Día dieciocho del reto #Flufftober

Tema: Abrazo

Momoe x Rika

Edad de las Protagonistas: 18 años

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—¿Dónde está Momoe? —Preguntó Rika, apenas ingresó a la habitación de Ai.

—Buenos días, Rika —saludó Neiru con ironía—. ¿Cómo estás?

—¡Buenos días, Rika! —Saludó la enérgica Ai—. ¡Creí que no vendrías! Momoe salió, ya viene.

—Hum, la esperaré entonces. —Y tomó asiento junto a sus amigas como si nada. Un rato después, entró al juego de cartas.

Unos minutos después, la causa de que la ex Idol estuviera en casa de la peliazul ése día, entró a la habitación. Momoe no había dado ni dos pasos dentro, cuando algo pequeño y rubio se le trepó encima. Envolviéndola con sus brazos, Rika le dió un abrazo mientras era casi cargada por la pelirroja.

Sorprendida y sonrojada por su actitud, Momoe correspondió al gesto. Dejando el juego de cartas a un lado, sus dos amigas ahora se dedicaban a observarlas.

—¿Rika? —Murmuró la más alta del grupo.

—Sí quiero —fue la respuesta de la más baja.

—¿Eh?

—Que sí quiero —se separó un poco para mirarla a los ojos, esos curiosos ojos esmeralda que tanto le encantaban—. Ésa es mi respuesta a lo que me preguntaste ayer...

—¿En serio? —Momoe tenía cara de que no se lo creía aún —. Pero yo creí que no querías y que no tenía que haberlo hecho...

—¡Para nada! —interrumpió—. En realidad, si me gustas. Lo que pasa es que aún tenía dudas y...

—Disculpen... —Intervino Neiru—. Si quieren privacidad, podemos irnos...

—¡No hace falta! —Aclaró la ex idol—. Ésto no es algo secreto. De todas formas, tenía que contarles.

—¿Les decimos? —inquirió Momoe.

—¡Claro! —Rika se bajó de encima de la la pelirroja y se dirigió a sus otras dos amigas—. Ayer Momoe se me declaró, pero fue algo tan repentino que no pude responder al momento. Así que le pedí tiempo para pensarlo. Ésa también fue la razón por la que no podía o no quería venir a la reunión de hoy...

—Pero, cómo pueden ver —continuó Momoe—. Al final si vino a la reunión de hoy y además aceptó mis sentimientos.

—Jeje, por supuesto. —y luego de ésto, ambas con sonrisas plasmadas en sus rostros, volvieron a darse un abrazo, ignorando por completo la mirada de ternura en el rostro de Ai y la de fría aprobación en el rostro de la morena...

Fin