Under the rays of the sun
Harry y Louis son hadas de reinos diferentes que no se llevan bien
Tag: Larry haditas, fantasía.
♡
Harry corrió, lo más que sus piernas le permitían, hasta esconderse detrás de un gran árbol. Tan solo le faltaban poco metros para poder salir del reino y había tantas hadas trabajando que no veía como iba a salir sin ser visto, pero eso no lo preocupaba, ha hecho esto varias veces que en segundos de distracción de aquellas hadas trabajando, podría salir. Y así fue, una vez que aquellas hadas de la primavera se reunieron para cargar algo Harry voló lo más rápido que pudo hasta salir del reino. Aquel lugar precioso que Harry llamaba hogar estaba bien escondido y guardado, que en todos estos años los humanos no han podido descubrirlo, esos humanos gigantes aterradores y malvados. Dejo salir un suspiro mirando a su alrededor sonriendo al haber logrado salir exitosamente una vez más en la semana, debería considerarse experto.
Cómo siempre camino por el lugar, grandes árboles, el viento soplando con tranquilidad y pequeños rayos del sol iluminando sus alas trasparentes de brillos. Harry amaba ser un hada de la primavera, y amaba sus alas preciosas, pero sentía que le faltaba algo. Estaba cansado de sentir la misma monotonía de hacer las cosas cada día, de solo convivir con hadas de la primavera cuando había más hadas ahí afuera, pero como la reina ha dicho, las otras hadas de afuera y los humanos son malvados y despreciables y nunca se debería convivir con ellas. Harry entendía, ha escuchado tantas historias a través del odio que se tienen entre todos los reinos. Tantas ilustraciones de esos humanos e historias de hadas malvadas de otros reinos.
¿Cómo llego Harry a salir del Reino? Ni él lo sabe. Solo se dio cuenta de que salía con demasiada frecuencia, recorriendo los preciosos lugares más cercanos y recolectando cosas que cree que deben ser inventos de los humanos. Todas esas cosas las guardaba abajo de su cama de hojas y eran preciadas. Sonrió volando hacia su lugar favorito, un lugar con un pequeño lago, árboles grandes y un prado de flores. En estas épocas en dónde era su estación, él mismo abría los capullos y de ella florecían flores de todos los colores. Voló rápidamente mirando lo bonito que lucía el cielo despejado sin casi ninguna nube que ocultara el precioso color azul del cielo. Estaba tan absorbo en apreciar el color que de un momento a otro termino chocando con un pájaro y perdió el equilibrio cayendo en el lago de su lugar favorito.
Dejo salir un grito tapándose la boca al instante. Tuvo que salir del agua como él podía, no podía volar porque sus alas estaban empapadas y su rodilla dolía. Se sentó en el césped del prado mirando como su ropa se había roto en la rodilla y de ella escurría sangre. Tuvo que alzar la cabeza cuando escucho un ruido entre los arbusto. Su pecho subía y bajaba esperando ver algún humano asomarse y aceptar su destino de que pudiera salir lastimado por los humanos, pero solo era aún hada, no cualquier hada.
Era Louis, hada del invierno. Trato de levantarse y correr con miedo, pero tuvo que aguantar un pequeño sollozo por el dolor de su rodilla. No lucho, tan solo se quedó sentado alerta a como Louis se acercaba. Reconocía a esa hada, se habían visto fijamente cuando había descubierto este lugar con Niall, fue la primera vez y última que su amigo salió del reino. Conocía su nombre porque mientras se miraban de pies a cabeza preguntaron por su nombre y aunque deberían odiarse lo soltaron sin impórtale nada. Niall lo había golpeado y tomado del brazo para llevarlo de vuelta al reino y nunca más lo había vuelto a ver, hasta ahora.
Harry está alarmado mirando fijamente los movimientos del castaño esperando que lo lastimara, en cambio, se quedó frente a él mirando su rodilla lastimada.
—Te vi caer—Es lo único que dice—¿Te duele mucho?
—No te acerques más, por favor—Pide asustado, pero Louis tan solo ríe de manera divertida. Pero con la petición de Harry da unos pasos atrás—Yo me iré, pero no me lastimes.
—¿Por qué quería lastimarte?
Harry lo mira ladeando la cabeza—La reina dice cosas terribles de las hadas de otros reinos.
—Ya—Murmura bajito alzando una ceja rápidamente con una expresión sería—Para ser un hada que sale del reino, me sorprende que creas todas las mentiras que te dicen.
Está a punto de preguntar a que se refiere y posiblemente de defender su reino, pero abre los ojos asustado cuando el hada se acerca a la altura de él y mira con atención su rodilla. La sangre sigue escurriendo manchando parte de su pierna. Chilla cerrando los ojos cuando ve como Louis se aleja pero lo escucha volver, esperando algún tipo de dolor, sin embargó, siente las suaves manos del hada pasando un poco de agua por su rodilla. La sangre cae mientras más agua eche ahí, unos segundos después está limpio sin rastro de sangre tan solo rascuños y moretones.
Lleva su mirada en los orbes azules de Louis y como está concentrado en quitarle la sangre. Tiene que fruncir el ceño confundido.
—¿Me esperas? Creo que debo tener una pomada que yo mismo hice—Pregunta Louis.
Harry asiente aún estando confundido, pero no rechista además de que aún le duele la rodilla y sus alas se encuentran mojadas. Tiene que levantarse para extenderlas y moverlas para alejar el agua de ellas. Alza la mirada viendo cómo Louis vuela hasta perderse entre los árboles. Se abraza a si mismo mirando a su alrededor alerta y temeroso de ser encontrado. Luego cae en cuenta de que tal vez esa hada le mintió y traerá consigo a otras hadas de su reino para hacerle daño. Trata de levantarse pero le está costando y la sangre vuelve a deslizarse por sus piernas.
—¡Auch!—suelta cayendo al suelo nuevamente. Se lleva las manos en la rodilla tiñéndose de rojo los dedos. Está siendo un desastre y el raspón es más grande de lo que pensó, su rodilla había impactado en la caída en una roca que había dentro del lago.
Lo único que puede hacer es confiar en esa hada y en qué estará seguro. Para tratar de calmarse se fija en el lugar, lo único que se escucha es el sonido del río, con las aguas corriendo, los cantos ligeros de las aves y del aire moviendo las hojas de los árboles. Todo es tan pacífico y tan precioso que no entiende cómo es que Niall no se atrevió a volver acompañarlo, pero entiende, si llega a ser descubierto saliendo del reino no sabe qué consecuencias podría tener y la reina, a pesar de ser una preciosa hada con gran porte, da miedo.
