga moliendo sus caderas contra él, enterrando su dureza en sus nalgas, la tela de su short como la única protección entre sus cuerpos. Está mojado, lubricación natural empapando sus muslos internos, su propia polla firme contra su vientre. La habitación huele a ellos, tan fuerte que se siente tóxico en sus glándulas olfativas, pero el pesado aroma de la canela picante solo lo prende más. La canela se mezcla con el coco deliciosamente, volviendo borrosos sus sentidos.

—Húmedo... caliente... —el alfa susurra, su nariz husmeando en su cuello. Toma una respiración profunda, sacándole al omega un gemido ahogado, porque sus labios tocan esa zona erógena en su cuello. Detrás de su oreja siente a SeungMin presionar su nariz, gimiendo ronco contra él.

Para ese momento, HyunJin ya está sucumbido por la bruma espesa de su excitación, así que no está pensando cuando deja de chupar los dedos, y desliza una mano entre sus cuerpos, buscando bajarle los pantaloncillos al alfa. Encuentra la orilla de los pantaloncillos con tanta facilidad, batallando un poco contra los empujes persistentes del alfa, hasta que logra bajarlos y así puede tomar directamente la polla. Gime, sintiéndola tan mojada y tan dura, grande, caliente y venosa contra su palma. Siente el nudo medio tenso, por lo que sabe que el alfa no está lejos de correrse.

—Joder —el alfa masculla, otra gruñido que envía una torrente de escalofríos hasta las puntas de los dedos del pie—. No pares... no...

—No planeo hacerlo, bebé. —le responde, acariciando su polla alfa de arriba a abajo lentamente.

Y una mierda que HyunJin iba a hacerlo, está ya tan inmerso en mastubar al alfa por primera vez en toda su relación, que está seguro de que querrá hacerlo de nuevo. Sin embargo, eso no podrá ser posible, lo sabe, una voz condescendiente en el fondo racional de su mente se lo recuerda, pero el omega prefiere no hacer caso. Hacer oídos sordos y ojos ciegos. Quiere tomar todo lo que puede del alfa en ese instante, quizás con suerte SeungMin no se dé cuenta, y ambos pueden seguir con la dinámica de siempre.

Siendo los mejores amigos de siempre.

Una gran mano se infiltra en su short, de pronto el alfa acaricia el hueso de su cadera y baja la tela con torpeza, su mano se siente perezosa y sin fuerza, por lo que HyunJin lo ayuda sin cuestionarlo. Cuando su short está por fin fuera del camino y su culo está al aire, siente al alfa frotar contra su muslo interno. Y la fricción se siente deliciosamente placentera de ese modo, piel contra piel. Lo ayuda un poco, quizás traviesamente guiando la cabeza roma de su polla alfa a la raja de su culo desnudo, solo para que el alfa diera otro empuje fuerte y comenzara a molerse contra él directamente.

—Joder... —gime, mordiendo su labio.

No llega a entrar, pero ahora puede sentir el duro tronco deslizarse entre sus nalgas y sobando su agujero mojado y solitario. El omega está tan seguro de estar lo suficientemente mojado como para que su lubricante haga brillar la piel lisa de su culo, quizás manchando las sábanas bajo ellos. El sonido empapado que hace la fricción ante cada suave vaivén del alfa solo lo enciende más, haciendo cosquillas en su vientre.

—Mm, sí... Omega —SeungMin gruñe en su oído, dicho omega solloza por eso—. Jodidamente mojado para mí.

—Solo para ti, alfa.

—Necesitado...

—Joder, mucho —se lamenta. Aunque una sonrisa se forma en sus esponjosos labios después—. Pero no mucho más que tú, SeungMin-ah. Frotándote contra mi muslo como un perro cachondo y desesperado en tus sueños.

