Parte 9
Advertencias: Punto de vista de Naruto / Ambientación medieval / Elementos de cuento de hadas / Hombres lobo / Contenido para adultos / Mpreg / Saltos de tiempo menores / Hadas / Lactancia materna implícita / Inseguridad
Descargo de Responsabilidad: Los personajes no me pertenecen, todos son propiedad de Kishimoto.
"¿Qué piensas? Madre dijo que podemos elegir otro si prefieres quedarte en otro lugar", dijo Sasuke y por primera vez Naruto detectó algo de nervios en su voz.
"Esta es tu guarida, ¿verdad?" Naruto pidió confirmación, mirando a su alrededor con curiosidad.
La guarida en cuestión se creó a partir de piezas de madera altísimas, que se juntaban en el medio por encima de ellos, creando una especie de gran tienda de campaña. La abertura que actuaba como puerta estaba simplemente cubierta con un trozo de tela, lo que no serviría de mucho para mantener el frío afuera durante el invierno, pero Naruto supuso que considerando que la mayoría de los Uchiha eran cambiaformas lobo, preocuparse por el frío sería redundante, para ellos.
No había chimenea, porque de nuevo, eran cambiaformas lobo, pero el nido era bastante grande y de aspecto cómodo con gruesas capas de piel apiladas una encima de la otra. Con las mantas adicionales que habían traído de su nido anterior y el calor corporal elevado natural de Sasuke, Naruto pensó que debería poder pasar el invierno sin congelarse ninguna extremidad, incluso si ahora vivían en medio de las montañas.
"Esto es mío, sí" confirmó Sasuke; su mano frotando suavemente la espalda de Hikaru. El bebé tenía el rostro escondido en el cuello de su padre, calmándose después de sentirse abrumado por tantos nuevos miembros de la familia que lo saludaban.
"La guarida de mi hermano está a la izquierda y la de mis padres a la derecha, aunque hay suficiente espacio entre cada uno para que nadie se moleste", agregó, colocando las bolsas justo al lado de la entrada.
Naruto lo siguió rápidamente, poniendo su parte de las bolsas con las demás antes de acercarse al nido, inclinándose para tocar la piel con cuidado.
A pesar de que Sasuke se había ido por tanto tiempo, el nido se veía impecable y se sentía suave como si todavía hubiera estado aquí para cuidarlo regularmente y Naruto supuso que alguien de su familia se había ocupado de la guarida, asegurándose de que estaría bien. Listo para cuando Sasuke regresara.
"¿Entonces, qué piensas?" repitió Sasuke, acercándose al rubio. "¿Estás de acuerdo con quedarte aquí o deberíamos ir a buscar otro?"
Naruto negó con la cabeza y se arrastró hasta el centro del nido, pasando las manos por el suave pelaje. "No, esto esta bien. Es tu hogar".
"Es tu hogar ahora también", argumentó Sasuke y entró en el nido también, manteniendo un fuerte control sobre su hijo para que no se cayera accidentalmente. "Entonces, si no te sientes cómodo aquí, no me importa mudarme a otro sitio".
"No me importa", dijo Naruto y se acostó, inhalando profundamente. Sonrió cuando pudo detectar rastros del olor familiar de Sasuke, aún impregnado en el nido a pesar del largo tiempo que no había estado aquí. "Huele a ti", murmuró, volteándose de lado tan pronto como Sasuke se acostó también.
Con Hikaru acunado entre los dos, sus profundos ojos azules recorriendo la guarida con asombro, Naruto suspiró satisfecho cuando Sasuke lo rodeó con un brazo, acercándolo.
"¿Así que esto esta bien para ti?" preguntó Sasuke una vez más, acariciando la sien de Naruto.
Naruto giró la cabeza para atrapar su boca en un suave beso. "Esto esta bien"
Era bastante diferente de las dos cuevas en las que habían vivido antes, pero eso no la hacía menos buena. Especialmente sabiendo que no tendrían que mudarse de nuevo después de hoy, a menos que toda la familia decidiera levantarse e irse. Sin embargo, teniendo en cuenta que Sasuke había mencionado que ya habían vivido aquí durante siglos, dudaba que se fueran pronto.
"Entonces, ¿Cómo se conocieron ustedes dos?" Mikoto preguntó con curiosidad esa noche mientras cenaban.