Se pone alerta al escuchar el movimiento de los arbustos moverse y deja salir aire cuando Louis regresa volando con toda la rapidez que puede. En sus manos tiene una bolsita hecha con hojas de árboles, la deja caer entre sus manos y nota lo fría que está. Claro, es un hada del invierno tiene que estar fría. Se responde así mismo. Louis se encarga de abrirla ligeramente y con sus dedos agarra la crema hecha por el hada. Harry se inclina oliéndola, sonriendo porque parece que huele fruta y algunas plantas que no sabe identificar. Louis le pone en poco en la rodilla con dedos suaves y olor a fruta.
A Harry le encanta y olvida unos momentos el dolor que siente en esa área y de que está hablando con alguien que se supone que debe odiar.
—¿Tu las haces?—Pregunta curioso cuando Louis cierra la bolsita aún con un poco de pomada.
—Sí, está hecha de manzana—Louis responde—La manzana es un excelente desinflamatorio y bueno... es de las pocas frutas que se pueden crecer en invierno.
—Oh—Arruga la frente. Louis tiene razón. Él nunca ha probado todas las frutas porque algunas no creen en época de primavera y ellos no tienen la manera de obtenerlas si no es con cada reino de diferentes estaciones. Justo como la manzana, para el cultivo del manzano debe tener temperaturas frías.
—Si exacto—Se burla de su respuesta antes de volver a dejar caer entre sus manos la bolsa—Puedes quedártela, así puedes ponerte más.
—Gracias.
Harry está confundido. Se supone que las otras hadas de los demás reinos son malas y les harían daño, pero está hada no lo ha hecho en cambio ha sido demasiado atento ayudándolo y curando sus heridas. No piensa en eso ahora, solo se levanta un poco con menos de dolor y agita las alas riendo por como Louis queda mojado ante la acción. Sus alas están totalmente secas por lo que se eleva un poco girando en el mismo punto antes de detenerse frente al castaño.
—Tengo que marcharme, pero muchas gracias, Louis—Es lo único que dice antes de volar con rapidez.
Con éxito vuelve entrar al reino y con pasos sigilosos entra a su hogar encerrándose en su habitación. Se deja caer en su cama hecha de hojas y palitos secos mirando como su rodilla está lastimada. Cuando escucha a su madre entrar rápidamente guarda la bolsita abajo de la cama antes de entrar a la cama y esconder su rodilla. Suspira cuando su madre vuelve a salir y Harry cae dormido por el cansancio.
♡
Camina sigilosamente con las manos hacia atrás viendo cómo hay algunas hadas cosechando fresas, rojas y jugosas a la vista. Todas perfectamente acomodadas en una cesta. Cuando las hadas están de espaldas Harry vuela y en con un bolsito que el mismo hizo con sus propias manos, guardan tres grandes y jugosas fresas antes de volar lejos, con dificultad porque las fresas eran demasiado grandes como para que su cuerpo pudiera cargar con ellas. Camina por todo el lugar arrastrando las fresas y suspirando cuando no hay nadie cerca sale del reino sin que nadie lo llegara a ver y abraza la bolsita con las tres fresas antes de volar. Se le está dificultando y se tambalea de un lado a otro y más con el aire azotando su pequeño cuerpo. Antes de que pudiera pisar el lugar, cae sentado y las fresas caen esparcidas en el prado de flores perdiéndose entre ella. Se levanta agitando las alas y palmeando su cuerpo quitando la suciedad y antes de que pudiera buscar las fresas estornuda con fuerza por el polen.
Estornuda tan fuerte que vuelve a caer de espaldas. Escucha una risa a sus espaldas y Louis está ahí riendo. Se cruza de brazos.
—¿Siempre eres tan torpe?—Louis camina hacia el mirándolo de arriba abajo—Un haditas torpe.
—¡No soy una hadita torpe!—Grita enfadado. Sin prestarle atención, mira hacia abajo en busca de las fresas, lo único que ve son las flores. Chilla cuando logra ver una y la toma rápidamente. Con una fresa en el brazo camina en busca de las otras dos.
Louis se eleva, tan solo un poco, mirando con los ojos entre cerrados hacia el suelo. Logra identificar las dos fresas. Vuelve a bajar plantando los pies en el suelo y camina hasta las fresas, las carga entre sus brazos y camina hacia Harry, en vez que las tomé el hada coloca otra fresa entre sus brazos.
—Son para ti—Baja la mirada—Son como agradecimiento por ayudarme el otro día. Son ricas y jugosas.
—Supongo que gracias—Louis responde dejándolas a un lado para poder llevarlas cuando vuelva a su reino. Harry se queda parado mirando como el hada se sube a una piedra, se da cuenta como bajo los rayos del sol las alas de Louis lucen magníficas y preciosas. Agita las alas volando y girando a su alrededor apreciando las alas, un tono azul, pero no como el cielo o el agua del lago de aquí o incluso como los de Niall, sino un azul único y diferente. Queda frente el rostro de Louis y sin previo aviso sostiene su rostro y acerca sus ojos a los de él, fijándose en el color de ellos. Azules, igual que sus alas.
Raro. Piensa Harry. El hada le da un manotazo.
—¿Qué haces? Es de mala educación hacer eso ¿Sabes?
—¡Claro! Porque ustedes son fríos—Asiente.
—No solo porque seamos hadas del invierno quiere decir que somos seres fríos—Gruñe rodando los ojos—Solo no es nada amable observar a la gente y luego sostenerla del rostro de la manera en que lo hiciste.
—Oh—Se le tiñen las mejillas—Entiendo. Es solo que tus alas son preciosas, son del mismo tono exacto de tus ojos. Es raro, yo tengo ojos verdes y mis alas son trasparentes y con brillos.
—Sí, bueno, así nací.
Harry lo mira no creyendo la parte en que dijo que no son seres fríos, lo poco que ha conocido a Louis, nunca ha respondido de manera amable o ha sonreído. Vuela de nuevo hasta estar frente a las alas del hada y llevar sus dedos para tocar sus alas, la suavidad entre sus dedos hacia cosquillas y es raro. Louis le gruñe enfadado pero no le toma la importancia. En su reino podías tocar las alas de las otras hadas, claro con su permiso, pero Louis aún no se había alejado por lo que pasó sus dedos por ahí.
