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Capítulo Dieciocho

[¿QUE PODRIA MALIR SAL?]







Escuela Salvatore, 2029.

—¡Merly!—La sacudió torpemente Lizzie, viendo temblorosa el cuerpo de su hermana.

Pero por mas que la sacudía, esta no despertaba.—¡Papá! ¿por que Mer no despierta?!—Exclamo Lizzie asustada viendo el cuerpo de su hermana.

Todos parecían asustados, luego de que Hope saliera de la mente de Josie, Lizzie comenzó a alterarse, acercándose corriendo al cuerpo de su hermana sacudiéndola intentando despertarla. Pero nada funcionaba.

MG rápidamente se acerco a la rubia agarrándola de los hombros para que lo mirara.—Lizzie, tienes que tranquilizarte-..

—¡Mi hermana no despierta y quieres que me tranquilice?!—Grito, soltando magia con el grito, haciendo que una lampara cercana explote.

—No lo dije de esa manera.—Dijo MG, intentando explicarse viendo con precaución como todos estaban igual de confundidos que el—. Tu hermana esta bien.

—¿Eres ciego?, ¡no despierta!—Lizzie señalo el cuerpo en el sofá.

—No es eso a lo que me refiero, digo que sigue con vida.—Aseguro—. Puedo escuchar su corazón latir y que también respira.—Explico, viendo como la cara de Lizzie se fruncía algo dudosa.

—MG tiene razón, Merly sigue con vida.—Exclamo Alaric, luego de acercarse a revisar el pulso y si respiraba su hija.

Lizzie se giro viendo a su padre junto a su hermana confundida, no sabia en que momento se movió su padre.

—Ellos tienen razón. Yo también lo escucho.—Afirmo la Mikaelson, haciendo que Lizzie soltara un bufido.

—¿Entonces por que no despertó como tu?—Pregunto Lizzie, señalando a Hope acusadoramente.

—No lo se, estaba conmigo cuando recitamos el hechizo para volver.—Explico la trihibrida, arrugando su cara en desconcierto, sin saber porque solo ella logro llegar a su cuerpo.

—Primero calmémonos, Elizabeth no mires así a Hope hasta que sepamos que ocurrió.—Hablo Alaric parándose.

Lizzie abrió su boca incrédula.—Pero papá.. ¿Quién mas además de ella sabe que paso ahí adentro?—Cuestiono, pero luego su cara paso a una blanca.

Dándose cuenta de su pregunta.

—Josie.—Nombro Hope, haciendo que todo el ambiente se pusiera tenso y Lizzie la mirara con una expresión aterrada sin querer creer en eso—. Josie también debe saber algo, pero no sabemos como preguntarle a la Josie adecuada.



















[...]

Merly abrió su boca bostezando torpemente, se tapo la boca con su mano, adormilada. Se suponía que ese día era luna llena y que tendría que ayudar a Liam a que no matara a nadie, encerrándolo.

Pero a pesar de eso, podía sentir que los días se le hacían aburridos. Casi no pasaba nada interesante, ya no había nada interesante y emocionante que hacer. O tal vez simplemente se había acostumbrado al ajetreado horario de monstruos en la escuela Salvatore.

Merly no sabía que hacer, ya que el día era muy aburrido. Aunque tenía que 'exorcizar' a Liam en la noche, el día seguía siendo aburrido. Y sinceramente, se estaba empezando a sentir sola.

Sus amigos de la escuela, su familia, sus hermanas. Todo eso no estaba junto a ella, no tenia a nadie de ese tiempo en el ahora de donde se encontraba, aunque siguen existiendo algunas personas en ese tiempo que conoce, pero no la reconocerían porque, de nuevo, no nace aun.

Algo mareada se levanto de la cama, apartando su melena hacia atrás al estorbarle, estando todo su cabello algo desordenado.

Con los ojos desenfocados se puso las sandalias y se dispuso a empezar el día, ya que no tenia nada mas que hacer.











[...]

Merly se encontraba caminando en circulo.

—¿Y si le hago un hechizo que acelere su velocidad en el cambio? No. Mejor no...—Murmuraba Merly sacudiendo la cabeza ante ese pensamiento, ya que el hechizo en si ayudaba mucho a los licántropos en el cambio en la luna llena, ayudándoles a no sufrir mucho por largas horas dependiendo de cuanto dure su transformación y el tiempo en el que los huesos se vuelvan a reacomodar al iniciar y al terminar.

Pero había una cosa mala con respecto al uso del hechizo, era muy efectivo con los que lo utilizaban, debido a que querían volver a usarlo una y otra, y otra, y otra vez, hasta el punto de que se volvían dependientes del hechizo. Sin saber como se sentía soportar el cambio por si solos.

Merly lo sabia, descubrieron este hecho cuando Jo ayudo a un chico de 13 años el año pasado, y Josie por simpatía para que no sufriera mucho en sus transformaciones. Le ponía el hechizo justo 15 minutos antes de que saliera la luna, y aunque Josie creyó que estaba haciendo algo bien, no fue así.

Se dio cuenta de eso cuando una tarde llego el pre-adolescente actuando nervioso pidiendo por el hechizo con desespero, pero en ese momento Josie no estaba como para hacer un hechizo y además se había olvidado de que ella le ayudaba. Ya que estaba ocupada con los exámenes y su nueva relación con Penélope Park.

Muy pronto la transformación empezó y el niño comenzó a sufrir, pero esta vez el doble de cuando se transformo por primera vez, según describía. Su padre Alaric, llego una vez que recibió la llamada de su hija llorando diciendo que un alumno se estaba transformando en su habitación y no en las celdas de cambio para los licántropos, que ahora se encontraban cambiando como era habitual.

Pero grande fue la sorpresa del mayor al llegar, debido a que el chico parecía sufrir en agonía, he incluso parecía que se desmayaría ya que su cara parecía estar pálida y sus ojos rojos, lo que solo retrasaría la transformación haciendo que cuando se despertara volviera a sentir dolor al seguir el cambio.

Fue algo terrible, y el hechizo fue prohibido en el uso para los licántropos jóvenes, y solamente en emergencias se podía usar pero nunca dos veces o seguido como medio de no sentir dolor.

—Pero entonces, ¿Qué hago además del circulo de sal?—Se pregunto, ya que no quería oír toda la noche los gritos de dolor de Liam—, no puedo simplemente oír sus suplicas.

Estaba indecisa, tal vez podía ponerse un hechizo de silencio en unos tapones de oídos, pero eso solo seria un tal vez porque también existe la posibilidad de que Liam se lesione así mismo en ese estado.

Habían muchas cosas que podrían suceder.

Merly soltó un pequeño grito de frustración sacudiéndose el cabello.

—¡Ya se!—Soltó de repente, abriendo los ojos con una idea en mente—. El hechizo de aceleración muscular, sirve para ayudar a que se curen mas rápido, pero solo sirve en sobrenaturales con esa capacidad de curación. ¡Es perfecto!

Pero incluso si es similar al hechizo que se hablo antes, eran muy diferentes, ya que no aceleraba el cambio sino que los relajaba para que hicieran un efecto placebo. Y no te facilitaba el cambio, sino que seguías estando con eso solo que mas relajado como si tuvieras una sedante, el dolor seguía ahí.

Era excelente.

—Listo, ya tengo todo.—Determino Mer, con una sonrisa dando saltos.

—Debo de decirle a Liam.—Exclamo deteniéndose de dar saltos, aparto un poco su cabello y girando un poco se acerco a la puerta abriéndola, yendo corriendo hacia el teléfono.















[...]

Merly caminaba tranquila con su bolsa, con absolutamente todos los ingredientes para los hechizos que tiene planeado hacer. Traía el cabello suelto a excepción de las dos pinzas que sostenían su cabello cerca de su frente en su lugar y así no le estorbara, eran de un color celeste en forma de pétalos de flor.