El aludido suelta un gemido ahogado, volviendo más rápidas sus embestidas falsas. HyunJin agranda su sonrisa, disfrutando tanto de la fricción. Mucho más lubricante brota de su agujero que se contrae en busca de algo de qué aferrarse. Está seguro de que ya empapó completamente el falo duro del alfa.

—Podría usarte como un dildo justo ahora... —el comentario sale soñador más para sí mismo, pero el lloriqueo del alfa en su oído solo lo hace bufar una risita—. Creo que a alguien le gusta la idea. ¿Alfa quiere ser solo una polla que montar?

—Joder... Sí.

—Incluso en tus sueños ruegas por ser solo una polla para usar.

—Por favor.

— Ruega más fuerte por ello, bebé alfa.

Un gemido lastimero sale de los labios del alfa y hay otro empuje duro que lo hizo jadear. No entiende la mitad de los balbuceos de SeungMin contra su oreja, todo lo que HyunJin puede enfocar su atención es en la manera en que la cabeza roma de la polla alfa se atora en su borde, antes de frotarse encima de nuevo, así que, impaciente y frustrado, mandando todo a la mierda, lleva una mano hacia atrás para volver a sostenerlo, alineando el glande contra su anillo de músculos.

Su lubricante hace más fácil la intromisión del pene, pero el omega todavía puede sentir esa leve quemazón por ser estirado sin previo aviso ni mucho menos preparación extra, pero a HyunJin le gusta así. Siempre le ha gustado el dolor inicial cuando no se prepara bien, solo confiando en que estará lo suficientemente mojado como para que todo sea más sencillo y flojo. Contiene la respiración hasta que cada centímetro de esa polla alfa está dentro, el nudo medio lleno acariciando su borde también.

—Joder, tan gorda —se queja, gimiendo con gusto—. Me estiras tan bien, mierda.

Cuando el alfa da el primer empuje lento, HyunJin ahoga un jadeo, cubriendo su boca con una mano para tratar de callar los ruidos que deja salir ante las embestidas. Esa vez más que reales. Pone la otra mano en su vientre, se siente tan lleno de polla que casi desea poder sentirla ahí. En esa posición, con él siendo la cuchara pequeña, puede sentir la polla alfa golpear tan profundamente, doliendo un poco, un dolor que es agradable y más que excitante. Siente las venas latir, lo caliente y mojado que está, se siente a sí mismo expulsando mucho más lubricante. Que esté obscenamente empapado solo es más que caliente y el ruido de sus pieles chocando más vulgar. Y le encanta, le encanta tan mal.

—H-HyunJin Hyung... —el alfa llama con un lloriqueo, sus caderas flaqueando. Pero el omega no se da cuenta que sus empujes se vuelven titubeantes y lentos.

—Mmh. —responde, ya perdido en su placer.

—Joder, HyunJin. —el alfa gruñe profundo en su oreja, enterrando hondo su polla.

El nudo medio lleno también rompiendo su borde, lo que solo hizo al omega lloriquear ante la presión. La cabeza de su polla está presionando su próstata deliciosamente. Los dedos de sus pies se encogen y sus ojos se vuelven llorosos, una de sus manos viaja de nuevo hacia atrás para aferrarse al culo del alfa mientras él machaca su próstata solo así, sin moverse, comenzando a sobreestimular un poco.

—HyunJin...

—N-No te detengas —se queja, sus uñas enterradas en la piel del culo del alfa—. Muévete, rápido.

—HyunJin —SeungMin dice esa vez más firme, por lo que el aludido abre los ojos y gira su cuello para verlo a la cara. El alfa tiene los ojos abiertos, observando el rostro enrojecido y lloroso del omega. Se ve aturdido, con las pupilas dilatadas pero con las mejillas igual de rojas y las cejas fruncidas, completamente confundido—. ¿Qué estamos haciendo?

Tragando saliva, HyunJin le responde:

—Sabes qué estamos haciendo. —aprieta su agujero, haciendo énfasis en su polla todavía bien enterrada hasta el tope en su agujero.