Tan feliz como Naruto había estado de conocer a toda la familia, no pudo evitar sentirse un poco aliviado de que la cena familiar real solo existiera entre los padres de Sasuke, su hermano y Deidara. El resto de la familia había sido amable, pero también había sido bastante abrumador ser recibido por tanta gente a la vez y necesitaba algo de tiempo para aclimatarse.
"Ah, bueno, nosotros, eh, yo" Naruto se detuvo, tambaleándose un poco. Su primer encuentro no había sido exactamente del tipo romántico y no estaba seguro de si estaría bien decir la verdad.
"¿Mi hermano hizo algo vergonzoso?" Itachi sonrió, agachándose cuando Sasuke gruñó y le dio un golpe.
"¡No soy tu!" Sasuke respondió, haciendo que Deidara sonriera.
"No puede haber sido tan malo", animó Mikoto, aunque sus cejas estaban juntas como si ya sospechara que su historia no había comenzado maravillosamente.
"En realidad, no fue un mal inicio", dijo Naruto, mirando a Hikaru. Había alimentado a su bebé justo antes de que comenzara la cena, pero a diferencia de las noches anteriores, Hikaru no parecía tener el más mínimo sueño ahora, prefiriendo mirar a su alrededor y hacer burbujas de saliva cada vez que alguien lo miraba por más de un par de segundos.
Sasuke suspiró y apoyó su mano en la rodilla de Naruto. "Originalmente fue un sacrificio hasta que me di cuenta que era mi compañero"
El silencio inmediatamente descendió sobre el grupo.
"¿Él era qué?" Fugaku preguntó rotundamente, mientras que Deidara parecía atrapado entre reír abiertamente y parecer preocupado, lo que terminó con el rostro torcido de manera divertida.
"Sasuke, ¿no te dije que no usaras tus poderes cambiantes?" Mikoto regañó, frunciendo el ceño profundamente.
"No fue así", dijo Sasuke molesto. "Mi búsqueda me había llevado a un bosque cerca de un pueblo y no me dejaba irme. Algunos humanos pensaron que podrían hacer un trofeo de mí y trataron de cazarme. Los maté. Cuando me preguntaron qué quería en a cambio de dejarlos solos, le dije que quería un sacrificio. Pensé que me darían algo de su ganado, pero en lugar de eso me dieron –"
"A mi" terminó Naruto resignado, mirando hacia arriba de nuevo. El trato del pueblo todavía le dolía un poco, pero lo estaba superando lentamente, sabiendo que no tenía sentido quedarse en el pasado.
Probablemente nunca los perdonaría por haberlo sacrificado tan fácilmente, pero eso lo había llevado a conocer a Sasuke y nunca podría arrepentirse de eso.
"Tu pueblo te sacrificó en lugar de ganado, ¿no?" Deidara preguntó perpleja. "¿Qué hay de tus padres? ¡Seguramente estaban en contra!"
"Soy huérfano" respondió Naruto simplemente y se encogió de hombros con poco entusiasmo. "Me dijeron que nadie me extrañaría y que valía menos que los animales que tenían como ganado, así que me ofrecieron en su lugar"
"¿Qué diablos les pasa a esos humanos?" Mikoto preguntó indignada; sus ojos escupiendo fuego "¿Cómo pudieron haberte abandonado así? ¡Eso no está bien!"
"La mayoría de ellos no conocen el significado de cuidarse unos a otros", murmuró Fugaku, pero sus ojos estaban oscuros y había un indicio de garras visibles cuando Naruto miró sus manos.
"Es irónico que los humanos terminaran haciendo algo bueno cuando decidieron ofrecerte", reflexionó Itachi, pero sus labios se apretaron, mostrando que él tampoco estaba feliz de escuchar cómo su hermano había terminado conociendo a su pareja.
"Eso es lo único bueno que hicieron", se quejó Sasuke. "Incluso tuvieron el descaro de enviar cazadores tras de mí".
"Bueno, hicieron eso después de que empezaste a matarlos", comentó Naruto, aunque su estómago todavía se revolvía con inquietud cuando recordaba lo cerca que había estado de perder a Sasuke ese día.
"¿Matarlos?" Itachi levantó una ceja.
El cambiaformas lobo más joven le devolvió la mirada desafiante "Habían estado lastimando a Naruto durante años y yo los castigué a ellos. Solo a los que lo habían lastimado, al resto los dejé en paz".
"Sabía que te enseñé bien", dijo Mikoto con orgullo, inclinándose para besar su mejilla. "¿Los mataste a todos?"
