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Birthday wish

Son vacaciones de invierno y Louis ve la oportunidad para dejarle una carta confesándole su amor a su compañero de habitación con la esperanza de que tal vez pudiera sentir lo mismo.

Louis suspira dándose vuelta en la cama y abriendo poquito los ojos y fijándose en la forma en que Harry duerme, tan tierno, abrazando una almohada y soltando pequeños soniditos, luce calmado y relajado, tal vez teniendo un buen sueño. Se fija, unos segundos después, en su parte de la habitación, tan diferentes. Harry tan organizado y cada cosa en su lugar, ni un solo desastre o basura, lo cual se había dado cuenta desde la primera semana compartiendo habitación e inconsciente hizo que Louis copiara aquel hábito para no incomodar a Harry, aunque hay un pequeño desastre dentro de las cajas de su mesita de noche y posiblemente abajo de su cama, pero aún así hace el intento de mantener su parte de la habitación ordenada y limpia. Sabe que no podrá ser igual a Harry respecto a tener cada cosa en su lugar, ordenar los libros por tamaños, las cosas por color y tantos pequeños hábitos que no se pasan por desapercibo, porque parece que Harry ha tenido esos hábitos todo una vida. Cada persona que entra por la puerta ríe al ver la habitación, bromeando acerca de que parecen diferentes lugares y Louis puede verlo, la parte de Louis colores neutrales y la parte de Harry colores más vivos. Sin embargo, a pesar de la diferencia parece que se completamente de una forma extraña.

Y aunque parezca que Harry tiene su vida ordenada y perfectamente trazada sabe que no es así, a veces llora de la frustración cuando las cosas no salen como él quiere o tiene pequeños accidentes. Recuerda la vez en que hacia un proyecto súper importante y sin querer y darse cuenta derramó una lata de refresco, lloro abrazándose de las piernas y aunque Louis no es nada ordenado el sabe cómo consolar a alguien, camino hacia él limpiando el desastre y abrazando a Harry o la ves en que no tenía cierto material y él sí. Puede que sean diferentes pero algo que no tengan el otro sí lo tiene, se completamente de esa manera.

Tan solo dos años compartiendo habitación los ha hecho funcionar de una manera rara y aunque a veces casi no se crucen sino hasta que cae la tarde o noche, se llevan realmente bien y a veces tienen estas charlas con palomitas cuando el sueño se les quita o están tan nerviosos por los exámenes. Louis gruñe sobre las almohadas porque ha tenido este tonto enamoramiento hacia su compañero de habitación hace un año y no sabe qué hacer con esa información que solo mantenerla para si mismo por mucho tiempo. No sabe cómo sacarlas y expresarlas en voz alta, porque a pesar de ser bastante hablador y lanzado, por alguna razón no puede sacar eso sin sentir que el aire le falta o que va a vomitar, así que lo ha estado guardando por todo ese tiempo y es bastante horrible porque cada vez que está en una situación en dónde está con Harry a solas y las cosas son las adecuadas no puede.

Es un cobarde y no hay otra palabra para eso. Louis lloriquea en voz baja sobre la almohada y mira rápidamente la hora en su teléfono solo para darse cuenta de que ha perdido tiempo valioso, de nuevo, solo para apreciar al rizado frente a él. En tiempo record se baña, se viste y guarda las cosas en su mochila para luego tomarla, hace todo eso con todo el silencio que podía hacer, ya que no quiere perturbar el sueño de Harry. Él rizado tiene un horario muy diferente al de él. Se despide de él, aunque sabe que no va a escuchar y camina hacia el campus y se dirige hacia su edificio. Sonríe cuando encuentra a sus tres amigos y se deja caer en unas de las sillas.

—De nuevo tarde—Zayn se burla.

—No me digas—Louis le gruñe recargando su cabeza en la mesa para estar más cómodo.

—¿Y bien ya saben acerca de sus planes para vacaciones de invierno?—Niall pregunta.

Louis alza una ceja en su dirección—¿Por qué? ¿Quieres invitarme a una cita?

—No seas imbécil—Niall hace una mueca de asco en su dirección antes de aclarar—Lo decía por Zayn y Liam, ya se que tú solo irás con tu familia y posiblemente dormirás todo el día.

No ataca porque tiene razón, en unos tres días la mayoría de los alumnos irán a casa por las vacaciones de invierno y él solo irá a casa a ver a su familia. El ha estado esperando con ansias estás vacaciones, demasiado tiempo sin ver a su familia. Se centra en los dos chicos frente a él, Zayn y Liam fue a los primeros que conoció y pudo ver la química que tenían y no se sorprendió mucho cuando empezaron a salir oficialmente tan solo unos meses después y sería la primera vez que tal vez conozcan a su familia.

—Primero pasaremos tiempo con la familia de Liam—Zayn dice sonriendole a Liam, pero su sonrisa luce nerviosa—Y luego iremos con la mía. Estoy nervioso.

—No te preocupes te van adorar—Liam lo calma dejándole un beso en su mejilla.

—Me alegro de solo pasarla con mi familia—Louis reconoce—Siempre odiaba conocer a la familia de mis parejas, siempre terminaban odiándome por una rara razón.

Reflexiona sin pensar mucho en eso, pero se alarma cuando Zayn tiene una mirada de pánico grabada en el rostro. Mira hacia otra parte arrepintiéndose al recordar cuando Zayn entro a su habitación y expreso el terror que sentía cuando Liam le dijo su opinión acerca de pasar las vacaciones con ambas familias y aunque Zayn no dio una respuesta rápida dijo que iba a preguntar, pero lo primero que hizo fue ir a su habitación y expresarle el terror y miedo que sentía por dar ese paso importante, porque lo era. Presentar a la familia era como el sello que decía iban enserio y aunque Zayn estaba muy enamorado tenía ese terror.

Y Louis solo estaba dando escapar pensamientos sin darse cuenta.

—Louis, no metas miedo—Zayn lo patea debajo de la mesa. Louis deja escapar un sonido de dolor.

—Zayn, si crees que es mucho para ti podemos dejarlo por mientras—Liam se aleja de Zayn con una expresión dolida—Si no estás listo para hacerlo lo voy a entender.

