CHAPTER 02 🏀 RUTINAS NORMALES

La luz del sol se cuela por su ventana directamente sobre su rostro. Desde hace un buen rato que su alarma no ha parado de sonar sobre su almohada e induce que han pasado por lo menos ocho minutos. El motivo es sencillo: Puede escuchar el coro de ese pegadizo tono en su celular. Si no tuviera tanta pereza por sacarse las mantas del cuerpo hubiera movido al menos un pie al ritmo.

Maldito tono espectacular. No puede existir alguien que odie escucharlo.

—Pon en silencio esa mierda antes de que ese celular termine estrellado contra la puta calle.

Vamos a omitir eso.

—Alguien se ha levantado de mal humor—el azabache se sienta sobre la cama antes de ver la espalda desnuda del moreno que suelta un resoplo. —Ahora lo apago aburrido—responde al escuchar otro: Apaga eso. La alarma es desactivada hasta otra nueva oportunidad luego de un desliz de dedo corto.

06:08 AM.

El sonido de otra alarma empieza a retumbar en el cuarto. Life Goes On de Oliver Tree ha empezado a retumbar sobre la cabeza del felino.

El menor observa como las felpudas orejas sufren espasmos por el constante sonido. Casi suelta una risita al ver al hombre pantera tomar su almohada para ponerla sobre su cabeza en un intento por omitir cualquier sonido exterior. Parece que el moreno no tiene intenciones de salir de su suave espacio de mantas.

—¿No piensas apagar eso? —Kim no responde. —Tae—silencio. Incluso la traviesa cola se mantiene quieta como peso muerto sobre su espalda llena de marcas. Un regalito de sus desesperadas manos en la noche. —Amor—le mueve vagamente los hombros. —Taee—le da un golpe de mano abierta sobre su piel. Silencio. —Kim.

—No me molestes—finalmente escucha su voz amortiguada contra las mantas revueltas a su alrededor. El humano no pierde tiempo en treparse sobre su espalda hasta sentarse con ambas piernas abiertas rodeando las caderas del chico.

El moreno ni siquiera se inmuta ante el movimiento. Al menor siempre le gustaba estar encima de su cuerpo. Si no estaba en su regazo mientras le daba besitos en el rostro—casi siempre pasaba cuando iban al comedor de la universidad o cuando les tocaba compartir clases—... entonces estaba saltando sobre su miembro mientras balbuceaba su nombre.

El humano hace una mueca divertida al escuchar el tenue ronroneo de su novio. Nunca va a admitir que ama demasiado esos sonidos tiernos que soltaba de manera inconsciente.

—Tenemos que ir a clases gato apestoso—sus manos buscan estabilidad sobre los omoplatos de la ancha espalda de su novio. El moreno no responde pero suelta otro ronroneo al sentir al menor echarse por completo sobre su cuerpo e inmediatamente empezar a acariciar su cabello. —Uff. Me vas a contagiar tu emocionante estado somnoliento—dice con sarcasmo.

—Cinco minutos—lo escucha decir. Kook rueda la vista ante el comentario. —Te llevo en la moto—vuelve a decir perezoso para tratar de convencerlo.

—Pero entras a las nueve—dice. Algo empalagoso da un besito sobre el hombro derecho del alto. —Tengo clase a las siete Tae.

—No te hagas—vuelve a responder con la voz ronca e impresionantemente grave que tiene. —Me estabas levantando para que te lleve. Uahhhh... —el bostezo lo hace suspirar por un momento.

—Cinco minutos Tae—responde para felicidad del cansado moreno. —Solo cinco minutos.

—See.

Y finalmente vuelve a caer dormido sobre la espalda tibia del alto. Puede escuchar vagamente los tenues ronroneos en el cuarto. Esos sonidos tiernos que en ocasiones le provocan cosquillas cuando son lanzados contra su cuello.

Kim se voltea sobre su sitio agarrando al menor de la cintura para mantenerlo sobre su cuerpo. El casi adormilado humano se permite hacer como si fuera un peluche suavecito para abrazar. Unos segundos luego se mueve con levedad para reposar un moflete sobre el pecho caliente del moreno.

De sus labios sale un suspiro al sentir las manos grandes acariciar la piel de su cintura con cierta lentitud por el cansancio. El alto se ha encargado de meter sus manos dentro de la enorme camiseta verde—era del alto—para tocarlo directamente.

Kook se abraza al cuerpo de su novio al sentir la pesada cola negra enroscarse en su muslo izquierdo.

Solo otros cinco minutos. Piensa antes de caer profundamente dormido.

11:48 AM

—¡Ponte unos malditos pantalones Kim! ¡Sigues en calzones!

—¡Son boxers! ¡Bo-xers! —responde irritado. En movimientos torpes toma los primeros pantalones rasgados que encuentra en su armario. —¡Por una mierda! —el antes disimulado rasgado se abre enormemente al intentar meter un pie.

Con disimulo ve a su chico echando bloqueador sobre su rostro frente al tocador. Sus cabellos oscuros siguen goteando por no secarlos luego de la apresurada ducha que se dio.

Las pupilas del alto toman cierto tono dorado ante la maravillosa vista que tiene. El menor se ha agachado con levedad frente al tocador para aplicarse su acostumbrado labial de frutillas. Sus labios son algo sensibles.

Delicioso. Su pantera no tarda en comentar.

Sin poder evitarlo su mirada desciende lentamente por su espalda hasta posarse sobre la caliente curva de ese trasero.

El pantaloncillo se amolda tan bien a su figura que hasta parece haber sido fabricado con sus medidas. Sus muslos se ven tan apretados en esa tela que no puede evitar pensar en lo apetecibles que lucen. Y su trasero se ve tan suave que- Cielos.

El azabache voltea sobre su espalda al escuchar un rugido tenue. Taehyung tiene la mirada brillando en un amarillo completamente escandaloso. Tiene las pupilas tan dilatadas que teme ver el negro apoderarse de su peculiar tono. Su cola se encuentra recta e incluso ligeramente temblorosa a espera de un siguiente movimiento.

Un suspiro grueso termina por responder sus sospechas.

—Ni lo pienses—dice. El moreno salta sobre su sitio al ser atrapado por su novio. —Mantenlo en tus pantalones Kim. Vamos cinco horas tarde—dice. El menor peina sus cabellos antes de tomar su mochila para salir del cuarto compartido.

La pantera suelta un resoplido antes de buscar otros pantalones e intentar ignorar el leve problema en sus pantalones.

—Tae.

El moreno levanta la cabeza tan veloz como un cachorrito felino al olfatear un sabroso filete de carne a pocos metros. El azabache apenas ha asomado su rostro por la puerta pero se ve tan precioso.

—Tengo libre a las tres—dice. El alto se congela sobre su sitio escuchando atento. —Te espero en el laboratorio—. Y con eso desaparece de su campo visual.

Kim traga saliva antes de acomodar el paquete en su ropa interior.

14:15 PM.

—¿Y tu novio? —el chico voltea a verla sin quitar el sorbete de sus labios. El resto del grupo suelta una risita ante la mirada aburrida del menor.

—A veces siento que te gusta mi novio Yongsun—responde.

—Tu novio es caliente—dice en un intento por molestarlo. Desde que el menor del grupo les dio la noticia del novio no han parado ni un solo momento en tratar de molestarlo.

—¿Vamos al patio? Necesitamos dialogar—le sigue la broma antes de escuchar al resto soltar unas risas escandalosas. Yoongi se mantiene imperturbable en su celular. Nadie va a interrumpir su lectura en Wattpad.

—Tranquilo chiquito—interrumpe Hoseok. —Nadie te quiere quitar a tu hombre.

—¿Acaso pueden? —los reta con la mirada. Hoseok finge ofenderse antes de responder.

—No es por asustarte Bambi—el menor rueda la vista ante el apodo. —Pero si hubiera querido—se peina los cabellos exageradamente—ese felino hubiera estado babeando por mi sabroso cuerpo.

—Sin ofender Hoseokie—se escucha una voz grave interrumpir. —Pero no eres mi tipo.

El felino se sienta a un lado del azabache antes de cargarlo con extrema facilidad para ponerlo sobre sus piernas. Le encantaba tenerlo sobre sus piernas aunque siempre intentara negarlo. El menor se ha abrazado a su cuello tan pronto la mano gruesa del moreno se ha enganchado en su muslo.

—¿Terminaste tus clases gato infeliz? —le pregunta despacito mientras los otros se meten en una nueva charla que tiene como tema principal los amores fallidos de Hoseok.

Kim esconde su cara en su cuello antes de contestar. —Tengo que presentar algo en Responsabilidad Civil¹ a las cuatro—meloso deposita besos cortos sobre el cuello del menor. —Pero no se me olvida el encuentro que me prometiste a las tres—vuelve a susurrar sobre su piel.

—No veo que me lleves al laboratorio—el felino saca la cabeza veloz de su cuello antes de ver la sonrisa arrogante del menor.

La sonrisa es devuelta con una similar de relucientes colmillos que no se esfuerza en ocultar. Pronto se ha lanzado a capturar los labios rellenitos que lo corresponden con la misma fuerza e intensidad.

—Ni se les ocurra follar frente a nosotros.

Kim le saca el dedo medio sin abandonar los labios de su novio. Y tan solo tres minutos luego... el desesperado moreno arrastra a su novio al abandonado laboratorio.

1. Responsabilidad Civil: Curso obligatorio de carrera impartido en octavo ciclo. Pertenece a la carrera de derecho.

▷ So... Tae en este fic es futuro abogado.
▷ Son 10 ciclos por carrera que se reparten en 5 años—2 ciclos para cada año—. Por lo que Tae se encuentra casi finalizando la universidad.

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