"Hasta el último de ellos", confirmó Sasuke.
"Lamento que hayas tenido que soportar tanto, hum", le dijo Deidara a Naruto; sus propios ojos azules brillando con simpatía.
"Está bien", dijo Naruto con torpeza, frotando su pulgar sobre la mejilla de Hikaru "Conocí a Sasuke así que..."
"Bueno, me alegro de que ustedes dos se hayan encontrado, incluso si las circunstancias eran menos que convencionales", dijo Mikoto.
Esa era una forma de describir cómo se habían conocido, supuso.
Vivir con los Uchiha tomó un poco... ajuste no era exactamente la palabra correcta, pero tomó algún tiempo acostumbrarse a la fácil familiaridad con la que todos se trataban. No importa cuán distante fuera la sangre, todos conocían a todos y era tan probable que visitaran la guarida de un primo lejano como la guarida de sus padres.
Ya sea que usaran o no ropa o caminaran cambiados de un día a otro, al parecer. Un día, Naruto vería a Mikoto caminando con uno de los muchos vestidos que parecía tener, mientras que al día siguiente se sonrojaría y desviaría la mirada cuando la viera caminar desnuda.
Ella le había asegurado que no había nada de qué avergonzarse y que no pensaría que era extraño que él la mirara mientras estaba desnuda, pero aún así, mirar a alguien más desnudo excepto a Sasuke tomaría algún tiempo para acostumbrarse.
Deidara parecía ser la única excepción, salvo Naruto, por supuesto, cuando se trataba de usar ropa. No importaba el día ni la temperatura, siempre iba vestido.
"No me gusta que nadie más que Itachi me vea desnudo, hum", respondió cuando Naruto finalmente reunió el valor suficiente para preguntarle al respecto. "Ellos saben que no deben presionarme sobre este tema"
Para un Fae, su sonrisa podría verse tan aguda como la de los cambiaformas lobo.
Aún así, aunque Deidara también prefería permanecer vestido, no parecía tener problemas para hablar con personas que estaban desnudas sin siquiera sonrojarse en lo más mínimo. Naruto esperaba que algún día llegara a esa apatía también, porque se estaba volviendo bastante vergonzoso que la gente se burlara de lo adorable que era, porque reaccionaba con tanta timidez a la desnudez.
Estaba más que acostumbrado a ver a su propia pareja desnuda; ¡Simplemente no estaba acostumbrado a ver a toda una familia desnuda!
"¿Sasuke te ha contado cómo se pasan los inviernos aquí?" Deidara lo sorprendió preguntándole un día cuando se acercaba el final del otoño.
Ya se había vuelto notablemente más fresco por la noche, dejando a Naruto preguntándose cuánto bajaría la temperatura en medio del invierno si ya hacía tanto frío.
"Erm, ¿qué quieres decir?" preguntó aturdido, desabrochándose la camisa para que Hikaru pudiera alimentarse.
Al principio había sido bastante tímido acerca de alimentar a su hijo frente a alguien que no era su compañero y se había retirado a la guarida cada vez. Pero luego había visto a una de las primas de Sasuke, Izumi, Naruto pensó que se llamaba, amamantando a su hija a la vista de todos los demás sin preocuparse en el mundo y sin que nadie lo mirara raro y eso había hecho un clic dentro de si mismo.
Por supuesto, ninguno de ellos se vería raro si alguien estuviera amamantando; eran lobos cambiaformas, la desnudez era normal para ellos y amamantar era tan natural como respirar.
Desde que se dio cuenta de eso, se había sentido más cómodo alimentando a su hijo sin importar si había alguien cerca o no. Sasuke todavía parecía preferir alimentar a su cachorro en su guarida, pero solo porque eso le facilitaba cambiar a su forma de lobo y enroscarse alrededor de ambos, actuando como un soporte bastante grande y esponjoso para la espalda de Naruto.
Aceptando la contra pregunta de Naruto como permiso para entrar a la guarida, Deidara entró y se sentó en el borde del nido, cruzando las piernas. Sasuke se había ido hace un rato, uniéndose a su hermano y algunos de sus primos en una cacería, para que pudieran comenzar a prepararse para el próximo invierno.
Claro, Sasuke podría salir durante el invierno para buscar algo de comida, pero dado lo severos que pueden ser los inviernos en las montañas, quería estar lo más cerca posible de Naruto, lo que significaba que tenía que comenzar a cazar ahora en para crear una especie de stock.