—S-Sé qué estamos haciendo... —traga saliva nervioso, apretando sus dedos en su cadera—. P-Pero, ¿Por qué? ¿Qué pasó?

Honestamente no puede pensar con mucha claridad enterrado hasta el fondo en el agujero de HyunJin, pero necesita una explicación del porqué de pronto despertó sintiéndose tan caliente en el fondo de su agujero. Puede sentir la húmedad del abundante lubricante empaparlo por completo, su nudo medio lleno apretado dentro, puede sentir sus paredes calientes recibirlo tan bien que nublan su mente, apenas recuperada del sueño.

—Estabas soñando conmigo —HyunJin empieza, también se ve afectado por estar todavía unidos—, y comenzaste a frotarte contra mí, me despertaste, y estabas gimiendo mi nombre.

SeungMin siente las mejillas arder. Por supuesto que recuerda lo que estaba soñando, para su vergüenza, el calor abrasador y húmedo del sueño se había sentido tan vivo que de pronto se sintió extraño. Así que se obligó a abrir los ojos, solo para encontrar a su mejor amigo omega lloriqueando con una mano en su boca y su polla follándolo desde atrás, ambos cuchareando.

—Y-yo... —balbucea, sin saber cómo justificar el sueño húmedo.

No es siquiera el primer sueño húmedo que tiene con él, por la luna, el alfa ha soñado tantas veces jodiendo con su mejor amigo omega que perdió la cuenta. No entiende cómo sucedió la primera vez, tampoco recuerda cuándo, una noche solo despertó a mitad de la madrugada asustado y cachondo porque tuvo un sueño caliente con HyunJin. Nunca creyó que sus sentimientos por HyunJin lo llevaran a soñar de ese modo con él. Se tuvo que masturbar con vergüenza y mucha culpa, aunque con cada sueño húmedo que aumentó, la culpa disminuyó y la añoranza creció en su interior.

El deseo voraz de volver sus sueños realidad se transformó paulatinamente en frustración sexual. Duró semanas sin pedirle dormir juntos por temor a que esto sucediera, de atentar contra el cuerpo de su mejor amigo omega durante su conciencia dormida. Su alfa le gruñó enfurecido por ignorar las propias invitaciones de HyunJin y excusarse con tontas mentiras, hasta que los sueños fueron desapareciendo y creyó estar a salvo.

Claramente erró enormemente. Pero, siendo sinceros, él no esperaba volver a tener un sueño erótico con su mejor amigo y que el omega se sometiera a él de ese modo.

—Así que me encendí un poco por eso y no pude detenerte. Lo siento —HyunJin le ofrece una sonrisa apenada, su pequeña mano acunando el lateral derecho de su cara—. Si quieres detenerte tú mismo puedes hacerlo, bebé alfa.

—Tú... ¿T-Tú quieres detenerte?

El omega gime, negando con la cabeza.

—Joder no, me encanta cómo me estiras y me llenas tan bien.

Abochornado, el alfa traga saliva ruidosamente. HyunJin nunca le había hablado de esa forma tan obscena antes, ni siquiera cuando le contó sobre sus cogidas de una noche con otros alfas, y él se tuvo que aguantar el nudo en su garganta. Nunca fue tan explícito y vulgar, y que lo esté siendo con él tan abierta y libremente, infla su pecho.

—¿Sí? ¿Alfa te hace sentir tan bien?

—Tan bien, me follas tan rico. No quiero parar —con una sonrisa, HyunJin traza la línea de vello en su mandíbula, ronroneando:—. Dijiste que serías solo una polla a la que montar.

—Joder, ¿Yo dije eso mientras dormía?

HyunJin asiente.

—Ujum, dije que te usaría como un bonito dildo humano, y tú me rogaste por usarte.

—Joder.

—¿Lo serías, bebé alfa? ¿Serías un bonito y gran dildo gordo para que yo te use a mi antojo?