En ese momento Louis mira de reojo a Niall quien está sentado incómodo sin saber que decir o hacer en esos momentos. Zayn lo golpea de nuevo antes de tomar la mano de Liam y besar su palma suavemente dándole calma y relajándolo.

—Estoy muy seguro—Suspira y Louis siente que debería irse—Es solo que eso no me quita el miedo que siento, eres importante para mí y quiero agradarle a tu familia.

—Lo harás, créeme.

—Buena suerte a ambos—Louis se dirige a los dos—Ya verán que le agradaran a la familia del otro.

Está completamente seguro que lo harán, ambos le cayeron bien desde el primero momento en que se conocieron y sus familias también lo harán. Se siente un poco triste por estar lejos de sus amigos durante unas semanas, ya se a acostumbrado a su salidas y estar cerca de ellos y sobre todo estar algo cerca de Harry.

—Me habría gustado estar en tu cumpleaños, pero mi familia quiere pasar tiempo conmigo—Niall se disculpa.

—Si, tal vez la próxima—Zayn agrega.

—Esta bien chicos, lo entiendo—Dice—Nuestras familias no nos han visto por un tiempo y las vacaciones son las únicas fechas en que lo hacen. No sé preocupen seguramente estaré con las chicas, haciendo esas cosas navideñas y comeré mucho. Un plan perfecto, sin el estrés de estar aquí y despertar temprano, todo es bueno si tengo un respiro de la universidad.

—Aun así haremos una reunión para tu cumpleaños antes de irnos—Niall promete.

Alza una ceja—Nos vamos en tres días.

—Lo arreglaremos todo para mañana—Liam decide—En la habitación de Niall en la noche.

—Se aprovechan de que mi compañero nunca este—Niall se lleva una mano al pecho mirándolos dolido, pero en el fondo sabe lo feliz que está porque no tiene que compartir tanto su habitación—Pero acepto.

—Bien—Louis gruñe aceptando.

Suelta un largo suspiro sintiendo sus extremidades cansadas, sonríe cuando llega a su habitación y con cansancio abre la puerta con ese tonto tirón en el pecho cada vez que llega después de estar afuera y saber que Harry ya estará en la habitación. Y como lo supuso ahí está Harry sentado en su cama mirando pensativo su computadora con un tazón de pasta a su lado y con lentes en su rostro. Lo bonito y cálido y suave que se ve Harry lo deja un poco sin aliento, porque ya ha aprendido a quedar sin aire al ver tantas veces a Harry.

Sonríe con agotamiento cerrando la puerta detrás de él con suavidad para no asustar a Harry. Deja la mochila sobre su cama y se sienta para desatar los cordones de sus zapatos y colocarlos abajo de la cama, mal hábito suyo pero está muy cansado como para acomodarlo dónde debería. Deja caerse en la cama mirando el techo y pensando en la mala idea que fue no regresar a su habitación todo el día y ahora tendrá que terminar la tarea en la noche con el sueño que tiene en su sistema. Debería ser más responsable y consciente de lo importante de tener todas sus horas de sueño y así tener energía para su día a día.

Se sienta de nuevo en la cama mirando brevemente a Harry quien parece tan inmerso en lo que hace porque no lo ha saludado cuando entro. No son los mejores amigos de toda la vida como lo es con Liam, Zayn y Niall, pero se llevan bien y pasan algo de tiempo juntos. Solo bastaron unos cuantos meses para tener sentimientos por Harry, no solo por lo bonito que era el chico, sino la dedicación y la pasión que ponía a todo. Harry estaba en varios clubs y tenía varios amigos por la dulce persona que era, no era difícil enamorarse. Él en cambio aprovechaba su tiempo en estar con sus amigos o tener pasatiempos.

Harry parpadea alejando su vista de la computadora y tallándose los ojos con cansancio. Sus miradas se encuentran y Harry esboza una ligera y cálida sonrisa, así lo cataloga Louis, porque siente algo en el pecho que lo deja con una sensación bonita.

—Oh, Louis, no te vi cuando llegaste—Harry se disculpa. Colocando su tazón en su mesita de noche y poder estirar las piernas.

—Fui silencioso—Señala levantándose para buscar una pijama—Parecías muy concentrado en eso.

Harry sonríe con agradecimiento asintiendo—Lo es, el último trabajo. Quiero terminarlo antes de ir a casa.

—Planeo hacer lo mismo—Louis le cuenta antes de entrar al baño, darse una rápida ducha, secar su cabello y colocarse la ropa.

Sale del baño con el cabello algo seco y se sube a la cama, Harry sigue con su trabajo, pero parece más relajado. Él rizado sube su mirada hacia él unos segundos antes de mirar hacia algún lado de la habitación, su mirada se ilumina antes de mirarlo de nuevo.

—Oh, por cierto prepare pasta y te deje un poco por si tenías algo de hambre—Harry señaló con su bolígrafo en el microondas que tenían en su habitación.

—Gracias, Harry, lo tomaré estoy hambriento.

—No es nada—Harry responde antes de volver a poner atención a su trabajo.

Louis por mientras saca los materiales que le van a servir y camina hasta el microondas calentando la pasta y saca una botella de agua y toma el tazón cuando termina caminando hasta su cama y sentarse. Come rápidamente dejando escapar pequeños gemidos de amor por la rica pasta que ha hecho Harry. Se da cuenta de que el rizado no solo es inteligente y tiene muchos pasatiempos sino es talentoso para muchas cosas.

Unas horas después tiene un desastre y solo alza la mirada cuando Harry guarda sus cosas y las acomoda en su lugar. Louis suspira empezando a guardar las suyas. Ha avanzado demasiado como para poder terminarlo mañana temprano es solo que no quiere tener una luz prendida todo el tiempo y sin poder dejar dormir bien a Harry.

—Sabes que no es necesario—Harry se da cuenta cuando se sube a la cama y se tapa con las frazadas. Sus ricitos alborotados a los lados de su cabeza, las ojeras visibles y su cansado rostro le hacen querer acercarse y abrazarlo, pero aleja esos pensamientos.

—De todas formas ya está por acabar y necesito descansar—Responde guardando las últimas cosas y subirse a la cama.

Sus camas están frente a la otra muy lejos, tristemente para Louis, por lo que pueden verse mientras duermen, pero a veces uno duerme mirando la pared y dando la espalda al otro. Eso hicieron al principio, demasiado incómodo. Sin embargo, poco a poco se quitaron esa vergüenza y empezaron a dormir frente a frente algunas veces, juntos como ahora. Harry abre los ojos sonriendo perezosamente antes de inclinarse y apagar el foco de su lámpara, Louis copia aquella acción y hace lo mismo. La habitación queda a oscuras y lo único que se escucha son sus lentas respiraciones

—Buenas noches, Lou.

—Buenas noches, Harry—Murmura por lo bajo antes de taparse y dormir con una sonrisa.

—Niall, por favor suéltame tengo que ir a hacer mi maleta—Louis se queja cuando quiere levantarse de la cama y Niall niega—Mira que no la he hecho ayer por quedarme contigo a ver películas.

Louis logra escabullirse de Niall para levantarse. Habían pasado toda la noche y parte del día juntos, con Zayn y Liam por su cumpleaños, pero estos dos último se habían ido por el caso de ver a sus familias y ellos habían estado ahí en la cama sin nada que hacer y Louis tenía que hacer su maleta y no perder más el tiempo, además de que quería una excusa para poder pasar un poco más de tiempo con Harry.

Se coloca sus zapatos y guarda todas sus cosas en su mochila, para luego acercarse a Niall y despedirse. Sw envuelven en un fuerte abrazo ya que Niall se va mañana temprano y está será el último día que estén en la universidad.

—Deberías venir luego de hacer la maleta.

Louis rueda los ojos, pero sus mejillas se encienden—Quisiera, pero quiero pasar un tiempo con Harry, ya sabes no lo veré en varias semanas.

—¿No piensas decirle lo que sientes por él?—Niall regresa a la cama sonriendo con complicidad.

Niall fue el primero que supo acerca de su enamoramiento por Harry, porque al parecer parece que le cuesta ocultar sus sentimientos y acciones con el rizado. Su amigo se dio cuenta de la mirada que le daba a Harry, la manera atenta y amable en que lo trataba. Al principio trato de negarlo, pero los balbuceos que soltaba lo dejaron en evidencia.

Lleva mucho tiempo guardando estos sentimiento para si mismo por varias razones, la primera es que al principio no sentía la necesidad de expresarlo, pero con el tiempo eso cambio, la segunda era que cada vez que intentaba en varias ocasiones expresarlo, porque no le importa que Harry supiera acerca de lo que sentía por él, su boca no podía dejar escapar esa importantes palabras. Su lengua se atoraba, entraba en pánico y sus manos sudaban mucho. Así que dejó de intentar, pero ya no podía seguir con eso. Siempre que estaban solos y Harry era amable y dulce, la mejor persona quizás de toda la universidad, le daban ganas de expresar lo enamorado que está de él, pero por alguna razón no puede hacerlo con su propia voz.

Suspira sentándose al lado de Niall—Sinceramente he intentado varias veces, pero no puedo soltarlo.

—¿Y no le dirás?

—No lo sé—Se encoge de hombros—Me gusta mucho, Harry y desearía que me diera una oportunidad. Además tengo esta tonta inseguridad, porque Harry seguramente tiene a tantas personas detrás de él. Es inteligente, precioso, está en estos clubs, y estoy seguro que convive con chicos guapos y con los mismos intereses. Yo con trabajo entre a ese club y solo porque necesitaba créditos.

—Pero mira por alguna razón sigue disponible—Le señala. Y Niall tiene razón sigue soltero y parece que a Harry no le importa—Porque si no puedes decirlo con palabras le escribes una carta.

Arruga la frente mirándolo—¿Una carta?

—Si, dijiste que no puedes decírselo. Creo que deberías darle una carta.

Louis baja la mirada pensando. Una carta sería una buena idea, pero solo pensar en dárselo el mismo le da miedo y nervios, simplemente Harry lo pone todo raro. Está a punto de decirle que es una mala idea, pero una idea se le viene a la cabeza. Él se irá mañana temprano y Harry siempre se va en la tarde, podría colocarle la carta en algún sitio que logré verlo y cuando lo lea él ya estaría en casa. Es algo cobarde, pero cuando vuelva de las vacaciones puede enfrentarlo y tomar confianza durante esas semanas sin verlo. Sonríe en grande abrazando a Niall.

—¡Es una buena idea!—Le dice abrazándolo con fuerza para luego alejarlo—Gracias.

—De nada—Niall sonríe orgulloso—Tienes que contarme como te fue.

—Claro, serás él primero en saberlo—Le promete. Se levanta de la cama yendo hacia la puerta antes de agregar—Ahora tengo que ir a hacer mi maleta y hacer esa carta.

—¡Suerte!—Niall exclama

Louis sonríe cerrando la puerta y camina hacia el ascensor.

De alguna manera se encuentra nervioso por lo que hará, no es nada sencillo lanzarse sin saber cuál será la repuesta y menos sabiendo que es su compañero de habitación y las cosas puedan llegar hacer algo incómodas si Harry no corresponde los sentimientos o le parece incómodo. Suspira alejando esos pensamientos negativos para no echarse para atrás y olvidar el plan. Mantiene su cabeza en otra cosa hasta que las puertas del ascensor se abren y camina hasta su habitación, abre la puerta lentamente sonriendo inconscientemente al ver a Harry acostado boca abajo con shorts cortos y la lap sobre su cama. Sus ricitos se mueven al ritmo de Harry y con la música que se escucha.

Él rizado alza la cabeza sonriendo—Hola, Louis.

—Hola—rasca su cabeza sentándose en la cama y ver a Harry—¿Qué haces?

—Mirando una película, termine con todo y aproveché para ver algo—Explica Harry aún con la atención a la pantalla, lo mira unos segundos, que no son suficientes para Louis para preciar lo bonito que es Harry—¿Quieres hacerme compañía?

Niega varias veces—No, no he hecho mi maleta y me voy mañana temprano.

—¿No has hecho tus maletas?—Repite como pregunta sorprendido.

Louis se avergüenza, pero no cambiaría nada de él solo para agradar más a Harry.