"Bueno, dado que vivimos en medio de las montañas, los inviernos pueden ser bastante duros aquí, hum", explicó Deidara sin andarse con rodeos.
Naruto apreciaba eso de los Fae. Sí, fue bastante directo, más directo que cualquier otra persona que Naruto hubiera conocido, pero también había algo refrescante en eso, porque Naruto nunca tuvo que preguntarse qué estaba pensando realmente el otro rubio.
"Me lo imaginaba, sí", asintió Naruto.
Había notado hace una semana que ya se estaba acumulando algo de nieve en la cima de las montañas, lo que le hizo sospechar que el invierno aquí sería peor que en el bosque.
"Ahora, aunque la mayoría de nuestra familia son cambiaformas, incluso ellos pueden tener frío si las temperaturas bajan demasiado", continuó Deidara, sonriendo cuando Hikaru chasqueó los labios y gruñó algo antes de aferrarse al pezón de Naruto nuevamente "Entonces se acurrucan juntos. Bueno, lo llaman acurrucarse, hum, pero yo solo lo llamo hacer una pila de cachorros"
"Una pila de cachorros", repitió Naruto dudoso y parpadeó.
"Sí, duermen juntos en una gran pila para mantenerse calientes", se rio Deidara. "No es como si toda la familia se reuniera, hum. Sobre todo los que son muy cercanos"
"Vaya" Naruto parpadeó una vez más, un poco confundido sobre por qué Deidara le estaba contando esto ahora.
"Solo te digo ahora para que no te alarmes en caso de que uno de nosotros se ofrezca a formar una pila en el invierno, hum", explicó Deidara, sintiendo su confusión. "Olvidaron advertirme y casi hago que Izumi entre en combustión cuando se metió en nuestra guarida la primera vez" Sacudió la cabeza, su largo cabello moviéndose de un lado a otro.
"Son personas encantadoras, pero a veces olvidan que no todos crecimos con ellos", agregó con ironía.
"Gracias por advertirme entonces", sonrió Naruto.
"Hm, pensé que lo haría, porque con el bebé aún tan pequeño, en realidad podría ser mejor si terminas en un montón, hum", Deidara asintió hacia Hikaru "El calor de Sasuke y el tuyo deberían ser suficientes, pero bueno, cuanto más, mejor" Se encogió de hombros.
"¿Podrías podrías tú e Itachi formar una pila con nosotros entonces?" preguntó Naruto nervioso.
Sí, se estaba acostumbrando cada vez más a toda la familia, pero aún se sentía más a gusto con Itachi y Deidara que con el resto ¿Fue porque Itachi era el hermano de Sasuke y Deidara siendo un Fae lo convertía en un 'forastero' tanto como lo era Naruto con él siendo humano? No estaba seguro, pero pensó que no le importaría tanto dormir en una pila si fueran ellos.
Deidara pareció sorprendido al principio antes de que sus rasgos se suavizaran "Claro, hum. No nos importaría".
"¿De qué están hablando ustedes dos?" Sasuke asomó la cabeza al interior, levantando una ceja.
"Discutiendo sobre montones de cachorros, hum", sonrió Deidara.
"No es un montón de cachorros, Deidara", suspiró Sasuke con exasperación, confirmando que habían discutido sobre este término muchas veces antes. "Deberías saber eso a estas alturas".
El Fae se encogió de hombros completamente sin arrepentirse y se puso de pie. "Ustedes son cambiaformas lobo y se acurrucan juntos, ergo, montones de cachorros", replicó con picardía.
"Eres una amenaza absoluta y no entiendo cómo mi hermano te aguanta", gruñó Sasuke.
"Soy bueno con mi boca, hum, entre otras cosas", sonrió Deidara y se fue después de lanzarle un guiño a Naruto, quien se echó a reír sobresaltado.
"¿Adivina quién no cuidará de Hikaru cuando sea mayor?" Sasuke murmuró sombríamente, resoplando cuando Deidara se rió alegremente en algún lugar afuera.
El invierno resultó ser severo con el viento aullando tan fuerte que mantuvo a Hikaru y, en extensión, a sus padres despiertos hasta bien entrada la noche; el sonido áspero y sibilante molestó mucho al pequeño bebé. Por lo general, solo se calmaba cuando estaba acurrucado entre Sasuke y Naruto con las mantas formando una especie de fortaleza a su alrededor, bloqueando el ruido tanto como fuera posible.
