🐺Capítulo 3|Hambre
CAPÍTULO 3= Hambre
Genna=
Corrí lejos de ese lobo, mamá no había llegado a enseñarme lo que era el cariño o un abrazo pero si lo que es querer mucho algo
Ella decía que los lobos son capaces de matar cuando quieren algo pero que también darían todo por esa misma cosa o persona. El lobo grande me dijo que me quiere entonces significa que es capaz de matarme pero también darme todo y yo no quiero nada de él, solo quiero ir a casa y encontrar a Lion y a Loan.
¡Deja de correr!- alguien gritó en mi cabeza y me detuve, mi corazoncito golpeaba mi pecho con fuerza y mi loba aullaba como la vez que nos caímos al agua y las sanguijuelas nos habían atrapado la pierna.
No corras- Tiara sonaba muy animada, la imagino moviendo la cola y dando saltitos como cuando éramos cachorras y Lion y Loan nos hacían jugar y yo les mordía las colas porque me hacían trampa.
¡Deja de correr!- volvió a gritar esa voz que no es de Tiara y miré hacia todos lados. El gran lobo se apareció como a un mago con sus trucos de magia y me aplastó con su enorme cuerpo al saltar sobre mí.
Volví a ser humana y le mostré la carita que Lion me enseñó a hacer por si había alguien malo que me querría llevar.
El lobo olfateó mi cuello y lamió mi cara, empecé a reír a causa de sus cosquillas y acaricié su gran pelaje.
-¿Eres el chico?- le piqué el ojo y me gruñó, bajé la mano asustada y lo miré, giró su cabeza hacia un lado y yo hice lo mismo, la giró para mirar al otro y yo también lo hice. -Ey! Te hablé!- le piqué el otro ojo y volvió a gruñirme.
Me llamo Logan, por favor no me piques el ojo tienes las uñas largas y sucias- le dio un lengüetazo a mi mejilla y miró hacia todos lados parando sus enormes orejas peludas y escuchando el sonido del bosque, a los pajaritos cantando y al sonido del agua de la laguna que siempre hace que me duerma.
Le piqué el ojo de hoy y me reí, levanté mis manos y las moví frente a esos ojos amarillos que me miran perdidos en algún lugar de mi rostro que si yo también quisiera ver tendría que ponerme bizca o ver a través de un cristal.
-Tengo frío Logan...-Mi panza rugió y el se agachó y posó su enorme oreja peluda en mi panza, mi estómago volvió a sonar y él ronroneó.
También tienes hambre lobita, vamos a comer- se quitó y ya no había ningún peligro de que se me cayera arriba y me aplastará con su enorme tamaño.
Se agachó un poco y acerqué mi dedo a su ojos solo para ver si se enojaba.
Creo que quiere que subas-me dijo Tiara, hice puchero y meneé la cabeza.
No- le dije a mi loba y le piqué el ojo al lobo.
Lobita sube- me dijo el chico y sacudió su cabezota, me empujó la mano lejos de su ojos y metió mi dedo en su boca. -Sube o te muerdo- de mala gana me subí en su lomo y él corrió devuelta hacia su cueva también llamada "casa".
En el camino me divertí mucho jalándole las orejas y picándole el lomo para que se apresure. Sus patas grandes se enterraban en la tierra y el polvo se levantaba, era como ver la niebla cuando es de noche y el bosque está en silencio.
Jalé de su pelaje e hice una mueca cuando nada sucedió, siempre quise ver a un lobo pelado y este lobo tiene mucho pelo como yo pero yo no quiero ser pelada porque hace frío y él adulto así que le crecerá rápido.
Entramos a su casa y me bajó en los cojines negros, los toqué y abracé las almohadas blancas que eran más suaves y calentitas.
Espera aquí,iré a cambiarme y enseguida te cocino- le piqué una última vez el ojo, él gruñó y me quedé sentada pensando en la manera de pelar al lobo sin que se enoje.
Logan=
Bajé de dos en dos las escaleras. Mi pequeña loba estaba a unos metros pero la distancia se sentía y eso no me gustaba. En tan solo unas horas la casa estaba impregnada de su delicioso aroma, me pregunto si la fragancia es por el bosque, deseo que no sea así, no quiero dejar de sentir esa satisfacción que siento cuando la huelo así que mejor la hago caminar por toda la casa las veces que sea necesario para que su perfume siga aquí.
-¿Dónde estas?- la casa estaba muy en silencio y si algo aprendí de mi hermana es que cuando eso pasa es porque algo malo sucedió con los niños.
La busqué por toda la planta baja y al no sentir su aroma salí a patio donde muchos gritos se escucharon incluyendo los de mi mate y su llanto.
Corrí con el corazón en la mano del miedo que tenía a que le pasara algo y la encontré en medio de una enorme multitud, ella se aferró a mi cuerpo cuando me vio y siguió llorando hasta que la cargué y la llevé devuelta a la casa. La bajé en el sillón para que sus pies no se congelen y al verla desnuda y pensar que otros la habían visto también, la furia tomó el control de mi lobo.
-¡¡No te dije que te quedes aquí!!- le grité enojado. Nunca estuvo en mis planes gritarle ni tratarla mal pero esto me supera.
-¡No me gusta que los demas te vean desnuda y aprecien lo que es mío! ¡Así solo logras ponerme celoso y es peligroso para tí que yo esté así!- le dije cabreado conmigo mismo por no haberle dado ropa y con ella por huir por cuarta vez de mí y por meterse en problemas.
