Esto tenía que ser una broma, cuando pensé que lo peor que podía pasarme en esta nueva escuela era no poder hacer amigos aparece un aquelarre completo de vampiros, y para colmo estos se encontraban sedientos. Observé mi alrededor y todos parecía conocer a este grupo, lo cual me tranquilizo un poco, significaba que no venían a hacer una masacre en esta escuela, pero ¿Qué hacen aquí?.

-Jess ¿Quienes son ellos?- pregunté

Ella alzó los ojos para ver a quiénes me refería, cuando su mirada volvió a conectar conmigo vi un brillo inconfundible, esto olía a Chisme.

-Los Cullen- contestó Angela uniéndose al chisme

-¿Quienes son los Cullen?- pregunté

-Son hijos adoptivos del Dr. Cullen, Los Hale, los rubios, son hermanos gemelos, y los Cullen son su familia de acogida

-Se mudaron de Alaska hace un año pero No socializan con otros- dijo Angela

-Es que andan juntos- prosiguió Jessica- La rubia es Rosalie Hale, y el de cabello oscuro es Emmett Cullen.

Me detuve a observarlos, la rubia de nombre Rosalie sin duda alguna era una belleza andante, una figura hermosa, una cabellera preciosa y unas exquisitas facciones. Una belleza digna de un vampiro mientras que Emmett era el más grande de ese grupo y el más musculoso, lograba dar la impresión de ser alguien intimidante pero emanaba cierto aire infantil.

Ellos son como pareja, ni siquiera se si eso es normal

Jess, ellos no son parientes- defendió Angela

Sí pero viven juntos- hizo una pausa y observó a la otra pareja- bien la de cabello corto es Alice , ella anda con Jasper el rubio que parece estar sufriendo

Observe al rubio, era un joven alto pero no tanto como Emmett, cabello largo y ondulado y ciertamente tenía una expresión de estar sufriendo, fije mi vista en su acompañante, la chica era bajita tenía aspecto de duendecillo, delgada en extremo, con rasgos pequeñas. Su cabello era de color negro intenso, muy corto y apuntando en todas direcciones.

La estaba observando hasta que su mirada conectó con la mía, pensé que se enojaría o algo pero todo lo contrario, me dio una gran sonrisa como si nos conociéramos de hace años, ese gesto me confundió bastante y con un poco de duda le devolví la sonrisa y dirigí mi atención a Jessica. 

-El doctor Cullen es cupido y padre adoptivo

-Tal vez me adopte- bromeo Angela, logrando que soltara una leve risa y disminuyera un poco mi estrés

Fije mi vista en el último integrante, era un chico alto, algo musculoso, con una belleza inigualable que volvería loca a cualquier mortal. Si duda alguna él y Rosalie podrían compararse sin problema con algún dios de la mitología griega.

-¿Quién es el?- pregunté

-El es Edward Cullen, es GUAPÍSIMO- exclamó Jessica- pero nadie es lo suficiente para el

Pude observa como una ligera sonrisa aparecía en el rostro de este vampiro, sin duda alguna estaba escuchando nuestra conversación, si en estos momentos no fuera un manojo de nervios tal vez sentiría vergüenza.

Los chicos al ver que perdían nuestra atención, se encargaron de recuperarla. Eric era un chico con el cual podría crear una buena amistad, lástima que no puedo decir lo mismo de Mike y Tyler, al parecer los dos se encontraba en una competencia de testosterona a ver cual de los dos conseguía mi atención.

Me encontraba contándole a Eric algunas leyendas que me sabía cuando un grito ahogado de Jessica llamó nuestra atención.

Alex- me llamo Jess- Los Cullen te están viendo

Increíblemente, TODA la mesa giró su cabeza en dirección a la mesa de los Cullen, al parecer ser disimulado no es característica de los habitantes de Forks.

Posee mi atención en los Cullen y efectivamente, los cinco pares de ojos color negro me estaban observando, Alice me miraba con una gran sonrisa mientras que el resto parecía analizarme.

-¿Qué clase tienes?- preguntó Mike con una clara intención de llamar mi atención

-Tengo Artes con la Sra. Cooper- dije y justo en ese momento la campana sonó.

-Yo te llevo- dijo Mike mientras tomaba mi mochila, gesto que no le agrado a Tyler 

Sin muchos ánimos de discutir seguí a Mike, durante el camino entablamos una conversación acerca de los maravillosos paisajes que Forks ofrece, en poco tiempo llegamos a mi salón, Mike me dio mi mochila y se despidió, le entregue a la profesora mi comprobante y me indico que me sentara en una de las mesas del fondo.

Me encontraba observando la ventana esperando a que la clase comenzará cuando el mismo aroma dulce que olí en la cafetería se presentó, gire mi cabeza y pude observar a Alice caminar hacia mi con una gracia digna de una bailarina. Una vez que se sentó a mi lado, giró y con su ya usual sonrisa y me habló

-Hola Alexandra, me llamo Alice Cullen- dijo mientras extendía su mano hacia mi

-Dime Alex- conteste mientras estrechaba su fría mano

-Perfecto- exclamó- se que seremos grandes amigas

-Eso espero- conteste con algo de duda

Con el paso de la clase me di cuenta que Alice no era mala, de hecho era una excelente persona, tal vez juzgue muy rápido a los Cullen pero aun así tenia muchas dudas acerca de ellos. Mis pensamientos fueron interrumpidos por la campana pero antes de poder irme Alice me OBLIGÓ a intercambiar nuestros numero de celular, y sin muchos ánimos de llevarle la contra a la vampiresa decidí dárselo.

Mi siguiente clase era cálculo avanzado, con la ayuda del mapa de la escuela pude llegar a mi clase, como era ya costumbre le entregue el comprobante al maestro y este me mandó a sentar para mi sorpresa al lado de Rosalie. Cuando llegue a su lado pude notar como esta se tensaba y dejaba de respirar.

Rosalie se dedicó a ignorarme cosa que no me afectó hasta que el profesor nos puso a resolver un trabajo en parejas, tome un poco de coraje y dirigí mi mirada a ella.

-Hola compañera, si quieres escapar de esta clase te recomiendo que comencemos

Rosalie algo resignada, tomó una innecesaria bocada de aire mientras dirigía su mirada hacia mi. Al percibir mi aroma pude observar como su expresión era entre confusión y alivio.

-Me llamo Alexandra Smith pero dime Alex- dije mientras extendía mi mano. Pude notar la duda de Rosalie pero finalmente estrechó su fría mano con la mía

-Rosalie Hale

Mientras realizamos los ejercicios logre hacer que Rosalie soltara algunas risas durante la clase, llegué a pensar que el profesor nos regañaría pero los más extraño de todo fue la cara de asombro del profesor al ver que Rosalie hablaba y reía conmigo.

Fuimos las primeras en entregar y salir de la clase, pero una vez fuera del salón una sonora carcajada salió de mi la cual no tardó en contagiar a Rosalie ya que la cara que puso el maestro al vernos a las dos fue verdaderamente cómica.

Cuando recupere el aire, Rosalie y yo caminamos a nuestra próxima clase, durante el camino conversábamos de temas triviales mientras que muchas miradas curiosas estaban encima de nosotras. Al llegar a mi clase me despedí de Rosalie y me adentre al aula, y para mi sorpresa el único lugar disponible era al lado de Jasper.

-Hoy es el día de convive con los Cullen o que- murmure para mi misma

Pude observar un ligera sonrisa en la cara de Jasper mientras le entregaba mi comprobante a la maestra, al irme acercando a mi asiento pude notar como Jasper poco a poco se tensaba y dejaba de respirar al igual que Rosalie pero la diferencia era que Jasper cada vez se ponía más tenso y un poco preocupada por su estado decidió intervenir.

-Hola compañero de escritorio- dije extendiendo mi mano- Soy Alexandra Smith

-Hola señorita, Soy Jasper Hale- dijo con un acento sureño mientras estrechaba mi mano

Mi conversación con Jasper se torno bastante interesante debido a sus amplios conocimientos de historia, el me hablaba de guerras como si las hubiera vivido- hecho que no me sorprendería- mientras yo le contaba algunos datos curiosos de hechos históricos que mi padre me enseñó. 

Conforme la conversación iba avanzando note como Jasper poco a poco se tranquilizaba y al igual que su hermana, cuando Jasper volvió a respirar y pudo captar mi olor una combinación entre curiosidad y alivio atravesó su cara, note que iba a preguntar algo pero fue interrumpido por la profesora.

La clase de historia termino y yo estaba a punto de irme, observe como Jasper quería decirme algo pero de nuevo fue interrumpido por la profesora que me mandó a llamar. Sacudí mi mano en señal de despedida y me acerque a la maestra la cual solo me quería dar la bienvenida y desearme suerte en mi adaptación a la escuela.

Salí del salón con intención de irme a mi casa pero me sorprendió ver a Jasper esperarme fuera del aula, quise acercarme a él pero Jessica y Angela llegaron a mi lado y me llevaron con ella hasta los casilleros. Me hablaron de cómo fue su día y como algunos chicos se acercaron a ellas para preguntar por mi, hecho que nos hizo reír a las tres, tome mi casco y me despedí de ellas.

Me dirigí a paso veloz a la oficina para entregar los comprobantes firmados, llegue y la secretaria me dedico una sonrisa

-¿Cómo fue tu día linda?- pregunto de una manera maternal

-Muy raro- dije mientras soltaba un leve risa

Salí de la oficina y me dirigí a mi motocicleta, al llegar ahí me llevé la sorpresa que aquel flamante Volvo que vi en la mañana tenía como dueño a nada más y nada menos que a Rosalie Hale.

-Lindo auto- le dije a Rosalie

-Linda moto- me contestó con una leve sonrisa

-Lo sé- conteste con una falsa arrogancia. Mi gesto provocó una leve risa en Rosalie y una gran sorpresa en sus hermanos al verla reír.

Me coloque mi casco, me despedí de los Cullen y me dirigí a toda velocidad al local de Luna. Al llegar ahí Luna me recibió con una gran sonrisa

-¿Cómo te fue?- preguntó

-Fue un día MUY raro- conteste provocando una cara de confusión en ella

-Ven, cuéntame

Le conté todo mi día, tanto de los chicos, como mi gran estrés al ver a los Cullen entrar a la cafetería y mi conversación con algunos de ellos pude ver que Luna no parecía sorprendida.

-Si, yo ya sabía de los Cullen

-¿Por qué no me contaste nada?- pregunte confundida

-Quería ver tu reacción- contestó muy inocente

-Casi me da un infarto en la escuela- conteste de manera dramática- pensé que se iba a desatar una masacre en la cafetería

-Tranquila- me contestó- Los Cullen no beben sangre humana

-¿QUÉ?

-Si, ellos se alimentan a base de sangre de animal

-¿Eso es posible?

-Al parecer si, eso los hace inofensivos así que tu tranquila

Me quede con Luna mientras le ayudaba en el local y esperaba que fuera la hora para mi clase de pociones. Durante el resto del día no pude evitar sentirme pésimo por juzgar mal a los Cullen, y me encargaría de alguna manera de enmendar mi error.