Lloriqueando, el alfa asiente varias veces, agitando las caderas para que su polla folle su agujero de nuevo. El omega ronronea, sonriendo ante el regreso del placer.

—Te gusta que te usen, ¿Uhm? Solo ser una bonita polla para tu omega, ¿Verdad, bebé alfa? ¿Vas a ser un buena polla para mí? ¿Vas a follarme tan rico?

—Puedo cogerte tan bien —responde el alfa, aferrado a su cadera con una mano, sin dejar de embestir lento y profundo contra él—. Voy a ser bueno para ti.

Que sigan de cucharita solo ralentiza sus movimientos, pero por la posición puede acariciar el vientre del omega y acunar su polla con una mano mientras él mismo se lo folla por detrás. La polla de HyunJin no es tan grande, pero es gorda y está mojada y dura, con la cabeza de hongo enrojecida y el pre-semen brotando de la uretra. Está tan cerca, SeungMin desea hacerlo correr con tantas ganas, solo acelerando el vaivén detrás.

—Joder sí, justo así —el omega gime agudo y airado, con los ojos cerrados y la esponjosa boca abierta—. Sí bebé alfa, más rápido

—¿Justo así? ¿Lo hago bien?

HyunJin suelta una especie de alarido, asintiendo muchas veces, su boca permaneciendo abierta. El alfa gruñe al verlo acumular saliva, antes de comenzar a babear por su mentón, así que con su pulgar izquierdo limpia el rastro y luego obliga al omega a girar su cabeza hacia él, atrapando sus esponjosos labios, finalmente.

Si pudiera enmarcar la sensación de besar los carnosos y jugosos labios de HyunJin sin duda lo haría hasta el cansancio, porque el calor agradable que siente en el vientre no se puede comparar con nada que haya experimentado antes. Sí, ha besado antes, pero ninguna boca como la del omega, nunca quiso besar a nadie tan mal como lo hace con HyunJin. Y no desperdicia la oportunidad. HyunJin solo yace ahí, gimiendo en su boca, dejando que el alfa chupe su labio inferior antes de que sus dientes lo maltraten, arrancándole un jadeo necesitado. Su lengua calmó el dolor, luego se deslizó dentro, poniendo un dedo en su mentón para obligarlo a abrir más la boca y así poder presionar la parte plana de su lengua contra la suya.

Mientras el alfa se encarga de devorar cada rincón de su boca, el omega dobla la pierna superior, sacando un poco más su culo para encontrarse con sus embestidas. De esa forma SeungMin tiene que levantar las caderas para poder follárselo como se lo merece, así que eso hace.

Pone una mano detrás de su rodilla y levanta su pierna abriendo al omega para golpear su interior con feroces empujes, la cabeza de su polla estropeando su próstata sin parar, solo reduciendo a HyunJin a un montón de lloriqueos sin aliento y saliva escurridiza. Ya ni siquiera se están besando, solo son labios chocando con labios, gemidos y gruñidos encima del otro, ahogando desastrosamente los gritos ajenos.

Hay mucho lubricante, sale a borbotones del agujero del omega, volviendo más sucio el irregular chapoteo de la pelvis del alfa contra sus glúteos.

—Estás tan mojado —repite SeungMin, esta vez más que consciente—. Me estás empapando todo y haciendo un desastre aquí.

—Me follas tan bien que no puedo evitar mojarme por ti —HyunJin responde, con una sonrisa sinverguenza en su boca—. Sé que te gusta que esté haciendo un desastre, ¿Verdad, alfa?

—No me molestaría limpiarte con mi lengua.

—Joder bendito, hazlo por favor —ruega con un largo lloriqueo—. Come mi culo como si estuvieras sediento.