Y sin duda bajo los rayos del sol que se filtraban en el lugar escondido las hacia brillar más.
—Sabes he dibujado alas que me han gustado de mis conocido, pero no había visto unas como las tuyas—Vuelve a volar frente al hada. Sus alas son azules, sus ojos lo son y su vestimenta lo es. Mantiene una pierna flexionada mirándolo con nada de gracia y amabilidad—¿Puedo dibujar las tuyas? Puedo venir mañana y traer mis cosas.
—Tengo mejores cosas que hacer, que perder mi tiempo haciendo nada para que tú dibujes mis alas.
—Por favor, solo serán unos cuantos minutos, incluso verás que pasaran rápido—Pide con las palmas juntas.
Su madre lo mataría si lo viera en estos momentos, fuera de sus actividades, fuera del reino y hablado con otra hada. Está arriesgándose y lo sabe. ¡Incluso la reina podría castigarlo! La mayoría de las hadas la adoran y le regalan cosas, pero Harry no le tiene confianza y puede ver la maldad en sus ojos, pero tal vez solo está siendo paranoico y solo está protegiéndolos a ellos, pero él no quiere permanecer ahí siempre, ha descubierto nuevos lugares, nuevas flores y plantas, animales y estar todo el día en el reino le aburre aún cuando tenga a su amigos ahí. Está disfrutando conocer a Louis y las peculiaridades que puede observar a simple vista.
Está consciente de que no debería regresar, de que no debería tentar al destinado y que algún día si alguien lo viera salir del reino porque podría tener graves consecuencias que Harry no quiere averiguar, pero en serio quería dibujar las alas del castaño.
—Bien—acepta derrotado—Solo tendrás poco tiempo.
—Sí, sí—Dice emocionado antes de darse cuenta de que se está metiendo el sol así que mira al castaño—Vendré mañana, no faltes. Tengo que irme.
Es lo que dice antes de sonreírle una última vez y volar hasta el reino con la promesa de ver mañana a Louis.
♡
Chillo del susto cuando Niall puso una mano en su hombro mientras esperaba a que las hadas estuvieran distraídas para poder salir del Reino. Esas hadas eran demasiadas chismosas que sabía que le dirían a la reina tan pronto como lo descubrieran. Soltó todo el aire contenido antes de darse la vuelta y sonreírle a su amigo. Pensó que ya estaba muerto, pensó que alguien lo habría descubierto y lo acusaría. Tan solo era Niall. Se llevo sus cosas hacia atrás para que su amigo no las viera, pero ya lo había hecho.
Tan solo tenía que sonreír y verse tierno para que su amigo lo dejara marchar sin un sermón de madre.
—¿Estabas a punto de salir del Reino?—Se llevo la mano al puente de su nariz suspirando—Harry, sabes que es demasiado riesgoso ir, alguien puede descubrirte ¡O peor aún, un humano! Ya sabes esos seres feos y malos.
—Estaré bien. He salido varias veces y no ha sucedido nada—Lo calma.
—No puedes estar tan relajado y seguro—Le señala pero luego lo ve entre cerrar sus ojos—¿Qué hiciste eh? Te he visto salir con regularidad, más que antes. ¿Hay algo que quieras decir?
Se paralizó y sus alas se levantan en estado de alerta. Niall se da cuenta y no es algo que pueda ocultarle, él muchas veces le ha salvado el trasero y si se molesta con él, ya no podría estar tan seguro saliendo, además de que era su mejor amigo y lo quería como un hermano. Deja que sus manos caigan a sus lados y muestren sus materiales de pintura y dibujo. Dibujaba en hojas secas y sus pinturas él mismo lo hizo con fruta y especias.
—Es que hay un hada.
—¿¡Un hada!?—Niall abre los ojos gritando. Harry suelta las cosas para lanzarse a su amigo y taparle la boca mirándolo alarmado.
—Sí, se que vas a regañarme y decirme todo lo que dicen de las hadas, pero él no es así, es diferentes—Le explica con palabras atropelladas—Además solo iré a pintar y tiene unas alas preciosas, como ninguna otra, pero ese no es el caso. Prometo que iré hacer eso y ya no volveré ahí de nuevo, lo prometo. Solo no digas nada.
Odia prometer eso, pero ya se ha arriesgado mucho, no es demasiado importante como para arriesgar su lugar en el reino. Podrían sacarlo del reino y dejarlo a su suerte y ahí afuera era demasiado grande para una pobre hada, podría morir ahí fuera o ser descubierto por humanos. Era demasiado arriesgado ser expulsado del reino.
Dejo caer la mano viendo cómo su amigo se debatía consigo mismo. Al final asintió, así que se lanzó en sus brazos alzándolo volando en círculos antes de soltarlo y tomar sus cosas y con ayuda de Niall salió del reino. Voló con felicidad hasta el lugar viendo que Louis estaba ahí comiendo un trozo de fresa mientras miraba el lago aburrido.
—¡Viniste, gracias!—Se dejo caer a su lado dejando sus cosas a un lado.
—Hola a ti—Louis batió las pestañas con indiferencia—Apúrate no tengo tiempo.
Harry se levantó antes de preparar las cosas y se sentó detrás de Louis para ver mejor sus alas. Sin duda preciosas, tal vez no tenga el tono exacto, pero hará el intento de combinar otros colores hasta encontrarla. Mientras hacia su trabajo, el hada mordía un gran pedazo de fresa llenándose las mejillas de esa fruta. Tan pacífico como este lugar, Harry era un torbellino, hablaba tanto, se emocionaba y revoloteaba por todo el lugar y todo el reino, que su madre tenía que detenerlo. En este lugar podría ser como él quería sin ser limitado.
—¿Por qué vienes aquí? ¿No sabes que hay seres gigantes que hacen daño a las hadas o que las mismísimos hadas de otro reino lo hacen?
Louis lo miro con la mirada neutra antes de verlo alzar una ceja y volver a morder su fruta. Genial, tendría que pintar sin hablar o eso creía hasta que por fin el castaño hablo.
—Porque es el único lugar en donde me siento libre—Respondió—Además todo lo que dicen se basan en mentiras. ¿O por qué crees que no te he hecho daño? Porque todo lo que dice son pura mierda. No me dejó engañar con eso, no te diré que no es del todo mentira porque hay hadas malas en todos los reinos, pero no todos son así ¿O tu me harías dañó?
—Nunca.
—Ya ves—Lo apunto con la punta de la fresa antes de morderla y hablar con la boca llena—No te dejes engañar, pero ya es cosa tuya lo que quieras creer.
