Tax:

-Me voy-- le dije con entusiasmo a Logan. No puedo creerlo, luego de tanto tiempo y siglo tras siglos preocupando por lo que hace o no hace Logan al fin tengo un descanso.

-¡No, tú no te vas a ningún lado!¡¿De qué me estás hablando?! Eres mi lobo interno!- rugió haciéndome reír.

Él no lo dice pero yo sé que me quiere.

-Volveré, tranquilo que es por día nada más y para tí serán minutos.- le prometí
-Cuida bien de nuestra lobita y mantente cerca de los guardias- me despedí lanzándole un beso el cual escuchó y me dejé llevar lejos de mi humano.

Mi madre, la diosa luna me llamaba, ya era el momento, la misión más importante de mi vida y la de Tiara se iba a llevar a cabo durante las próximas veinticuatro horas e íbamos a pasar tiempo juntos.

Al llegar mis tantísimos hermanos me empujaron e hicieron rodar.

-¡Volví!- repartí lamidas por aquí y allá -¿Dónde está mamá?¿Dónde está mamá?- la busqué entre ellos pero no la encontré y una boca me jaló de la oreja y comenzó a arrastrarme -Hola mi amor- le metí un lametazo y me gruñó -¿No quieres darme un besito?- se giró y le di un lametazo cuando menos se lo esperó.

-¡Tax!- me empujó haciéndome reír y suspirar por partes iguales, se ve tan linda con su larga cola blanca y su pelaje brillante.

-Te amo- ronroneé cerca de su ozico y corrí por el inmenso bosque de nieve y flores hasta que llegué donde mamá.

-¡Tax!¡Tiara!- la alegría en sus ojos la hizo llorar lágrimas doradas que al caer sobre la nieve hicieron que una nueva flor naciera.

-¡Aquí está tu hijo favorito!- chillé y salté sobre ella. Mi madre es muy estricta, pero como soy su favorito siempre a sido buena.

-Lo siento mi diosa- Tiara me jaló de la cola y me gruñó para que me quedase quieto.

-Hola Tiara- mi mamá se agachó y la abrazó, Tiara con timidez le lamió la mano y ella nos invitó a recostarnos sobre la espesa nieve. -Ya sé por qué vinieron y todo está listo- sacudió su mano en el aire y dos lobos dorados trajeron una fuente sujetándola por las manijas con sus bocas.

-Estupendo- lamí a Tiara para que se relajara y le besé el ozico recibiendo un empujón de su parte.

-Tax tu mamá...- comenzó a gruñirme, pero se calló al ver los frasquitos que otros lobos dorados traían.

-Shh, yo ya no estoy- mi madre desapareció al igual que todos los lobos, las floceres también se fueron y sólo quedó la fría nieve bajo nuestras patas.

-¿Lista?- le pregunté a mi loba, siempre está enojada pero nunca nerviosa.

-No- admitió y me le subí encima. -¡Bájate Tax!- se rió.

-No, tu dime cómo quieres al cachorro y yo lo hago para ti- jalé de su oreja para hacerla reaccionar y le señalé con mi pata los frasquitos.

-Como tú- susurró bajito

¿Cómo? ¿Me lavé bien las orejas? ¿Escuché bien? ¿Mi compañera quiere que nuestro primer cachorro sea como yo?

-Tiarita no me hagas ilusionar, mi corazón es débil respecto a ti- le susurré viendo hacia abajo, a ella.

-Quiero un cachorro como tú- repitió y me reí, me bajé y comencé a tomar los frascos con la boca.

-Cariñoso- susurré, levanté el frasquito y metí el contenido en la enorme fuente de cristal.
-Dulce- susurré pensando en ella y también vertí el contenido en la fuente -Terco- me reí y ella se recostó sobre mí.

-Te olvidas de inquieto- lamió mis patas y suspiró -Te extraño

-Espera- vertí inquieto y busqué por todos lados el te extraño -Ese no está- le dije viéndola y ella se rió.

-Te extraño- juntó nuestros ozicos y cerró sus ojos.

-Siempre estamos juntos- me reí y recosté por unos segundos mi cabeza en su pequeña cabeza.

-Sí, aún así siempre te
extraño- comenzó a ronronearme -Aunque seas un pesado, molesto, inocente y revoltoso lobo, te amo Tax- cerró sus ojos y yo también lo hice.

Estamos creando a nuestro cachorro, pero podemos tomarnos un tiempo para el amor.

-Te amo Tiarita de orejas grandes y cola hermosa que me vuelve loco.

-Te amo Tax- se rio y me acarició con su cabeza
-¿Seguimos?-preguntó algo cansada y asentí con la cabeza, me levanté de encima suyo y continué tomando los frasquitos que forman a nuestro cachorro.

Hermoso, serio, furioso si se enoja y:

-Un poco de altura pues Genna es chiquita y no puede tener una jirafa llamada Logan
junior- me burlé aprovechando que no está y tomé el frasco de la altura.

-¡TAX NO!- Tiara me hizo asustar y vertí el frasco incorrecto.

-Yo...yo- miré con miedo la etiqueta del frasco y retrocedí
-Tiara, lo siento...

-Débil- susurró dolida.

-Debe haber una forma de corregirlo- comencé a aullar llamando a la diosa, pero no apareció.

-Intenta con el de fuerza- caminó con desespero a mi alrededor mientras lloraba.

Con sumo cuidado tomé el frasco y a medida que me iba acercando a la fuente el polvo mágico de la fuerza iba desapareciendo, lo poco que quedó lo vertí esperando que sea suficiente para que esté bien.

-Estará bien- le prometí y me acerqué con cuidado.

-Va a sufrir- lloró dejándose caer en la nieve.

-No lo hará- le prometí
-Estará bien, cuando encuentre a su mate su fuerza estará bien- le prometí y ella tomó el medidor de edades para la llegada de su pareja.

-Temprano- se lamentó y yo alcé con cuidado el frasco de mates. -Dieciséis- me indicó y llené el medidor hasta esa edad, ella lo vertió y se volvió a echar, luego de eso ya no me miró y no gruñó en cada lamida que le robé

-Feliz- continué creándolo con sumo cuidado -Inteligente- miré a mi loba -Perfecto- susurré y por lo bajo agregué "Como tú".

Travieso, hermoso, valiente.

-Fertil- me susurró acercándose -Alfa- me pasó los frascos y dudé en ese último.

-¿Estás segura? Los alfas tienen muchas
responsabilidades- le dije a su vez recordando lo presionados que nos sentíamos Logan y yo al comienzo.

-Sí- murmuró aún dolida.

-Estará bien- le prometí.

-Híbrido- continuó dejando ir mis palabras.

-¿Sangre o carne?- le pregunté.

-No sé- se asustó y volvió a llorar -La sangre lo podría hacer más débil si es más lobo que vampiro pero la carne no lo podría llenar- temblamos de solo pensarlo y vertimos ambos frascos.

-Que la diosa elija- dijimos al mismo tiempo y continuamos.

-Suertudo, rebelde, amistoso, tímido- agregué hasta que solo quedaron dos frascos pues mientras íbamos agregando otros iban desapareciendo.

-¿Hembra o macho?- le pregunté y me sonrió.

-Dije un Taxito pero va a necesitar ser como yo si quiere sobrevivir hasta que encuentre a su mate- me sonrió y juntos vertimos en último frasco.

-Tendremos un cachorro- dijimos al mismo tiempo muy emocionados pues nunca imaginamos que luego de tanto tiempo nos íbamos a encontrar o siquiera a unir

-Te amo Tiara- junté nuestros ozicos y cuando volví a abrir los ojos estaba devuelta con Logan que dormía abrazado a Genna.