El alfa lloriquea, siendo más rudo con sus empujes. La cama cruje bajo ellos, chocando sin parar contra la pared, están haciendo tanto ruido que no se sorprenderían si despertaron a alguien más en la mansión que rentaron para grabar el programa. Ni siquiera deberían estar haciendo esto, no cuando hay cámaras en todas partes y, además, se supone que es un viaje con amigos para relajarlos del arduo trabajo de ser una agrupación músical. Tampoco les importa.

Alguien podría asomarse por la puerta y mirar desde lejos cómo el alfa se está cogiendo al omega justo de la forma en que se lo merece, y tanto temieron, y ninguno movería un dedo para prohíbirselo. Están en su descanso, no están siendo ídolos que suben a escenarios y tienen que cuidar sus acciones frente a los reflectores, ahora son alfa y omega que joden la frustración que acumularon sobre el otro por tantísimo tiempo.

SeungMin deja de sostener su pierna, y sujeta la mano traviesa del omega que tuvo la intención de frotar su pene, ganándose un gemido quejumbroso de HyunJin. Su polla había estado abandonada desde el comienzo y el omega solo desea aliviar un poco el dolor, pero al parecer no será posible.

—No bebé, quiero que te corras sin tocarte. Solo mi polla.

El omega asiente, siendo un buen chico y poniendo sus manos lejos de sí mismo, mientras el alfa ronronea en su oído, y le murmura:

—Buen chico, mi buen y bonito omega. —su voz suave hace vibrar su pecho, encantado por el halago del alfa.

—Estoy tan cerca SeungMinnie, tan cerca, por favor.

—Yo también, bebé. Joder, estoy tan cerca.

HyunJin suelta un alarido, llevando una mano hacia atrás para tantear su rostro, sosteniendo su mandíbula con dedos duros que obligan al alfa a mirarlo directo a la cara. SeungMin tiene la intención de volver a besarlo, pero el omega bufa una risita y aprieta sus dedos para evitarlo, murmurando sobre su boca tentativamente:

—Quiero que tu nudo me estire. —antes de lamer su boca cerrada con su lengua.

Lloriquenado, el alfa sigue el camino de su lengua como un bobo aturdido, solo escuchando la risita malvada del omega antes de que volviera a hacerlo solo para burlarse de él. Por lo que, con un gruñido profundo, SeungMin empuja la cadera del omega con una mano para terminar de voltear su cuerpo, su pecho pegado por completo al colchón y su culo en pompa hacia él.

HyunJin sisea ante el jalón de pelo que recibe con tal de levantar su cabeza y así el alfa pueda besarlo, mientras arremete mejor desde atrás. Su cuello queda expuesto y estirado, así que el alfa suelta su cabello, y, sin terminar el beso, envuelve una mano alrededor para presionar suavemente su contorno.

HyunJin se ahoga un poco, y siendo honestos, cree que su liberación se acelera solo por eso.

El agarre posesivo en su cuello no se suelta incluso cuando el omega siente el subidón caliente por su vientre hasta su cabeza, sus cejas se fruncen involuntarias y su boca queda abierta, la saliva se acumula de nuevo, los dedos de sus pies se encogen y hay una pequeña contracción en sus muslos cuando finalmente tiras calientes de su semen disparan de la uretra y más lubricante humedece alrededor. Escucha un pitido sordo en sus oídos y siente su agujero encerrar la polla del alfa, lo aprieta dolorosamente hirviendo y ceñido en su interior.

SeungMin solo puede gimotear por la presión en su polla, y solo le basta un par de embestidas más para hasta que finalmente su nudo se tensa y se ancle en el borde.

El omega llora con un alarido por la sensación del nudo explotando en su interior; se siente duro y blando al mismo tiempo, se contrae repetidamente, acaricia su interior con pulsaciones irregulares para vaciarse por completo. Es tan grande que duele, nunca se ha sentido así de abierto antes, y comienza a amar la forma en que su borde se estira para encerrarlo y apachurrarlo. Casi puede sentir el esperma tibio llenarlo, una de sus manos viaja hacia abajo, gimiendo al reconocer el bulto del pene bien enterrado y anclado sobresalir en su vientre.