No dijo nada más, porque ahora estaba confundido, siempre creyó que todo lo que decían era algo exagerado, pero ahora se ha dado cuenta de aquella mentira. Su alrededor está lleno de mentiras y parece que están cayendo una por unas. Agita los rizos para dejar de pensar en eso ahora y se dedica a pintar. Sonríe cuando acaba y lo deja a un lado esperando que seque. Vuelva hasta sentarse frente al otro hada, sus ojos lucen fríos, pero no de la manera en que sea frío de personalidad, sino que sus ojos lucen como el hielo.
—¿Cómo es tu reino?
—Frio y hay hielo como para patinar.
—¿Patinar? ¿Qué es eso?—Ladea la cabeza confundido con el ceño marcado.
—Es como si este lago estuviera vuelto hielo y puedes deslizarte en ella. Es divertido—Le explica con calma.
—Suena divertido, me gustaría alguna vez intentarlo—Dice triste. Hay cosas que suenan tan divertidas que no puede hacer porque no es parte de él, fácilmente el castaño podría convertir un poco de agua en hielo, pero no el lago completo él solo.
—Lo es—Dice levantándose por completo y agitar las alas—Es tarde debo irme.
Asiente camina por sus cosas tomándolas, pero luego siente un tirón en su brazo y tiene que agitar las alas para volar. Mira asustado a Louis que lo pega en el tronco de un gran árbol, coloca una mano al lado de su cabeza y pega sus pechos juntos. Harry lo mira a los ojos antes de percibir un sonido y alzar la cabeza asustado. Son humanos, los reconoce por lo grandes que son en su comparación, con miedo suelta un sollozo y abraza a Louis escondiendo su cabeza en el pecho del hada, está algo frío pero no le importa.
Louis lo mira antes de volver su atención a los humanos, viendo cómo pasan de largo y se pierden en el lugar. Deja salir un suspiro.
—¿Estás bien?
Harry niega abrazándolo con fuerza pero alza la mirada con los ojos y mejillas bañadas de lágrimas. Mira hacia el lugar aliviado y con algo de temor al ver que los humanos se han marchado de ahí. Estuvo demasiado cerca. Luego mira a Louis y lo suelta avergonzado. Se limpia las lágrimas con fuerza.
—Sí, yo uhm—Harry baja la mirada avergonzado—Eran aterradores, pero no eran como nos lo pintaron en el reino. No sé parecían en nada.
Louis da un paso hacia atrás, pero le toca la frente con la punta de su dedo. Se siente frio—Claro, porque todo lo que dicen es mentira. Ya te lo dije.
—Uhm gracias por eso—Dice recogiendo sus cosas que habían caído del suelo—En realidad por hoy, dejarme pintar tus alas y protegerme de los humanos.
—No agradezcas, solo la próxima trae otras fresas. Creo que se han vuelto mis favoritas y ya no tengo más.
—¡Lo haré!—promete. Antes de despedirse y volar con mucha preocupación.
Cuando llega a su casa cae en cuenta de que ha prometido dos cosas que no se van a poder cumplir y está acabado. Eso es claro.
♡
Tuvo que romper la promesa que le había hecho a Niall porque dos días después aquí está, en el mismo lugar donde conoció a Louis con tres grandes fresas en sus brazos, pero el castaño no estaba ahí. Soltó las fresas dejándolas caer al suelo antes de caminar por el prado de flores y fijar su mirada en las flores cerradas. Camino hasta ellas y las acuno entre sus dos manos y tan pronto como las tocó floreciendo tomando un bonito color brillante. Sonrió orgulloso de su trabajo. Se alejo asustado cuando Louis se planto frente a él. El hada miraba con atención la obra hecha por Harry, todo eso lo ponía tímido y juzgado. De pequeño le tomo un tiempo, más que las otras haditas, lograr que sucediera eso, había recibido burlas que aún sentía que no lo hacía bien.
Pero Louis estaba impresionado y Harry estaba tan concentrado en el color de sus ojos y alas.
—Haces un excelente trabajo—Halago—¿Quieres ver qué puedo hacer?
Asintió curioso. Se inclino mirando fijamente como Louis tocaba con la punta de sus dedos los pétalos de las flores y al instante se escarcharon una por una, luego simplemente la flor cayó muerta. Harry miro impresionado a Louis. Claro, él era aún hada del invierno, lo cual no todas las flores resisten a esas altas temperaturas, por eso hizo eso la flor.
Alza su mirada hacia el castaño, ahora está muy curioso de las otras cosas que el hada del invierno pueda hacer.
—¿Qué más puedes hacer?
—Ven—Louis sonríe.
Harry lo mira desde donde esta, un par de metros arriba, sentado en la hoja de un árbol. Louis se había encargado de volver con hielo la hoja haciendo que caiga abajo ente las flores y Harry parecía divertido deslizarse en la hoja y caer entre las suaves hojas. Él castaño solo tenía los brazos cruzados mirándolo desde abajo viendo cómo Harry reía cuando caía, parece que no ha tenido mucha diversión en un par de tiempo. Puede que así sea.
—¡Atrápame, Louis!
—¿Estás loco? No haré eso.
—¡Vamos por favor!—El hada pidió mirándolo con ojos tristes y Louis solo quería ya marcharse a casa y era de noche y no iba a dejar a Harry estando aquí con todos los peligros que conlleva.
—Bien.
Harry sonríe victorioso y como lo ha hecho en los minutos que llevan aquí, se desliza en la hoja hecha de hielo y cae y Louis lo captura entre sus brazos pero termina cayendo sentado entre las flores. Gruñe molesto cuando Harry suelta una carcajada y por primera vez no puede evitar reír también.
♡
Harry deja de caminar cansado, pero al ver que falta poco vuelve a abrazar el melocotón que ha tomando de aquellas hadas que se encargan de cosechar las frutas. No debió de tomarla sin permiso e incluso las fresas que ha estado tomando hace días, pero con suerte nunca se darán cuenta de que él ha sido el culpable que hayan desaparecido y no cree que se hayan dado cuenta así que está calmado. Arrastra el melocotón cuando se cansa y suspira cuando llega al lugar. Louis alza las cejas viendo el melocotón. Ni siquiera sabe cómo ha logrado salir del reino con ese melocotón pesado, pero era demasiado rico como para que Louis se perdiera ese sabor, así que se lo ha traído y más que ahora Louis y él comparten cosas y Harry tiene pequeñas cosas preciadas escondidas abajo de su cama.
Louis vuela hasta él, volando alrededor del melocotón mirándolo curioso y con una sonrisa. Harry tan solo cruza los brazos por atrás sonriendo al ver lo feliz que se ha puesto Louis con la fruta.
—¿Es para mí?
—Sí, no iba arrastrar ese melocotón solo para comerlo aquí—Ríe dando unos pasos hacia él—Sé que te gustan las fresas, pero también es rico esto. Solo no me lo pidas seguido porque en una de estas, eso me aplastará.
—Ya lo creo—Louis ríe pero le da una mordida al melocotón soltando un sonidito de amor. Harry camina hasta una roca y descansa en ella. En el lugar entra pequeños rayos de sol que hacen querer tomar una siesta encima de una flor pero es demasiado peligroso no estar alerta a cada segundo.
Pasan tiempo compartiendo el melocotón llenándose las mejillas antes de recorrer el lugar compartiéndose cosas acerca de su reino, como son las hadas y Harry comparte porque viene a este lugar. Simplemente caminan por el lugar porque es divertido perderse entre las hierbas altas del lugar y jugar a las escondidas a pesar de que tienen diecisiete años.
Luego se meten al lago sintiéndose un poco más valientes y aventureros. Harry se siente tan libre mojándose y nadando y conociendo a Louis que siente que no estaba viviendo antes, no completamente. Ríen salpicándose de agua entre ellos hasta que Louis lo toma de la mano jalándolo.
—Vamos más al fondo.
—Pero, yo no sé—Se le tiñen las mejillas pero Louis lo sigue jalando hacia adelante que abraza al castaño de los hombros mientras Louis va yendo hacia lo más profundo, hasta que se detiene y lo ve puntitas.
Lo mira a los ojos dándose cuenta de lo cerca que están, Louis lo sostiene de la espalda acariciando sus alas y recuerda lo que Louis dijo de que era irrespetuoso tocar las alas de otra hada que tenía que aguantar una risita porque ahora Louis lo estaba haciendo, pero no le incomodaba, lo hacían sentirse un poco más relajado. Bajo la vista hasta los labios del castaño hasta que no puedo aguantar más tiempo y se inclino capturando sus labios. Louis jadeo sorprendido, pero unos cuantos minutos siguió el beso con calma mientras escuchaban el agua correr, el sonido de los pájaros y solo ellos dos en este precioso lugar.
Los labios del castaño están frío pero juntos crean algo cálido. Harry se sostiene con fuerza moviendo sus labios sobre los de Louis. Se separan cuando Louis lo hace y lo lleva hasta la orilla y salen del lago. No dicen nada, tan solo agitan las alas para alejar el agua de ellas y puedan volar de regreso a sus reinos. Se despiden como si el beso no hubiera sucedido y se marchan de ahí.
Aún siente la presión y las cosquillas de sus labios y como el beso sabían a melocotón.
♡
Soltó un gran suspiro dejándose caer al lado de Niall, que estaba sentado en un hongo grande. Tuvo que volar de regreso cuando se dio cuenta de que Louis no iba a ir como siempre lo han estado haciendo. Está un poco preocupado y había llevado otra gran fresa para que pudieran compartirla, pero Louis no había aparecido y se sentía un poco preocupado, lo único que podía hacer era tener esa incertidumbre por el resto del día porque no podía ir al reino de Louis; una porque no sabe dónde puede estar y dos no podía ir como si nada porque podrían hacerle algo. Así que regreso después de hacer su búsqueda de cosas. Había obtenido una caja que contenía, lo que parecía ser palitos de madera. También había conseguido un par de hojas de colores, pero no como las hojas de los árboles.
Harry iba a usar esas hojas de colores para dibujar, posiblemente si pueda pintar en ellas. Recarga sus codos en sus rodillas suspirando aburrido. Estar con Louis había sido lo más divertido de sus días y hoy simplemente no estaba.
—¿Crees que le pudo pasar algo?
Niall alza una ceja—¿A quién?
—A Louis—Dice así de simple.
—¿Al hada del invierno? ¿A él has estado viendo? Harry, sabes que no puedes tener nada con él, son de reinos completamente diferentes e imagínate si te llegan a descubrir. Te echan del reino.
—¿Tú crees?—Dice con miedo pero niega cruzándose de brazo—No me importa.
—Harry, solo quiero protegerte—Niall el acaricia el brazo—¿Además como sabes que no te hará daño a la larga? Ya sabes lo que dicen de las otras hadas de otros reinos.
Recuerda lo que Louis dijo acerca de las mentiras que le dicen, posiblemente a Louis le digan lo mismo en su reino, pero él si sabe distinguirlas. Además sabe que Niall ha estado más tiempo entre tantas mentiras, entiende lo asustado que está. Él estaba de la misma manera y luego gracias a Louis se dio cuenta en la mentira que el reino le dice, en realidad las mentiras que la reina soltaba.
Desearía que los reinos no estén separados, así podrían intercambiar frutas, vegetales o cosas que los otros reinos si podrían hacer. Recuerda cuando apenas estaba saliendo del reino y se lastimo las alas al impactar con una rama, un hada del otoño lo ayudo. No intercambiaron tantas palabras y tan pronto como Harry estuvo bien ella se marchó.
—Él no es así—murmura entre dientes—Me ha traído frutas y cosas que él mismo hace, me mostró lo que puede hacer.
—Solo ten cuidado y no te confíes—Su amigo suspiro derrotado.
Harry se levanta lanzándose en brazos de su amigo batiendo sus alas en señal de felicidad. Eso mismo hubieran hecho sus alas cuando Louis y él se besaron, pero como estaban mojadas no podían, además se sentiría avergonzado si se hubiera dado cuenta de cuánto había querido eso. Porque fue su primer beso, la primer vez que estuvo tan cerca de un hada de esa manera. Era nuevo y adictivo.
♡
Se detuvo unos segundos viendo cómo Louis estaba sentado en esa roca, como normalmente, mordiendo un gran trozo de fresa que había dejado ahí para este día. Harry sonrió volando con fuerza y cayendo encima del castaño, justo en su regazo. Hacer eso ocasiono que el trozo de fresa que estaba comiendo Louis cayera en el lago. El hada lloriqueo pero lo sostuvo de la cintura mientras las alas de Harry se movían como si aún estuviera volando y es algo que no podía contener, sus alas hacían eso cuando estaba demasiado feliz.