Cada vez que Deidara e Itachi se unían a ellos para compartir el calor corporal, el Fae le cantaba al bebé; el tono era de otro mundo pero relajante al mismo tiempo y Naruto se encontró durmiendo junto a su hijo cada vez. Era una canción de cuna antigua que solo los Fae conocían, había explicado Deidara, cantada exactamente en el tono correcto para superar cualquier ruido perturbador.
Naruto no estaba exactamente seguro de si entendía cómo funcionaba la canción de cuna, pero hizo que su hijo se durmiera fácilmente incluso con el viento silbante afuera y esa era la parte más importante.
Cuando la nieve cubrió todo con su color blanco puro, la familia Uchiha pasó el mejor momento de su vida viendo a los bebés explorar la sustancia con curiosidad. Hikaru todavía era demasiado pequeño para caminar, aunque ya había aprendido a gatear, y un coro de arrullos solía surgir cuando estaban afuera y Hikaru tocaba la nieve con asombro, golpeándola furiosamente cada vez que se derretía bajo su toque. Los otros bebés tendían a seguir su ejemplo, los que ya tenían la edad suficiente para caminar tambaleándose y tratando de atrapar los copos de nieve que giraban sobre ellos.
Fue increíble poder caminar libremente en la nieve esta vez. El año pasado siempre habían sido cautelosos al salir de su cueva, sin atreverse a adentrarse demasiado en la nieve, por temor a que personas no deseadas los siguieran. Aquí, no tenían ese miedo. Conocían a todos y sabían que ninguno de ellos intentaría hacerles daño, por lo que, aunque este invierno fue más severo que el anterior, Naruto se encontró disfrutando del clima, incluso yendo tan lejos como para sostener una pelea de nieve con Sasuke durante el rato en el que Mikoto y Fugaku estaban cuidando a Hikaru.
Claro, todavía extrañaba a Tsunade y Kakashi algo ferozmente, pero también había algo que decir sobre la libertad de caminar y ser él mismo.
El invierno ya había pasado cuando Naruto comenzó a sentirse inquieto.
No entendió por qué al principio, porque nada parecía estar mal; La vida en el complejo Uchiha continuaba como siempre desde que había llegado aquí. Brevemente consideró que algo podría estar mal con Hikaru, pero no, su hijo estaba bien, gateaba como un profesional y ya intentaba pararse derecho, aparentemente alentado por ver a otros niños hacer lo mismo.
Aún así, la inquietud permaneció, lo que lo enojó consigo mismo, hasta que se dio cuenta de la razón cuando una tarde él y Sasuke estaban solos en el nido, Hikaru era adorado por sus abuelos. Estaban holgazaneando, acurrucados uno contra el otro, cuando comenzaron a besarse.
El beso comenzó lento al principio, ambos saboreando la oportunidad de tomarse el tiempo para explorarse el uno al otro nuevamente después de meses de compartir besos rápidos; su atención demandada por su cachorro. Naruto amaba a Hikaru con todo lo que tenía en él y algo más, pero era un hecho que con un bebé alrededor, él y Sasuke no tenían mucha privacidad, ni mucha energía, pero Mikoto y Fugaku se ofrecieron a cuidar de Hikaru esa tarde.
Sasuke lo hizo rodar sobre su espalda, quedando entre sus piernas, cuando el beso se profundizó; sus bocas separándose bajo la presión. Un suave gemido escapó de Naruto cuando las puntas de sus lenguas se tocaron e impulsivamente rodó sus caderas contra las de Sasuke, estremeciéndose cuando una creciente dureza encontró la suya.
Tenía exactamente tres segundos para saborear el calor que comenzaba a enroscarse en su bajo vientre, alimentado por la anticipación, cuando Sasuke de repente se separó de él, rodando a su lado; su respiración era demasiado pesada porque simplemente se habían estado besando.
"¿Por qué, por qué te has parado?" preguntó Naruto decepcionado, sentándose; sintiéndose extrañamente despojado a pesar de que su compañero todavía estaba justo a su lado.
"Tuve que parar antes de ir demasiado lejos", respondió Sasuke con los dientes apretados, apoyando su brazo sobre su rostro.
"¿Pero por qué?" repitió Naruto, sin entender cuál era el problema.
Sasuke nunca se había detenido antes, al menos no después de haber dado el paso final. Claro, se había contenido al principio, antes de que Naruto se sintiera listo para hacer más, ¡pero no era como si Naruto todavía fuera virgen! No había necesidad de contenerse ahora, así que ¿por qué no continuaban?
