El monstruo de huesos

Merly se encontraba en un teléfono publico, intentando sacar con un pequeño palo las monedas que dan para el cambio desde la pequeña rejilla la maquina. Le estaba costando mucho, metió el palo hasta dejarlo atorado para que lo dejara abierto y metió su mano doblándola lo mejor que pudo y con sus dedos sintió una moneda. 

La cual con sus dedos intento agarrar la mayor cantidad posible, saco la mano haciendo que el palo se caiga, con una pequeña sonrisa comenzó a contar cuanto es lo que pudo sacar mientras sacudía la mano con la que se metió a la maquina al dolerle haberse doblado.

Era el segundo día que estaba en Beacon Hills, Merly durmió en el parque por que aunque parezca extraño no hizo tanto frio, o tal vez no lo sintió era como si su cuerpo entero estuviera a la misma temperatura del ambiente y se calentara.

Eran las 12 del medio día, y Merly tenia hambre.

—¡Si!, tengo suficiente par hacer 2 llamadas.—Dijo Feliz Merly dando suspiros de felicidad. 

Comenzó a poner moneda por moneda hasta que fue suficiente para poder llamar. Agarro el teléfono y lo puso en su oído mientras con su otra mano la dirigía a donde marcaria los números deteniéndose cuando estaba apunto de tocar un numero.

—¿Cuál era el numero de papá?, recuerdo solo los primeros 5 números pero lo demás me es confuso..—Decía la Saltzman, dándose con la sorpresa de que no se acordaba del numero. Aunque pensándolo bien nunca se lo había aprendido Lizzie siempre le decia que para que se lo iba a aprender si tenia su celular donde lo tenia guardado. 

Casi iba a entrar en pánico cuando una idea se le vino a la mente.—¡MG!, me se el numero de MG.

Suspiro agradecida de todavía recordar el numero del vampiro, comenzó a marcar los números antes de olvidarlos o confundirse. Ya listos espero paciente a que contestara debido a que se escuchaba el pitido, Mer estuvo un rato así haciendo que se impaciente.

Iba a colgar cuando una voz contesto.

"El numero de teléfono no existe."

Merly frunció el ceño y se pregunto si había colocado mal los números. Nuevamente volvió a recordar a mas detalle el numero de MG, el cual si era al que estaba llamando.

—Probemos con el de Dorian. —Se dijo mientras marcaba el numero, ya que ese si se lo sabia de memoria.

Timbre, timbre, y la misma voz diciéndole que el numero no existe.

—¿Por que no funciona ninguno?—Medio grito Mer, sintiéndose frustrada sin saber que mas hacer.

Merly había gastado todas las monedas que logro sacar, y no se arriesgaría de que la atrapen intentando sacar mas monedas ya que a diferencia de antes ahora había mas gente afuera que si bien solo pasaban había un riesgo de que la pillen.

Cansada salió del teléfono publico y comenzó a caminar por las calles dándose cuenta de que no tenia nada que hacer, de nuevo se volvió al parque sentándose en la banca de cuando llego el día anterior.

[...]

Estuvo jugando en el parque, tanto en los juegos para niños como en el césped. Mer no tenia nada mas que hacer así que distrajo su mente lo mas que pudo para no pensar en otra cosa que no sea distraerse, y así las horas pasaron hasta oscurecerse por completo.

Merly estaba planeando dormir en el mismo sitio que antes que aunque no le agradara la idea no tenia a donde ir, suspiro mirando los faros iluminando el gran parque cuando un pensamiento le llego a la mente.

¿habrá llegado la información a papá? siquiera pudieron dar con el?

Merly lo pensó, le dijeron que lo llamarían o contactarían no sabia como pero lo harían. Entonces, si ayer le informaron entonces saben cuando vendría. Mer se levanto de la banca ilusionada con esa idea, pero había un conflicto y es que era muy de noche, debían ser como las ocho o nueve de la noche. 

—Pero un hospital esta abierto las 24 horas del día, ¿verdad?—Se dijo así misma, mientras pensaba en esa posibilidad.

Con eso en mente salió disparada hacia el hospital, sabia el camino ya que fue una vez y aunque estuviera oscuro Merly reconocía algunas cosas que la orientaban.