En resumen la bolsa que traía consigo, tenia lo suficiente y mas ingredientes para hacer cualquier hechizo para el exorcismo que haría en luna llena ese día.

Ese día hacia un poco de frio, por lo que Mer llevaba un abrigo ligero ya que pensaba que en la casa de Liam no haría frio. Puesto que el lugar elegido para que lo ayudara había sido su casa, lo cual Merly automáticamente le cuestiono esa locura por teléfono, siendo informada que la madre y padrastro de Liam habían salido del pueblo y que regresarían en tres días.

Y bueno, Merly no pudo evitar extrañarse por tal casualidad, pero no cuestiono nada y simplemente informo que iría a la casa de Liam en cuanto estuviera lista.

Merly venia tan metida en sus pensamientos, que de un momento a otro comenzó a tararear cualquier canción que se le viniera a la mente, moviéndose de vez en cuando al ritmo de la canción en su mente.

No paso mucho tiempo cuando ya se encontraba en el porche de la casa de Liam, todavía tarareando toco la puerta esperando paciente a que le abrieran.

Sacudió un poco su cabeza imaginando que la música sonaba a todo volumen, iba girarse cuando la puerta fue abierta haciendo que se detuviera a mirar a Liam con sus labios cerrados.

Merly sonrió viéndolo—. Buenos días, ¿Cómo esta mi rabioso favorito?—Pregunto Merly con una sonrisa entrecerrando sus ojos.

Liam la miro con una cara de póker, pero aun que lo intento se le salió una pequeña sonrisa.

—Pasa, faltan solo algunas horas para que oscurezca.—Dijo Liam, apartándose un poco para que ella entrara, la cual lo hizo agradeciendo mientras daba saltitos.

—¿Y bien?, ¿Dónde será el lugar que tengo que proteger?—Pregunto Merly sentada en el sofá, comiendo unas papas fritas que trajo Liam luego de cerrar la puerta.

Liam lo pensó unos segundos, tratando de pensar en un lugar cerrado y que pueda ser el mejor. De repente una idea le vino a la mente, ya lo tenia.

El rostro del hombre-lobo pareció iluminarse.—¡En mi cuarto de lavado!—Exclamo con una sonrisa.

Merly ladeo su cabeza.—Bueno, eso podría funcionar, si.—Admitió, comiendo un poco mas de las frituras sentada en el sofá, con los pies estirados y apodados en un pequeño banco.

—¿Y que tenemos que hacer?—Pregunto Liam, haciendo una mueca confundido. Si bien sabia lo que Merly haría, no sabia lo que implicaba o que debía de hacer específicamente.

Merly se tapo con una de sus manos masticando lo que tenia en su boca, hasta casi tragarlo por completo.—Uhmn.. No mucho, simplemente que nadie interrumpa en mi espacio o abra el circulo.

Liam asintió en comprensión. Sonaba fácil de realizar, esperaba que todo fuera tal y como lo estaban planeando.

—Por cierto, le dije a Mason que estaba ocupada y no podía salir con el hoy. Así que mas te vale que salga bien esto, me dio penita rechazarle.—Hablo sintiéndose un poco mal de rechazar la salida de uno de sus amigos de este tiempo, Mason. O como ellos se decían, M&M.

Liam cerro sus ojos acordándose de algo.—Mierda.. si, lo olvide. Le prometí que pasaríamos mas tiempo juntos.—Dijo agarrándose la cara con las palmas de sus manos—. Bueno, mañana hablare con el.

—Háblale ahora, luego se sentirá mal.—Comento Mer, dejando las frituras a un lado.

—Si tienes razón.—Murmuro asintiendo, dándose la vuelta para dirigirse hacia donde había dejado el celular.

Merly solamente pudo ver como se iba de la sala, por lo que comenzó a comer de vuelta las frituras solo que esta vez un poco preocupada por Mason. Ya que, por la charla con este el otro día sabia mas o menos como se estaba empezando a sentir Mason.

























[...]

La luz se encendió con dos parpadeos antes de que se estabilizara por completo e iluminara por completo el cuarto de lavado de la casa de Liam.