Ella bajó la mirada hacia sus piecitos, sus pequeños labios le temblaban, me miró y volvió a bajar la cabeza, se hizo bolita en el sillón y sollozó como la cachorra que es.
¡Te pasaste!- me dijo mi lobo enojado
-Alfa- Alec entró detrás de mí y bajó la mirada evitando hacer contacto con mi hermosa lobita.
-¡¡¿Que mierda quisieron hacerle?!!¡Desde cuando esta manada se comporta así!¡Es una niña! -lo reté. Él como mi beta debía cuidar a su luna.
-Solo le quisieron dar ropa hermano- me explicó Alec y me acerqué a mi lobita para pedirle disculpas.
-Basta no llores- limpié sus lagrimones -Lo siento-ella lloró peor con mi cercanía. -Por favor lo siento,deja de llorar, dejaré que me piques el ojo.
Destapé sus ojos y la abracé, ella se quedó quieta sin hacer nada, con las manitos enroyadas en mi cuello y la escuché olfatearme.
La dejé que me abrazara por unos minutos más para que me reconozca y su loba sepa que su lugar es al lado mío.
-Vamos, creo que tengo algo de ropa para ti.- La llevé a la antigua habitación de mi hermana dónde sabía que ella se había olvidado ropita de cuando era chica y le dí un vestido que a mi loba le quedó algo grande pero que era de niña y servía para ocultar todo.
-¿Me diras cual es tu nombre?- me senté frente a ella en la cama.
-Soy Genna Wolfblood, mamá dijo que nuestro apellido está bien porque habla de los lobos y la sangre de los vam...- cubrió su boca y abrió muchísimo los ojos, su cara se puso pálida y me miró como si buscara algún indicio de querer torturarla por ser una híbrida.
-Yo soy Logan Strike, el alfa- estire mi mano y ella la miró con desprecio y la me la golpeó para que la quitara.
-No te besaré la mano.
Me guardé el comentario sarcástico y volví a cargarla en mis brazos.
-Vamos necesitas comer.- La llevé hacia abajo y Alec seguía aquí. Me miraba de una forma rara, acusatoria y con los ojos entrecerrados queriendo adivinar mis pensamientos o lo que sea.
Saqué comida de la heladera y se la serví en un plato, ella miraba los cubiertos y los descartó haciéndolos a un lado utilizando sus manitos para comer.
Alec se rió y le señalé la puerta.
-Alec si eso es todo puedes retirarte- le dije enojado y él asintió y salió por la puerta.
-Lobita come con el tenedor y el cuchillo, a las cenas que iremos no puedes comer así- le enseñé como se usa y ella prefirió comer con la mano y seguir ignorándome.
-Veo que tenias hambre ¿Quieres más?- tomé su plato y le serví más comida, lo puse frente a ella y lo alejó.
-Quiero irme- pronunció las palabras con dificultad.
-¿Cuánto tiempo estuviste viviendo en el bosque?-me parece raro que a su edad no sepa hablar muy bien y que la ropa se lleva puesta no como ella que ni siquiera la usa.
-Mucho- me respondió.
-Está bien ¿Quieres
descanzar?- De la nada corrió hacia la otra punta de la cocina y empesó a golpear la puerta para abrirla
-¡¡Vas a rayarla, tranquila que te sucede!!-ella no me respondió e intentó volver a abrir la puerta.
Ya me está sacando de quisio, no soy para nada paciente, esa no una de mis virtudes y tampoco lo es cuidar niños. La luna sabe que estoy haciendo un gran esfuerzo por no retar a mi loba en este momento.
-¡No me aparearé contigo!-me gritó muy asustada y retrocedí.
¿Qué acaba de gritar?¿Cuántos traumas tiene esta niña?
-No me referia a eso, sé que solo eres una niña pero dime quién te dijo eso así le puedo pegar- ella dejó de golpear la puerta y me miró muy mal.
-¡No los lastimarás! Ellos son buenos, estábamos viendo a una coneja que tenía su pata en la cabeza y Lion dijo que se había apareado con el conejo que la miraba y Loan luego de pegarle dijo que solo descansaban ¡Así que no descansaré contigo, lobo malo!
-Solo quiero protegerte,no te haría nada de eso...
¡¡Márcala!!- el desesperado de Tax volvió a gritar.
No,¿Qué te pasa? Está muy asustada no la marcaré es solo una niña y ya entiéndelo- cada vez me cabreo más.
Yo te lo advertí- gruñó y ya no volvió a hablar.
-Ven Genna te mostraré cual es tu habitación- tomé su mano y ella se quedó mirando nuestras manos juntas por unos segundos.
-Siento hormigas- se le dice conexión pero hormigas está bien.
Subimos a su nueva habitación, ella cambió a forma lobuna y se echó a dormir en la alfombra.
Vive como un animal.
La cargué en mis brazos y la acosté en la cama, la observé y como no sabía si apagarle la luz o no se la dejé encendida y cerré detrás de mí cuando salí.
Mi lobita, creí que lo primero que haría al encontrarte sería hacerte mía pero ahora que te veo no puedo. Eres solo una niña y aunque en la última hora me sacaste más veces de quicio que todos los demás, sólo quiero protegerte.
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