SeungMin también lo hace, acariciando su vientre, presionando en el bulto con dedos gentiles. El descubrimiento del omega estando tan lleno de él solo hace a su pene blando endurecerse de nuevo, todavía soltando semen por dentro.

—Mierda, vamos a estar así un buen rato, ¿Uhm?

SeungMin se ríe, y se inclina por su cuerpo para besar su hombro cariñosamente.

—Lo siento, tú querías mi nudo.

—No me arrepiento.

—Voy a movernos, para estar más cómodos.

Tan pronto como HyunJin asiente, el alfa pega su pecho a la amplia espalda del omega, abrazando su cintura para hacer fuerza y empujarlos a ambos a un costado cuidadosamente, regresando a cucharear.

Hay un tirón del nudo ante eso, que saca a HyunJin un quejido, pero no es insoportable. SeungMin se encarga de sobar una de sus nalgas para intentar apaciguarlo, lográndolo a la perfección. Aunque la calma dura poco, ya que el alfa deja caer su palma encorvada en su trasero con una palmada juguetona, arrancándole al omega un siseo jugoso. Dejó su piel quemando deliciosamente, la marca de sus dedos comenzando a enrojecer.

—Querías hacer eso desde hace rato, ¿Verdad?

—Sí. —no tuvo vergüenza en aceptarlo, abrazando su cintura en un apretado agarre. HyunJin sonríe, acariciando con sus pulgares cariñosamente ese brazo protector.

—SeungMin-ah... después de esto... ¿Qué haremos?

—¿Uhm?

—Esto... ¿Será solo una vez?

—¿No quieres repetirlo? —el alfa pregunta con voz suave y cautelosa—. Honestamente, yo quiero repetirlo.

HyunJin se muerde el labio.

—Yo... Yo también quiero repetirlo.

—Entonces, definitivamente lo haremos de nuevo.

—Pero...

—Algo te preocupa —SeungMin murmura, sosteniendo su peso con un codo con tal de buscar su rostro. El omega no lo busca de regreso, sin embargo—. Dime qué pasa, bebé.

—Es... Tú me gustas... Mucho. Y yo no quiero volver a hacer esto si solo va a ser físico porque yo-...

—Oye —interrumpe, sujetando al omega del mentón para obligarlo a girar la cabeza. HyunJin cede, observándolo con ojos vulnerables, y SeungMin sonríe por esos bonitos ojos de cachorro temerosos. Así que lo besa, lento y profundo, buscando transmitir todo lo que sus palabras a lo mejor no pueden detallar—. Tú también me gustas, mucho. Como jodidamente mucho. Quizás esté algo jodidamente enamorado de ti.

Los ojitos de cachorro del omega se abren desmedidos, su boca en un círculo sorprendido.

—¿E-en serio?

—Mjum... T-Tenía miedo de que no me correspondieras, tus señales eran muy confusas. A veces creía tener la puerta abierta, pero otras veces parecía cerrarse de golpe y yo... No quise arriesgarme a estar equivocado.

—No lo estás. Yo también me sentí así hasta que —bufa una risita divertida—... Hasta que comenzaste a frotarte contra mí en tus sueños.

El alfa hace un berrinche, se queja y se cubre la cara, escuchando al omega reírse.

—No vas a olvidar esto jamás, ¿Verdad?

—Cuando me pregunten cómo me di cuenta que soy correspondido, diré que mi alfa se frotó contra mí como un cachondo perro desesperado porque tenía un sueño erótico conmigo.

SeungMin empuja su hombro sin fuerzas, escuchando su carcajada. En medio de sus risas, siente el nudo desinflarse lo suficiente como para deslizarse fuera, así que el alfa extrae las caderas lentamente. HyunJin se aguanta el gemido que quiso salir de su boca por la lenta caricia de su polla mientras lo hacía, hasta que finalmente su cabeza se libera con un obsceno burbujeo. El alfa admira su agujero abrir y cerrarse ante la falta de algo, gimiendo por el esperma y lubricante natural que resbala por sus nalgas, formando un charco pequeño en las sábanas.