Merly miro con curiosidad el lugar, el cual se encontraba en lo que parecía el sótano. Estando atrás de Liam pudo notar como el lugar olía a un producto para la ropa que no conocía.

Liam descendió hasta llegar a la mitad de la habitación para luego girarse hacia Merly, la cual venia con su bolsa agarrada analizando el lugar.

—El espacio no es ni muy grande, ni tampoco pequeño.—Comento Merly, ahora estando al lado de Liam, mirando por todos lados—. Si, servirá.

Liam suspiro aliviado, viendo como Merly dejaba su bolsa en una de las secadoras de ropa.

—Bien, primero será plantar los grilletes y las cadenas a algún lugar de aquí.—Menciono la Saltzman con un ligero puchero, el cual hacia a veces cuando estaba pensativa.

—Oh, ya me encargue de eso.—Informo Liam, haciendo que Mer se voltee a mirarlo confusa.

Liam al notar la mirada de la bruja hizo que se le formara una sonrisa.—Si, están aquí mira.—Dijo, indicándole que lo siguiera hasta una de las paredes donde se podía ver unos tubos y una manta blanca que tapaba algo en la pared.

Merly se acerco, viendo a Liam alzar la manta, dejando ver unos grilletes y una gran cantidad de cadenas incrustadas en la pared y el suelo.

Alzo sus cejas sorprendida de esto, haciendo que suelte un silbido.—Dios, Liam. Me sorprendes.—Declaro con una pequeña sonrisa, acercándose hasta las cadenas y ver como las había puesto.

Después de analizarlas un poco noto algunos errores.

—Están bien localizadas, supongo.—Hablo mientras sostenía una y se comenzaba a levantar—. Pero creo que habrá que hacer algunos reajustes aquí.—Dijo mientras se levantaba comenzando a jalar una de las cadenas que guiaban al suelo.

—¿Porque?—Pregunto Liam, viéndola extrañado de lo que estaba haciendo.

Ni bien termino de decir eso se escucho el sonido de algo soltarse con fuerza.

—Por esto.—Comento Mer mirando a Liam con la cadena en mano.

Liam abrió ligeramente sus labios para decir algo, pero nada salió de ellos. Estaba un poco rojo de lo avergonzado que se sentía de que esas cadenas no estuvieran bien colocadas, ¿pero podían culparlo?, nunca en su vida había hecho algo como eso.

Merly simplemente alzo una ceja viéndolo con burla.


















[...]

—Y.. Listo. Eso seria todo.—Declaro Mer, sacudiéndose las manos del pequeño polvo que se levanto al arreglar las cadenas y por ende los grilletes que había puesto Liam.

Tuvo que desviar un poco de magia de Liam para asegurar un poco algunas de las cadenas que se veían que no aguantarían ni un jalón de hombre-lobo, debido a que la pared agrietada donde estaba colocada.

—Si..—Acepto Liam con un suspiro pesado.

Merly frunció su ceño y se giro a verlo.—¿Ya sientes algo?—Pregunto viéndolo.

—¿Que?, no. ¿Por que lo dices?—Cuestiono algo nervioso, algo inquieto.

—Porque estas sudando y parece como si tuvieras dolor de cabeza.—Explico Merly, dando unos pasos preocupada.

—Oh, si. Estoy bien.—Afirmo sacudiendo su cabeza—. Yo te diré cuando empiece a sentir cosas raras de hombre-lobo.

Merly asintió en silencio pero luego entrecerró sus ojos.—Por cierto, ¿Qué horas son?—Pregunto confundida, ya que debido a la buena iluminación del lugar no podía notar si ya había anochecido o no.

Liam lo pensó unos segundos para luego quedarse callado.—Mmn.. No lo se, deja reviso mi celular.—Dijo Liam acercándose las cosas que había traído Merly, ya que había dejado ahí su celular cuando Mer le había mostrado los errores que había hecho al poner las cadenas.