Le sonrió a Louis mientras esté lo seguía mirando molesto por haber ocasionando que lanzará su pedazo de fresa al lago. Pero Harry estaba demasiado ocupado feliz porque Louis estaba aquí de nuevo y lo había extrañado.
—¡Volviste!—Exclamo alzando los brazos—¿Por qué no viniste?
—Cuando estaba a punto de escabullirme mi madre me vio y me puso hacer unas cosas—Responde Louis—Y es peligroso venir más tarde.
—¡Y pensar que te había sucedido algo! Te pudo comer una rana o encontrado la reina ¡O peor los humanos!
Louis contenía una risa al ver a Harry alarmado a pesar de que le ha dicho que había estado ocupado. Podía ver cómo Harry lo miraba con los ojos abiertos preocupado por las muchas posibilidades que puedo haberle ocurrido y no haber venido a su encuentro. Tiene que callarle la boca con un trozo de fresa que le sobró. Harry entre cerró los ojos con la boca llena de fresa, trago con dificultad antes de alejarse de él.
Estaba rojo y caminaba entre las flores. Louis se mantenía sentado en la roca logrando ver cómo Harry asomaba la cabeza entre las flores sonriéndole. Esa hada era un caso. El hada de la primavera acunó las flores muertas dándole una segunda vida, ellas volvieron a florecer como si apenas hubiesen floreciendo, luciendo un bonito aspecto y color.
—¡Oh, oh—Harry se inclino chillando de alegría antes de volar de regreso a Louis—Mira son nueces, son deliciosas.
Se extendió una al castaño antes de llevarse una a la boca manteniendo las mejillas llenas. Después de eso obligó a Louis a caminar y buscar cosas, recolectaron cosas que no sabían cómo se usaban, pero eran bonitas y Harry buscará una forma de usarlas. Louis se quejo cansado, por lo que se detuvieron. Harry frunció el ceño viendo cómo pequeñas luciérnagas iluminaban el lugar, tan solo tuvo que mirar el cielo para darse cuenta que era de noche y que estaba en problema si no se iban.
—Tengo que irme—Toma sus cosas y se eleva aleteando las alas antes de quedar frente a Louis en inclinarse—¿Puedo obtener un beso antes de irme?
Espera a que Louis dijera algo, pero solo lo mira con los ojos amplios y la sonrisa caída, que más parece una mueca. Está a punto de irse pero Louis asiente.
—Yo... olvídalo—Baja la mirada—No tienes que aceptar. Es de noche, debo de irme.
—Solo ven aquí—Louis lo toma de la mano bajándolo hasta él y besándolo. Harry sonríe dejando caer sus cosas para sostener el rostro del castaño y sus alas hacen esto de moverse rápidamente y alzarse. Louis no dice nada, aún cuando parece que su movimiento golpea la mano del castaño que mantiene en su espalda.
Tan pronto como sus labios se separan Harry toma sus cosas picotea una vez más sus labios y se marcha de ahí. Entra al reino sin dificultad. Da pequeños pasitos mirando por la ventana de su hogar para poder ver si su madre ya había llegado a casa, suspira cuando se da cuenta de que no hay nadie. Deja caer todas las cosas en la cama tratando de pensar en cómo usarlas, pero lo único que su mente piensa es en Louis y en su beso.
♡
La pequeña hadita de la primavera saltaba sobre los hongos cercanos esperando a que aquella hadas se distrajeran y pudiera escapar del reino y poder ir a ver a Louis. Salto en el último hongo antes de pisar el suelo, y antes de que pudiera pensar en cómo escapar su madre paso junto ahí con la reina, llevaba un precioso vestido amarillo largo, su madre llevaba uno más corto. Claro, su madre ha sido la mano derecha de la reina y por ende ha sido el hijo ejemplar y bien portado o eso es lo que creía su madre, sin saber que su hadita salía del reino con todos los peligros que había afuera y más que se estuvieran viéndose con otra hada de otro reino.
Ella se infartaría si se diera cuenta de que sucedía eso y que su hijo no estaba pasando sus tardes con Niall o haciendo su parte del trabajo. Anne lo vio acercándose a él y acunando sus mejillas.
—¿Dónde ibas? ¿Por qué estás tan cerca de la salida? ¿No ibas a salir verdad—Ella le da una mirada de advertencia que lo pone todo nervioso y más porque la reina le estaba dando una mirada extraña.
Ríe nervioso alejándose de su madre—¡Puff! Nunca, estaba buscando algo pero no lo encuentro, además vi a una hada por estos rumbos pareciendo sospechoso.
—Muy bien, cariño—Su madre le aplaude—Solo no estés tan cerca de aquí.
—Sí.
Harry le sonríe a ambas antes de verlas caminar y dar la vuelta por otro rumbo y al ver que las hadas se hablaban entre ellas mirando a la dirección de la reina, Harry escapa de ahí. Vuela felizmente, tomando su tiempo de observar lo bonito que es el paisaje. Cuando llega a su lugar de siempre sonríe al ver a Louis ahí mismo mirando con atención el lago, puede que sus alas hagan un sonido que alerte al castaño porque se da la vuelta y lo mira. Un hada tan descarada que cuando sus pies tocan el suelo se impulsa y besa a Louis.
Y es que nunca había tenido nada como esto y la manera en que hace que su corazón explote de emoción al saber que vera a Louis cada día. Sabe lo peligroso que es venir todo los días e incluso tener una relación con otro hada, pero simplemente no puede pensar y actúa como si fuera libre de hacer lo que sea sin tener una consecuencia.
Se aleja con las mejillas rojas y las alas revoloteando sin su consentimiento, Louis ríe acercándolo nuevamente.
—Mi hadita de la primavera—Declara antes de besarlo nuevamente y aunque venía con una pregunta, muere en su boca porque con lo que ha soltado Louis le da la respuesta que había estado rondando su cabeza toda la noche.
Cuando entra al reino y da unos pasos hacia adelante como normalmente lo haría, se da cuenta de que algo anda mal, la reina está frente a él cruzada de brazos con otras hadas a su lado e incluso su madre. Sus ojos lucen decepcionados y puede ver el temor en ellos. Le late tanto el corazón que no entiende nada de lo que dicen mientras lo toman de los brazos y lo obligan a ir con ellos. Aunque esté en estado de shock sabe que está en serios problemas y tiene miedo de lo que le harán.