O... Naruto trató de detener el pensamiento traicionero, pero se formó de todos modos, haciéndolo sentir horrible y con náuseas a la vez.
¿O Sasuke ya no se sentía atraído por él?
Se las había arreglado para deshacerse de la mayor parte del aumento de peso que había adquirido durante su embarazo, pero sus muslos aún eran más gruesos que antes y su estómago tampoco estaba completamente plano, aunque eso último no era notorio a menos que estaba parado derecho y usando algo muy ajustado.
Pero aun así, el peso extra, por pequeño que fuera, seguía ahí. ¿Sasuke estaba disgustado por eso? ¿Era esa la razón por la que no quería ir más lejos ahora, porque eso significaría tener que mirar a Naruto desnudo?
Su espiral de dudas e inseguridad se detuvo abruptamente cuando Sasuke suspiró profundamente, bajando el brazo.
"Puedo oler que estás pensando en algo estúpido", dijo con calma, pero sus labios estaban fruncidos. "¿Qué ocurre?"
"Nada", desvió Naruto, sin querer admitir sus inseguridades. Si Sasuke no lo quería, solo tendría que aceptarlo y esforzarse al máximo para deshacerse del peso restante.
¿Seguramente si volviera a su peso anterior, Sasuke lo querría de nuevo?
"Todavía puedo oler que algo anda mal", señaló Sasuke y se sentó también "Vamos dime"
"Solo – ¿por qué te detuviste?" preguntó Naruto impotente. "Pensé que querrías, pensé que también querrías". Tragó saliva, apenas capaz de contenerse, "¿Pensé que tú también me querías?"
"No quiero hacerte daño", dijo Sasuke con resolución, confundiendo aún más al rubio. "Solo diste a luz hace seis meses, no quiero poner demasiado estrés en tu cuerpo"
"¡Pero me siento bien!" Naruto protestó, aunque al mismo tiempo se sintió mareado de alivio al darse cuenta de que una vez más era la protección de Sasuke lo que lo detenía y no porque ya no se sintiera atraído por él.
¡Realmente debería haber sabido que Sasuke se preocuparía demasiado!
"Aún así, no quiero arriesgarme", dijo Sasuke, sacudiendo la cabeza. "Lamento haberlo dejado llegar tan lejos; debería haberlo sabido mejor"
"Honestamente, Sasuke, me siento bien", insistió Naruto, acercándose a él. "Por favor, ha pasado tanto tiempo... te necesito". Sus mejillas se colorearon ante la franca admisión, pero sabía por experiencias pasadas que su franqueza era una buena manera de hacer que Sasuke se animara a cambio.
Y sí, podía ver esos ojos oscuros ardiendo, un indicio de colmillo deslizándose por los labios rojizos, y se emocionó, sus brazos se deslizaron alrededor del cuello de Sasuke, listo para continuar, cuando el hombre de cabello oscuro volvió a negar con la cabeza.
"No, no puedo arriesgarme, lo siento, Naruto. Creo que es mejor si esperamos un par de meses más"
¿Un par de meses más? ¡No podía hablar en serio! Naruto lo miró con incredulidad, pero mientras Sasuke se veía igual de frustrado, tampoco estaba dispuesto a ceder.
De repente, harto de toda la situación, harto de lo inquieto que se había sentido últimamente, ahora sabiendo que era porque él y Sasuke no se habían hecho el amor en mucho tiempo, se levantó y salió de la guarida. Ignorando el grito de sorpresa de Sasuke.
Marchando hacia la guarida de la izquierda, apenas se acordó de tocar la madera antes de entrar, sorprendiendo a Deidara e Itachi que habían estado durmiendo en su propio nido.
"Di a luz a Hikaru hace seis meses, ¿está bien que tenga sexo ahora? Me siento bien", dijo con impaciencia, poniendo sus manos en sus caderas.
Deidara parpadeó como un búho. "Eehh, no puedo decir que sea un experto médico, pero diría que si te sientes bien, hazlo, hum", respondió y se encogió de hombros.
"Seis meses parece tiempo suficiente para que tu cuerpo se recupere", estuvo de acuerdo Itachi, atrapado entre una mezcla de diversión y desconcierto.
