Nota: okey, tengo mucho miedo de publicar esto porque realmente no es lo mejor que he escrito y siento que podría ser mejor pero en fin- por favor fanfic, no fracases
🙏😫

Ｒｅｓｕｍｅｎ: Venus no sueña con cálidos abrazos ni experiencias vividas de locuras y sin sentidos. En cambio vive en la eterna tortura de un desveló constante día tras día, ojeras profundas y el frío de las sábanas rasposas de mala calidad.
Todo lo que ha conocido siempre es la desagradable sensación de la miseria aferrándose a él como una sanguijuela.

Quizás por eso, cuando Tierra es todo dolor y amargura cruda se siente atraído hacía él como una polilla a la luz, aún cuando sabe que podría quemarse.
¿No es acaso demasiado hilarante toda esta jodida situación?

⚠️ Advertencias

- Narrador poco fiable
- Manipulación
- Comportamiento obsesivo [ligeramente]

Venus era una bomba de tiempo, de esas a las que nadie quería molestar porque era obvio que al mínimo toque: explotaría.
Si eso tenía sentido, claro.

Pero el caso era que simplemente todo mundo sabía que estar cerca suya no era una opción elegible si querías seguir viviendo.
Sobre todo si se se encontraba de mal humor (lo que en realidad, sucedía todo el maldito tiempo) Se desquitaría con cualquiera que se cruzará en su camino. Todo ser que cruzará miradas con él, incluso quién sea que se atreviera a respirar en su presencia.

Y a Venus le gustaba ese temor que existía en los ojos ajenos, le gustaba el orden que simple y llanamente todos conocían como una ley natural: El cielo es azul, 2 + 2 son 4 y Venus es el jefe, no hay lugar para la oposición.

Todos... A excepción de uno.

Su única piedra en el zapato y el motivo de su amargura perpetua cubierta de apatía, uno que tenía nombre y caminaba a su lado en el mismo sendero de la cafetería como un mortal sin importancia.

Tierra.

Aquél generalmente descrito con un: "Mmm, él es bueno en todo"
Un elegido por derecho propio y dios entre humanos bendecido como la perfección encarnada que camina, actúa y habla como un don nadie.
Pero Venus lo sabe, él no es un don nadie.

Nadie que sea un don nadie es tan perfecto, nadie es tan agradable. Tal cosa no existe en este mundo abandonado por dios, arrugado y olvidado en la esquina mas remota como un trozo de papel desechado en la basura.
A Venus le molesta, talvez demasiado más de lo normal. La importancia que le da es casi irritante si no fuera porque no es culpa de nadie más que suya, ¿Porqué le importa tanto si ese niño es el mismísimo epítome de la perfección? ¿Porqué está tan obsesionado con ello?... ¿Por qué?

No importa, ninguna de esas preguntas importa cuándo la amargura no disminuye, en su lugar crea un vacío arraigada celos fervientes que escapan de su pecho y se agita con impaciencia.
¿Que se necesita para ser como él? ¿Qué se necesita para ser tan especial? ¿Un elegido? ¿...que hay que arriesgar para ser menos infeliz?

Tierra ríe a su lado y el eco de su voz resuena en el comedor, tan ruidoso y escandaloso como todo en él.
Cómo la ambigua necesidad de recordarle a Venus que existe y que nunca podría olvidar o pasar por alto su presencia.
El chiste de Titán ni siquiera es gracioso y no sabe si acaso está más enojado por qué él peliazul fuera demasiado educado como para no reírse o porque es Titán quién recibe la suave melodía de su risa.

Antes de darse cuenta se encuentra rechinando los dientes hasta que es demasiado evidente para que alguien lo ignore.
El chico de motas verdosos y mechones marrones (que no se pintaron del todo bien) se estremece de la misma forma en que un perro esconde la cola entra las patas, casi siente la necesidad de reírse de ello si no fuera porque es bastante obvio que sus manos huesudas y ligeramente bronceadas se agarran fuerte a las prendas bien planchadas de Tierra buscando refugió.

- "Venus?" - y aquí va de nuevo, el niño dorado haciendole su buena obra del día.
Por qué si, obviamente va a defender a Titán ya que, ¿Porque no lo haría? - "¿Qué está mal?" -

El peli naranja frunce el ceño sin intenciones de explicar nada chasquea los dientes, y le lanza una mirada demasiado profunda para que alguien con sentido común la resista, por desgracia, el peliazul carece de ello.
Así es como es: está situación se ha repetido tantas veces que ambos saben exactamente el orden en que todo ocurrirá.
Un tira afloja y suelta que ambos juegan a la perfección. Casi ensayado, destinado a ser.