—Joder, creo que no me cansaré de esto nunca. —murmura, sobando con un dedo el borde maltratado. Está sensible y enrojecido, un poco hinchado también, y HyunJin sisea por la intromisión de sus dedos que metieron un poco del semen que escurre.

—Mm, sé mi novio, alfa.

SeungMin levanta la vista de su culo a su rostro, con los ojos grandes y sorprendidos.

—¿De verdad?

El omega asiente, tímido.

—Por favor, dime que sí.

—¡Sí! —le salta encima, logrando meterse entre sus piernas que se abrieron al instante para dejarlo pasar. Le acuna la cara con ambas manos, dejando besos esporádicos por todos lados. Su frente, sus párpados cerrados, la punta abotonada de su nariz, su filoso mentón y sus esponjosos labios que besa largo y lento—. Al fin puedo llamarte mío.

—Yo también, mi alfa.

—Mi omega~

Dicho omega suelta risitas suaves por el nuevo ataque de besitos amorosos.

Apenas ponen un pie en el comedor, hay cinco pares de ojos que se fijan en ellos, cada uno con expresiones distintas, pero tan similares a la vez. HyunJin siente las mejillas calientes por la atención, y SeungMin se cohíbe porque ambos saben el porqué de las miradas.

—¿Se divirtieron anoche? —Chan, el alfa de su pequeña manada, comenta con una sonrisa sospechosamente calmada.

—Y fue mucha diversión —el beta más joven, y el único de la manada, comenta irónico. Sigue comiendo su cereal, burlándose de ambos—. Apestan al otro.

HyunJin encoge los hombros. Avergonzado ante el escrutinio de su manada, pero sin querer demostrarlo por completo.

—No es como si no lo hubieran visto venir, tarde o temprano tenía que pasar.

—Pero por favor, que no sea en la madrugada, lo único que pido. —MinHo comenta. Tiene un ceño en su frente y su boca hecha una curva molesta. El omega se enfurruña si no tiene sus horas enteras de sueño.

JiSunh se ríe, estando de acuerdo.

—Vayan a ducharse juntos, de verdad apestan a sexo.

—¡Van a coger en el baño! —el omega ChangBin se queja en voz alta, su satoori de YongIn enfatizando su descontento ante la sugerencia del compositor músical alfa.

—No lo había pensado, pero, ¡Buena idea, HanJi!

Antes de que alguien pudiera quejarse de nuevo, HyunJin entrelaza su mano con la de su alfa y lo arrastra fuera de la cocina para dirigirse al baño. Solo escucha el berrinche del otro omega, y las risas malvadas de JeongIn junto a Chan, regañándolo por plantar esa tonta idea en ambos.

SeungMin lo detiene cuando están por llegar al baño, empujando la espalda del omega a la pared. Pone ambos manos junto a su cabeza, inclinando su cuerpo sobre él solo para mirarlo a los ojos con una sonrisa coqueta. Su olor cautiva tanto a HyunJin que termina ronroneando y llevando sus propias manos a su cuello, acariciando ese punto erógeno detrás de su oreja.

—¿De verdad vamos a hacerlo en la ducha?

—En realidad solo quería molestar a Hyung, pero no suena nada mal —sus ojos se vuelven oscuros, jalando al alfa más cerca de su boca, murmurando sobre ella:—. Siempre quise coger en la ducha.

—Joder.

El alfa se apresura en recoger al omega desde sus nalgas, escuchando las risitas juguetonas de HyunJin antes de callarlas con un beso hambriento, mientras lo dirige al baño.

La puerta se cierra detrás de ambos.

Wanna Sleep With You Tonight | Original de © thrdflavor

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