Finalmente había llegado, Merly estaba parada afuera respirando agitadamente y super cansada. No había parado de correr hasta llegar al hospital, Mer estaba a unos metros de un auto rojo, se acomodo bien su cabello y troto para llegar a la entrada pasando por el estacionamiento hasta llegar a la entrada. 

Ingreso dándose cuenta de que esa no era la entrada donde había entrado la ultima vez pero no le importo. Busco entre la gente a una enfermera en particular, justo al verla se le acerco rápidamente tocándole el hombro.

—Merly, volviste.—Exclamo la enfermera sorprendiéndose.  

—¿Lograron contactar con mi padre?—Pregunto con esperanza de que ya iba a regresar a su hogar.

—No lo se aun, pero la doctora esta en el tercer piso tal vez ella sepa.—Le dijo indicándole el ascensor cuando las luces comenzaron a parpadear asustando a Merly.—Diablos, eso a estado sucediendo desde hace unos minutos, tal vez tumbaron un poste de luz ya que parece no parar. Solo sube al tercer piso y no te recomiendo usar el ascensor con esta falla de luz.

—Si, claro.—Asintió la menor.

 —Esta bien, me tengo que ir ya que con la falla de luz parece que ha alborotado a todos así que tengo que irme.—Le explico alejándose—. No olvides, tercer piso Doctora Shepherd.

Merly solo asintió viendo a la mujer irse a pasos rápidos. 

—Dijo la escalera, ¿No?—Se dijo así misma frunciendo el ceño, girándose buscando con su vista las escaleras ya que como dijo la mujer era mejor no entrar en el ascensor si la energía fallaba.

Rápidamente fue hacia las escaleras y comenzó a subir temerosa de pisar mal y tropezarse, ya que estaba medio oscuro debido a que la luz iba y venia lo que la confundía mas.

Paso por el primer piso, el segundo piso y ya de ahí subió despacio ya que se había cansado. Un suspiro de cansancio salía de su boca cada que subía otro escalón hasta llegar al piso 3, justo cuando iba a abrir la puerta y pasar al piso tres un estruendo se escucho arriba de Merly.

La cual salto del susto y se dio la vuelta, viendo que las escaleras seguían a un cuarto piso o mas bien la azotea.

Otro golpe junto con un gruñido, grito se escucho haciendo que Mer se quede de piedra mirando las escaleras hacia arriba. Volteo su vista a su mano donde tenia la mano agarrada de la agarradera para empujar la puerta, miro su mano unos segundos.

vamos Mer, tienes que ir con la Doctora Shepherd..

Se decia mientras veía como sus manos y su cuerpo no obedecían irse, regreso la mirada a las escaleras sintiendo que lo que iba a hacer era algo estúpido y suicida, pero vamos habían pasado cosas peores en la escuela Salvatore.

Merly tomo una bocanada de aire y soltó la manija de la puerta, comenzando a ir hacia la escalera que conducía a la azotea.   

Subía cada escalón con una tensión y un escalofrió horrible, Merly sentía que había algo malo pasando arriba por que cada que subía mas su corazón latía mas fuerte.

Los escalones se acabaron y tenia la puerta a unos pasos, Merly trago su propia saliva mientras se acercaba tomando la manija y empujando la puerta hacia afuera.

Los ojos de la joven bruja se abrieron de par en par al estar afuera, veía la espalda de un ser sumamente horrible con calaveras y huesos en forma de traje.

Su respiración se detuvo unos segundos apretando sus puños del miedo que tenia, salió de su estupor cuando la cosa lanzo a una chica hacia un lado dejándola desmayada y aturdida al impacto. 

Pensando a mil por hora Mer no tuvo otra opción que acercarse a la espalda de aquella cosa que pelaba con un chico que estaba ayudando a despertar a la que se había desmayado. 

Mer puso ambas manos en la espalda iniciando a extraer la magia de lo que fuera esa cosa, lo hacia de forma brusca para que sintiera dolor y se distrajera de los chicos. El monstruo se retorció con un gruñido de dolor. 