Repetitivo.

Pero al final Venus siempre desiste en los ojos vacíos de Tierra, demasiado opacos e insensibles para realmente creer que tiene genuinos deseos de ayudar.
Venus siempre se ahoga en esa indiferente crueldad que habita en las cuencas gélidas del mayor.
Dorado, dorado como el Sol que te quemará hasta que duela y el frío es todo lo que puedas sentír.

¿Puede alguien tan perfecto tener ojos tan agudos como esos?
Joder, necesita un respiró.

Toma sus cosas y se retira azotando la puerta de la salida con una mezcla nauseabunda de irá, asco y envidia.
Si fuera más observador, podría notar la forma en que los ojos del mayor se apagan con aburrimiento ante los agradecimiento de Titán apesar de la sutil sonrisa.

En cambio, se centra en su constante desdén infectando con furia absurda las acciones de Tierra.
Siempre el héroe.
Siempre el que hace lo correcto.
Siempre el que recibe los aplausos y halagos sin fin.

Se pregunta, si acaso...

Asume que no, después de todo ¿Quién cambiaría todo lo que es solo para complacer a los demás?
No es propio de Tierra hacer cosas que no quiere, pero...
Tierra no siempre fue tan dulce con todo sonrisas y amabilidad, al menos no antes del incidente, el creé que no debería añorar tanto a la peor versión de su amigo.

- "Y sin embargo, la prefiero" - no está seguro de porque lo dice pero él arrepentimiento nunca llega.

Se pregunta si debería sentirse mal por eso, ¿Quién en su sano juicio desearía algo así?
¿Que clase de amigo desearía desenmascarar una mentira que claramente no existe? Solo provocada por una paranoia de pura y asquerosa envidia.

El silencio permanece mientras Venus recorre los helados pasillos llenos de polvo, moho y húmedad.
Suspira rendido y tiene casi por seguro que será otra noche sin conciliar el sueño.

Contrario a la creencia común, Venus es un sobre pensador ansioso.
Pasando noches en vela por arrepentimiento y lamentos que no tiene fin: Ya que ¿Porqué lo habría? Es una persona llena de errores demasiado grandes para arreglarse.
Su existencia es demasiada sucia e impura para alcanzar la rendención.

Rápidamente arruga la cara en una mueca horrenda al tiempo que frunció el ceño con extrañeza ante lo religioso que sonó eso, válgame la redundancia, ni siquiera recuerda la última vez que puso un pie en la iglesia.

Vaya, ¿Venus ɐ̶ɹ̶ɹ̶ǝ̶ᴉ̶ꓕ̶ es verdaderamente una persona muy desagradable, no? quizás la más desagradable que pueda existir algún vez.

Tal vez.

Son en momentos como estos, cuando toca fondo y la desesperanza inunda su corazón que se permite derramar lágrimas saladas de pena lastimera.
¿Si fuera un poco más como él sería más feliz? ¿Si fuera Tierra sería feliz?
Al instante se odia por pensar en el idiota narcisista solo que... En realidad ya no es así, ¿verdad?
Tierra no es quién se lamenta día tras día por existir y fracasar en ello.
El peliazul es el éxito por qué es bueno en todo
No es un fracaso. Él no falla.

Una ley natural, ¿No?
El cielo es azul
2 + 2 son 4
Venus es el jefe, no hay lugar para la oposición.
Y Tierra es perfecto.

Esto es demasiado, llorar estúpidamente en su cama no sirve.
Y quedarse aquí tampoco, por una vez le gustaría no sentirse estancando, con las lágrimas escoziendole la esclerotica ardiendo al rojo vivo junto a las lágrimas secándose en su rostro dejando en evidencia su debilidad.

No le importa. No puede importarle, nadie es tan idiota para cuestionarle (alguien puede) le recuerda su mente, Venus le dice que se calle, afortunadamente lo hace entonces respirar se hace más fácil y toma su chaqueta dirigiéndose a la cocina.
Un bocadillo de media noche podría ayudar.
Tal vez no, tal vez solo quiere una distracción de su realidad. Eso suena bien.

Sin embargo, el pensamiento muere rápidamente cuando la suave melodía de la que no se había percatado antes lo invade rompiendo su ensoñación, de repente el aroma a manzanilla, chocolate y mantequilla rebota en su nariz ¿Qué...?

Ahí en el umbral de la cocina, apenas iluminado por la luz de la luna está el martirio de sus problemas.
Tan etéreo como una deidad, bailando en una sincronía aterradora de soledad con ingredientes crudos y trastos sucios.

- "Hola Venus" - Tierra no necesita girarse para verlo por supuesto. Los dioses son omniscientes después de todo, ¿No?

- "..." - no tiene ganas de lidiar con esto, así que solo pasa de largo del chico.

El peliazul no entiende la indirecta y toma su silencio como una señal de darle seguimiento a su lengua suelta mientras continúa batiendo algo en un bowl - "Sobre lo que pasó en la cafetería- " -

Venus lo ignora, apenas captando algo sobre un discurso motivador de la importancia de ser gentil y tener empatía con los semejantes.

- "Creo que deberías disculparte" - dice finalmente y oh..., tiene tantas ganas de reír.
Es que acaso ahora no solo quiere ser un héroe sino también, ¿un redentor?
Siempre pensó en Tierra como un dios, pero nunca creyó el día en que realmente lo vería, tratar de enmendar pecados ajenos? Sacrificarse por qué? Paz? ¿Solidaridad? ¿Fé? ¿Heroísmo?

No sabe de dónde surge el valor, pero no se detiene a pensarlo cuando por primera vez (de lo que podrían ser meses) se atreve a encarar a Tierra.

- "Y yo creo que no deberías meter las narices donde no te llaman, ¿Acaso no te lo han dicho?" - se siente poderoso, quién está en la cima ahora, mmm? Es probable que este impulso de valor no dure lo suficiente, pero definitivamente no lo desaprovechara.
- "¿Te sientes mucho por qué eres que? Perfecto?" - un dedo acusador perfora el pecho del más alto con retorcida envidia trastornada. Envidia. Envidia. Eso es todo lo que puede sentir ahora y siempre.

- "Mmm, realmente te odio mucho,
¿Sabes?" - Venus casi siente las ganas de atragantarse por su repentina sinceridad, excepto que... Esas ya no fueron sus palabras.

No.

Son las de Tierra.

- "q-que...?" - sus mejillas se tiñen de un suave rojo por la vergüenza, una voz tan pequeña y tímida como quien no quiere la cosa. Nunca ha sido un cobarde, pero aquí cuando la filosa voz de Tierra habla Venus se siente incapaz de decir algo en contra.

Se siente como un niño berrinchudo que a menudo ha sido mimado y que finalmente ha provocado la irá de su madre por primera vez.

- "Yo te desprecio tanto, ¿Cómo se siente eso Venus?" - la dulce voz de Tierra no ha desaparecido de alguna manera incorrecto. - "Nadie te ama, nadie te aprecia ¿Realmente puedes enfrentarte a eso? Al odio del mundo me refiero" - El peli naranja siente el sudor frío escurriendo por su frente, un ligero temblor se apodera de sus piernas.

- "¿Podrías... Soportarlo?" - el peliazul inclina la cabeza con inocencia infantil y el aire se escapa de sus pulmones al tiempo que el color de su piel se desvanece.

Venus apenas logra articular 2 palabras, apenas susurradas en un volumen
audible; - "Lo sabía" - aquí y ahora, Tierra no es amable, es egoísta. Es malo, malvado y retorcido, si tan solo tuviera una prueba.

Tierra lo escanea con la mirada minuciosamente antes de relajar su expresión a aburrimiento - "Puedes decirles" - dice él y Venus da un paso en falso hacia atrás con duda? Miedo? no. No importa, sacude la cabeza dispuesto a salir de aquí.

No sin antes ser detenido por la fría voz que no encaja en lo absoluto con él orígen del ruido, nada más que cansancio emocional demasiado seco para ser real

- "Consigue pruebas incluso: Díselo al mundo entero si quieres... tú y yo sabemos que nadie te creerá" -

- "Tu no sabés eso" - réplica Venus con valentía fingida y la postura rígida.

- "No, supongo que no, pero que pensarán los demás; aquí yo soy el bueno intentando ser tu amigo y tú el loco paranoico tratando de inculparme, entonces te preguntó ¿Realmente quieres probar suerte? Averiguar a quién le creerán más?" -

- "..." - A Venus se le hiela la sangre.

Una sonrisa triunfante se asoma por las comisuras de sus labios del contrario
- "Pero no me hagas caso, vamos, diles... siempre es divertido verte intentar" -

Y ese es el secreto, ¿no?
Tierra es verdaderamente el chico más desagradable que haya tenido el desinfortunio de existir.
Tan malvado como puede ser en la oscuridad y pretender por el día.

Pero aún así, estúpidamente Venus encuentra un abrumador consuelo en los afilados ojos dorados del peliazul que se tornan rojizos en las noches más oscuras y que parecía desvanecerse en cuestión de segundos, como si no pertenecieran a ese lugar o nunca hubieran estado allí para empezar.

Extraño.

Venus siempre pensó que estaba siendo demasiado paranoico con el tema pero, en el fondo creía genuinamente que una vez que descubriera que tenía razón (eso independientemente de que de hecho pudiera no tenerla) se sentirá más feliz.

No lo hizo. Sí, Tierra era un mentiroso manipulador ¿pero ahora qué?
Sus amenazas pasivo agresivas tenían algo de verdad si no es que toda, porque el peliazul podría ser un asesino o hasta el peor criminal en lo que a él respecta pero eso no significaba que algo cambiaría, las cosas seguían su orden natural incluso entonces: Tierra era un santo y Venus una clase de antagonista celoso del protagonista.

Sin más ni menos.

Saberlo realmente no cambiaba nada y el flujo de los siguientes días se lo demostró.
Tierra siguió actuando igual que siempre luciendo su bonita sonrisa, sin preocupaciones, indiferente a la propia angustia de Venus que poco a poco consumía su mente hasta dejarlo sin nada.
¿Cómo lo delataría a este paso? Pero incluso cuando lo hiciera, ¿Obtendría un cambio? ¿Él sería diferente? ¿Se sentiría mejor?

No.

Venus no hacia esto por ser un buen samaritano o una buena persona, Venus solo necesitaba la certeza de saber que no era el único podrido que caminaba sobre el mundo como un hombre común, ¿Lo hacía eso una mala persona? Probablemente. Egoísta, por no querer estar solo en el gran agujero que había cavado para si mismo.

Igual que él.

Pero nada de eso afecto a Tierra, nada lo alteró: él solo siguió feliz y campante de la vida, el dios entre humanos bendecido.
Ni siquiera su presencia lo perturbo, así que esperó, nada dura para siempre. ¿Lo decía ese viejo refrán no? El pez por su boca muere.

Pero el peliazul no era un pez, definitivamente no era aún tonto y obviamente no tenía nada entre manos.
Lo que existía entra la oscuridad, los agudos ojos de alguien fervientemente cruel y las ascuas de la profunda ansiedad que producía, nunca salió a la luz pareciendo conocer su lugar.
¿Era Tierra realmente un actor tan maravilloso? [En este punto no le sorprendería y estaba más inclinado a sermonearse por tener ese pensamiento siquiera porque desde luego, se trataba del niño dorado]

Día tras días la presión aumentó y sus manos ansiosas por algo, cualquier cosa se volvieron prácticamente inservibles; vibrando por entender algo que no le correspondía.

Pero, Tierra nunca hizo nada.

Pero Venus estaba trastornado.
¿no era ridículo? que aquel que era horrible pudiera conciliar el sueño tan fácilmente como si simplemente lo mereciera.

Para colmo, la semana termino más pronto que tarde.
Necesitaba una respuesta, y si la única fuente para ello existía entre cuatro paredes de civilizada hipocresía mañanera entonces que así fuera.

Estaba hambriento de más, hambriento de saber.
Se preguntó, si acaso se atragantaria una vez que obtuviera una respuesta.

- - - - -

Venus descubrió que era difícil atragantarse cuando en primer lugar no se tenía una respuesta o siquiera un apice de ella.

Encontrar a Tierra era fácil, porqué él estaría en el lugar que quisieras que estuviera [la revolución estudiantil de aquellos inferiores a cursos mayores en su contra también lo había sido, el peliazul no hacia las cosas por hacerlas y molestar a Titán también habia sido un acto deliberado de atraer mas atención, tenía la ligera sensación de qué cuando todo se salió de control el peliazul reformuló su plan de modo que saliera impune como un héroe renovado, ¿Y tenía sentido, no? Ser como un fénix: morir y renacer como una nueva versión 100% mejorada, una que todos pudieran amar.]
El peliazul era verdaderamente un espectáculo de enredijos y enigmas sin resolver, por lo tanto lo único realmente complicado de hacer era obtener una respuesta clara del mayor sin terminar el doble de confundido de lo que estabas al principio.

- "Tierra" - ahí en la cocina (tal como la noche anterior a esa hace ya una semana) se encontraba imperturbable el causante de su angustia.

Solo que... Algo era ligeramente diferente.

Él no respondió.
Tampoco lo hizo cuando pasaron 2 minutos o 10, tampoco cuando se convirtieron en 29 minutos.
Se sentía estúpido parado ahí en una conversación aparentemente unilateral, desperdiciando minutos valiosos de sueño (minutos que él no tomaría en realidad) suspiró y resignado se dió la vuelta

Entonces el reloj hizo click;
- "Pensaba que eras inteligente" -

- "¿Q-qué?" - Venus realmente no sabe de dónde salió ese insesante tartamudeo, no tenía problemas en la lengua y no comenzaría ahora, lástima que esa decisión no dependiera de él.

- "Oh, tu sabés. Tú y tu necesidad de ser superiormente moral" - la voz gélida no contrastaba bien con el tono seco de desinterés, ¿Estaba realmente aburrido de su comportamiento predecible?

- "y-yo no" -

- "¿No es por eso que viniste a buscarme?" - Tierra finalmente le miró de reojo y aquellos ojos resplandecientes e incandescentes como el mismísimo sol se posaron en él una vez más 'un dios entre humano' pensó. Nadie que fuera normal tendría ojos así - "Estás aquí porqué quieres respuestas, ¿No?" - la postura del peliazul no flaqueó, no tembló con irá ni con miedo, tal vez porque no lo sentía.
En cambio Venus sí. Retrocedió, no importó que Tierra ni siquiera haya dado un paso a su dirección, el impetuoso deseo de poner una distancia segura entre ambos era una necesidad precaria de sobrevivir ahora mismo, aún si esto no era una cacería, aún si Tierra no era un depredador (porque si, ciertamente así se sentía él).

Y es que, a menudo solía creer que era mejor, que lo sabia mejor: Venus sabía como leer a una persona.
Sabía del lenguaje corporal y ese era simplemente el mejor método para saber que es lo que pensaba el otro incluso antes de que decidieran actuar.

Para él, las personas eran libros abiertos, libros que podía leer con una facilidad ridícula. Excepto él. Una vez más, excepto él.

Las emociones en cambio eran un tema difícil.
Aquí mismo, Tierra le había demostrado una vez más quién tenía la ventaja.

Su lenguaje corporal no decía nada, y le lastimaba más el orgullo saber que quizás en realidad nunca lo había hecho.
No importa cuántas veces en el pasado el peliazul haya chocado hombros con los suyos en un intento de ser amigable con él.
No importa cuántas veces Tierra le regalará una sonrisa que se veía genuina.

Porque no lo era.

Con vergüenza tenía que admitir que no tenía idea de como identificar dónde comenzaba la verdad y en qué parte la línea se desdibujada hasta crear mentiras.

Venus soltó un sonido ahogado de desesperación incapaz de sostener la mirada del contrario ni por un breve instante más.
Está situación estaba consumiendo su cabeza en un mar de dudas abrumadoras (y lo peor de todo es que no tenía ni una sola respuesta todavía).

Eso [aparentemente] fue un error porqué entonces su tiempo se acabó.
Y Tierra resopló perdiendo ligeramente un rasgo de humor reemplazado por una mueca de fastidio apenas
disimulada: - "¿Sin palabras Venus?" -

- "..." - esto se sentía como una prueba, una en la que estaba fallado estrepitosamente y si era así (si realmente era un prueba) ¿Que significaba eso para Venus? ¿Para que estaba siendo probado? Y más importante ¿Qué se suponía que hiciera ahora...?

Los ojos del peliazul se entrecerraron y sus labios se contorsionaron con ira fría, una vez más los afilados ojos del mayor estaban ahí: motas rojizas y matices acre de sol poniente como el ocaso. - "Ya veo, debes estar cansado ¿gustas un té?" -

Por un instante un escalofrío frío le recorrió de pies a cabeza, sus estremidades rígidas gritaban "no" (más tarde aprendería la importancia de decir que no firmemente esta parte de la prueba) pero por ahora Venus, conocido más por ser terco antes que racional, asintió.

Fiel a su palabra, el té le fue servido en una elegante taza de porcelana que nunca antes había visto (asumía que se debía a su falta de atención en detalles como estos) y el dulce aroma de lavanda y valeriana se mezcló con la miel y el sonido del agua hirviendo en una tetera llena de abolladuras por sus años de uso consecutivos: y de repente era increíblemente difícil mantener los ojos abiertos porque sus párpados pesaban demasiado y luchar contra ello se volvía cada vez más cansino hasta el punto de no querer y ya.

- "Buenas noches Venus" - una voz sutil y distante, susurró.

¿quién era? ¿a qué rostro pertenecía ese sonido? el peli naranja lo tenía justo en la punta de la lengua solo incapaz de acertar por los confusos fragmentos de una mente inducida por el sueño, y sin más ni menos sus pensamientos fueron cortados de raiz cuando la voz pronuncio 12 palabras agudas que recordarían para siempre desde esa noche en adelante.

- "La próxima vez, no vengas aquí si no estás dispuesto a escuchar" - Fue lo último que supo antes de sucumbir ante los brazos de Morfeo.
Luego todo era borroso y mientras nadaba en el oscuro manto de la inconsciencia, Venus cerró los ojos.

La siguiente vez que despertó lo hizo exactamente en el mismo lugar, pero el olor a flores, el dulzor del azúcar y la miel habían desaparecido.
Para su [no] sorpresa Tierra ya no estaba en ninguna esquina de la cocina ni tampoco alguna pista de que hubiese estado aquí en primer lugar.

Venus sintió el sudor deslizarse por su frente ante su brusco despertar mientras observaba la taza frente a él como un símbolo burlesco de su estupidez noctámbula.

Imperturbable c̶o̶m̶o̶ é̶l̶ enfriándose en el taburete de la barra de la cocina, como si nada malo hubiera pasado, como si el dormir durante horas hubiese congelado su frescura y calidez [no lo hizo].

El peli naranja se debatió si tomar o no el contenido durante unos segundos antes de decidir tirarlo en el lavavajillas.
Estaba demasiado frío ahora y no tenía ningún caso.

Cómo si necesitará más incentivos para sentirse peor, los traviesos rayos del sol que le recordaban demasiado a alguien más se colaron por las persianas en contra de su voluntad.

La irritación se acumuló en su pecho y sin darse cuenta la porcelana cedió bajo su agarre y un corte profundo se instaló en la palma de su mano.

La sangre manchó la encimera del lavabo pero el agua del grifo siguió corriendo por encima de ella aún.
Se sintió como una atronadora metáfora y el destino hablando.

Venus simplemente se quedó ahí, observando su sangre diluirse con el agua y los platos sucios - "¿Qué demonios?" -

Sin respuesta.

Un hecho tan pequeño como el saber que había en un simple té no debería afectarlo tanto en realidad, pero esa mañana no tenía el humor para lidiar con eso: estaba enojado, y solo había un responsable con el que podía desquitarse realmente.

Fue así que se encontró pateando la puerta de la azotea invitandose a sí mismo al lugar que sabía que el peliazul frecuentaba a la hora de almuerzo - "Tierra" -

- "Venus, ¿decidiste amablemente brindarme tu compañía?" - él no parecía la mitad de afectado por su interrupción más ocupado admirando la vista de la cancha a través de la malla de seguridad, ese hecho le molestó.

- "¿Qué fue lo de anoche?" -

- "¿Mmm?¿Qué fue que?" - el de vetas verdosas entremezcladas de marrón terroso voltea e inclina la cabeza con su típico aire inocente haciéndose el desentendido como en aquel entonces cuando frunció el ceño y dijo «ustedes deberían conocer su lugar» habría funcionado admite con pesar, de no haber experimentado la forma en que Tierra pasaba de un corderito indefenso a un lobo hambriento en un abrir y cerrar de ojos, habría funcionado.
Lo habría engañado y Venus lo habría creído totalmente ¿Eso lo hace ingenuo o tonto?

- "Sabés bien a qué me refiero" - pero él pelirrojo es tajante en su impaciencia. No necesitan darle más vueltas de las necesarias a un asunto tan rebuscado.

- "¡Oh! Te refieres a tu últimamente extraño aire de acosador?" - el mayor sonríe traviesamente enderezando su postura: arquear la espalda, los hombres ligeramente hacia atrás y mentón al frente,
Tan pulcro como siempre.

Como si eso no fuera suficiente, el universo decidió restregarle en la cara a Venus la belleza etérea de un ángel una vez más.

Las nubes grises que se estaban acumulando decidieron abrirse paso, lo que permitió que un rayo de luz del atardecer iluminara la azotea. Los rayos de luz entonces impactaron el rostro de Tierra, y las dos gemas ámbar rodaron para mirar hacia el cielo.

Bajo la luz del sol, entre el dorado de la gema y el brillo caramelo de la miel alrededor de los ojos de Tierra, Venus pudo ver varias líneas rojizas del atardecer allí.

Maldición.

Venus sintió que su rostro se calentaba, negó y apartó la vista (no se pierde el detalle del fastidio y las pequeñas motas de aburrimiento tiñendo las iris del peliazul)

Concéntrate, el tiempo se acaba, la atención de Tierra no durará para siempre - "¿Qué tenía el té?" - balbucea a medias con los nervios a flor de piel rogando que funcione y lo hace, el mayor sonríe petulante, satisfecho de que finalmente hiciera las preguntas correctas.

-"Tú sabes lo que tenía ese té"- lo hace, por desgracia, saberlo no alivia la pesadez que descansa encima de su pecho como rocas.

Venus apretó los dientes con evidente enfado escalando niveles preocupantes solo para ser detenido cuando él peliazul levanto su tono de voz una vez más - "No soy culpable de tu fragilidad" - y esas palabras actúan de inmediato en su cabeza como un ataque personal por la repuesta tan arcaica que en el fondo él ya sabía (aquel que era un dios no estaba equivocaba después de todo).

Cuando Tierra avanzó a su dirección dejó escapar un susurró apenas por encima de la bulla de los estudiantes, las plumas de las aves y las copas de los árboles revoloteado le siguió: -"Tú lo eres" - Venus se encontró apretando los puños ante eso por puro despecho y supo entonces que no tenía la fuerza para aceptar la verdad.

Él te estaba limpio y sin manipulación, era lo que era, solo un té... un incentivo para dormir elegido específicamente por Tierra dadas sus propiedades para ayudar a dormir, un incentivo que Venus habia aceptado sin mirar dos veces.

Venus de mente débil que había caído en el primer instante que le ofrecieron un dulce, había bajado la guardia y había decidido dormir en el presencia del mayor. Estúpido.

El tap de los zapatos de Tierra resonó en su mente mientras pasaba de él a su lado, recordándole el sentimiento de una presa siendo acechada por cada paso que dió y en ningún instante paró mientras se dirigía a la puerta de la azotea consumiendo su silencio en incertidumbre.

- "ah.. y Venus?" - el ceruleo no se dió la vuelta, el morocho tampoco tuvo el valor de mirar.

Aún tuvo que responder - "¿Si?" - sin importar si la sensación del miedo se asentó en lo más profundo de sus entrañas pero se negó a dejar que se notará en su rostro.
Él no cree que hiciera un buen trabajo ocultándolo si el temblor de su cuerpo lo delató de todas formas pero Tierra fue bondadoso en dejarle fingir sobre ello.

El silencio perduró poco pero se sintió eterno - "Deberías saber que no tengo problemas con deshacerme del polvo bajo mis zapatos si es necesario" - y con eso se alejo.

Y solo entonces, Venus fue capaz de respirar otra vez aspirando grandes bocanadas de aire.

Se sintió un pusilánime, tener el valor para entrar en la jaula del león solo para ridículamente terminar atrapado en ella.

Patético.

Los días siguentes fueron un destello de memorias viejas atrapadas en una lente de una cámara sin precedente, como una vieja fotografía que observas y en la que no estás: piloto automático, por así decirlo.
3 días y aún no sabía cómo interpretar la amenaza tácita de Tierra, pues claramente estaba contento con la forma en que Venus se arrancaba el cabello y perdía noches de sueño en intentar desenmascararlo.
Pero la cuestión era, que apesar de lo divertido que pudiera resultarle al peliazul no tenía reparos en descartarlo sin miramientos o dudas.

Era aterrador en cierta medida pero él no era de los que se quedaban callados cuando algo lo molestaba, mucho menos de guardarse sus pensamientos.

Entonces obviamente, Venus agudo y redundante cómo era, comenzó a introspeccionar ciertos comportamientos (por mínimos que fuesen) que pudieran delatar la fea naturaleza de Tierra en público, cualquier pequeño momento que saliera a flote cuándo nadie miraba, algo que pudiera asegurarle que no estaba loco y que en efecto, no estaba equivocado.

Tal tarea habría sido ideal para Mercurio, simplemente perfecto para desempeñar este papel, pero Mercurio no lo habría entendido al menos no de la forma en que Venus puede y quizás... En el fondo el peliazul también lo siente así, sino porque le dejaría ver su peor faceta ¿Significa entonces que confía en Venus lo suficiente para ello? Aveces cree que sí, para luego retractarse cuando se topa con aquella mirada astuta y afilado que le recuerda su lugar.
El moreno suelta una risa seca y amarga, y desde luego ¿Cómo podría él pensar que sí? cuándo no existe ninguna otra respuesta correcta a esto más que "No. Claro que no. Simplemente le gusta la satisfacción de saber que ninguno puede decir nada, son un círculo completo y también la misma cara de la moneda."

Venus lo detesta por eso.

En si no había mucha diferencia, los almuerzos aún se trataban de comer en la misma cafetería de siempre con Marte y Tierra (Mercurio también vendría aveces) Las charlas con Tierra seguían siendo divertidas como si no hubiera nada fuera de lo normal.
Y en general: el mundo seguía girando, estuviera de acuerdo o no, incluso si Venus seguía aquí estancado en el fango de sus dudas.

El peliazul era una mariposa social, agradable, agraciado y sutil.
Para Venus en cambio, eso era una mentira.
La complejidad de Tierra, su mente y su actuar eran erráticos, interesante.
¿Hasta dónde puede mantenerse una mentira? ¿Hasta donde puede un copero aguantar antes de derramarse? Cuando un vaso se llena demasiado que no le queda otra opción que desbordarse? Y...¿Que le pasará a Tierra cuándo llegué ese momento?

Suspiró.

Datos extra:

❏ Este es DISGUSTING quién tuvo un voto más que los demás (apenas)

❏ Quería que esto solo tuviera un capitulo pero ya es demasiado texto y no quiero que por errores de Wattpad se sobrecargue y no lo guardé, así que ahora son dos partes sorry no sorry.

❏ Hay algunas aluciones biblicas/religiosas en la forma en que Venus percibe a Tierra como ya habrás notado.

❏ La escena del té en si, es una metáfora de la confianza y la psicología inversa.

❏ En un principio realmente no había tenido la intención de alargar esto, pues la idea central de esto era simple: «Tierra nunca podrá dejar de ser un idiota desagradable y Venus también, si ambos se dieran cuenta probablemente encontrarían consuelo el uno en el otro»
Eso evidente no pego conmigo, experto en el drama sobre exagerado nivel rosa de Guadalupe, así que paso de un One Shot de aproximadamente 1,000 palabras a 2 capitulos de por los menos 5,000 y tantas cifras.

❏ Vearth nunca ha sido genuinamente de mi agrado, pero tengo a alguien apuntandome la nuca con este pedido y al que realmente no podía decirle no, así que sería lindo si dejas tu voto y un bonito comentario. Tu sabés. Por mi esfuerzo (｡⁠•⁠ ⁠ᵕ⁠ ⁠•⁠｡)

❏ Tierra puede sentirse muy occ o fuera de canon y lo lamento mucho en verdad, pero sentí que ese aspecto «juguetón con una vena manipuladora pasiva agresiva» le sentaba bien.

❏ Siguiendo el punto anterior Tierra pasa de amigable a "amenazante" e insensible con una facilidad asombrosa debido a que así es el comportamiento de un manipulador en general (en la serie ese detalle no se trata tan bien como debería pero eso porque es una serie animada de caricaturas y no pueden profundizar con tanta seriedad el asunto, se entiende ¿No?)

❏ Esto puede etiquetarse como #relación tóxica si quieres, ya que Venus podría estar desarrollando una enfermiza dependencia insana a partir de los errores de Tierra al mismo tiempo que lo enaltece como un dios, en fin, cosas de todos lo días.

❏ Me gusta mucho caracterizar a Venus con un complejo de superioridad que le dice: "Eres el jefe" y el complejo de inferioridad que le recuerda "Pero apestas totalmente" lo que confunde a Venus siempre y en lugar de acomodar sus ideas dice: «al diablo, voy a enojarme con todos porque no sé canalizar mis emociones»

❏ La revolución lunar en este Au se adapta a una revolución estudiantil de grados menores exigiendo derechos porque es lo mejor que se me ocurrió.

❏ Si alguien tiene dudas sobre mis otras historias, guardenselas porque no voy a responder nada. Los tkm 💗 jsjsjs
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¡Vale, pues gracias por leer! Sería increíble que dejes tu voto y compartieras tu opinión conmigo sin más que decir nos leemos en la segunda parte.