—No, no tuve tiempo—Deja su mochila hacia un lado para levantarse y sacar la maleta que tiene aún lado, cuando logra sacarla se gira hacia Harry—Y ayer mis amigos me hicieron algo para mí cumpleaños, ya que no estaremos juntos.

Harry asiente comprendiendo. Louis sigue sus pasos cuando Harry se levanta de repente y lo ve busca algo en sus cajones, se sonroja cuando Harry saca un regalo envuelto en un papel azul bajo con un moño blanco. Él rizado se acerca algo tímido, algo raro para Louis, y le extiende el regalo. Sus manos se rozan cuando Louis lo toma.

—Harry, no tenías.

—Tú siempre me compras algo para mí cumpleaños y quise darte algo también—Harry dice.

—Gracias.

Harry asiente algo dudoso mirando varias veces hacia otro punto antes de regresar su mirada en él—¿Puedo abrazarte?

Ni siquiera tiene que preguntarle, pero aún así asiente abriendo los brazos. Harry coloca sus brazos sobre su cuello abrazándolo con fuerza, él cierra las manos en su cintura acercándolo. Deja que sus ojos se cierren y disfruta del abrazo guardando el recuerdo en su corazón. Son pocas las veces en las que ha tenido el privilegio de abrazar a Harry de esta forma, tan íntimos y posiblemente sea el último abrazo dependiendo de cómo se tome las cosas Harry.

Alza la cabeza para acariciar los ricitos de Harry con su nariz y oler lo bien que huele el cabello del rizado. Le toman unos cuantos segundos más para que Harry se alejara sonriéndole tímidamente y regresará a su lugar y volviera a lo que está haciendo. Louis tiene una batalla interna, camina hacia la cama colocando el regalo en su maleta para verlo cuando llegue a casa. Empieza a colocar las cosas indispensables que llevaría a casa, así pasan las horas hasta que Harry le murmura buenas noches y apaga la luz, dejando que el lugar se alumbre con la lámpara de Louis mientras sigue con su labor de guardar sus cosas.

Media hora después Louis se percata de que Harry se ha quedado dormido ya aprovecha para sentarse en el escritorio que comparte con Harry y arrancar una hoja de su cuaderno. Deja que las palabras y todos los sentimientos que ha estado guardando por un tiempo salgan y pueda escribirlo. Él realmente se esmera por decorar y hacer prolija su letra y hace un sobre metiendo la carta en ella y cerrarla con una corazón. Espera que Harry le envié mensaje cuando termine de leer la carta como le ha señalado en ella, porque él no aguantará la incertidumbre durante varias semanas.

Solo esperaba que Harry lo tomara por lo menos bien o si es tan afortunado y el universo estaba de su lado, Harry sintiera algo por él, más allá de una amistad bonita.

Se queja cuando su despertador suena muy alto, le toma unos segundos levantarse de mala gana y apagarlo. Las piernas le pesa mientras camina hacia el baño y se cambia de ropa, regresa a la habitación viendo cómo Harry se aferra en sueños a la almohada y suelta balbuceos tiernos, Louis toma esa oportunidad para sacar la carta del cuaderno y acercarse sigilosa y silenciosamente hasta la mesita de noche de Harry y colocarla un poco hacia el fondo. Le tiemblan las manos cuando un mensaje le llega al teléfono avisándole que su madre está esperándolo en el estacionamiento. Ya no puede retraerse y solo suspira rezando para que todo salga bien y no se le salga el corazón cuando obtenga un mensaje de Harry.

Toma sus cosas guardándola en la mochila para colocársela y tomar su maleta sin hacer mucho ruido para despertar a Harry, pero parece que no funcionó porque el rizado abre los ojos pasándose las manos para despertarse. Se le acelera el corazón, pero parece que Harry aún no piensa levantarse.

—¿Lou? ¿Ya te vas?—Harry entrecierra los ojos con sueño viéndolo desde su cama.

—Sí, ya está mi familia aquí—Dice dejando la maleta a la mitad de la habitación y caminar hacia Harry y sentarse a su lado—Espero que tengas un buen viaje y una feliz navidad.

Mierda. Harry sonríe perezosamente colocando la frazada a la altura de su boca y lo mira con los ojos brillantes y si Louis fuera lo suficientemente valiente se inclinaría para besarlo, en cambio se queda sentado.

—Debería decirte lo mismo, espero que disfrutes estás vacaciones con tu familia—Harry baja la frazada.

—Gracias—Louis responde mirando hacia la puerta—Yo debería irme.

—¿No vas a despedirte de mí?—Harry alza una ceja.

No sabe a qué se refiere con despedirse, pero Harry luce tan suave y Louis se inclina y lo abraza colocando su cabeza en su cuello y aspirar su dulce olor. Siente las manos de Harry recorrer su cabello y acercarlo a él. No es valiente para soltar todo lo que está escrito en esa carta, pero espera ser algo valiente para afrontar todo cuando regrese de las vacaciones.

Se aleja viendo cómo Harry le sonríe para volver acostarse y cerrar los ojos. Muerde su labio para darse la vuelta, tomar su maleta y salir de la habitación con el corazón latiéndole tanto que siente que en algún momento se detendrá.

—¿Estás bien?—Una de sus hermanas pregunta.

Alza el cabeza distraído por estar viendo su teléfono en cada minuto que pasa y es que han pasado varias horas y está seguro que Harry ya debió de haber leído la carta, pero por alguna razón no ha recibido un mensaje. Está empezando a preocuparse y está buscando respuestas para poder calmarse unos momentos, posiblemente quiera pasar algún tiempo con su familia y quiera responderle cuando tenga tiempo y Louis lo entiende, pero eso no quita que siga nervioso.

—Sí, no es nada—Louis se encoge hombros caminando está su habitación y dejarse caer en ella mientras revisa su bandeja de mensajes.

Tiene mensajes de otras personas, menos de Harry y eso le preocupa un poco. Se sobresalta cuando obtiene un mensaje y decae su sonrisa cuando se da cuenta de que es Niall.

Tal vez no debe preocuparse antes de tiempo, a penas hoy en la mañana dejo la carta encima de su mesita de noche y Harry debe estar ahora compartiendo tiempo con su familia, lo entiende. Es solo que no puede calmarse sin tener el pensamiento de que en cualquier momento Harry pueda mandarle mensajes y obtener una respuesta a sus miedos, le da terror pensar en eso y él quiere acabar con la incertidumbre de una vez.

Responde los mensajes de Niall antes de meter su teléfono en uno de los cajones y se va a obligar a mantener la cabeza ocupada en otros asuntos, pasará sus vacaciones en familia y solo tomara su teléfono el día de su cumpleaños. Si eso hará, tal vez así pueda dormir tranquilo.

Louis tiene un buen día, despertó con buenos deseos, un pastel de cumpleaños y muchos regalos. Él había cerrado los ojos con fuerza deseando que algo bueno venga de haberle dejado una carta a Harry sobre sus sentimientos antes de soplar la vela de cumpleaños. Bajo las escaleras desayunando una gran porción de pastel para luego besar la mejilla de su madre agradeciéndole como siempre.

Unas cuantas horas después subió a su habitación después de haberse quedado sentado en el sofá viendo películas clásicas de navidad. Tenía dos pendientes que lo ponían demasiado nervioso y ansioso, una de ellas era que aun no había abierto el regalo de Harry y que paso varios días sin revisar su teléfono por lo que tenía la esperanza de que el rizado haya mandado algún mensaje entre ese lapso de tiempo.

Se subió a la cama estirándose para obtener el regalo con envoltura azul, lo abrió con cuidado con una presión en su pecho al darse cuenta de que había varias cosas, una colcha suave azul, varias mascarillas para la cara, té y varias cosas para cuidarse. Ríe con cariño aún le sorprendía un poco lo random que podía ser Harry con los regalos y si o si debe usar todo esto. Dejo todo aún lado para obtener su teléfono en una de las cajones. Podía sentir su corazón retumbar en sus oídos.

Aún con los nervios que sentía abrió los mensajes y se le paralizo el corazón cuando vio que tenía varios mensajes de Harry y algunos de sus amigos felicitándolo. Sin esperar más tiempo abrió los de Harry esperando alguna respuesta, pero se le borro la sonrisa cuando se dio cuenta de que solo lo felicito nuevamente y le deseo una feliz navidad. Eso era todo, no había nada más.

Se sobresalto un poco al recibir una llamada de Niall. Se llevo el teléfono a la altura de su oreja decepcionado. Sabía que había una probabilidad de ser rechazado, pero nunca pensó que dolería tanto, él no buscaba una relación solo quería sacar todo lo que sentía.

—¡Feliz cumpleaños!—Grito del otro lado con emoción.

—Gracias, Niall—Agradeció sonriendo tan solo un poquito.

—¿Estas pasándotela bien?

—Uhm—Louis dudo unos segundos antes de suspirar—En realidad me duele el pecho, le dejé la carta a Harry antes de irme y lo único que obtenido de él fue deseos de cumpleaños.

—Lo siento—Niall murmuró por lo bajo—¿Estás seguro que lo ha leído?

—Si—Dice convencido—Se lo deje sobre su mesita de noche ahí tiene cosas importantes que llevará a su casa. Solo no está interesado, siento que será incómodo cuando vuelva ¿Cómo puedo cambiarme de habitación?

Se deja caer en la cama. No quiere saber cuan incómodas se volverán las cosas o simplemente estaba exagerando porque Harry no era así y casi nunca se ven hasta la tarde o noche. Puede sobrevivir otros tres años más.

—¡Louis!—Niall ríe—¿Por qué no le preguntas acerca de la carta?

—No, no—Niega varias veces cerrando los ojos—Seguramente no quiera hablar de eso, mejor no toco ese tema de nuevo. Me siento mejor al dejarlo salir de alguna manera y que él sepa acerca de mis sentimientos así que no importa.

—Como quieras—Puede imaginar cómo Niall rueda los ojos—Aun así, si quieres quedarte en mi habitación eres más que bienvenido.

—Gracias lo tomaré en cuenta—Sonrió antes de escuchar los gritos abajo—Ahora debo irme. Te veo en unas semanas más.

Deja caer el teléfono cuando cuelga y se tapa el rostro queriendo llorar. En unas semanas volverá a la universidad y no quiere saber cuando tenga que enfrentarse a uno de sus miedos, pero sabe que tiene que hacerlo.

Abre la puerta despacio rezando por qué Harry aún no haya llegado, deja escapar un suspiro cuando se da cuenta de que no lo ha hecho, camina hasta la mesita de noche con la esperanza de que tal vez Harry no se haya dado cuenta de la carta, pero la carta no está ahí. La mesita de noche del rizado está limpia, parece que Harry la ha limpiado antes de irse a su casa por lo que es seguro que ya haya leído la carta. Ignora la horrible presión en su pecho y camina hasta la cama para subir la maleta y empezar a desempacar y así poder distraer su cabeza y dejar de sentirse triste.

Él realmente pensó que Harry iba a responder, tampoco dejo la carta con esa intención, pero sabía cómo era el rizado y sabía que el dejaba las cosas en claro. Él solo quería una respuesta, no importa cuál fuera solo quería una. Y tiene tantos sentimientos mezclado y se siente algo molesto por no haber recibido aunque sea un corto mensaje, él dejo salir todos aquellos sentimientos, puso su corazón en esa carta y dejo salir sus miedos e inseguridades que se sentía. Esta algo enfadado porque estuvo todas las vacaciones ansioso y nervioso que no se le quitaba la cabeza el recibir un mensaje de su parte.

Aunque entendía no era su obligación responder, pero aún así se sentía enfadado y tenía el corazón roto. Saco su ropa limpia, que ya había lavado en casa, para colocarla en el closet y poco a poco sacando los regalos que le dieron guardándolos en su lugar.

Cerró los ojos con fuerza cuando escucho la puerta abriéndose. No presto atención a Harry porque no podía verlo a los ojos aún, así que siguió sacando las cosas.

—Oh, estás aquí—Harry entro cerrando la puerta detrás de él arrastrando su maleta—Pensé que vendrías más tarde.

Louis lo ignoro mientras cerraba la maleta y la guardaba en su sitio. No quería ser un imbécil ignorándolo, pero no podía verlo aún sabiendo que leyó la carta y no respondió.

—¿Y cómo te fue con tu familia?—Harry se sentó en la cama quitándose las botas.

—Uhm.

—¿Estás cansado o molesto?—Harry lo mira esperando que por lo menos le dé una mirada—¿Sucedió algo?

Iba a decirle, porque no puede contener nada y menos ahora. Se da la vuelta con la mirada fría viendo cómo Harry mantiene una sonrisa cansada y está con los pies descalzos sentado sobre la cama. Tan solo verlo hace que el dolor incremente y es que Harry es tan bonito, dedicado e inteligente que entiende porque no corresponde aquellos sentimientos.

—Esperaba una respuesta. Sé que no era una obligación, pero deje salir tantas cosas ¿Sabes?

Harry ladea la cabeza frunciendo el ceño—¿Eh? ¿De qué hablas?

—De la carta que te deje en tu mesita de noche—Dice a la defensiva.

—¿Me dejaste una carta?—Harry pregunto confundido.

Se cruza de brazos molesto—Lo hice antes de irme.

Harry relaja sus expresiones caminando hacia su mesita de noche y Louis no entiende nada, pero cuando Harry se agacha y mete de mano debajo de su mesita y saca la carta lo entiende todo. Desvía la mirada avergonzado, se puso realmente mal y malhumorado solo para darse cuenta de que la carta se había caído hasta el final, se debió de caer cuando la puso muy en el fondo. Se quiere darse un golpe.

Harry se sienta mirando la carta en sus manos—¿Es para mí?

Louis alza la mirada demasiado sonrojado. No tenía que suceder de esta manera, Harry tendría que haberla leído cuando estuviera lejos.

—Sí, pero podrías leerlo cuando no esté presente—Pide.

Harry no está entiendo nada porque mantiene la frente arrugada y mira algunas veces la carta entre sus manos, pero asiente y guarda la carta en su mesita de noche para más tarde. Louis deja escapar un suspiro de alivio porque aún no lo ha leído y no necesita estar presente cuando lo haga y entre en pánico por eso.

Harry le sonríe antes de empezar a desempacar y Louis hace lo mismo con el corazón acelerado y una pequeña esperanza.

—¡Te lo dije!—Niall señalo cuando le explico el asunto de la carta y que Harry aún no lo leía—Pero no quisiste hacerme caso.

—Que iba a saber que se cayó hasta el fondo, mis manos estaban temblando y no verifique bien—Se defiende cruzándose de brazos para entrar a una de las salas de estudio deteniéndose unos segundos—Ahí está.

Harry estaba sentado solo en una de las mesas con varias cosas sobre la mesa y estaba concentrado. Poco a poco sentía una frescura invadir su rostro obligando a Niall caminar sin hacer mucho escándalo y ser invisibles hasta llegar a una de las mesas. Niall llevo la vista hasta el rizado mirándolo fijamente y Louis tenía una batalla, quería ir a saludarlo, pero no tenía idea si Harry ya ha leído la carta y parece el momento perfecto como para que lo haga. En la mañana se dio cuenta de que Harry guardo la carta en su mochila antes de salir de la habitación y podría leerlo en cualquier momento y Louis no tenía la valentía para ir.

Alejo la mirada sacando los materiales que le serviría y mordió la punta del bolígrafo inclinándose hacia Niall para no hacer mucho ruido.

—¿Crees que ya lo haya leído?

Niall lo miro de nuevo antes de negar—Parece ocupado en otras cosas.

Hace una mueca pasando las manos por su cabello de manera nerviosa—Expuse mi corazón ahí y para serte sincero me estoy arrepintiendo. Creo que fue mucho para ponerlo en una carta o no en persona.

—Puede ser—Niall asiente—Pero no sabes si a Harry le encanta las cartas y todas esas mierdas cursis. Podría gustarle o ponerte una orden de restricción.

Rueda los ojos recargándose en la silla cruzándose de brazos—No estás ayudando.

—Oh por dios está leyendo algo—Niall susurra y Louis voltea rápidamente, pero luego se da cuenta de que Harry sigue con lo mismo. Golpe la pierna de Niall—¡Ouch! fue una broma.

—Deja de hacer esas bromas, se me sale el corazón—Dice antes de volver a su asunto—Cállate y terminemos esto.

Unas cuantas horas después Louis regresa a su habitación con las manos sudándole y con un dolor de estómago. Está nervioso al entrar en esa habitación y podría haberse quedado con Niall, pero tiene que enfrentar eso, no podía ignorarlo lo más posible. Abre la puerta entrando y viendo a Harry con libros en la cama mientras tararea una canción, tiene los audífonos puestos y la pijama.

Harry alza la cabeza distraído murmurando un saludo y tal vez se dio cuenta del pánico que expresaban porque amplió sus ojos.

—Uhm, yo no he leído la carta—Harry se saca los audífonos—He estado muy ocupado y no he tenido el tiempo de hacerlo. No quiero hacerlo todo apurado, se ve que le pusiste de tu esfuerzo. Prometo que no pasa de mañana ¿Si?

Se rasca la cabeza nervioso y algo decepcionado, pero termina asintiendo. Lo entiende, Harry siempre está algo ocupado, él casi no es de estar relajado, tiene que estar ocupado de alguna manera.

—No hay problema.

Harry asiente regresando su mirada a sus cosas—Tal vez deberíamos pedir algo de cenar si quieres.

—Lo pido yo, así no te estresas y distraes—Comenta Louis.

—Gracias, Lou—Harry agradece.

Al final de la noche terminan comiendo pizza y coca cola mientras Louis termina su tarea con los dedos llenos de grasa y Harry se relaja un poco y mira a Louis, cosa que lo hace sentirse nervioso y sonrojado.

—Lo siento, Louis, está ocupado y un poco de lugar disponible es donde está Harry—Niall señala cuando entran a la sala de estudio. Abre los ojos cuando su amigo lo empuja hacia allí—Y tenemos que hacer esto.

Quiere detener a Niall pero ya están lo suficientemente cerca del rizado. Harry alza la cabeza confundido antes de sonreírle y saludarlo con la mano, parece que aún no ha leído la carta o solo está teniendo lastima por él. Niall rueda los ojos y lo hace sentarse al lado de Harry y el frente a él.

Louis se da la vuelta hacia Harry y con el nudo en su garganta logra decir:—Uhm espero que no te moleste que invadamos tu espacio, era el único lugar disponible.

—No hay problema—Harry ríe—De todas formas la mesa no es mía.

A Louis se le sube la temperatura a la cara cuando Harry ríe de manera tierna y empuja su brazo con el suyo antes de verlo regresar a lo suyo. Puede ver cómo Niall se ríe por lo bajo en su cara, pero lo ignora y trata de buscar la carta en algún lugar de todos estos cuadernos y materiales de Harry. El sobre lo encuentra en su carpeta ya que sobre sale y se nota que es la de Louis. Suspira aliviado por ver qué está en perfecto estado y aún no ha sido abierta.

Por un lado no quiere que lo lea, pero por el otro se siente decepcionado al ver que Harry no le da la importancia. Sin embargo, viendo al rizado ahora no cree que tenga el tiempo de hacerlo.

Ignora a Harry mientras Niall y él se ocupan de terminar un trabajo para una de sus clases. De vez en cuando desvía la mirada para apreciar a Harry en su lugar.

—Iré a buscar el libro que nos pidieron leer—Niall avisa levantándose del lugar.

Harry parpadea mientras mira como Niall se va hacia la biblioteca. Louis baja la mirada nervioso intentando centrar toda su atención en su trabajo y no en el precioso chico de ojos verdes a su lado. Harry se estira un poco y luego se gira hacia él apoyando la cabeza en su hombro. Aquella acción le toma un poco de sorpresa pero sonríe.

—Lo siento, no he leído la carta—Harry bosteza—Al raro tengo tiempo libre y la leeré. Por cierto ¿De qué es la carta?

A Louis se le atora el aire y entra en pánico, no sabe que decir o cómo explicar que es una carta en dónde expresa su amor y sus sentimientos. Harry alza la cabeza cuando Louis no contesta rápidamente.

—Uhm mejor léela

Harry frunce el ceño asintiendo dejando caer la cabeza en su hombro mientras restriega su nariz en su cuello.

—¿Estás cansado?

—Un poco, estar sentado mucho tiempo cansa—Harry explica alejándose. Él ya extraña el toque y el aroma de Harry.

Solo esperaba que Harry leyera la carta de una vez por todas y pueda dormir hoy sin sentirse ansioso.

Louis está en la habitación de Niall junto con los otros chicos cuando sucede. No presta atención a quien toca la puerta sino que sigue con lo suyo hasta que Niall cierra lentamente la puerta y gesticula bajas palabras hacia él. Louis frunce el ceño, pero cuando reconoce 'Harry está aquí' no puede evitar levantarse y entrar en pánico. Él rizado nunca lo ha buscado aquí, por lo que sabe que ya debió de leer la carta y eso le quita la respiración.

Con todos los nervios en su cuerpo abre la puerta y la cierra cuando sale, lo primero que ve es que Harry está ahí parado con los ojos brillantes y la carta ya abierta en sus manos. Ya es demasiado tarde como para darse la vuelta. Para su corazón se tiene que fijar en la reacción de Harry, no luce molesto en cambio tiene las mejillas rojas, sus ojos brillantes y su sonrisa no está, pero no parece desagradarle. Sin decir nada más caminan fuera del edificio caminando por el campus y buscan unas bancas. La noche está ahí para presenciar una respuesta de Harry, se siente nervioso que ya se le ya revuelto el estómago.

Se sienta al lado de Harry mirando sus manos porque no tiene la fuerza para mirarlo a los ojos sea cual sea la respuesta del rizado. Le toma varios minutos a Harry responder simplemente fijándose en la carta, se da cuenta de que ya la ha leído como cinco veces.

—¿Todo esto que escribiste en realidad lo piensas?—pregunta Harry sin creerlo.

—Sí, más o menos porque pienso tantas cosas de ti que una hoja no era suficiente—Va a ser sincero aunque eso le cueste, quiere abrir una vez su corazón sin temor a saber qué pasará.

—Tu escribiste tantas cosas bonitas que nunca nadie me ha dicho—Harry subió las piernas girándose a Louis para verlo a la cara. Louis no quería dejarlo así que subió la pierna y así como Harry se giró. Ahora estaban viéndose de frente y Louis se sentía indefenso, como si Harry pudiera leer cada uno de sus pensamientos más profundos.

Louis no tenía mucho que decir, casi no conectaba su cerebro con sus palabras.

—Eso eres y más cosas.

Harry bajo la mirada sonrojado, casi nunca veía al rizado de esa manera a menos que lo elogiarán por su trabajo.

Alzo la cabeza jugando con la carta en sus manos—Dijiste que estás enamorado de mi desde hace un tiempo.

Louis desvía la mirada porque podía aceptar otras cosas, pero era difícil confirmar eso, porque era más fácil ponerlo en papel que decirlo en voz alta frente a Harry. Los ojos de Harry brillantes por las estrellas le dieron aquel pequeño empujón que necesitaba para ser sincero y expresar todo lo que sentía y todo lo que puso en esa carta.

—Lo hice y te lo repito—Louis se arma de valor para llevar una de sus manos a la de Harry—He estado enamorado de ti hace un año y no es algo fácil decirlo sin sentir esto raro en mi cuerpo. Estoy enamorado, no solo de lo bonito que eres sino de la forma en que eres, tan inteligente, perseverante, amable, tantas cosas que no tengo ni idea de cómo describirlas.

Sonríe por lo que ha ocasionado en Harry. Se apachurra en su lugar y sus manos se enredan la una con la otra y desvía la mirada sin poder mirarlo a los ojos. Podría no haberlo dicho, porque su cabeza no procesaba bien las cosas cuando sentía tantos nervios, pero ahora que lo dice y ve las reacciones tan tiernas de Harry lo hacen sentirse bien. Podría acostumbrarse a esto solo si Harry tendrá estas reacciones que hacen que su corazón se infle de amor.

El decirlo ya es una victoria no importa cuál sea la respuesta de Harry.

—Louis yo—Harry regresa la mirada hasta él nervioso y algo triste—Todo lo que dices es muy lindo, pero.

Tan solo escuchar eso hace que aleje la mano y se prepare para lo que viene. Se aferra a la orilla de la banca esperando algo.

—Entiendo.

Harry lo mira confundido antes de buscar su mano—¿Me dejas terminar?

Louis parpadea ante eso pero termina asintiendo. Él rizado se acerca más hasta sus rodillas se tocan y todo luce tan lindo, lo bonito que luce Harry aún con ese cansancio visible en su rostro y aunque haya una posibilidad de que llegue con el corazón roto, aún con todo eso se permite disfrutar del momento porque cree que no importa el momento, las circunstancias, de algo se puede aprender y por algo pasan las cosas, él siempre ha tenido eso en la mente.

—Voy a serte sincero, no estoy enamorado de ti, no como lo estás de mi—Harry dice lentamente y Louis ya quiere levantarse e irse pero la mano del rizado lo aprietan con fuerza—Pero me gustas yo he me estado sintiendo raro contigo desde hace unos meses, me pone nervioso que me abraces, que estés tan cerca de mí y siento cosquillas cada vez que haces algo por mí, me gusta regresar a nuestra habitación y saber que estarás ahí y pienso mucho en ti durante el día. Debe significar ¿algo?

Harry baja la mirada jugando con sus dedos y Louis solo quiere inclinarse y besarlo ya, pero sigue hablando.

—Con esto de la carta no quiero que dejemos las cosas como normalmente eran ¿Tu lo quieres así?

—Yo acepto todo lo que quieras darme—Es lo único que dice.

Harry ríe negando acercándose más—Ya veo.

—Enserio, Harry, escribí esa carta porque sentí que estaba ahogándome con mis sentimientos y teniéndote como compañero no ayudaba—Dice—Además sentía que alguien debía recordarte lo maravilloso que eres, si estás teniendo un mal día o estás dudando de lo que eres ahora está carta tiene el poder de hacerte saber cuan increíble eres.

Se sorprende cuando Harry apoya su cabeza en su hombro y no tarda en poner una mano en sus rizos.

—Tú eres increíble—Ya más calmado Harry suspira mirando su teléfono—Yo debería irme estaba con unos amigos y veo que tú estabas divirtiéndote. Cuando llegues a la habitación tenemos que terminar con esta plática, así que no tardes ¿Si? Además es de noche.

Louis asiente, pero no se siente decepcionado solo ansioso y no cree que vaya a concentrarse ahora que sabe que Harry le corresponde los sentimientos.

—Lo prometo—Louis alza una mano antes de dejarla caer en los rizos de Harry—¿No estarás durmiendo?

—No, voy a esperarte—Harry muerde su labio—Si estoy durmiendo despiértame.

—No haré eso.

—Pero Louis tú estabas esperando una respuesta todas las vacaciones—suelta un puchero—Me imagino cómo te debiste de sentir. Así que despiértame.

Louis está muriendo de amor aquí mismo, realmente tenía pocas esperanzas pero aquí está Harry con sueño y exigiendo que si está durmiendo cuando llegue lo despierte y Louis no cree tener el corazón para hacer eso cuando siempre duerme cálido y bonito.

—Bien—Acepta—Entonces te veo ahí.

Harry asiente dejando libre su mano para poder levantarse. Ve como dobla la carta delicadamente para meterlo en uno de sus bolsillos y acercarse a Louis que lo toma por sorpresa. Él castaño no va a desaprovechar ninguna oportunidad así que se inclina y lo besa, sin miedo ni nerviosismo en su cuerpo. Se centra en Harry y solo en el. Él ojiverde suspira acunando sus mejillas correspondiendo el beso.

Besar a Harry es lo mejor que ha sentido en mucho tiempo. Los labios del rizado son suaves y se amoldan perfectamente con los suyos, sabe a tantos sabores mezclado que no puede decir un sabor en específico, pero disfruta besarlo. Él rizado es el que se aleja primero sorprendido por la acción de Louis.

—Ya debería irme—Harry murmura aún con la guardia baja, pero se inclina y deja un besito chiquito antes de sonreírle y caminar.

Louis camina hasta la habitación de Niall con una sonrisa que nadie se la podía quitar.

Louis entra a la habitación de manera silenciosa y encuentra las luces apagadas por lo que cree que Harry debe estar durmiendo y no va a despertarlo aún cuando él lo haya pedido así. No tiene el corazón y cree que mañana puedan también hablarlo, pero Harry se encuentra en la cama riéndose en alto en su teléfono, pero alza la mirada cuando escucha sus pasos. Louis le sonríe aún algo nervioso y no dice nada más, va al baño llevando consigo su pijama para poder cambiarse.

Se da cuenta del esfuerzo que a hecho Harry para no quedarse dormido porque cuando sale del baño el rizado lo mira con los ojos entrecerrados por el sueño y acurrucado en entre sábanas que Louis quiere besarlo.

—Ven—Harry murmura abriendo las sábanas, lo cual lo toma un poco por sorpresa—¡Louis, hay frío, entra ya!

Él castaño ríe acercándose y metiéndose de bajo de tantas sábanas y una calidez lo invade y Harry se acuesta en su pecho y enreda sus piernas alzando la cabeza para mirarlo a los ojos.

Louis pasa los dedos en el cabello de Harry para alejar sus ricitos que invaden su frente—Te quedaste despierto.

—Si—Harry asiente aferrándose a él. Lo friolento que puede ser Harry a veces—No quería hacerte esperar más. Lo siento tenía frío y tú siempre estás cálido.

Louis ríe acariciando el cabello de Harry mirando sus ojos. Había soñado tanto tiempo en compartir esta cercanía con Harry que parece algo irreal, pero el sentimiento que siente ahora mismo le hace darse cuenta de lo real que es.

—¿Estás mejor ahora?

—Sí, gracias—Harry besa su mandíbula—Uhm sabes el beso de hace rato me reafirmó que me gustas. Tal vez no sienta tanto amor por ahora, pero vamos yendo a la segura. Dame unos cuantos meses.

Harry se ríe, pero habla enserio. Louis lo envuelve en un abrazo y le da la vuelta para besarlo sin poder aguantar un poco más. Él se encargará de llevarlo hasta allá con actos y palabras.

Después de todo Harry siente algo por él y eso es una victoria que disfrutara y Harry ya parece emocionado por la manera en que lo abraza y lo besa

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