Merly despego las manos de la espalda y recito un hechizo.

—¡MOTUS!—Exclamo en voz baja dirigiendo con ambas manos al monstruo hacia un lado haciendo que se estrelle contra la pared con un fuerte sonido. 

Merly al ver lo que hizo miro unos segundos incrédula y sorprendida a la cosa, la cual se estaba comenzando a levantar.

—¡ADSOMNUN!—Exclamo Merly, lanzando con lo que le quedaba de magia el hechizo.

La cosa cubierta de huesos y ahora que Mer lo veía mas de cerca tenia garras de metal en las manos se desmayo dejando se moverse.

Escucho unos quejidos, lo que hizo que Mer se girase viendo con mas claridad que un chico de lo que parecía su edad con un hilo de sangre saliendo se su boca junto a una chica unos dos años mayor. 

Merly rápidamente se acerco.—¿Estas bien?—Consulto, extendiéndole su mano al chico. 

El chico la miro un tanto confundido aceptando su mano, Mer lo ayudo a pararse tomando su mano dándose cuenta de algo.

Es un licántropo.

Aseguro Merly en su mente, ya que al este agarrarle la mano para levantarse vio por unos segundos los ojos característicos de los licántropos, el brillo amarillo de sus ojos que aunque fue fugaz Mer lo pudo ver junto con unos dientes raros que sobresalían de la boca de este, lo cuales ya no estaban.

El chico ya levantado, miro con cautela e impresionado a la chica que parecía tener mas o menos su edad.

Mer todavía sosteniéndole la mano también lo estaba viendo, para confirmar su teoría extrajo de forma suave y gentil un poco de magia al tener las manos juntas.

El joven de ojos azules sintió un pequeño escalofrió que le recorrió desde la mano hasta llegar a su cabeza haciendo que se le ericen sus vellos de su piel. Parpadeo confundido y sin dejar de mirar a la chica bajo su vista por un segundo al ver como una pequeña luz naranja rojiza desaparecía de su mano, la cual la tenia agarrado. 

Mer siguió la linea de visión del chico dándose cuenta que todavía tenían las manos agarradas.  

De un manotazo esta dejo de tocarlo, sintiéndose avergonzada.—Creo que tu amiga necesi..

—¡Liam se acaba el tiempo, Scott!

La chica salió corriendo luciendo asustada sin ver muy bien quien los había salvado, el chico que aparentemente se llamaba Liam abrió sus ojos como si acabara de recordar algo mega importante.

Este dudo si seguir a la chica o darle las gracias a quien lo salvo.

—Ve, debe ser importante para que salga de esa manera.—Opino, recibiendo un asentimiento para luego el chico Liam también bajar por las escaleras.  

Merly suspiro sintiéndose agotada tanto física como mentalmente.

—Siento como si me olvidara de.. ¡Hijo de..!—Merly salto del susto al escuchar algo caerse, se giro y vio que no era nada mas que una parte rota de la armadura de el monstruo.

Mer se dio media vuelta y a pasos rápidos se dispuso a bajar por las escaleras, no sin antes cerrar la puerta que daba a la azotea.

Ya por fin en el vendito piso tres, Merly busco a la doctora Shepherd preguntando tanto a las enfermeras como a la gente en particular, pero sin éxito.

—¿Dónde esta la maldita Doctora Shepherd?—Cuestiono al aire Merly sintiéndose molesta de no hallarla.

—Aquí esta la maldita Doctora.

Se oyó una voz en su atrás, que hizo que Merly se girara a velocidad flash. 

—Yo no quise..—Comenzó a intentar disculparse al ver a la doctora shepherd justo atrás de ella. 

—No te preocupes, es lo mas suave que me han dicho, ¿Para que me buscabas?—Cuestiono dándole una mirada inquisitiva a la joven.

—Quería preguntarle si tenia información de mi padre y si ya se pusieron en contacto con el. —Dijo de manera muy rápida haciendo que la mujer apenas y si entendiera lo que dijo. 

—Si, intentamos contactar con el pero tal parece que no existe.—Termino de manera firme—. Niña si tienes problemas con tu familia esta bien. Pero no tienes que dar un nombre falso, por que sabemos que Merly Annabelle Saltzman no existe, no esta registrado su nacimiento en ningún hospital o seguro medico en ningún hospital internacionalmente.

