Novios. La palabra favorita de Youngjae.

Novios, novios, novios, eso eran Juyeon y él, novios… ¿ya dijo que son novios? Bueno, lo son.

Ese día Youngjae despierta especialmente feliz, ¿y cómo no hacerlo? Es imposible no estar feliz si debajo suyo, haciendo de almohada, una piel cálida se siente, y no tiene que pensar demasiado para saber de quién se trata.

Sus mejillas pueden doler de lo mucho que está sonriendo, mirando el rostro de su novio dormido.

Ah, dios, ¡no era siquiera la primera vez que dormían juntos! No podía estar así de emocionado.

Youngjae no terminaba de creérselo. 

Con la enorme sonrisa en su rostro, el rubio se levantó de su cama lo más sigiloso posible, tonteando consigo mismo cuando desde su lugar, ya de pie, podía ver toda la extensión del cuerpo de Juyeon, quien aún dormía, y se sonrojó sólo porque el azabache estaba desnudo de su cintura hacia arriba.

Era una bobada, pero decidió salir de su cuarto antes de que sus mejillas explotaran.

Preparó un desayuno pequeño (por primera vez en sus días universitarios) para Juyeon y él, terminando de adjuntar las tostadas a las pequeños platos, chillando y brincando en su lugar cuando unas manos apretaron sus caderas que apenas eran resguardadas por un camisón grande, rápidamente teniendo a Juyeon besando la parte trasera de su cuello.

Se deshizo ahí. ¡Oh por dios!

ㅡ¡Hyung! -Se escuchó chillando, chocando su espalda con el pecho desnudo del azabache, quien sonrió. ㅡ¡Me haces cosquillas!

Juyeon optó por detenerse, sólo dejando un último beso y apretando la carne en sus manos, con el rubio girando sobre sí, puchereando.

Youngjae tapó su boca con ambas manos cuando Juyeon hizo amague de besarlo. El azabache arrugó su nariz, alejándose sólo poquito. Youngjae parecía tomate.

ㅡ¡Ni se te ocurra! - Chilló, alejándose del azabache, Juyeon bufó a sus espaldas. ㅡTe puedo amar mucho pero hay que lavarse primero, hyung.

ㅡPero en las películas y en las historias esas que leo las parejas siempre se besan cuando despiertan. -Juyeon soltó, pareciendo realmente dolido, puchereando aún cuando su pareja no lo viera. ㅡJae, sólo un piquito~

Youngjae se giró otra vez, esta ocasión pasando por su lado con dos platos pequeños en sus manos, girando sus orbes con diversión.

ㅡPues te informo que en las películas nada es real, y en esas historias que lees los o las autoras son bobas, ¿cómo se van a besar apenas despiertan? Está bien que sea ficción, pero hay cosas que simplemente no.

Juyeon se sentía como cachorro regañado, con las perlas del rubio en él. 

ㅡDeja de hacer berrinche y sirve el jugo. 

Juyeon hizo lo que se le pidió, aún cuando seguía dolido.

El quería un beso, ¿qué tanto era eso?

Y bueno, no todo parecía lindo. Juyeon super triste.

♡♡♡

Ir a su universidad estando de novio con su mejor amigo-novio, es incluso mejor de lo que Youngjae lo imaginó. La verdad es que todo lo que imaginó junto a Juyeon es más bueno de cómo se veía en su mente.

Llegar a su mesa de siempre ahora con la mano de su novio entre las suyas se siente bien, demasiado en realidad.

Sonríe como bobo cuando Juyeon le aprieta el agarre en su mano, acercándose poquito para dejarle un beso en su sien, murmurando después:

ㅡVoy por un aperitivo, ya casi regreso.

Y puchereó, esta acción no dejó ir a Juyeon, quien ladeó su cabeza.

ㅡ¿Qué pasa? -Inquiere algo confundido, sonriendo cuando cae en cuenta lo que sucede, entonces le da un golpecito pequeño en la nariz del rubio, quien pucherea más. Era un bebé. ㅡVoy por un aperitivo, mi amor, ya casi regreso. -Repitió, recalcando la palabra nueva, con Youngjae sonriendo de inmediato. ㅡ¿Mejor?

El rubio sólo asiente, arrugando su nariz cuando Juyeon le dejó un beso en sus párpados, levantándose para ir a hacer lo dicho.

Realmente se sentía como un sueño.

Juyeon era… simplemente un sueño, de verdad. Su mente ilusionada con algún futuro juntos, siempre imaginó escenarios donde Juyeon fuera su novio. Se preguntaba cómo actuaría, qué diría, si le tomaría la mano en público, si lo besaría, si le hablaría bonito, en fin, si sería cursi con él. 

Es algo vergonzoso pero se siente bien admitir que ya Juyeon era así con él incluso antes de revelar sus sentimientos, pero quizás nunca lo notó. Bueno, nunca lo hizo.

Juyeon lo abrazaba siempre sin importar las personas que los rodearon, le besaba las mejillas, las sienes y muchísimas veces les decía un "te amo" antes de marcharse, acciones que no vio tan profundas hasta ese momento que las analiza.

Se siente algo bobo por ello.

Sonríe en grande con sus pensamientos, su mirada nunca abandonando la manera en la que Juyeon camina hacia él, con una bandeja en sus manos que lleva unas cajitas de jugo, algunas galletas y frutas. Juyeon era lo máximo. El azabache le sonríe bonito cuando toma asiento a su lado, una vez más, actuando como si fueran únicamente ellos dos ahí.

Efectos de estar enamorado, es de suponer.

Y su comportamiento no debería sorprenderle ni hacerlo chillar como lo hace, porque al término de su día universitario, cuando ya caminan con sus manos entrelazadas para sus departamentos, Juyeon es quien suelta con su voz dulce y mejillas rosadas:

ㅡ Lindo, ¿quisieras ir a una cita? 

Youngjae definitivamente chilla asintiendo una y otra vez, besando las mejillas de su, ejem, novio.

ㅡ¡Obviamente sí quiero, hyung!

Dios, en serio estaban enamorados. ¡¿Qué era todo eso?!

Ah, su primera cita.

¡Su primera cita!