Genna=

Logan y yo nos encontrábamos abrazados y sentados en nuestra cama mientras veíamos a nuestra pequeña dormir. Sentía que podía pasar horas a solas con ellos pero Alec y Jeins interrumpieron el momento.

Ellos estaban muy animados, ambos vestían camisas y pantalones de vestir que los hacían verse muy bien. Lo primero que pensé fue que iban a cenar con sus lobas y en ningún momento se me pasó por la cabeza que era para la despedida de Logan.

Desconocía el término hasta que Alec me lo explicó y entonces me pregunté porqué Logan querría emborracharse y festejar su "último día libre", como ellos lo habían llamado.

Laya y la mate de Jeins, Lara, vinieron también, ambas con vestidos y uno extra para mí.

Logan vio el vestido y nos redeó a Tai y a mì con sus brazos.

—Prefiero pasar la noche con mi loba, pero gracias— les sonrió amablemente y de mala gana se bajó de la cama y les abrió la puerta de la habitación.

—¡Oh vamos! Genna suéltale la correa— me dijo Jeins riendo
—Logan te vas a casar, hay que festejar tu último día de
soltería— lo alentó Jeins y Logan sacudió la cabeza.

—Amor ve— le dije sin comprender porqué se emocionaban tanto pero sí eso era lo que él quería, adelante.

—Lobita quiero quedarme con ustedes— dijo viendo hacia abajo a nuestra cachorra que yacia dormida en mis brazos.

—Vámonos Jeins, los seiscientos  se están acercando y ya le afectan, está echo un viejo— murmuró Alec yendo hacia la puerta.

—Sí, Alec— Jeins lo siguió
—Ahora que es padre está castrado y pronto lo veremos utilizar una faja para sostenerse la panza...

—¡Oigan!— Laya, Lara y yo dimos un respingo y Jeins y Alec se detuvieron y giraron con sonrisas burlonas a ver a Logan.

—¿Vamos hermano?— preguntaron al mismo tiempo y Logan bufó.

—No quiero mujeres, ni sexo o cualquier cosa que haría que sus mates los castren— les dijo y yo lo miré.

—¿Mujeres?¿Sexo?— Repetí estupefacta.

—No te preocupes, no habrá nada de eso Lunita o esos dos hombres que ves ahí parados con sonrisad burlonas serán
castrados— sonrió Laya con inocencia fingida y tanto Alec como Jeins se acercaron a sus mates a besarlas y a susurrarles algo al oído, ellas sonrieron complacidas y Logan me besó tomándome por sorpresa.

—Volveré a tiempo— me prometió.

—Logan...

—Y no habrá sexo, ni mujeres, eso sólo lo hago contigo— besó con dulzura mi frente y sostuvo unos segundos a nuestra hija abrazándola contra su pecho y olfateándola hasta que Jeins y Alec comenzaron a molestar y de mala gana se despidió con más besos y se fue.

—¿Lista?— Laya y Lara me sonrieron con travesura —Los hombres vendrán en unos segundos— comenzó a decir Laya y yo sacudí la cabeza.

No quiero arruinarles la noche que planearon pero yo no quiero ver a otros hombres y tampoco deseo alejarme de Tai.

—¿Y si mejor vemos una película?— pregunté esperando que aceptaran —Podríamos ver el Stand de los besos— sugerí eligiendo mi película favorita.

—Oh podríamos festejar— dijo Laya animada. —¡Vamos Genna!¡Te vas a casar con el alfa!¡La diosa sabe que tus ojos tendrán vendas luego de que digas acepto!— me dijo y codeó a Lara.

—Es verdad— dijo esta sonriendo —Esta es tu última noche libre, por fis....

—Buenoo— dije dudando —Pero ¿Qué hago con Tai?— pregunté algo insegura, ellas sonrieron y Laya salió de la casa y regresó un segundo después con Nathan que al verme me sonrió y se acercó a tomar a Tai.

—Yo la cuido— me dijo y se inclinó a mí oído —Trata de que mamá no beba, tiende a reírse sola— me susurró y se fue riendo con mi pequeña.

—No me pude despedir...

—Ya la traerá, vamos a
arreglarte— me dijeron y ambas se pusieron a la obra con mi vestimenta, también mi peinado y maquillaje el cual a diferencia del que yo me hice hace muchos años, no me dejó como payaso.

—¡Perfecta!— chillaron las dos y justo el timbre sonó.

Lara fue corriendo a abrir y Laya me puso una corona con orejitas en la cabeza y me cruzó una banda rosa que decía "Solteroski".

Reí al leerla y miré hacia la puerta a tres hombres musculosos, altos y enmascarados que entraron vestidos como guardias de seguridad y tenían guantes en las manos y linternas en sus cinturones.

—No creo que Logan esté de acuerdo— le dije a Laya y la música empezó. Los tres hombres caminaron hacia mí y me llevaron al sillón.

Laya y Lara reían por mi cara mientras bailaban y dos de los hombres se fueron con cada una de ellas mientras que a mí me dejaron con el más alto y músculoso de los tres.

Miré hacia atrás buscando la ayuda de ellas y el hombre  frente a mí me tomó de la mano y la besó. Sentí cosquillas en mi estómago y de repente oí a Laya gritar.

—¡Pero qué pasó con los stripper!— gritó mi amiga que le había sacado la máscara a su guardia y descubrió que era Alec.

—Hola bombón— Alec la atrajo hacia él y la besó, Laya gruñó y riendo le correspondió.

Lara, confundida le quitó la máscara a su guardia y descubrió que era Jeins.

—Debí imaginarlo— dijo mientras negaba con la cabeza y le sonreía a su mate, él se rió y la besó, la cargó en su hombro y la llevó hacia la puerta.

Miré al guardia frente a mí y este me veía fijamente, de inmediato reconocí sus ojos dorados y lo abracé.

—Gracias por salvarme, lobo malo— le quité la máscara y lo besé, él se rió y me alzó en sus brazos.

—¿Te lo esperabas?— me preguntó mientras caminaba hacia la habitación conmigo.

Acaricié su mejilla y negué rozando nuestras narices con cariño.

—No, de hecho estaba aterrada ¿Por qué querría festejar que aún no estoy casada?— le pregunté y él se rió.

—Es una tonta tradición
humana—me explicó y sentí algo blando a mis espaldas, volteé a ver y estábamos en nuestra cama. —El plan de Alec y Jeins era ir a beber a un bar a la ciudad pero vimos a los stripper cuando llegaban y ¡Demonios! No podía dejar que a mi lobita le bailara otro— dijo haciéndome reír y le quité los guantes porque quería sentir la electricidad de sus toque en mi piel.

—Logan ¿Por qué alguien querría una luna de miel?— acaricié su mejilla —Laya dijo que es como la semana de celo, pero mejor— le conté y él sonrió con picardía y se quitó el gorro y la linterna que era parte del disfraz de guardia de seguridad. —Y siempre peleamos en la semana de celo...

—Este año fue diferente lobita— me recordó y asentí ya que tenía razón. —Y la luna de miel es otra tradición humana que nosotros adoptamos como nuestra.

—¿Por qué?— lo interrumpí viendo la hora en el reloj de la pared ya que mañana es la boda y no quiero tener ojeras por eso debo dormir temprano.

—Por que tú y yo disfrutaremos juntos en la luna de miel y haremos el amor cada noche, cada día y hasta podríamos decir que cada tarde también.

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Logan=

Estoy en el altar, los invitados ya están aquí, incluso tres de mis padrinos llegaron pero no hay noticias de Genna o de Laya o de nadie que me interese.

Estoy muy nervioso y agradezco a la luna por tener a Tai que huele muy parecido a su madre junto a mí, pues si no yo no podría aguantar la larga espera.

—¿Me dejas tomar el control por unos minutos? Quiero saludar a los invitados— me pidió Tax muy animado.

—No, porque luego no me lo vas a devolver— le dije ya que anoche compartí el sueño de nuestra boda con mi loba y Tax tomaba el control y ya no me lo daba.

—Pero mi mamá está allí— me enseñó la imagen de unas hermosas sillas blancas decoradas con telas doradas y giré en busca de esa mujer de test pálida y cabello gris brilloso.

Al verla noté que ella sonreía y veía atentamente todo desde su lugar atrás de todo. Sus ojos se conectaron con los míos y cambiaron a amarillos.

—Hola mamá— la saludó Tax enviándole los pensamientos y ella sonrió radiante.

—Hola hijo— la diosa no se veía como me la esperaba, parecía una mujer normal pero con una apariencia exótica.

—Logan hijo mío, una diosa no necesita utilizar magia, coronas o vestidos brillantes, una diosa es llamada así por su amor a los que cuida y proteje— oí su gloriosa voz y como si nunca hubiese estado allí, desapareció.

Ella se fue y Genna llegó, mi loba estaba tan nerviosa que sus pensamientos me llegaban.

—Por favor, por favor piecitos, no me fallen hoy con estos zapatitos.— pensaba y Loan a mi lado olfateó el aire, los ojos se le llenaron de lágrimas y corrió hacia la entrada.

Alec y Jeins se miraron confundidos y la música comenzó a sonar.

Laya era la primer dama de honor, se acercaba por la alfombra blanca vestida con un largo vestido dorado y unas flores negras.

Mis hermanos y yo nos vimos confundidos y la siguiente dama de honor, Lara, vino con un vestido dorado muy parecido al de Laya y las flores negras. Las siguientes damas, las mates de Lion y Loan también venían vestidas de dorado y traían las misma extrañas flores.

Mi loba y sus hermanos llegaron al camino de la alfombra blanca y me quedé sin habla, sin respiración y mi corazón quería irse corriendo.

Genna no era la típica novia vestida de blanco, no, ella traía un hermoso vestido de novia negro, un velo del mismo color y una orejitas que salían como corona del velo.

—Wow— murmuramos los invitados y yo al mismo tiempo.

—Ta ra tata ta ra tata, nos vamos a casa ar, ta ra tata ta ra tata— cantaba Tax super felíz —Está hermosa no veo la hora de que le quitemos ese vestido.

No le presté atención como siempre, yo estaba embobado viendo como el vestido se le ajustaba como una segunda piel y le daba una forma de reloj de arena a su cuerpo, Genna ya no era una adolescente era toda una mujer, mi mujer...

Miré hacia el público y gruñí, todos la veían con la boca abierta y yo no sabía si ella me estaba viendo a mí o a alguien más ya que el velo negro le cubría los ojos.

Llegó hasta mí y ambos hermanos le besaron las mejillas.
Lion me vio y suspiró con resignación.

—Cuídala— me dijo entregándome la mano del amor de mi vida y sonreí.

—Siempre— le prometí y él y Loan sonrieron con los ojos llorosos y se fueron a sus lugares junto a Alec y Jeins a mi lado.

Acaricié las manos de mi loba y ella soltó una risita.

—Lobo malo cierra la boca— me susurró y reí.

—Es que te ves hermosa, me sorprendiste— le confesé negándome a apartar los ojos de ella.

Ella enlazó nuestros brazos y ambos nos paramos en el altar frente a mí padre quien iba a oficiar nuestra boda como era la tradición.

—Hermanos y hermanas, hijos de la luna. Con alegría y emoción  estamos hoy aquí reunidos para unir a esta hermosa pareja— dijo viéndonos a Genna y a mí con una sonrisa aunque de reojo veía las orejitas de ella, creo que todos lo hacían —La diosa luna nos trajo a Genna para iluminar el camino de mi hijo y así lo hizo, le llevó años...— la gente rió —Pero ¿Estamos aquí, verdad? Y no podría estar más satisfecho de ver la alegría en los ojos de ambos.

—Pero si está llorando— oí a Jeins susurrarle a Alec y les gruñí y me sequé las lágrimas, Genna hizo lo mismo y pude atisbar un vistazo de su labial rosa.

—La diosa los unió, los bendijo con una pequeña cachorra y hoy nos acompaña y está aquí para celebrar su eterno amor, por eso Logan repite conmigo:

Me giré de costado a los invitados y tomé ambas manos de mi loba.

—Yo Logan Strike te tomo a ti Genna Wolfblood...Para enamorte cada día, para amarte como se debe, lobita.— cada palabra salía de mi e iba directo al suyo...

Oí un sollozo detrás de mí y un gruñido.

—No puedo creer que mi bebé se está casando— ¿Ese fue Lion?

—...Para respetarte y aceptarte, protegerte y desearte...Y darte mi amor eterno sin importar lo que pase, mi amor. — sonreí, apenas consiguiendo respirar y mi padre se dirigió esta vez a ella.

Sus votos eran diferentes, así es la tradición.

—Genna repite conmigo— pidió mi padre y ella comenzó a decir las palabras que sellarían nuestro destino y le pondrían un comienzo a nuestra vida eterna.

—Yo...— la voz de mi loba tembló.
—Genna Wolfblood, te tomo a ti Logan Strike.— alzó la mano y se secó las lágrimas bajo el velo y volvió a tomar mi mano con más firmeza. —Para amarte y cuidarte, consentirte y soportarte mi lobo malo— se rió.
—Para alentarte o sermonearte, guiarte y nunca dejar que te vayas a otra parte...— fruncí el ceño ante eso último y miré de ella a mi padre.

—Ella insistió en ponerlo— me explicó él y sonreí.

Mi lobita cadi se acercaba al final y pude sentir sus piernas temblar o tal vez eran las mías, pero se sentía increíble.

—...Y entregarte mi amor eterno sin importar lo que pase— finalizó casi sin voz y Luck se acercó cargando a Tai por el camino blanco y nuestra pequeña bebé nos dió los anillos con la ayuda de su guardia.

—Ahora repitan conmigo— nos dijo mi padre y así lo hicimos:

—Yo Logan Strike te quiero a ti Genna como mi esposa ¿Me aceptas?.

Mi loba asintió.

—Claro que te acepto— reprimió otro sollozo y adorné su hermosa mano con nuestro anillo eterno.

—Yo Genna te quiero a ti Logan Strike como mi esposo ¿Me aceptas?— me preguntó y los recuerdos vinieron a mi.

Tiara dice que eres el lobo malo.

¿Me quieres?

¿Quieres ser mi novio?

¿Para qué es la semana de celo?

¿Me dolerá?

Logan ¿Puedes besarme?

—Te aceptaré ahora y siempre, mi osita— dejé que me pusiera el anillo y ambos miramos a mi padres sentía el ansia de ella por besarte y estoy seguro de que ella siente mis ansias por besarla y estrecharla en mis brazos.

—Entonces bajo los ojos y la bendición de la diosa yo los declaro marido y mujer, alfa y luna, reina y rey...

Levanté cuidadosamente el velo de mi esposa y sonreí, jamás se vio más preciosa.

Me incliné a su altura y sonriendo la besé.

—Mi luna, mi esposa.

—Mi alfa, mi esposo.

—Me perteneces.

—Y tú a mí oso con rabito.

...Fin.

Holis!

Espero que esté final sea de su agrado, que les haya llegado al corazón y les haya robado un suspiro.

Logan y Genna siempre estarán en mi corazón al igual que tod@s ustedes, pero en especial aquellas personitas hermosas que me hacían sonreír, me aconsejaban y se convirtieron en más que mis lector@s, se convirtieron en amigas.

Las amo, los amo, los adoro y les deseo una bonita vida y una sonrisa cada noche antes de que vayan a dormir.

Atte y por siempre: Micaela.E.P❤️