—¿De que habla?, ese es mi nombre lo juro..—Prometió la joven bruja sintiéndose confundida sobre lo demás, sobre que no existía.  

—Si, claro. Dinos tu nombre, tú verdadero nombre y podemos..—Un pitido interrumpió el hablar de la doctora, la cual al escuchar dicho sonido reviso algo en su cintura—. Demonios, debo irme pero ten en cuenta lo que te dije, ¡pospondremos esta charla!—Explico saliendo a toda prisa del pasillo, dejando sola a Merly con miles de preguntas.

Mer se quedo unos segundos parada en medio del pasillo, sin saber que hacer o decir. Por que eso de que ella no existía era falso ¿cierto?, no había posibilidad de algo así y de seguro debía ser una equivocación.

—Vine en vano.—Murmuro Merly sintiéndose desanimada, comenzando a dirigirse al ascensor ya que ahora no parecía haber problema con la energía.

Entro en el ascensor y presionó el botón del segundo piso, quería caminar hasta llegar a la salida y no escapar por la escalera como una delincuente. 

Las puertas se abrieron en el segundo piso, saliendo de ahí Merly caminaba lento hacia las escaleras. Doblo el pasillo cuando se topo con el chico de antes.

—¡Tu!—Un chico la señalo—. Tu eres la chica que nos salvo.—Exclamo con el ceño fruncido acercándose a la bruja. 

—Si, soy yo..—Acepto con el ceño fruncido al ver que la apuntaba.

El chico Liam dejo de apuntarla y se rasco la nuca, cambiando por completo la expresión molesta y preocupada a una de nerviosismo.

—Quería decirte, gracias. Por lo de allá arriba.

—No hay de que Liam, además creo que tu hubieras podido solo si no me hubiera interpuesto.—Garantizo dando una pequeña sonrisa la cual fue correspondida con otra, pero luego la expresión del chico se frunció en confusión.  

—¿Cómo es que..?

—¿Se tu nombre?, la chica lo grito antes de salir corriendo ¿lo olvidas?—Dijo haciendo le recordar un poco al chico lo que sucedió en la azotea, que después de un pequeño análisis abrió ligeramente sus labios y luego los cerro al no tener nada que decir ante eso. 

—¿Entonces tu eres?...—Indago Liam mirándola confundido.

Merly alzo las cejas confundida sobre a que se refería.— Soy Merly Saltzman.—Se presento haciendo que el chico asienta su cabeza de nuevo, aunque esa no era lo que había preguntado.

—Bueno, nos vemos algún futuro día, Liam.—Se despidió pasando junto a el, para luego darse un poco la vuelta y sacudir su mano en señal de adiós. 

El chico solo la miro irse para luego darse la vuelta y dirigirse a donde iba en primer lugar.

Mer camino tranquila por el pasillo sin notar unos ojos que pasaron fugazmente sobre ella haciendo que se quede en estado de shock, la mujer se giro por completo para verificar bien si no era un engaño de sus ojos. Lo cual para su alivio al parecer lo era, ya que la figura de la joven había desaparecido. 

—Enfermera McCall, la necesitamos aquí.—Hablo alguien, haciendo que la mujer identificada con ese nombre deje de mirar en dirección del pasillo para seguir a su colega a donde la necesitaban.

Merly se detuvo en la sala de espera del primer piso, donde se podía ver mucha gente esperando a ver a sus familiares, algunos hasta incluso durmiendo. Miro por unos segundos las sillas y luego miro la salida donde venían entrando personas temblando del frio, lo medito unos segundos para después decidirse.

Se volvió a girar a la sala de espera y se fue a sentar en el ultimo asiento, sintiendo lo suave que era a pesar de ser una silla, se acomodo y lentamente cerro sus ojos dejándose caer en el profundo sueño.   

29/03/2024 [Escrito] [2630 palabras]

Holaaa, espero y les este gustando.

¿Algunas teorías? o suposiciones que piensen que pase en el futuro?

Los amo<3