Tomo el celular y lo encendió.—Eh.. son las, ¡nueve de la noche!—Grito haciendo que Mer se girara de inmediato con los ojos abiertos.

Oh.. Mierda.—Farfullo pensando lo mas rápido que podía—. Estamos retrasados, en menos de media hora comenzara a afectarte la luna.—Anuncio Mer, levantando su vista para ver a Liam quien se quedo parado con los ojos abiertos.

—Bien, tenemos que ser rápidos.—Proclamo Mer, acercándose rápidamente hacia sus cosas, sacando algunas cosas—. Estamos sobre hora Liam, así que necesito que te muevas lo mas rápido que puedas, ten. Ve poniendo esto alrededor y en todo el espacio que creas conveniente de encerrarte.—Indico Merly, dándole una bolsa de sal, sacando ella otro.

Así poniendo en marcha, Liam se fue por el lado de la escalera empezando a dejar un rastro de sal luego de haberle hecho un pequeño agujero a la bolsa. Al igual que Merly, la cual hizo lo mismo desde su lugar.

—Listo, ¿ahora que mas?—Pregunto Liam, alzando la bolsa de sal que se encontraba ahora vacía.

Merly dejo su bolsa aun lado.—Ya esta listo circulo, solo necesito extraerte un poco y comenzaremos.

Liam asintió en silencio, y vio como Merly se le acerco tomándolo de las manos y empezar a desviar magia de su lado hombre-lobo.

Liam al principio estaba bien, se sintió como de costumbre, esa particular y extraña corriente de electricidad que lo recorrió de pies a cabeza haciendo que se le erizará la piel. Relajándolo de alguna extraña manera, todo iba normal y tal cual las anteriores veces que lo hacían. Pero de repente sintió que algo nuevo comenzaba a surgir haciéndolo sentir raro, que se originaba en sus manos y se iba a todo su cuerpo sintiéndose débil.

Dejo salir un suspiro pesado en voz baja.

Merly que estaba concentrada alzo su cabeza al escucharlo suspirar algo raro, al hacerlo pudo ver a Liam con la cara algo roja o algo sonrojada. Parpadeo sin saber que hacer, por lo que dejo de agarrar las manos de este.

—¡Lo siento!, ¿Te lastime?—Pregunto algo preocupada y avergonzada, ya que sabia que el desviar un lado sobrenatural de alguien a veces era doloroso y aunque cuando lo hacia con el consentimiento de otra persona en vez de forzarla, lo cual causaría un dolor seguro, seguía habiendo la posibilidad de que doliera de alguna manera porque estaban extrayendo una parte de si mismos.

Liam abrió sus ojos sorprendido y sobresaltado, parpadeo rápidamente y sin saber que decir miro en silencio a Merly.

Ah.. Bueno, estoy bien, si.—Aseguro, parpadeando y desviando la mirada tratando de dejar de sentir su cara caliente de solo recordar la sensación nueva y rara que había sucedido.

—De acuerdo.—Murmuro Mer, sin saber que hacer.

Liam iba a decir algo cuando cerro de repente sus ojos con fuerza y soltó un quejido, haciendo que Merly se alerte de sobremanera.

—¿Qué sucede?, ¿esta ocurriendo en este momento, empezó?—Cuestiono Merly nerviosa. Jamás había visto como ocurría, sabia como ocurría pero nunca lo había presenciado en persona.

—Si creo que si.—Contesto Liam con los ojos cerrados, apretando los dientes.

Merly rápidamente fue hacia el y lo ayudo a ponerse las cadenas y grilletes lo mas rápido que sus nervios la dejaban actuar. Termino de ponerle la ultima cadena alrededor de su brazos y se levanto mirándolo.

—Vale, entonces mantente en el circulo.—Señalo dando unos pasos hacia atrás, saliendo del circulo y que solo Liam estuviera ahí.

Liam acepto e intentando controlarse se quedo ahí, Merly al verlo en medio del circulo levanto ambas manos e inhalo aire para luego soltarlo, preparándose. Comenzando a recitar en voz baja y firme el hechizo para encarcelar a Liam en el circulo. No tardaría mucho.

Liam soltó un gruñido, y Merly pudo ver con asombro como unas garras comenzaron a aparecer reemplazando lo que alguna vez eran uñas humanas en Liam, al igual que su rostro comenzó a cambiar y sus ojos brillar junto a los dientes sobresalientes que de la boca de este.

Mer termino de recitar el hechizo y bajo los brazos, viendo algo extrañada y alerta a Liam. 

«¿No era esta la parte en la que empezaría a cambiar y gritar?»

Se pregunto confundida. Ya que se sabia que primero venia la reorganización de los huesos y luego el pelaje y esas cosas.

De repente este dejo salir un rugido que asusto a Merly, haciendo que saltara y retrocediera por instinto. Liam parecía querer liberarse de las cadenas que lo retenían, moviéndose como loco haciendo temblar la pared y los las cadenas. 

Las cuales resonaban al jale, Merly trago saliva un poco asustada y asombrada a Liam el cual parecía estar fuera de si, Merly agradecía haber puesto un hechizo de silencio en el cuarto de lavado en cuanto estaban arreglando las cadenas y los grilletes puestos, ya que no querían que los vecinos le dijeran a la madre y padrastro de Liam que se escuchaban ruidos raros de metal en su casa cuando no estaban.

Mer arrugo su cara nerviosa por los sonidos de jale y golpe que hacían temblar algunas cosas.—¿Estas bien, Liam?

No recibió una respuesta coherente, mas bien un gruñido feo. 

Merly iba decir algo cuando cayo en cuenta de algo.—Espera un momento.. ¿Por qué no estas transformándote?—Cuestiono frunciendo las cejas, no recibiendo una respuesta humana.

—¿Ta vez estas retrasado?, ¿eso es posible.?—Murmuro Mer con dudas en su cabeza, parpadeando mirando al piso.

—Si, tal vez todavía le falta tiempo. Mamá una vez dijo que los hombres lobo las primeras transformaciones eran tardadas y dolorosas.—Dijo cerrando los ojos intentando recordar esa conversación, aunque también debería de saberlo ya que lo pasaron como tema en la escuela Salvatore. 

El problema era que no se acordaba con exactitud de las clases, y que aun que si retenía la información debía de pensarla detenidamente para poder recordarla. 

—Muy bien, entonces esperare.—Comento suspirado, mirando hacia los lados buscando alguna cosa para ponerla abajo de ella y así sentarse, ya que no habían sillas y no quería ir hasta arriba y descuidarse de que Liam se lastimara.

Al notar una pequeña frazada a unos metros de ella, la agarro y la tendió en el suelo cerca de una de las lavadoras que serviría de soporte para su espalda. También agarrando la manta que Liam haba usado para tapar los grilletes se tapo, sentada mirando a Liam, lista y atenta para cualquier cosa.  








[...]

Merly podía sentir de alguna manera algunos ruidos raros, unos que no lograba comprender por completo, su conciencia parecía estar perezosa.

«¿Que es eso..?»

Su mente pensó por un segundo, estando en un estado de inconciencia.

Con ese pensamiento rebotando en su mente, comenzó a despertar y a abrir sus parpados de forma lenta y perezosa.

—¡AHH!—Soltó un grito sobresaltándose, recibiendo un rugido fuerte ante su grito.

Al haber abierto sus ojos por completo se había encontrado con Liam y sus pequeños cambios a solo unos metros de ella, no pudo retroceder debido a la lavadora que estaba atrás suyo, pero por un momento casi se olvida del circulo. Lo cual la alegro, soltando un gemido aliviada.

Después de analizar lo que pasaba fijo su mirada en Liam, notando para su asombro como tenia la ropa algo rota en algunas partes y que todas, absolutamente todas las cadenas junto con los grilletes estaban en el suelo. Ninguno incrustado en la pared, sino que parecían haberlos arrancado con un camión gigante de demolición.

Esto debido a que habían trozos de la pared todavía en el suelo al igual que algo de polvo.

Trago saliva y aplano sus labios, apartando la manta para comenzar a levantarse. Pudo escuchar como Liam quería venir hacia donde ella pero el circulo lo detenía.

Merly lo miro con algo de miedo y diversión, diversión por como se veía tratando de atravesar el circulo y a su alrededor. Y miedo por que literalmente era un hombre lobo descontrolado en luna llena.

Sin poder evitarlo emitió una ligera risa que llamo la atención de Liam, el cual en ese estado pareció furioso y rugió haciendo que Merly levantara sus manos. 

—¡Lo siento amigo!, pero es divertido verte correr por todo el lugar como una rata encerrada.—Admitió alzando ambas manos en rendición recibiendo otro gruñido.

—Oye ya basta de gruñidos, ¿no?—Comento Merly creyendo que todavía la conciencia de Liam estaba aunque nublada, presente.

No recibió respuesta, solamente otro gruñido. 

—Bien, pero desde ahora nada de gruñirme a mi, ¿oíste?—Demando apuntándolo, pero este ni siquiera la miro, estaba ocupado tratando de atravesar lo invisible que lo encarcelaba. 

Merly suspiro poniendo los ojos en blanco, se giro en busca de algo. El cual al verlo donde lo había dejado Liam, se acerco a prenderlo.

—A ver.. veamos que horas son—Murmuro prendiendo el celular en su mano—, ¿son las 3 de la madrugada?, ja. Que irónico, la hora de lo paranormal.—Menciono Mer con algo de diversión.

—¿Tu que piensas Liam?—Pregunto girándose, pero solamente pudo esquivar por reflejo una de las cadenas lanzadas en su dirección, que vio por un milisegundo venir hacia ella. Abrió sus ojo asombrada y algo asustada. 

—¡Oye!, ¡casi me cortas la cabeza peor o igual que María Antonieta!—Exclamo Merly con los ojos bien abiertos, sorprendida de que la cadena atravesara el circulo y no rebotara.

Curiosa se dio la vuelta, y agarrando la cadena se dirigió hacia Liam.—Eso fue loco pero.. ¿Cómo hiciste eso?, se supone que nada debe salir o entrar al circulo si no lo permito.

Pero tal y como había pasado antes no recibió respuesta. Por lo que suspiro derrotada, dándose cuenta de que no servía hablar con él en ese estado, aunque ya tenia muchas dudas sobre lo sucedido. 

¿Por qué no se transformo por completo aun?, ¿Qué era esa rara transformación?, ¿Qué clase de hombre-lobo no se transforma por completo?, tenia varias preguntas sin resolver y además de que se dio cuenta de que no utilizo el hechizo que tanto esmero hizo para prepararse y aplicarlo en Liam.

Mientras Merly estaba en sus pensamientos no noto como Liam con un gruñido agarro una de las cadenas y la volvió a lanzar. Merly salió de sus pensamientos en cuanto escucho algo golpear una de las secadoras, vio de donde había escuchado el sonido viendo una de las cadenas en el suelo con el cristal de la secadora agrietado.

En silencio giro su cabeza en dirección cuando escucho uno pequeños gruñidos, al hacerlo vio a Liam con una cadena en mano para luego de unos segundos acercarse con garras, mostrando sus dientes feos, según Merly.

Merly retrocedió un paso alerta, ya que si una de las cadenas de las de antes habían traspasado el circulo, entonces tal vez estas también podrían atravesarla, por lo que debía de estar alerta.

—Liam entiendo que estés así en tu día del mes, pero no es como para dejar destrozado el cuarto de lavado. Yo no tengo dinero suficiente como para reemplazar ese cristal, o si es reemplazable.—Comento Mer, intentando bromear para no sentirse nerviosa.

Liam no pareció escuchar eso y fue hacia ella, siendo detenido por la barrera. Merly sonrió feliz de la barrera, pero al ver que Liam alzo su mano con la cadena envuelto en ella, hizo que mirara con confusión lo que intentaba hacer.

No fue ni dos segundos cuando se dio cuenta lo que Liam trataba de hacer, haciéndola abrir los ojos asustada.

—¡Ey, no! Lo que estés planeando hacer en tu mente peluda, no lo hagas.—Exclamo viendo como Liam balanceaba la cadena cerca de las líneas de sal. 

Si el no podía acercarse a 30 centímetros de las líneas de sal, tal vez la cadena si. 

Eso fue exactamente lo que pensó Merly, al verlo gruñir mientras balanceaba la cadena de forma amenazante.

Merly se preparo para cualquier cosa lista para lanzar un hechizo, pero de repente no pudo sentir casi nada de magia en su sistema.

—Pasaron más de cinco horas...—Murmuro cayendo en cuenta que ya la magia que había desviada había salido de su sistema hace no mucho tiempo.

Pero era algo obvio, no había desviado mucho, por ende no tardaría mucho en desaparecer de su sistema.

Un escalofrió recorrió todo el cuerpo de Merly, quedándose sorprendida.

 —¡No te atrevas a-

Sus palabras fueron cortadas en cuanto vio la cadena pasar por la barrera hasta golpear la barrera de sal, rompiendo el circulo.

Un jadeo de sorpresa salió de Mer, viendo con impacto la única barrera que la protegía disolverse. 

Alzo su vista, encontrándose con Liam. El cual dio un paso hacia adelante dando se cuenta de que ya no estaba encerrado.

—¡Liam..—Merly grito, al verlo abalanzarse hacia ella con un rugido. Pero los instintos de supervivencia de Merly mas o menos desarrollados seguían agudos, y por reflejo tomo de las muñecas a Liam con ambas manos.

Merly claramente no podía competir contra la fuerza de un hombre lobo y más si era en luna llena. Merly apenas podía detenerlo, pero su fuerza pareció incrementar, por lo que a Merly se le ocurrió una idea.  

Con algo de determinación apretó su agarre y empezó a desviarlo, y mientras extraía magia comenzaba a murmurar un hechizo. Se le era difícil, del esfuerzo que estaba haciendo hacia que sus palabras salieran como quejidos, pero eso no impidió que el hechizo, no era necesario decirlo. Es más, era casi no verbal, pero en esta situación Merly no podía darse el lujo de hacerlo con la intención y que se desconcentrara .

Liam parecía querer luchar y que lo dejara de agarrar pero, por alguna razón no ejercía una fuerte violenta. Cada que forcejeaba sentía que su ira se iba al contacto de Mer.

Liam soltó unos gritos, todavía en su transformación, su cabeza. Sus ojos se cerraron ante el dolor infernal en su cabeza, era como si le dieran una paliza a su cerebro desde adentro, Mer haciendo fuerza repitió y repitió mas el hechizo, no porque lo fuera a hacer mal, sino como algo que la podía mantener concentrada en lo que estaba haciendo.  

De pronto Liam abrió sus ojos, los cuales se encontraban brillando más fuerte. 

Merly abrió sus ojos consternada, sintiendo como Liam utilizaba que estuviera agarrándolo.—¿Liam?..—Su voz en voz baja fue opacada por un rugido, siendo aventada para atrás en menos de dos segundos.

Merly vio todo en cámara lenta, la fuerza con la que la habían lanzado, su agarre contra las muñecas de Liam ni si quiera la había frenado un poco. Solo una cosa pudo pensar antes de estamparse contra la pared, tan fuerte que el dolor que sintió tal parecía que su cerebro no lo había registrado.

«Jódete Liam..»















20/11/2024 Palabras (4791), Editado y corregido, o eso espero.

Holaaaaa, se que no he actualizado desde hace mucho tiempo. Pero es que me llevo un bloqueo de escritor.

Coméntenme, ¿Qué les pareció?, ¿les gusto?, o si tienen dudas .

Espero y les guste :)

Es el capitulo mas largo en este fic, eso creo. No estoy muy seguro.

Los amo<3

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