Su madre lo sigue desde atrás mientras hadas lo toman con fuerza y lo obligan a entrar y lo encierran en un lugar bien reforzado y con solo una ventana reforzada con palos de madera. Harry lloriquea con fuerza soltando disculpas y sollozos esperando que con eso le otorguen el perdón, pero tan pronto como es encerrado y dejado solo, cae al suelo. Tiene que sacar todo su dolor de alguna manera, su madre no lo ha defendido y nunca volverá a ver a Louis.
Alza la cabeza cuando la reina lo mira desde aquella ventana cuando todos se van.
—Créeme pasaras un buen tiempo aquí—Ella suelta cambiando ese dulce rostro angelical en un rostro de maldad—Sabia que ese hada, ese rubio, sabría dónde encontrarte. Has roto todas las reglas, Harry. Has salido todo este tiempo del reino y has pasado tiempo con aquella hada del invierno, teniendo una relación a escondidas. Veremos cómo enderezaremos ese comportamiento, por el momento acostúmbrate a estar aquí y si intentas escapar te desaparezco y no con vida.
No sabe que le duele más, no volver a ver a Louis o que su propio amigo lo haya traicionado de esa manera.
Esa noche duerme en un suelo rocoso y sucio, con lágrimas cayendo de sus mejillas y sintiéndose traicionado y decepcionado de las personas que más quería.
♡
Despierta cuando escucha unos pequeños golpes, tiene que parpadear lentamente para darse cuenta de que Niall está ahí y a pesar de que se encuentra molesto con él, no puede evitar emocionarse y volar hasta ahí. Niall sonríe antes de atraerlo a él, bueno lo que podían, debido a la reja que los separaba.
Pero de pronto se acordó de su traición y se alejo molestó. Se cruzó de brazos y desvío la mirada para no caer en la tentación de abrazarlo de nuevo al ser la única persona que ha visto en todo el día.
—Pensé que te hicieron algo peor—Niall hablo bajito—Lo siento, la reina me amenazó con sacarme del reino, a mi madre y a mí. Sabes que mi madre está muy enferma que no sobreviviríamos estando afuera con los peligros. Trate de decir que no sabía dónde estabas, pero no puede. Lo siento.
Harry voló hasta el quitándole las lágrimas que caían por sus ojos y más con los sollozos que salían de sus labios. Se sentía mal amigo y eso lo sabía Harry.
—No te disculpes, te puse en una situación que no merecías. Fui egoísta al dejarte todo esto en tus manos mientras yo me iba—Harry niega—Fui un mal amigo y también lo siento.
—Está bien—Niall se alejo antes de sonreír—Puedes hablar con la reina y decirle lo arrepentido que estás y prometerle no volver hacerlo.
Ante eso Harry se alejo negando. Nunca haría algo como eso y menos ahora que sabía la clase de hada que era la reina, mostrando el bondadoso corazón que tenía, cuando solo era una vil mentira escondida con esas palabras y acciones. Nunca iba a renunciar a Louis ni a los preciosos paisajes de afuera y menos a lo libre que se sentía ahí. Hay cosas por las que vale la pena luchar solo para poder sentirse vivo.
—No, no. No voy a renunciar a Louis y la reina no es cómo crees que es—Harry aprieta los puños molesto a su lado—Ella dijo que si no cambiaba iba a desaparecer y no creas que vivo. Esas fueron sus palabras. Estoy cansado de las mentiras que nos dice, de que nos use a su antojo y que la gente crea que lo hace por nuestro bien. Solo ha pensando en ella.
Niall parece en verdad impresionado, él siempre ha visto a la reina como un ejemplo desde que son pequeños y le duele que no sepa ver lo cruel que puede llegar a ser la reina.
—Yo...no lo sabía—Niall baja la mirada—Aun así creo en ti.
—Gracias, Niall.
—Buscare la forma de sacarte de aquí—Niall le toma de las manos prometiéndole—Aunque te vayas y pierda a mi mejor amigo, haré todo lo posible para que puedas escapar e ir por lo que en verdad te da felicidad.
Tiene que aguantar llorar cuando Niall le promete eso y tan pronto como se va. Suspira con tristeza, con una energía baja. Estar entre estás cuatro paredes, sin sentir el aire en su rostro mientras vuela o besar a Louis son cosas que lo hacen sentarse en el suelo y dormir por horas sin intentar escapar de ahí.
♡
Camina de un lado a otro por el pequeño espacio donde está encerrado, patea la comida que le han dejado desabrida y seca, que ni siquiera le dieron ganas de comer y puede que esté más delgado, pálido y sin brillo en sus alas, sin vida por no comer en los cinco días que lleva ahí dentro. La tristeza y la desesperación lo está consumiendo poco a poco que no encuentra la manera de calmarse y centrar su atención en otra cosa que no sea el sentimiento de sentirse libre y el sentimiento de besar a Louis, no solo de besarlo, sino la manera en que se sentía cuando Louis lo sostenía de la mano abajo del agua o cuando lo miraba con aquellos ojos cargados de sentimientos cuando hacia florecer las flores que estaban en el capullo.
Se deja caer en el suelo abrazando sus piernas mirando la pequeña ventana que le han dejado. Cinco días se siente una eternidad y más no estar cerca de Louis. Tiene que prestar atención cuando escucha bajas maldiciones y de pronto una cabellera castaña demasiado familiar se deja ver. Harry se eleva batiendo las alas antes de sonreír en grande y volar hasta ahí. Trata de tomar el rostro de Louis y besarlo pero es un poco complicando, pero el hada busca la manera de hacerlo y se siente la libertad en la punta de sus dedo, la poca libertad que ha sentido en estás cuatro paredes.
Se besan con desesperación y demasiado amor que Harry llora, él solo quiere salir de aquí y abrazar a Louis de la mejor manera.
—Harry, sol, estás bien—Louis se cerciora de ver qué este bien antes de mirarlo a los ojos—Tan pronto como Niall me dijo que te hicieron vine hasta aquí.
—¡Niall, salió del reino!
—Claro, él me dijo que estás aquí—Louis sonrió antes de tomarlo del rostro—Haremos una cosa, solo si tú estás dispuesto. Creemos nuestro propio reino, con nuestras reglas. Hay hadas de invierno que hemos estado enfadados y están conmigo e incluso ese duendecillo rubio vendrá con nosotros. Solo salgamos de aquí y vayamos.
Ni siquiera tiene que pensarlo con claridad porque está tan cansado de la manera en que los hacen trabajar aquí, de la opresión y de las mentiras. Solo quiere un lugar donde pueda sentirse él y ser libre y más si está al lado de Louis y nada los separara. Asiente varias veces y no entiende como Louis lo consigue, pero con ayuda de otras hadas, hadas del invierno y primavera logran derivar el lugar y tan pronto como sale tiene que lanzarse a Louis y girar.
No les dura tanto la felicidad porque varias hadas y la reina están frente a ellos luciendo enfadados. Louis da un paso hacia adelante llevándolo atrás.
—Harry, te lo advertí—Ella da unos pasos hacia él y Harry está tan asustado que toma a Louis del brazo—Voy a expulsarte del reino y no volverás a dar un paso aquí y no podrás ver a tu madre.
Harry frunce el ceño dando un paso hacia adelante con la frente en alto—No me importa, porque estoy cansado de sentirme prisionero aquí y de las mentiras. Incluso creo que nadie sabe su verdadera cara y me iré, formaremos nuestro propio reino y no va ser como el de usted.
—¿Dejaras a tu madre aquí? Clase de hijo eres, cuando te traicionen estás hadas no tendrás un lugar aquí.
—Pues no me importa y mi madre elige su propio camino—Harry miro a todas las hadas del reino que están presenciando la discusión—¡Y si quieren ir con nosotros va a ver un lugar ahí para ustedes! ¡No será como aquí! Nada de lo que les ha dicho es cierto y yo lo he podido comprobar.
Después de eso hubo varios susurros a su alrededor y poco a algunas hadas se ponían atrás de él. Sonríe orgulloso antes de ver directamente a su madre, pero no había nada que hacer, ella ya había elegido un bando y no era a su lado. Tuvo que aguantar las lágrimas que amenazaban con salir.
La reina rio sínicamente, su voz fría inundó el lugar—¡Entonces vayan con él! Cuando vean que no lograrán sobrevivir sin mí, no vuelvan. Pagarán todo lo que están haciendo.
Y con eso la reina se dio la vuelta y se marchó de ahí, lo que más le dolió es como vio que su madre siguió a la reina. Tuvo que parpadear cuando algunas hadas los estaban sacando. Sin embargo, se sentía bien al saber que casi la mitad del reino confiaba en ellos y de querer hacer un cambio.
—Hey, saldremos de esto, pero juntos—Louis llamo su atención abrazándolo de la cintura.
—Juntos—Asintió para emprender este camino.
♡
—¡Eso luce muy bien! Buen trabajo—Harry les dijo a aquellas hadas mientras cosechan con amor las frutas que brotaban de los árboles.
Harry miro a su alrededor. Este reino era completamente diferente, nada comparado con el otro. Hadas de todas las estaciones conviviendo con armonía y felicidad, Harry ya no se sentía prisionero de un lugar, se sentía tan libre como nunca lo había sido. Fue un poco difícil al principio, empezar de cero, pero con el esfuerzo de todos pudieran armar un reino precioso y al gusto de todos y al poco tiempo el rumor corrió hacia otros reinos y poco a poco otras hadas pedían unirse a ellos. Aunque no fuera de su agrado tenían que tener un representante, pero tenía que ser alguien justo, valiente y determinante, al principio Louis fue votado, pero él era un alma libre y sin preocupaciones que desistió de aquel puesto, pero había una hada del otoño que demostró esa amabilidad y honestidad que nunca se había visto, tan perfecta para el puesto.
Harry miro a su alrededor buscando con la mirada al hada del invierno pero no lo vio por ningún lado pero se quedó estático al ver a su madre frente a él. Ella le sonrió con tristeza y Harry quería correr hacia ella y apretarla en un gran abrazo, pero ha pasado meses sin verla que no sabe cómo reaccionar.
—Harry—Ella lo estrecho en sus brazos. Dejo caer la cabeza en el pecho de su madre recibiendo caricias que ha necesitado mucho—perdóname, cariño, sé que es tarde y que creí tarde en ti, pero si me permites prometo enmendar el daño, no volveré a dejarte solo. Te he extrañado tanto cariño.
—Está bien, está bien me costará un poquito—Alzo la cabeza—¿Te quedarás?
—Lo haré.
—¿Estarás de acuerdo con mi relación con Louis?
—Lo hare, solo quiero estar cerca de ti y la manera en que te defendió aquel día y todo lo que hizo para salvarte de ahí estoy segura que te ama y si él lo hace, por mi estoy más que de acuerdo.
Harry sonrió antes de volver abrazarse, tan solo le faltaba eso para sentir que lo tenía todo, sentir que todo estaba saliendo bien. Se alejo quitándose las lágrimas mientras tenía una sonrisa temblorosa en el rostro. Guió a su madre a una casa que él había hecho con la esperanza de que ella algún día cambiará de opinión y viniese. Ella sonrió agradeciendo y diciéndole lo orgullosa está de tener un hijo como él.
—Espero que te guste y cualquier cosa no dudes en decirme—le besa la mejilla antes de dar un paso atrás—Ahora tengo algo que hacer.
Sin más, voló hasta salir del reino e ir a su ya familiar lugar. Louis estaba sentado en la roca movimiento los pies dentro del lago sin gracia. Harry voló en dirección hasta el hada, hasta tirarse sobre él, ambos cayendo al agua, Louis se alarmó pero relajo las facciones cuando se dio cuenta de que solo era él. Se inclino besándolo tomándolo con fuerza de la mandíbula.
—¡Mi madre regreso, Louis!—Lo abrazo del cuello—Ella quiere conocerte y va a quedarse. Estoy tan contento.
—Se nota, sol, estoy feliz por ti—Dijo acariciando sus mejillas que levantaban una gran sonrisa de su rostro y aunque están en el agua puede sentir que sus alas hacen el intento de revolotear para mostrar cuan feliz se encuentra en esos momentos.
—Esta felicidad se debe solo a ti—Beso su nariz—Desde el momento en que te conocí solo te has encargado de mostrarme cómo es en realidad el mundo, sin ti posiblemente estuviera siendo infeliz ahí en ese reino.
—También se debe a ti, has hecho un gran trabajo en el reino junto con la reina, si estamos mejor que nunca es gracias a ti, que no se te olvide.
Ambos se miran con tanto amor y con el sonido propio de la naturaleza se unen en un beso. Sus alas mojadas brillan bajo la luz de los rayos del sol mostrando lo maravilloso que puede ser su amor si se tienen al lado para afrontar las cosas, justo como Louis dijo: lo harían juntos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro