Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

004.

capítulo cuatro.
i'm hope mikaelson.





Scott McCall levantó su la pequeña botella de cerveza con una espléndida sonrisa, acompañando en el brindis que su manada había propuesto luego de comenzar la pequeña reunión luego de algunos meses sin verse. Todos se encontraban allí, o al menos casi todos, pero de igual forma, ninguno podía borrar la sonrisa de su rostro al haber vuelto a sus raíces.

Beacon Hills estaba tranquilo, Scott siguió con su vida como los demás, junto a Malia, quien le había traído suma felicidad a su vida, pero aún así, el pequeño hueco en su pecho seguía estando.

Yendo a la universidad y continuando siendo alfa de la manada, con Liam cuidando a su amado pueblo junto a su amigo Masón, Corey y Theo. Jordan Parrish también participaba de la guardia, al igual que el padre de Stiles, Chris Argent y su mamá estaban felices juntos, protegiendo al pueblo y sus integrantes sobrenaturales.

Lydia Martín se posó a un lado de Scott con una sonrisa en su rostro, también observando como la manada hablaba entre sí en pequeños subgrupos pero a la vez todos entre todos.

—Es bueno estar de vuelta— acotó la pelirroja viendo como reían.

—Necesitábamos esto— añadió Scott asintiendo mientras bebía de la cerveza.

Stiles Stilinski dejo de prestar atención a la conversación con Liam y Malia, al ver el nombre en la pantalla, dejando su cerveza de lado contestó antes de que el celular deje de sonar.

—¿Hola?— habló lo suficiente alto debido a la música.

Hope Mikaelson leía nuevamente las indicaciones de Hayley, caminaba de un lado a otro por la habitación con el papel en la mano mientras seguía asintiendo, repasando nuevamente.

—Stiles— la voz quebrada y temblaste de Hope lo hizo fruncir el ceño haciendo que se levante para alejarse un poco del ruido, pero Liam y Malia dejaron de hablar al ver como se alejaba.

—¿Hola?— repitió Stiles parando su caminata.

—¿Stiles?— volvió a decir Hope con voz temerosa. —Stiles, algo malo le pasó a mamá— confesó la muchacha tratando de aguantar las lágrimas al decirlo en alta.

El mundo de Stiles se paró bruscamente al escuchar eso, frunció su ceño y rápidamente miró a sus amigos. —Esperen, bajen la música. Cállense— habló fuertemente llamando la atención, haciendo que Theo apague la música con su ceño fruncido al igual que los demás. —¿Hola? ¿Que sucede? ¿Estas bien? ¿Que ocurre?

Hayley siempre había insistido en que Stiles no podía decir el nombre de su hija en voz alta si estaba con alguien más fuera del círculo interno Mikaelson, siempre había sido así de quisquillosa cuando se trataba de la protección de su hija; aunque no era el solo, Lydia tampoco podía decirlo y Parrish tampoco.

—Tío Stiles, necesito hablar con Scott— pidió Hope cada vez con sus nervios rebalsando.

La banshee se acercó a su novio mirándolo expectante. —¿Todo está bien?

—Mama esta desaparecida, Stiles, necesito hablar con Scott— demandó la menor a través de la llamada telefónica, haciendo que Stiles clave la mirada en el alfa.

El muchacho apretó sus labios mientras se acercaba al alfa y le tendía el celular con su mano temblorosa, algo que no pasó desapercibido por su mejor amigo. Los ojos de Stiles tenían pequeñas lágrimas de angustia y sus ojos demostraban nervios, por mas que había escuchado la conversación, no tenía ni idea de quién se trataba.

Scott McCall tomó el celular lentamente para colocarlo en su oído, toda la manada tenía la mirada fija en el esperando respuestas.

—¿Hola?

Hope apretó sus labios al reconocer la voz de Scott, se la notaba un poco más gruesa desde la última vez que lo había escuchado, habían pasado algunos años desde que se conocieron y le parecía una locura lo que su madre había hecho para ponerla a salvo; sinceramente, no la juzgaba, pero Hope confiaba plenamente en Scott McCall y toda su manada.

Hope tomó la hoja leyendo al mismo tiempo que hablaba. —Scott. Soy Hope Mikaelson, la hija de Hayley Hale. Y necesito tu ayuda.

Todos observaron como el alfa se quedaba quieto en su lugar, sin respirar al escuchar esas palabras. Se sentía perdido, como si estuviera entrando a una nueva realidad la cual ya conocía en el fondo de su cabeza, pero que a la vez estaba ausente siendo desaparecida por la misma muchacha que Hope Mikaelson había nombrado.

Los flashes de una muchacha de ojos verdes, sonrisa de conejo, tanto mal educada como mal hablada, su cabello castaño y la macha de nacimiento de su hombro; eran presentes en la mente de Scott.

Cayó de rodillas rendido, siendo mucho para su propio cuerpo al haber recibido tanta información y recuerdos de golpe, siendo el último, el más reciente de todos, pasando en cámara lenta como si fuera una eternidad.

Olvidarás todo lo que tenga que ver con Hayley Hale y el nombre Mikaelson— mustio Hayley observando con dolor como las pupilas del moreno se dilataban.  —Pero aún así... El día en que escuches por parte de mi hija: 'Soy Hope Mikaelson, la hija de Hayley Hale. Y necesito tu ayuda' va a ser el momento en que recuerdes todo. Va a ser el momento en que los recuerdos vuelvan a ti— Hayley apretó sus labios. —Se que serás capaz de reconocer su voz en cualquier lado, confío en ello. Repítelo.

—Recordare todo cuando escuche 'Soy Hope Mikaelson, la hija de Hayley Hale. Y necesito tu ayuda'— Hayley dejo salir un sollozo al escuchar como Scott hablaba automáticamente.

—Mi hija necesitará ayuda, y se que tú harías lo que sea por ella y por mi... Estoy segura que pondrías las manos en el fuego si es necesario— la muchacha acaricio la mejilla del moreno, quien no emitía sonido más que su respiración. —Todos los de la manada estarán hipnotizados también, así q como tu lo estarás— Hayley trago duro. —Tendrás que decirles 'Hope necesita nuestra ayuda' pero tiene que venir de ti y solo de ti, de nadie mas. ¿Entiendes?

Scott asintio con su mirada perdida mientras que sus ojos se dilataban al mismo tiempo.

—...lo recordarás todo— termino de hablar Hayley entre lágrimas. —Te amo, Scott. Por y para siempre.

Los oídos del alfa estaban punados, no escuchaba absolutamente nada más que las últimas palabras del recuerdo que tenía de Hayley en su cabeza.

Por y para siempre.

Los ojos de Scott se llenaron levemente de lágrimas al ser golpeado por la realidad, sentía como su manada trataba de estabilizarlo y de socorrerlo pero el solo estaba, permanecía allí de rodillas, con su mirada perdida; el teléfono aún en llamada con Hope Mikaelson, quien escuchaba absolutamente todo lo que ocurría en esa reunión que se suponía que era para festejar.

Un nuevo peligro acechaba y esta vez, no era en Beacon Hills ni sus habitantes. Era en Nueva Orleans, y era por Hayley Hale.

Scott se recompuso rápidamente, tomando el celular torpemente mientras se levantaba apoyándose en la mesada de mármol que había allí, toda la manada lo miró atentamente mientras que le preguntaban si estaba bien, más Malia que los demás; pero su mirada de conectó con la de Stiles y Lydia, quienes estaban apartados de todo, observando la reacción del muchacho al saber que había recuperado sus recuerdos.

—¿Hope?— soltó Scott en la línea de teléfono causando la atención de la pelirroja en Nueva Orleans.

—Scott, esta desaparecida. Mama. Esta desaparecida— repitió torpemente sin saber que decir. —Y-yo... necesito tu ayuda... mis tíos no pueden porque hubo...algo y... por favor, Scott. Ayúdame— suplico Hope con un hilo de voz haciendo que al alfa se le rompa el corazón.

Miró a su manada, quienes estaban cerca de él con su ceño fruncido, pero el prestó atención a los únicos dos que no parecían para nada sorprendidos de lo que ocurria. Stiles le preguntó con la mirada, ambos lo hicieron, causando que Scott asienta apretando sus labios.

Estaba confirmado. Hayley Hale había vuelto a sus vidas

Miró a la manada. —Estamos en camino, Hope. Todos nosotros.

Corto la llamada tirando su celular arriba del mármol, con frustración. Era mucho para asimilar pero no tenía tiempo. Hayley estaba en peligro, Hope necesitaba su ayuda, y la manada aún estaba esperando una respuesta.

—Hagan sus maletas. Nos vamos a Nueva Orleans— fue lo único que dijo antes de caminar dispuesto a irse a su hogar a empacar.

—Oye, espera. ¿Que está pasando? ¿Que hay en Nueva Orleans?— lo detuvo Malia bruscamente tomándolo del brazo y obligando a voltear.

Observo a su novia, notando el parentesco que tenía con la mujer que amaba, probablemente su inconsciente estaba buscando regresar a Hayley, y lo más cerca que tenía a ella era a su propia madre, Malia.

Scott acaricio la mejilla de la muchacha antes de dirigir la mirada hacia la manada.

—Hazlo, Scott. Dilo— incentivo Stiles haciendo que gire su cabeza hacia el.

Hope necesita nuestra ayuda.

Fue lo ultimo que escuchó Malia antes de caer de rodillas al igual que los demás de la manada, siendo atacados todos con recuerdos de la muchacha de ojos verdes con pelaje de coyote.

Stiles atajo al piso a Liam antes de que caiga al piso, Hayley le había dicho que probablemente los más afectados sean Malia y Liam, ya que ellos fueron los que pasaron más tiempo con ella. El hombre lobo sudaba mientras que repetía los diálogos inconscientemente en voz alta, poco a poco, la manada cayó al piso tratando de recuperarse ante el golpe de recuerdos que habían tenido.

—Entiendo que es horrible... pero realmente tenemos que irnos, chicos. Nos necesitan en Nueva Orleans.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro