Promises and broken dreams
Se prometieron entre besos nunca separarse, hasta que llega el día que lo hacen.
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Harry amaba despertar de esta manera. Los rayos de luz filtrándose un poco por las persianas, el colchón suave y cómodo dónde estaba acostado, lo cálido que se sentía la habitación. Despertar de un buen sueño y sobre todo, lo que hacía que su corazón se encogiera de amor cada mañana era despertarse y sentir estos brazos ajustarse en su cintura, sentir la suave y lenta respiración de su novio detrás de él. Sentirse protegido y amado despertado entre estos brazos, era una sensación que no cambiaría por nada del mundo. Tan solo despertarse en los brazos de su novio se sentía victorioso, no necesitaba nada más si Louis estaba a su lado.
Dejo que un bostezo se le escapara y se acurrucó en el pecho de Louis entrelazando sus dedos sobre su pecho y permitirse solo unos cuantos minutos más estar en la cama y revolotear sus pestañas para despertarse del increíble sueño que ha tenido. Estiró los dedos de los pies y miro por la abertura de las persianas. El cielo estaba despejado y el sol estaba presente. Sonrió ante eso, no quería que la lluvia lo mojara mientras iba al trabajo, tenía que presentar un trabajo importante y tenía que estar presentable. Aún con ese pendiente se dio la vuelta para estar frente a su amado novio. Sus labios entre abiertos soltando ligeros suspiros y ronquidos, el cabello le caía en la frente tapando sus pestañas y las mejillas rojas por la presión contra las almohadas. Harry se inclino dejando besos por sus mejillas y se alejo solo para alejar todos esos cabellos y pasar sus dedos con delicadeza por todo su rostro.
Louis era precioso. El había se había enamorado mientras fueron amigos y poco a poco los sentimientos surgieron y florecieron cada vez más, pero siempre vio esa belleza en él. Harry paso una de sus manos en la nuca del castaño pasando sus dedos en su cabello y despertarlo de la mejor manera, bueno Harry lo había despertado de otras maneras que implicaban mucho más tiempo, pero ahora no lo tenía por lo que estaba bien así, cuando llegue en la noche le recompensará adecuadamente.
Deslizó sus dedos por el pecho desnudo de Louis tomándose el tiempo de delinear el tatuaje de sus clavículas y de sus brazos. Estaba tan centrado en acariciar cada uno de los tatuajes que se encontraban ahí que no vio cuando Louis abrió los ojos con pereza y sonrió hacia él, de esa manera en que derrite a Harry. Louis tenía diferentes sonrisas y el rizado sabía identificar cada una de ellas, después de todo estar a su lado por cuatro años a ayudado.
—Siempre sabes cómo despertarme—Harry alzó la mirada cuando lo escucho. Se encontró con esos ojos azules que tanto amaba.
—Lo sé—Harry dijo orgulloso. Louis hizo esto de acercarlo hasta que sus pechos se estaban tocando y sus narices se presionaban juntas—Tengo en mente otras maneras divertidas de hacerlo, pero ya sabes que tengo que llegar temprano a mi trabajo.
—Uhm, me gustaría saberlas—Louis gruño por lo bajo.
Louis se inclino y capturó sus labios, no le importo mucho el aliento mañanero que ambos tenían. Tan solo lo acerco y lo beso. Harry suspiró pasando sus manos por el pecho del castaño acariciando su piel. Movió los labios lentamente sin mucha prisa, amando la calidez que le proporcionaban los labios de Louis y sus brazos. Harry jadeo abriendo sus ojos unos instantes solo para ver cómo Louis lo ha colocado abajo de él y lo ha aprisionado con sus brazos.
Dios, no deberíamos. Harry pensó mientras enredaba sus brazos en el cuello de su novio y abría las piernas. El castaño se posicionó entre ellas creando una deliciosa fricción entre ambos. Harry lo dejo, esto podría ser rápido, de todas formas ya estaba completamente desnudo debajo de su pijama. Su beso ya se estaba volviendo tan desordenado y calientes. Sus piernas se apretaron en la cintura de Louis buscando frotarse, pero abrió los ojos cuando los besos de Louis llegaron a su pecho. Rio nervioso y alejo a su novio.
—Louis—reprendió alejándose—Deja de provocarme, te he dicho lo importante que es esto.
Louis se dejó caer en la cama frustrado ante la idea de no tener un polvo mañanero con su Harry.
—Por lo menos puedes quedarte unos momentos más—Louis pidió mirando hacia su dirección.
Harry resoplo, pero gateo hasta sentarse en el regazo del castaño, ignorando el bulto en sus pantalones y enredo los brazo en sus hombros y se inclino para repartir besos en su mandíbula. Suspiro, no importaba cuántos años hayan pasado y cuánta monotonía había en las mañanas, siempre encontraban la manera de hacer las cosas diferente y nunca se ha sentido aburrido, era todo lo contrario. Sus citas de fin de semana se reducían a ir sin un plan y siempre resultaba bien, como la vez en que condujeron por horas solo para ir a un buen restaurante, la vez en que Louis lo follo en la playa de noche y con la noche estrellada solo porque Harry quería algo así de romántico. Pero también sus planes semanales de acurrucarse en el sofá con una buena cena y una buena serie o simplemente acaba con Harry encima de Louis teniendo un buen sexo. Nada ha sido aburrido aún cuando había monotonía. Ellos lo hacían diferente, como si estuviera destinado a esto.
—¿En qué piensas?—Louis pellizco su frente riendo.
Harry se quejo removiéndose en su regazo—En nada. ¿Qué chismoso saliste eh?
—Soy tu novio es claro que quiero saber—Se defendió—Seguramente estás pensando en ese chico que te coqueteo en ese ascensor aquel día.
Harry resopla rodando los ojos—Supéralo.
Harry chillo cuando de nuevo todo dio vuelta y estuvo debajo de Louis. Estaba vez se removió ante la mirada de Louis, sus mandíbula estaba apretada, sus ojos reflejaban celos y ya no tenía esta bonita sonrisa en su rostro.
—¿Qué lo supere?—Louis pregunto molesto. Harry apretó las piernas. Este Louis le prendía, con lo posesivo y cabreado—Estaba tan suelto y coqueto contigo como si yo no hubiera estado presente.
—Ni siquiera le preste atención—Harry respondió—¿Estás celoso de nuevo?
—Estoy ardiendo en celos—Suelta sincero—Pero lo entiendo ¿Sabes? Joder ese día lucias hermoso, tenía que mantener mis manos para mí mismo.
Harry se sonrojo. Aún cuando Louis era de decir esas cosas la mayor parte del tiempo, aún no se acostumbraba a los contantes halagos. Lo abrazo de los hombros acercándolo a él, dejando unos suaves besos en sus labios para demostrarle cuando lo amaba.
—Te amo—Murmuro sobre sus labios—Te amo tantísimo y deja de ser celoso.
—Hare el intento—Louis acepta. Se besan un poquito más amando como sus manos se buscaban entre besos. Harry lo miro a los ojos cuando el castaño se alejo—Mi amor, te prometo amarte toda una vida.
Estaba seguro que sus ojos tenían este brillo y que sus mejillas estaban ligeramente coloreadas—También yo, te prometo siempre estar a tu lado.
—Umh—Louis beso su cuello—Trato hecho.
Harry sonrió satisfecho con su respuesta, dejo que Louis lo besara por uno cuantos minutos más y luego se levantó para el largo día que le espera.
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Tocó varias veces el timbre esperando que alguien se indignara abrirle la puerta, e incluso su novio lo hiciera, pero conociendo a Louis el esperaría que alguien más lo hiciera aún sabiendo que era él. Rueda los ojos ante ese pensamiento, espera con paciencia que alguien abriera. Después de unos segundos Niall abrió la puerta sonriendo y abriendo los brazos, rápidamente Harry se dejó caer en ellos cansado. Había extrañado a su amigo, varias semanas sin verse por culpa del trabajo.
—¿Cansado?
—Si, ya sabes cómo me tienen en el trabajo—Lloriqueo Harry en su hombro. Aún con toda esa presión amaba su trabajo y no lo cambiaria por nada, le costó mucho tenerlo.
—Entra, están los chicos—Niall se aleja para dejarlo pasar.
Harry asintiendo con las extremidades cansadas y se adentra a la casa, lo primero que ve es a Liam y Zayn sentado en el suelo con quién sabe que en sus regazo y a una esquina en la cocina está Louis bebiendo una cerveza relajado. Con un puchero en su rostro se acerca al castaño dejando sus cosas en la mesa de la cocina y se deja caer en sus brazos, es envuelto rápidamente. Amaba llegar de un largo día y tener la dicha de estar entre los brazos de su novio, sentir su calor y tener estos besos en su cabello.
—Dios, se me cae la cerveza—Louis gruñe alejando la cerveza para poder colocarla en la isla de la cocina.
Ríe alzando la vista y admirando de cerca su novio, luce mejor que él, todo despierto y bañado y Harry tan solo saliendo de un largo día de trabajo. Se inclina besando la mandíbula del castaño mientras esté lo aprieta a su costado respirando con suavidad. Está consciente que están siendo los novios amorosos y empalagosos frente a sus amigos, pero necesitaba esto después de un largo día, tal vez cuando vuelvan a casa pueda persuadirlo de acompañarlo a un baño de espuma mientras beben algo.
Harry suelta un suspiro asintiendo para si mismo. Necesita eso.
—¿Qué haces?—Louis ríe alejándolo.
—Nada—Se sonroja aún con la cabeza en el pecho de su novio—Creo que me vendría bien un baño al llegar a casa, es todo. Por cierto ¿Cómo te ha ido en el trabajo?
Harry se aleja de entre los brazos del castaño y camina hacia la cocina de Niall para tomar un cerveza, la abre y se la lleva a la boca. Regresa para sentarse al lado de Louis acomodando con una mano sus rizos, llevándolos hacia atrás.
—Bien, ya sabes todo normal—Louis le sonríe—¿Cómo te ha ido a ti, mi amor? Te ves cansado.
Suelta un puchero—¿Eso crees? Creo que necesito un descanso o algo así.
—Necesitamos un descanso—Louis ríe incluyéndose en sus planes. Harry rueda los ojos con cariño. Como si Louis nunca fuera parte de sus planes—Tal vez a mitad del año podamos ir de vacaciones.
Harry se le prende los ojos emocionado. Ama su empleo y en dónde están ahora mismo y no lo cambiaría por nada, pero la promesa de ir de vacaciones a algún lugar le permite relajarse un poco. Louis se inclina acariciando con su pulgar su pierna mientras se miran a los ojos, con tanto amor que podrían desbordarlo sin darse cuenta. Besaría a su novio si sus amigos no estuvieran gritando en medio de la sala y riendo, podría haberse inclinado y besarlo con paciencia y amor, pero la risa que suelta Niall hace que voltee y sus ojos se iluminen. Se levanta acariciando la mano de Louis antes de dejarse caer al lado de Niall en el sillón abrazando sus piernas en su pecho viendo la televisión.
Pasan un tiempo con sus amigos antes de que vuelvan a casa. Una vez que pisan su habitación Harry guía a Louis hacia el baño y toman un relajante baño en la oscuridad, con solo una luz tenue iluminando mientras Louis besa su hombro y susurra tantas palabras de amor y promesas que Harry podría llegarlas a olvidar alguna vez, sin embargo, cierra los ojos y se las graba mientras Louis las susurra muy lentamente como si supiera las intenciones de Harry.
Y no necesita responder cada una de esas palabras, Louis ya las sabe.
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Harry está cocinando el almuerzo un fin de semana, cuando Louis parece ahí soñoliento, con una sudadera y unos pantalones de dormir. Niega reprendiéndolo por despertar tan tarde y perderse el desayuno. Había desayunado solo en el sofá mientras Nala, su perrita, tenía la cabeza en su regazo y dormía, claramente tenía que ser igual a su padre durmiendo en otra habitación. Harry había tratado de levantarlo besando su pecho desnudo, pero Louis lo había golpeado con la almohada y bueno Harry estaba hambriento como para seguir tratando de levantar a su perezoso chico.
Harry le dio una mirada rápida mientras movía la comida, Los brazos de Louis se ajustaron detrás de él y sentía su respiración en su cuello. Debería concentrarse en mover los vegetales, pero Louis susurraba cosas que se le hacían difícil de comprender aún cuando hacia el intento. Lo ignora y sigue con su tarea de preparar un rico almuerzo completo.
Louis besa su cuello suavemente—Uhm buenos días, bebé.
Harry ríe negando—¿Qué buenos días? Ya son tardes, Louis.
Louis deja un último beso sin decir nada sube de nuevo a la habitación, Harry se da la vuelta buscando su teléfono para colocar música y poder cocinar más a gusto y no tener este silencio y escuchar los ladridos de Nala por toda la casa. Está moviendo las caderas mientras apaga la estufa para colocar la comida en platos cuando Louis lo jala del brazo, sonríe al ver a Louis ya cambiado y más despierto. Se inclina conectando sus labios mientras Louis hace esto de llevar una de sus manos hacia su espalda y acercarlo lo más posible.
Louis ríe en medio del beso mientras comienza a balancearse de un lado a otro sin despegar sus labios. Harry se aleja solo para colocar sus brazos en el cuello del castaño, como siempre lo hacen cuando bailan, Louis ajusta sus manos en su cintura y se balancean lentamente por toda la cocina. Junta sus frentes sonriendo.
Este es un hábito que tienen cada vez que alguno cocina, Louis siempre es el que coloca música y lo jala en sus brazos balanceándolo de un lado a otro, ya es parte de ellos. Los hábitos que tiene como pareja.
—¿Dormiste bien, amor?
—Como un bebé—Louis suelta aún con sus voz soñolienta.
—Tal vez cuando terminemos de almorzar podamos regresar a la cama y ver algo—Harry dice. Suena como un perfecto plan de fin de semana, está cansado como para tener alguna de sus citas de fin de semana y la idea de volver a la cama con el castaño es tentadora.
—Si—Louis murmura en su hombro alejándose para darle la vuelta a Harry—Tu novio es un perezoso.
Harry ríe cuando Louis empezó a darle vueltas y pierde un poco el equilibrio en las piernas, pero cae en los brazos de Louis.
—En dónde me fui a meter ¿Eh?—Bromea porque Louis es más de lo que ha querido en un novio. Tan romántico y divertido, un perfecto equilibrio entre esas dos cosas, además lo complace en diferentes aspectos.
—No te puedes alejar, advertido estas—Louis le señala.
—Como si quisiera hacer eso—Harry vuelve a enredar sus brazos en su cuello—Esto va para largo. ¿No lo crees así?
Espera una respuesta rápida y aunque ya han hablado en muchas ocasiones de esto aún le gusta escuchar las respuestas que le da Louis. Sabe que el camino es incierto, que puede haber cosas que tendrán que superar juntos para salir adelante como una pareja, tal vez desacuerdos, celos o cosas más grandes en dónde se pondrá en riesgo su relación, pero quiere pensar que ellos podrán con cada una de esas cosas, que su amor será tan fuerte como para vencerlo.
—Esto que hay entre nosotros va para largo—Louis señala entre ambos—Siempre veré que vaya para largo, solo si tú estás dispuesto.
—Totalmente dispuesto—Harry promete. Aunque no sabe que podría presentarse quiere pensar que estaría dispuesto a luchar.
—Aunque nunca te haría escoger entre algo que amas ¿Lo sabes?—Louis dice, cambiando su expresión. Se torna más serio.
—Lo se, Louis—Asiente hacia él. Se aleja tomando su mano para guiarlo a la mesa que tienen en la cocina—Ahora basta de charla y siéntate a comer. No has desayunado nada.
—Bien—Louis le rueda los ojos con amor—Dame ese almuerzo para que podamos volver a la cama.
Harry asiente dejando un beso en su sien ante de regresas a su trabajo inicial. Almuerzan pasta con las piernas entrelazadas debajo de la mesa y terminan entre un lío de sábanas abrazándose mientras miran un serie. Un fin de semana perfecto si se lo preguntan a Harry.
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Harry alza la mirada cuando la puerta de su pequeña, pero bonita oficina, se abre y Nancy acecha con una sonrisa de disculpas.
—¿Interrumpo?
Harry niega dejando los materiales que estaba usando para acercarse a Nancy. Esperando que dijera algo importante respecto a alguna junta o algún pendiente que se le haya podido pasar. En cambio ella señala hacia afuera con una sonrisa cómplice.
—Hay alguien que quiere verte—Nancy sonríe. Harry arruga las cejas.
—Dile que pase—Harry está apunto de sentarse en la silla y arreglar un poco el desastre de su escritorio para atender a alguien cuando Nancy niega—¿Qué pasa?
—Dice que no quiere, quiere verte afuera dice que si no sales se va—Nancy cita tal cual.
Harry rueda los ojos—Louis.
—Si, ¿Quieres que le diga que estás ocupado?—Ella cuestiona.
—No, dile que en unos momentos salgo—Harry le pide.
Su tonto novio está aquí y como siempre con sus ingeniosa maneras de pedirle a Nancy que le diga que está aquí sin decir que es él, dejando que Harry lo deduzca por si mismo. Recoge sus cosas viendo que es la hora de su almuerzo y mira unos momentos a su alrededor para ver si todo está en orden antes de poder salir con su bonito novio de ojos azules. Desde el día uno en que se conocieron Louis ha sido siempre divertido, suelto ingenioso, todo un caso.
Mientras camina hacia fuera se permite rememorar cuando se conocieron en la universidad, justo en su último año. No fue tan raro o diferente tan solo se conocieron en una fiesta, Harry estaba perdido porque sus amigos se dispersaron y Louis por alguna razón estaba igual, se encontraron en la barra y rieron cuando se contaron lo que había pasado dándose cuenta de que les sucedía lo mismo, lo que pasó después es que terminaron con bebidas en su mano y en medio de la gran pista con tantas personas a su alrededor que Harry tuvo que apretarse con Louis, a ninguno de los dos le importo demasiado.
Al final de la fiesta Harry acabo en la cama de Louis mientras se besaban acaloradamente sin nada de ropa y lo demás fue historia. Una bonita historia que acabo mejor de lo que había pensado.
Harry sonrió con amor al ver a Louis en medio de la habitación con dos bolsas de papel y dos contenedores de té helado. Él castaño Lucia tan despreocupado como siempre.
—¿Qué haces aquí?—Harry entrelazado sus manos llevándolo a la cafetería de su trabajo, justo donde estaban las mesas.
—Salí del trabajo antes—Divertido. Harry rodó los ojos al ver que ha puesto una excusa para salir antes—Y no quería llegar a la casa y recordé tu hora de almuerzo y bueno aquí estoy.
—Ya veo—Harry beso sus labios suavemente—Dime que trajiste mi favorito.
—Por supuesto que lo he hecho—Louis se sienta frente a su novio pasándole una de las bolsas—He traído también mi favorito por si quieres compartir, amor.
Harry sonríe sin poder evitarlo. Se inclina alzando los labios para obtener un buen beso, no suelen tener besos realmente intensos o profundos cuando hay tanta gente alrededor, guardado esos besos para cuando están solos, pero Harry realmente quiere y necesita uno ahora mismo. Louis parece siempre saber que necesita sin decirlo en voz alta. Harry cierra los ojos cuando recibe su anhelado beso. Sus manos se dirigen al rostro de su novio abriendo sus labios para dejar pasar la lengua del castaño, permanecen a ese ritmo unos segundos para luego cambiar el ángulo.
—Te amo—Harry se aleja manteniendo cerca sus rostros. ¿Es que podría haber pedido a alguien mejor que Louis para estar toda una vida? El no lo cree.
—Lo se—Louis dice orgulloso—Me lo dices muy seguido.
—Dime que también me amas—Harry le reprende.
Louis suelta una carcajada llamando la atención de algunas personas que se encuentran ahí, pero a ninguno de los dos le importa, Louis niega tomando suavemente el rostro de Harry acercándolo de nuevo.
—Te amo igual—Murmura ahora sí alejándose y abriendo su almuerzo—Ahora calla y come, no puedo ser el novio romántico que amas si estoy con el estómago vacío.
—Tonto—Harry dice con cariño, pero desenvuelve su almuerzo.
Comen en silencio un rato, pero después le cuenta de su día y Louis le cuenta de algo chistoso que le ha pasado a Liam. Louis no regresa a casa una vez que Harry tiene que volver al trabajo, en cambio regresan a la oficina de Harry y Louis se deja caer en la silla frente a él mientras juega un absurdo juego en su teléfono mientras Harry se dedica a seguir con su trabajo. A Louis realmente no le importa que no le hablara por varias horas.
Es un poco más sencillo trabajar sabiendo que Louis está frente a él esperando que acabará su turno y así poder irse juntos a casa. Balancean sus manos cuando salen del auto y caminan hacia su departamento.
—Gracias por el día de hoy—Harry lo abraza antes de que pudieran entrar—Realmente lo aprecio y haces que me enamore más de ti.
—Me agradan como suenan esas palabras viniendo de ti—Louis le devuelve el abrazo dejando un beso en su cabello ante de alejarse—Vamos, estoy cansado como para permanecer parado.
Entran a la casa cenan algo ligero y toman una buena ducha. Termina de colocarse la pijama para poder saltar a la cama y soltar un suspiro de felicidad. No había nada más que le hiciera feliz como regresar a la cama después de un largo día, con Louis ya acostado se abraza de su cintura colocando su cabeza en su pecho, lo único que ilumina la habitación es una luz tenue. Alza un poco su cabeza para mirar como Louis está tratando de dormir mientras sus dedos suben de arriba a abajo en su espalda. Luce relajado, a veces sentía un poco de celos por el trabajo de Louis, siempre era tan flexible y menos cansado, a veces desearía haber tenido otro trabajo, pero luego recordaba que trabajaba en algo que realmente disfrutaba y que no cambiaría por nada.
Está apunto de quedarse dormido en esta cómoda posición cuando el teléfono de Louis empieza a sonar en la mesita de noche, se aleja para darle espacio al castaño para poder contestar mientras él se estira en la cama con una sonrisa y espera a que Louis regrese a la cama de nuevo. Ve como Louis camina para no molestarlo con su voz, pero el podría dormir tan solo escuchando su dulce voz.
Le es un poco extraño que llamen a esta hora por lo que mira como Louis tiene un expresión preocupada, lo cual lo pone en alerta. Caminaría y acariciaría su cabello mientras murmura unas cuantas palabras de aliento, pero no quiere interrumpirlo. Tan solo va a esperar pacientemente a que Louis termine de hablar, esperando que no fuera nada malo que perturbara el sueño de su novio.
Abre sus ojos cuando alcanza a escuchar a Louis despedirse y regresar a la cama. El rostro de Louis cambio drásticamente sus ojos están cristalizados y sabe que está tratando de permanecer fuerte.
—Amor, ¿Qué pasa?—Pasa sus dedos por su cabello—¿Quién era?
Louis aleja una pequeña lágrima que ha caído—Es mi padre, no está bien de salud y no creo que se recupere
Harry parpadea procesando la información, pero Louis cae en sus brazos soltando bajos sollozos. Lo estrecha entre sus brazos y murmura palabras de aliento y diciéndole que todo va a mejorar, pero sabe que no es así, así que solo se dedica a pasar sus dedos por el cabello y espalda del castaño hasta que esté cae dormido con una expresión de tristeza grabada en su rostro.
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—Te traje el desayuno a la cama—Harry anuncia cuando ve a Louis con los ojos algo rojos bostezando mientras está sentado—Hice tu favorito y te puse te.
—No tenías—Dice con voz cansada, pero trata de sonreír—Se ve delicioso ¿Quieres acompañarme? Creo que me haría bien un poco de tu compañía.
Ni siquiera tiene porqué repetirlo dos veces, Harry se instala a su lado cortando en trozos los panqueques para Louis. Desayunan en silencio mientras Louis mira fijamente el desayuno y con pocas ganas se lo lleva a la boca. El rizado solo quiere atraerlo en otro abrazo y hacerle saber lo fuerte que es, recordarle lo valiente que sabe que es, pero no lo hace, quiere darle su espacio para pensar las cosas antes de hacerlo por su cuenta.
Sabe lo difícil que puede llegar hacer manejar a Louis en estos estados. Su felicidad se apaga y sus energías lo hacen también, le agrada que haga el intento de parecer que no sucede nada, solo muestra lo ser humano que es.
Harry regresa todo hacia la cocina dejándolo ahí por el momento y regresa con Louis a la cama. Se abrazan por horas mientras escucha como Louis habla con su familia y llora un poquito más. A él no le importa que su camisa favorita se llene de mocos y lágrimas, solo le importa hacerle saber a Louis que está ahí.
—Esto es una mierda—Suelta Louis por fin.
—¿Estás mejor? ¿Quieres llorar más?—Harry besa sus labios.
Louis lo mira pensando—No estoy mejor en absoluto, y creo que ya no tengo más lágrimas para soltar.
—¿Quieres hacer algo para distraerte? —Harry le propone esperando que con eso pueda obtener una sonrisa de su parte.
Louis niega no queriendo salir de la cama para nada. Duerme un buen rato y habla con su familia en la tarde, en la noche se acurrucan con sus cuerpos cálidos y Harry le susurra te amos llenos de amor.
Esperando que de alguna manera esto pueda mejorar, solo empeora, un mes después regresan de un vuelo de siete horas después de haber ido al funeral del padre de Louis. Percibe a un Louis algo pensativo y siente algo de terror.
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—Esa cena fue muy buena—Harry comenta mientras sus manos se balancean.
—Lo se—Louis le da la razón. Su sonrisa ahí está de nuevo solo que no tan sincera como antes, falta algo—Pero no mejor cuando tú cocinas.
Harry ríe enamorado y se aprieta a un costado del castaño, deja que su mano se apriete y deja unos besos en la piel expuesta más cercana. El olor de Louis es una mezcla de su perfume, su sudor y el olor a cigarro, toda esa combinación es Louis y lo ama. Estaban en una cita, después de algunas semanas, y ya lo habían extrañado pero Harry percibía algo en Louis, algo que lo preocupaba y no quería contarle. Algo no le está contando.
—Deberíamos terminar esta cita con un baño de burbujas—Deja al aire esperando que Louis esté de humor como para acompañarlo.
—Me gusta la idea—Louis lo abraza por atrás besando su cuello—Y más pensar en tenerte desnudo.
En realidad acaban desnudos en la tina con una bomba de jabón y con un Harry apoyando su espalda en el pecho de Louis mientras esté pasa sus dedos en su cintura. Tan solo un gesto amoroso y no más allá de unos simples toques. Harry alza la mirada para ver a Louis mirando en un punto en específico. No han hablado desde que entraron aquí y de alguna manera se siente diferente a todos sus silencios. Este se siente como si Louis no pudiera soltar lo que le afecta en este momento.
No lo presiona, espera a que el castaño quiera contarle o expresar su preocupación. Se presiona en su pecho.
—Te amo.
Louis ríe despacio, solo unos cuantos segundos—También te amo, demasiado. Gracias por estar a mi lado.
Harry se da la vuelta acercando sus rostros y permaneciendo a escasos centímetros.
—He estado pensando mucho en mi familia—Harry no dice nada espera a que Louis continué—Sabes que mi padre era su sustento económico y he visto a mi familia mal. Y no me gusta dejarlas solas, sentir que no estoy apoyando. He estado pensando en mudarme de vuelta a Londres, ya se que de aquí a Londres son siete horas de vuelto y.
El corazón de Harry podría caerse o romperse—¿Y?
Louis lo acerca besando brevemente sus labios, tomándose el tiempo de amarse.
—Mira Harry—Louis lo aleja. Su mirada rota y triste—No creo que haya una fecha de regreso, no puedo decir que volveré en unas semanas, meses o años, pero necesito estar ahí, apoyar a mi familia económicamente. Y no puedo decir que pueda venir con regularidad aquí porque no creo que sea algo posible.
Harry lo mira a los ojos acercándose de nuevo negando—Entonces vamos.
—No, Harry—Se vuelve a alejar y eso parte su corazón—No puedo hacerte esto, tu te mudaste aquí para cumplir tus metas y sueños, tienes a tu familia aquí, a tus amigos, tu trabajo. Todo esto te ha costado y lo sé, sería muy egoísta de mi parte llevarte conmigo sabiendo cuánto has luchado para lograr lo que tienes ahora y yo necesito estar con mi familia en estos momentos.
Harry baja la mirada conteniendo las lágrimas, porque esto lo está soñando, porque su novio no puede estarle diciendo estás cosas. Porque su corazón le está doliendo como si le costará tomar aire.
—Pero puedo.
—Harry, vas a ser infeliz ahí—Louis niega. Aunque le duela lo que está diciendo. El soltar al chico de su vida, pero no quiere ser egoísta con él—He sabido lo que has luchado como para que lo tires a la basura.
Harry desvía la mirada, ahora sí dejando que sus lágrimas se deslicen, porque Louis claramente está terminando con él. De una manera cruel, están en la tina, anclándose entre ellos, después de decirle te amo. Louis lo hace de esta manera. Llora, Louis también lo hace.
—¿Estás terminando conmigo?—Dice como si no pudiera creer que estuvieran en esta posición.
—No sabes cuánto me gustaría no hacerlo—Louis lo jala del cuello a sus labios. Se besan un buen rato hasta que Louis se aleja—Pero no quiero que me esperes, no sé cuánto volveré o si alguna vez lo haré. No quiero que esperes por mi.
—Eres, eres cruel—Llora.
Louis besa sus lágrimas mientras le dice en voz baja cuánto lo ama, cuan agradecido está de haberlo tenido todo este tiempo, en esos tiempos difíciles, en los logros que tuvo. Agradecido por el largo camino que tuvieron. Harry permanece con los ojos cerrados temblando, pero no es capaz de abrir los ojos, porque todo será tan real que le dolerá más de lo que ya está doliendo.
—Mi precioso chico—Louis murmura suavemente—Has hecho mis días felices, de eso voy a estar agradecido toda una vida.
—Louis—Se atreve abrir los ojos—¿Cuando te vas?
—En un mes—Louis responde—Tengo que resolver unas cuantas cosas antes de irme.
Se aferra a él como le es posible—Por favor, no termines conmigo ahora, no está que te vayas. Por favor, amor.
Louis duda un poco en asentir, pero la mirada que le da Harry lo hace hacerlo, además de que quiere pasar el máximo tiempo que le queda aquí con Harry.
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Se sorprende al encontrar a Louis fuera de su trabajo, con las manos dentro de los bolsillos de su pantalón mientras está recargado en su auto mirando algo interesante en la estructura del edificio de dónde trabaja. Cuando Harry se acerca Louis se da cuenta de su presencia y se levanta correctamente.
Harry se queda un rato mirándolo porque tan pronto como se vaya, tal vez no lo vea en mucho tiempo o simplemente debe hacerse la idea de que podrían no volverse a ver nunca. Habían pasado unas dos semanas y cada vez que Louis renunciaba a cada cosa que lo vinculaba ahí con él, se le rompía más su corazón, las promesas y esperanzas que tenían en el futuro se rompen y se desvanecen como si nunca hubieran sido dichas.
Trata de no pensar en el hecho de que le queda tan poco tiempo para tener a Louis a su lado. Aprovecha todo el tiempo que aún les queda juntos.
—Louis—Harry se acerca envolviéndolo—¿Qué haces aquí?
—Termine unos pendientes que me faltaban y pensé en llevar a mi novio a cenar—Louis alzó los hombros jalando al rizado de la cintura—Te ves precioso hoy.
—Tu también—Le besa la boca despacio antes de entrelazar sus manos.
Cenan en un bonito restaurante mientras sus manos siguen entrelazadas, ambos con la escusa de que van a extrañar el contacto. Harry no sabe que va a ser con un departamento sin Louis, sin su ropa tirada en el suelo de su habitación, sin nadie quien lo abrace por las noches, sin que lo tome en los rincones de la casa. Aún no se ha ido y ya siente que le falta una parte de él, desearía que no le importa tanto las cosas que tiene en este lugar y que de alguna manera lo obligan a vivir aquí, sino fuera de esa manera tal vez estaría mudándose con Louis y no tuviera este vacío en el pecho, pero hay tantas cosas que ama en este lugar que lo impiden seguir a Louis, y puede que él tenga razón, si lo hace se sentiría infeliz de estar ahí y no quiere que eso afecte en su relación y como están terminando las cosas.
Harry se engancha de su ropa jadeando en su cuello cuando entran a su departamento. Si son los últimos días en que estarán juntos quiere que sean con amor y recuerdos felices.
—Llévame a la habitación, Louis. Una última vez—Le pide casi suplicando de rodillas.
Le aparta el cabello de la frente juntando sus labios en un necesitado y desesperado beso. Sus lenguas se encuentran en una lucha para el mando, pero luego el beso se torna más lento y con pasión. Louis los guía, sin despegar sus labios ni sus manos a los lados del rizado, hacia su habitación. No se molestan en dejar sus cosas a un lado ni de prender la luz de la habitación, tan solo se desnudan el uno al otro mientras Louis recorre de besos los lugares que tiene a su alcance. Sus dedos ágiles y rápidos terminan de quitarle la ropa al rizado y lo empuja en la cama, se sube sobre el juntando sus labios mientras intenta quitarse los pantalones.
—Louis—El rizado se queja cuando pierde todo contacto cuando Louis se aleja para terminarse de desnudar.
Aunque entra poca luz a la habitación, hace todo el esfuerzo por apreciar por ultima vez el cuerpo de Louis, va a apreciar cada sonido que escape de su boca, la suavidad de su piel y sus tatuajes. Estaría triste si en ese momento no estuviera necesitado de tener a Louis dentro de el, empujándolo para llevarlo hasta el final.
Cuando Louis une sus bocas el aprovecha para pasar los dedos por toda la extensión de piel de su espalda, toca esos hoyuelos que se encuentran en su espalda baja y no necesita ver o tener prendida las luces, conoce el cuerpo de Louis desde hace años.
Jadea sintiendo los dedos de Louis recorrer sus muslos, apretar su trasero para alzarlo y rozar sus erecciones, el contacto los hace soltar gemidos altos. Harry abre los ojos pidiendo un beso de manera silenciosa, Louis lo cumple apretando la carne de sus muslos y recorre con una mano sus piernas. La debilidad de Louis hacer eso cada vez que están en la cama de esta manera.
—Bebé—Louis se aleja tratando de encontrar los condones y el lubricante en la mesita de noche.
Harry baja la mano hasta la erección de su novios y envuelve sus manos buscando los labios de Louis. El castaño suelta varios gemidos cuando Harry empieza a mover su mano y con su dedo pulgar jugar con la glande de la polla de Louis. Mueve su mano hacia abajo y hacia arriba mordiendo su labio viendo cómo su novio se deshace en gemidos y balbuceos entrecortados.
Está apunto de inclinarse cuando Louis detiene sus movimientos con una mano fuerte en su muñeca.
—Detente—Louis dice—Vamos acuéstate quiero cuidar de ti.
No protesta porque el sentimiento es más de quererlo cerca mientras empuja lentamente y con suavidad y no algo rápido y sin cuidado, como le es costumbre. Se deja caer abriendo sus piernas esperando a que Louis se acerque. Lo mantiene cerca cuando llega y le proporciona besos y mordiscones en todo su cuello y hombro. A Harry realmente no le importa que su cuello pueda parecer un desastre mañana, ahora lo que le importa es sentir a Louis, sentir conectado de esta manera.
Sin darse cuenta Louis adentra dos dedos en su entrada sacándole un gemido, alza y mueve sus caderas persiguiendo el movimiento y que llegue más profundo. Arquea la espalda jadeando y se aferra a las sábanas de bajo de él cuando Louis golpea su punto. Louis sabe cómo mover sus dedos y llevarlo al límite, podría sentirse desfallecer si Louis no lo estuviera sosteniendo en sus brazos y follandolo de manera rápida con sus dedos. Podría venir de esta manera.
—Dios solo apúrate y entre en mi—Suplica enganchando una pierna detrás de Louis y se sostiene con una mano de la cabecera de su cama.
Louis sonríe con malicia tomándose el tiempo de abrir el condón y colocárselo correctamente. Entra en un lento y doloroso movimiento dentro de Harry estirando sus paredes y sintiendo la estreches del rizado. Cómo siempre espera a que se adapte al tamaño para empezar a golpear, está vez lo hace lenta pero profundamente que tiene al rizado al borde. Una de sus manos encuentra su lugar en el cabello del castaño jalándolo con cada golpe de Louis.
El único sonido que hay en la habitación es de sus pieles chocar juntas y sus respiraciones agitadas, así como las palabras entrecortadas. Louis se hunde más alzando sus piernas un poco más para hacer más profundas y cómodas las penetraciones.
—¡Ah!—Se aferra a los brazos del castaño—Dios, Louis sigue de esa manera.
—¿Si? ¿Te gusta que de este modo?
—Si, siempre me gusta como me tomas—Harry dice con los ojos cristalizados y los labios hinchados.
Llegan a un ritmo dónde se mueven al mismo tiempo y deslizan sus labios con cada movimiento. Harry podría llorar si no estuviera persiguiendo su orgasmo alzando las caderas y moviéndolos acompañando las estocadas del castaño.
—Louis, sigue, más rápido—Pide.
Louis lo besa una vez más antes de cambiar el ritmo lento que tenían ahora solo intentando que Harry acabará. Lo folla de manera rápida y sin descanso alguno, esperando que sus piernas no le fallaran. Tan solo unos cuantos minutos ambos llegan y se dejan caer en la cama para normalizar sus respiraciones.
—¿Ducha?—Louis dice.
Harry asiente. Está agradecido de que las cosas no sean tristeza y dolorosas, quiere que sean lo más normal posible hasta el último día en que Louis esté aquí.
♡
Y en tan solo un parpadeo el día en que Louis se muda de vuelta a lo Londres llega. Harry trata de contener las lágrimas mientras ayuda a terminar de empacar la ropa de Louis. Realmente solo lleva ropa y papeles importantes, no lleva nada más con él, dejándole las cosas materiales a Harry así como un enorme vacío en su cama, en su armario... En su vida.
Hay un sentimiento de vacío en su corazón y ya ha llorado lo suficiente como para seguir haciéndolo y preocupar a Louis en su viaje, mantienen la calma tan solo unas cuantas horas. Louis suspira cuando cierra su última maleta y se sienta en la cama cansado de tantas vueltas para volver a irse hacia la casa de su madre. Harry se mantiene en su lugar mirando como Louis se acuesta en la cama pasando las manos por su cabello, sabe lo difícil que también está siendo para Louis. Reconoce la bondadoso y buen hijo que está siendo Louis, siempre ha sido muy apegado a su familia que entiende porque lo da todo por ellos y lo entiende, no le recrimina. Ya está pasando por un mal momento como para hacerlo, además que nunca lo haría.
—Vienes unos momentos, mi amor—Cierra los ojos disfrutando de como suena ese apodo venir de Louis, esperando recordar el sentimiento cuando ya no esté a su lado.
Se acerca a Louis y es atraído hacia su cuerpo mantienen las frentes juntas y se besan lentamente. Harry se traga el enorme nudo y corresponde el beso con tanto amor, con tantas ganas que ninguno quiere separarse. Tienen demasiado amor entre ellos que tal vez sea difícil que alguna vez se extinga por completo, que aquella flama se apague para siempre. De eso están seguros. Harry mueve sus labios sobre los de Louis abriendo sus labios y tener un beso de verdad.
Sienten que sus recuerdos y su historia juntos pasa por sus cabezas como un torbellino. Harry aprieta sus labios soltando un pequeño sollozo que Louis niega y lo besa para calmarlo.
—¿Puedo ir a dejarte al aeropuerto?—Se aleja manteniendo sus cuerpo juntos.
—No—Louis responde—Ya es demasiado difícil despedirme. No lo hagas más difícil de lo que ya es.
Harry asiente sus narices se rozan y se miran a los ojos. No quiere dejarlo ir, nunca pensó que alguna vez lo haría, nunca pensó que terminarán, siempre pensó que iban a dejar de ser novios para convertirse en algo más. Ahora entiende que todos aquellos sueños y promesas que se susurraban entre besos en noches llenas de amor se han roto, ahora no existe una posibilidad de que aquello pudiera cumplirse.
—Harry—le alza la barbilla—Si alguna vez regreso y las condiciones entre los dos nos lo permiten voy a recuperar lo nuestro, voy a luchar de nuevo por tu amor. Es una promesa.
Harry quiere creerle, pero solo son promesas con ninguna fecha en concreto, pueden hacerse realidad o solo pueden ser promesas vacías.
—Te amo—Es lo único que dice en cambio. Se besan una última vez antes de separarse y que Louis pudiera marcharse al aeropuerto.
Al final de la noche Harry regresa a la cama con un espacio vacío y frío, un espacio en el armario y promesas con sueños rotos.
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