"Estoy bastante seguro de que Izumi apenas esperó seis meses", murmuró Deidara y bostezó. Agitando su mano hacia Naruto, cerró los ojos de nuevo y se acurrucó más fuerte alrededor de Itachi. "Diviértete, diría yo"
Satisfecho de haber demostrado que tenía razón, Naruto regresó a su propia guarida, donde Sasuke lo estaba esperando con una mirada exasperada en su rostro.
"No puedo creer que le hayas preguntado a mi hermano si tu cuerpo está listo", suspiró, frotándose la mejilla.
"Le pregunté a Deidara en realidad", lo corrigió Naruto y volvió al nido, arrastrándose hasta el regazo de Sasuke.
Enlazó sus brazos alrededor del cuello del cambiaformas, sintiendo fuertes brazos descendiendo alrededor de su cintura. "Mira, entiendo que estés preocupado, pero estoy realmente bien, Sasuke. Ha pasado tanto tiempo y Hikaru se quedará con tus padres por lo menos un par de horas más. Por favor, tengo muchas ganas de volver a sentirte"
El rostro de Sasuke se suavizó y acarició suavemente algunos mechones rebeldes de cabello rubio hacia atrás. "Simplemente no quiero lastimarte"
"No lo harás", lo tranquilizó Naruto y cerró los ojos cuando los labios se encontraron con los suyos en un segundo beso.
Era divertido, reflexionó, mientras Sasuke lo empujaba hacia abajo y le quitaba la camisa, que siempre fuera Sasuke preocupándose de que pudiera terminar lastimándolo en lugar de que Naruto se preocupara de que el lobo cambiaformas pudiera lastimarlo.
Sasuke realmente debería tener más fe en sí mismo.
"¡M-más fuerte, por favor!" rogó Naruto, empujando hacia atrás contra Sasuke, quien gruñó y apretó su agarre en las caderas del rubio.
Sus rodillas probablemente estarían magulladas mañana, apoyadas como estaban contra la parte más delgada del nido, y todo su cuerpo estaría encendido con marcas de dientes, mostrando a todos lo que él y Sasuke habían estado haciendo, como si nos los hubieran escuchado todavía, pero a Naruto no le importaba.
Lo único que le importaba ahora era volver a tener a Sasuke dentro de él después de tantos meses de estar vacío, de sentir su fuerte cuerpo curvado sobre el suyo, su polla golpeando contra ese particular manojo de nervios en lo profundo de él que nunca fallaba, para prender fuego a todo su cuerpo, haciendo que las puntas de los dedos de sus manos y pies hormiguearan mientras el calor se acumulaba rápidamente en la parte inferior de su vientre.
Ya ni siquiera podía sentir el aire frío, el placer ardiendo en sus venas, calentándolo desde adentro, y maulló cuando Sasuke escuchó su súplica y comenzó a empujar más y más fuerte, golpeando ese punto en particular una y otra vez hasta que todo desapareció, se volvió demasiado y Naruto se corrió, sollozando por el intenso placer que parecía estrellarse contra él como olas golpeando contra un acantilado, haciendo que su cuerpo temblara y se estremeciera; sus muslos temblando mientras su fuerza se agotaba rápidamente; sus oídos zumban y luces brillantes destellan a través de sus párpados.
Incluso a través de la neblina de placer, pudo sentir a Sasuke creciendo constantemente, el nudo formándose y atrapándose en su borde, y también pudo sentir el momento en que Sasuke comenzó a disminuir la velocidad, aparentemente con la intención de salir antes de que el nudo pudiera atrapar por completo.
Su mano se disparó hacia atrás inmediatamente, aferrándose a la muñeca de Sasuke, y jadeó con urgencia, "No, no, dámelo, por favor"
"No estoy – no estoy tan seguro de que sea una buena idea", dijo Sasuke; su discurso fue arrastrado, evidencia de que sus colmillos estaban a la vista.
"Sí, lo es, es una muy buena idea, por favor, lo quiero, Sasuke, por favor, dámelo, lo necesito", balbuceó; su coherencia se disparó al infierno mientras su cuerpo aún sufría espasmos, trabajando a través de las últimas oleadas de su clímax.
Todo lo que sabía era que necesitaba todo lo que Sasuke le diera, incluido su nudo. Sin contenerse, sin alejarse de él cuando estaba claro que Sasuke quería continuar.
Sasuke gruñó y Naruto pudo sentir pequeños pinchazos en sus caderas donde las garras presionaban su piel, pero rápidamente se olvidó de eso cuando Sasuke comenzó a follarlo más duro, decidido a meter su nudo dentro y todo lo que Naruto podía hacer era apoyarse contra el nido, preguntándose delirantemente si sería capaz.
Resultó que podía y juró que se desmayó en el mismo segundo en que el nudo de Sasuke se atrapó por completo, llenándolo por completo, estirándolo como si no hubiera sido estirado en meses.
Cuando volvió en sí, su cuerpo todavía temblaba como si estuviera experimentando su propio terremoto personal, y Sasuke estaba besando suavemente la parte posterior de su cuello y sus hombros, pasando su mano arriba y abajo por el pecho y el estómago de Naruto. Estaban de costado ahora, Sasuke presionado firmemente contra su espalda, y el nudo aún no se había desatado.
"¿Te sientes bien?" Sasuke preguntó en voz baja, agarrando una de las mantas para poder cubrirlas.
"Sí, perfecto, esto es exactamente lo que necesitaba" suspiró Naruto, sintiéndose como si todavía estuviera confuso; cualquier ruido exterior lo alcanzaba como si estuviera debajo del agua.
La pequeña bocanada de risa de Sasuke acarició su piel húmeda, haciéndolo temblar levemente. La inquietud se había ido ahora, reemplazada por una profunda satisfacción en su lugar.
Esto había sido exactamente lo que necesitaba: conectar con Sasuke nuevamente después de meses de castos besos y caricias fugaces.
"Naruto, cariño, Hikaru tiene hambre, ¿te importaría-" Mikoto se interrumpió tan pronto como los vio y la forma en que arrugó la nariz dejó en claro que sabía exactamente lo que habían estado haciendo en ese momento. "¿En serio, Sasuke?" exclamó exasperada, haciendo reír a Hikaru. "¡Deberías saber mejor que no atarlo ahora! ¿Qué pasa si termina embarazado de nuevo?"
"Dijo que estaba bien", respondió Sasuke con petulancia, tirando de la manta hasta la cintura de Naruto para cubrirlo por completo cuando ella se acercó para entregar a Hikaru al rubio. "No quiero hacerlo infeliz y bueno, sucedió antes de que me diera cuenta" Se aclaró la garganta.
"Aún así, deberías haberlo sabido mejor", dijo con desaprobación. "Todavía podría amamantar, pero eso no significa que no pueda quedar embarazado"
Con la mente aún bastante confundida, solo fue lo suficientemente consciente como para colocar a Hikaru contra su pecho, donde el niño pequeño se aferró de inmediato, bebiendo con avidez. "No me importa, quiero tener más bebés con Sasuke", dijo Naruto distraídamente.
Eso hizo que Sasuke apretara su agarre alrededor de su cintura y lo tenía acariciando la parte de atrás de su cuello.
Mikoto suspiró y sacudió la cabeza "Ve a hablar con Deidara una vez que ambos estén listos. Él le dará a Naruto algo que asegurará que no quede embarazado hasta que ustedes dos estén completamente listos"
"Lo haré", prometió Sasuke y ella se fue entonces, chasqueando la lengua.
"Realmente eres increíble", se rio Sasuke; todo su cuerpo temblaba de diversión.
Naruto solo tarareó, sintiéndose como si estuviera flotando, acunado contra el pecho de Sasuke con su bebé comiendo.
Definitivamente se sentía bien ahora.
Deidara terminó entregándole un brebaje de hierbas, lo que evitaría que quedara embarazado mientras bebiera el té. Sabía un poco asqueroso, pero siendo Hikaru tan joven, sería mejor si esperaran un poco más antes de pensar en tener otro hijo.
Si alguien le hubiera dicho hace dos años que algún día se casaría con el hombre más increíble y amable que jamás había conocido, tener a su hijo y considerar tener más de uno, se habría reído directamente en la cara de esa persona, porque milagros como eso no existía. No para gente como él.
Pero existían, existían, y aquí estaba él ahora, junto con Sasuke, Hikaru creciendo día a día, rodeado de una familia que nunca pensó que tendría.
Podría haber sido un sacrificio, pero ahora lo amaban y lo querían, y eso era más de lo que podría haber soñado.
Y cuando miró hacia las puertas un hermoso día de verano y vio dos rostros familiares que le sonreían a medida que se acercaban más y más, el cabello rubio y plateado reflejándose en la luz del sol, supo que la vida no podía ser mejor que esto.
Aquí, rodeado de su familia.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro