Día veintinueve del reto #Flufftober

Tema: Champagne o Cualquier Otra Bebida de su Preferencia

Neiru x Ai

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Si había algo que Ohto Ai amara más en este mundo, a parte de su madre, sus amigas y a Neiru, eran los dulces.

Cualquier alimento que contuviera la suficiente cantidad de azúcar para ser catalogado como "Dulce", llamaba de inmediato su atención.

Pasaran los años que pasaran, siempre habían algunas cosas que se mantendrían intactas. El gusto desmedido de Ai por los dulces aún estaba muy presente.

El problema es que ahora, el tipo de dulces que quería probar no era algo para tomarlo a la ligera.

Ai nunca sintió interés alguno en consumir bebidas alcohólicas, ni siquiera les prestaba atención o las miraba por más de unos pocos segundos cuando pasaban cerca de una licorería.

Pero, desde que descubrió que existían bebidas con sabores frutales, muy dulces y provechosos para su paladar, Ohto Ai vió la oportunidad perfecta de ingresar en aquel curioso mundo.

—Veamos... —Murmuró la peliazul sin despegar la mirada de la carta—. Etto, éste tal "Sawa", ¿qué es?

—Es alcohol mezclado con soda, jugo o té verde... —Murmuró su acompañante y novia, Neiru Aonuma.

Al igual que Ai, su mirada verdosa no se despegaba de la carta.

—¿Y es dulce? ¿Tiene buen sabor? ¿Es...?

—Puedes pedirlo y averiguarlo, Ai. No soy amante de los dulces, así que no te puedo ayudar.

—¿No has bebido antes, Neiru?

—Sí, pero nunca pido bebidas que contengan más azúcar de la que por obligación deban tener —pidió su orden y luego volvió a centrar su atención en su novia—. Casi todas llevan edulcorantes entre sus ingredientes principales, pero rara vez se sienten. Cuando es así, es porque ése es el objetivo: Que su dulzor pueda ser disfrutado por los amantes de los dulces... Cómo tú.

—¡Oh, pero si sabes mucho, Neiru!

—Sí, claro.

Siguieron conversando otro rato, hasta que les llevaron su orden. Comiendo un poco del Shiokara que pidieron y bebiendo un poco, Ai notó que la bebida era muy refrescante y que iba muy bien con el calamar.

Tal cómo Ai lo había sospechado, era bastante dulce. Había algo con respecto al balance de sabores entre el alcohol y el jugo. Hacían un contraste bastante interesante.

Siguió pidiendo más de aquella bebida y, aunque Neiru en algunos momentos intentó detenerla, ella simplemente no le hizo caso. Se notaba a leguas que Ai no era la bebedora más experta.

La guinda del pastel fué el Umeshu. Ya para cuando Ai lo pidió, estaba algo fuera de combate —y de control también—.

Sólo bastó una ración de éste particular vino, para que Ai cayera noqueada en su totalidad.

Aunque tuvo que requerir de la ayuda de Tanimoto para sacarla de allí, Neiru se veía algo aliviada.

Al menos, no tendrían que lidiar con ella despierta bajo los efectos del alcohol y fuera una loca o algo así. Era más fácil de llevar de ésa manera.

Agradeció también que su primera borrachera real fuera con ella.

Fin