Dedicado a yeonbin06 y a pichiiowo ♡, gracias por darle amor a mi adaptación desde el principio!! :) Se los agradezco mucho, por sus comentarios por sus votos, gracias por todo, yeonbin06 gracias por volver a leer todos los capitulos esperando que actualice, muchas gracias a ambas(os) por todo ese amor a la historia. ♡♡ Espero les guste este capitulo!! ❤❤

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—¡Huening Kai!— Sung Hoon corrió detrás del niño pequeño —quédate ahí, por favor— cargó al niño por las axilas y lo llevó de regreso al baño —sé que no te gusta, pero mamá dijo que debes sentarte aquí, ¡siéntate!— Huening Kai frunció el ceño mientras Sung Hoon le ayudaba a acomodarse en el baño entrenador. Sentó al niño y posteriormente se sentó en el suelo —¡Dios!

Huening Kai pataleó —baba...

—Baba está con Lia— Sung Hoon bostezó —quédate ahí cinco minutos y podremos irnos.

Huening Kai bostezó también —no popo.

—Mami dijo que debes intentar— Sung Hoon se levantó —no te muevas— bajó las escaleras corriendo, yendo dos escalones a la vez —¡mamá!— pasó a un lado de su madre y regresó para detenerse a su altura —mami, Huening Kai dijo que no quiere hacer popo.

Soo Bin se dio la vuelta con una sonrisa —Está bien bebé, si no lo ha hecho aún, ya no lo hará— volvió la mirada a Lia —Justo como tu hermana.

Lia chilló, lanzando patadas hacia su padre con sus pequeños pies —¡ami!

Yeon Jun besó sus pies —ten cuidado alfa, nosotros no pateamos.

Lia sonrió, levantando los brazos hacia él —¡riba!

Yeon Jun la levantó para dejarla sobre el suelo —ve por tus zapatos, Lia.

—¡Sí, baba!

Sung Hoon la observó correr lejos —baba... ¿cuándo volverá a transformarse en lobo?

Yeon Jun se irguió —no estoy seguro Sung Hoon, y no creo que ella lo sepa tampoco— besó la frente de su hijo para luego hacer lo mismo con Soo Bin —iré a cambiarme de ropa también.

Soo Bin sonrió —prepararé algunos aperitivos para el viaje— dijo antes de ver a Sung Hoon —¿puedes ir a decirle a tu hermano que ya puede levantarse?

—Oh, sí— Sung Hoon corrió escaleras arriba y entró al baño —¡Huening Kai!

El niño brincó asustado —¡Sung Hoon!— se quejó —asusta...

Sung Hoon lo cargó con un poco de trabajo, mirando el baño —nada— dijo y le ayudó a ponerse el pantalón —mami dijo que puedes dejarlo por ahora, ¡no, no!— empujó al niño dentro del baño —lávate las manos— pidió y espero a que terminara para dejarlo salir.

Fue de regresó a su propia habitación —¿qué me pongo?

—¡Sung Hoon!— Lia corrió dentro de su habitación, tropezando con los muñecos —ow...— se levantó rápidamente —¡muñecos!

Lia intentó pegarle pero Sung Hoon atrapó su mano —baba dijo que si pegas estarás en problemas, Lia. No me pegues.

Lia se cruzó de brazos, gruñendo —¡muñecos!

—¿Qué tienen mis muñecos?

—¡Mueve!

Sung Hoon suspiró —deja de gritar, por favor— buscó un par de calcetines en un cajón —recogeré mis muñecos antes de irnos.

Lia se recostó en el nido y giró en el —quiero ami.

—Mamá está abajo— dijo mientras se ponía los calcetines —baba dijo que debías vestirte, ve.

Lia salió de la habitación gateando, en busca de su mellizo.

Sung Hoon quitó el muñeco con el que se había tropezado, solo en caso de que volviera a entrar corriendo.

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—Ami...— Huening Kai jugueteó con sus pies —¿dónde vamos?

—Vamos al avión grande, bebé, para ver a Beom Gyu, Tae Hyun, Sunoo y Eun Bi.

—¡Eun Bi!— Lia gritó.

—No necesitas gritar, cachorra.

—Sí, baba.

Sung Hoon bostezó —mamá, ¿puedo dormir en el avión? Estoy cansado.

—Sí, precioso. ¿Por qué estás cansado?

Sung Hoon miró a Lia que sostenía la mano de su mellizo —Lia siempre va a mi habitación muy temprano.

Yeon Jun los miró por el espejo retrovisor —Lia, ¿qué te he dicho de eso?

La alfa se quejó —que no vaya...

—Exacto— Yeon Jun dio un giro al llegar a la terminal —no lo hagas ya, Lia.

—Sí, baba.

—Baba... quiero mantita.

—Está en la cajuela, tendrás que esperar a que estacionemos el auto.

Huening Kai soltó un gimoteo —No, ahora, por favor.

—No, Huening Kai.

—¡Mami!— El niño comenzó a llorar —¡necesito!

Soo Bin se estiró para alcanzarlo y limpiar sus lágrimas —escucha a baba, mi amor... solo falta un poco más.

Lia también ayudó a secar sus lágrimas —tranquilo Huening Kai... tranquilo.

—¡Quiero!

—Omega— Yeon Jun habló y Huening Kai cubrió sus labios —¿qué acabo de decir? Cuando bajemos del auto la tendrás, pero puedes quedarte aquí si no te comportas.

Huening Kai sollozó contra su mano, bajando la cabeza. Sung Hoon se quitó la bufanda —ten Huening Kai, usa esto.

—Oh, gracias Sung Hoon... ¿lo ves, Huening Kai?

El niño la apretó con fuerza mientras el auto se detenía. Yeon Jun puso el freno y bajó del auto. Huening Kai lloró más fuerte cuando abrió la puerta y Yeon Jun frotó sus mejillas juntas hasta que Huening Kai respondió a la acción. Se removió para salir del auto... Soo Bin había aprendido que su hijo odiaba los lugares cerrados.

Yeon Jun lamió su rostro, marcándolo con su aroma —debes tranquilizarte... no siempre recibirás lo que quieres.

—¡Mm!

—Ven— le quitó el cinturón de seguridad y dejó que olisqueara cerca de su fuente de aroma —vamos por tu manta ahora.

—¡Huening Kai!— Lia estiró los brazos —Mami, ¡quiero salir!

Sung Hoon gruñó —Lia, espera.

—Sung Hoon...— Soo Bin advirtió —cuida tu tono... Lia, sé paciente.

Ambos niños respondieron al mismo tiempo.

Sung Hoon estaba atravesando una etapa en la que intentaba jugar a ser padre. Yeon Jun lo había puesto en su lugar algunas veces. Había ocasiones en que le gritaba a sus hermanos cuando se portaban mal en lugar de ir a buscarlos.

Sung Hoon tenía cinco años... comenzaría la escuela pronto y aunque el niño había crecido tremendamente, seguía temeroso. Sung Hoon aún tenía el corazón más grande y era el niño más dulce. Su cabello creció tanto que Soo Bin tuvo que cortarlo para que cayera por debajo de sus hombros. Su pronunciación había mejorado; Yeon Jun por fin dejó de encontrarlo gracioso. Sus clases con Bang Chan iban tan bien que Lia y Huening Kai habían comenzado a asistir después de la escuela para lobos.

Ambos niños podían transformarse... A Lia le había costado un poco más de tiempo que a su hermano. Lia y Huening Kai eran completamente blancos, justo como Yeon Jun. Cada que Soo Bin salía, la gente le decía que los niños se parecían a Yeon Jun y el omega no podía sentirse más feliz por eso.

Lia era muy animada, pero también muy dulce. Se comportaba agresiva y protectora, tal como Sung Hoon. Le gustaba estar en la nieve todo el tiempo y realmente le gustaba transformarse. Admiraba a Sung Hoon, e incluso más a Yeon Jun. Parecía bastante independiente, justo como Soo Bin pero tenía un corazón sensible. Si alguien estaba molesto o llorando, Lia se volvía empalagosa, su exterior se derretía. Sabía escuchar y retener información, tal como Sung Hoon.

Huening Kai era su mellizo pero también su opuesto. Les gustaban las mismas cosas y siempre estaban juntos, pero él era más reservado. Le gustaba jugar solo y estar en el agua. Huening Kai controló más rápido su transformación pero no le gustaba cambiar a su lobo muy a menudo. Yeon Jun tenía que organizar días en los que él, Huening Kai y sus hermanos practicaban a cazar para que el niño tuviera una excusa y se transformara. Le gustaban los rompecabezas y adoraba a su madre, tal como Sung Hoon.

Sung Hoon rompía los límites cada día. Cazaba a pie con Yeon Jun y era capaz de mantener el ritmo. El niño sería el primer mitad-lobo en asistir a una escuela de lobos puros. Los sentidos del alfa iban más allá del entendimiento de Yeon Jun. Le gustaba ser retado así que Yeon Jun a menudo lo llevaba al bosque y jugaban a las escondidas, a veces Sung Hoon no lo encontraba pero a veces sí. El niño era rápido con sus pies y resolvía rompecabezas en minutos. Soo Bin a veces lo observaba mientras escribía en su diario y se preguntaba cómo pudo crear a un niño capaz de demoler estándares.
Sung Hoon había tomado su injusta vida y la había destrozado bajo sus dedos. Yeon Jun y él solían hablar en las noches sobre Sung Hoon, su desarrollo y como solo le esperaban cosas buenas.

El primer año fue difícil. La gente les hacía fiestas, lo cual les había ayudado a los niños para hacer amigos y aprender a jugar con otros, por lo que Soo Bin se alegraba. Viajaron a Barrow para ver a su familia y fue incluso peor. Soo Bin apenas y vio a su alfa e hijos. Era llevado a un lado y ellos a otro.

Ahora iban a unas 'vacaciones de la familia Choi’ como Yeon Jun les decía, para visitarlos de nuevo.

—Salgan todos— Yeon Jun habló, abriendo la puerta de Lia y ayudándole a quitarse el cinturón —escúchenme bien, no quiero que después digan que no les advertí— miró al niño entre sus brazos y después a Lia y Sung Hoon —si se portan mal, la próxima vez que vayamos a Barrow solo seremos su madre y yo.

—La última vez que fuimos...— Soo Bin tomó la palabra —hubo llanto en el avión por los auriculares...nadie los tocará esta vez.

—¡No!— Lia gruñó —¡película!

Yeon Jun la tomó por el mentón —¿te gustaría quedarte en casa?

Lia negó rápidamente —no, baba.

—Muéstrenme que pueden comportarse y lo consideraré en el vuelo de regreso— abrió más la puerta para poder dejar a Huening Kai y su manta —salgan y vayan a buscar su maleta en la cajuela.

—Sí baba— se escucharon tres voces al unísono.

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—¡Hola!— Beom Gyu separó sus brazos para dar abrazos —oh Dios mío, ¡están tan grandes!

Sung Hoon se inclinó respetuosamente antes de que Beom Gyu lo abrazara —Hola Beom Gyu.

Beom Gyu acarició su rostro y luego su cabello —oh, luce increíble...está más corto— sonrió ampliamente —Sung Hoon...luces tan grande.

—Gracias, Beom Gyu.

El omega mayor cargó a Lia —¡y tú estás enorme!

Soo Bin sonrió —demasiado grandes... crecen muy rápido.

—Realmente lo hacen... entren, entren— Beom Gyu les apresuró a pasar —¿cómo estuvo el vuelo?

—Mucho mejor que la última vez— Yeon Jun besó la mejilla de Beom Gyu —es bueno verte, omega.

—Igualmente, Yeon Jun... ¡Tae Hyun, Sunoo, Eun Bi!— Beom Gyu acarició la cabeza de Huening Kai que estaba pegado a la pierna de Soo Bin —es un niño hermoso, esos ojos siempre me cautivan.

Tae Hyun llegó primero —bienvenidos— dijo y abrazó a Yeon Jun —es bueno verte de nuevo.

—¡Sung Hoon!— Sunoo sonrió, yendo directo hacia él —hola Sung Hoon, ¿cómo estás?

Sung Hoon sonrió —bien, Sunoo— respondió y lo abrazó —te extrañé mucho.

Sunoo sonrió de lado, sosteniendo la mano del alfa —también te extrañé...mamá dice que no sabe por qué si todos los días hablamos por teléfono.

Sung Hoon besó la frente del omega —no es lo mismo— razonó y volvió la mirada a su maleta —te traje algunas cosas.

—Oh, gracias— Sunoo se sonrojó, mordiendo su labio —no puedo esperar por mostrarte lo que puedo hacer como lobo ahora.

—¡Sunoo!— Lia se paró frente a Sung Hoon —hola, ¿Eun Bi?

—Eun Bi está jugando arriba— acarició su cabeza y besó su mejilla —ve con ella— Sunoo miró a Sung Hoon de nuevo —tu cabello se ve bien...me gusta.

Sung Hoon tocó su cabello, que ahora llegaba a sus hombros —gracias— se fijó en el cabello de Sunoo que ahora llegaba a su espalda baja —el tuyo es muy largo.

Sunoo sacudió la cabeza —me gusta así, ya me acostumbré.

Sung Hoon sonrió —también me gusta.

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Sunoo tomó impulso para correr, escalando un árbol alto en la parte trasera de su casa.

Sunoo llegó a lo más alto antes de saltar. Sung Hoon rápidamente intentó atraparlo pero falló, aunque el omega logró caer sobre sus pies —oh, wow— Sunoo hizo algunos sonidos tiernos mientras Sung Hoon rascaba sus orejas —eso fue increíble, Sunoo— levantó la mirada —peligroso, pero increíble.

Sunoo lentamente se transformó, temblando —frío.

Sung Hoon se quitó la chamarra con rapidez para dejarla sobre los hombros del omega —te tengo— le ayudó a levantarse —eso fue ge-genial.

—Gra-Gracias— Sunoo sonrió —trabajé mu-mucho en eso.

—Sunoo...— Los dientes de Sung Hoon castañetearon por el frío que ahora sentía —estás congelándote— guió al niño dentro, hacia la chimenea donde Huening Kai jugaba en silencio —quédate aquí, Sunoo— besó su nariz y frotó sus brazos para mantener su temperatura —te traeré algo caliente— dijo antes de darle un beso a Huening Kai, que se alejó de la muestra de afecto.

—Mm, ¡solo!

—Está bien, Huening Kai— Sung Hoon se encogió de hombros y miró a su amigo —le gusta estar solo... baba y mamá dicen que lo dejemos.

—Ya veo...— Sunoo miró al omega menor —¿puedo sentarme cerca del fuego, Huening Kai?

El niño asintió, continuando con su juego.

Sung Hoon negó —ahora vuelvo— giró su cuerpo y se estrelló contra Eun Bi —oh, discúlpame.

—¡Sung Hoon, Sung Hoon!— La niña corrió alrededor de él junto a su hermana —¡me gusta tu cabello!

—Gracias, Eun Bi— la detuvo para que dejara de correr —a mí me gusta el tuyo.

—¡Gracias!

Eun Bi y Lia debieron ser gemelas. Eran mejores amigas y si Lia no le estaba quitando el celular para hablar con ella, entonces Eun Bi se lo estaba quitando a Sunoo.

—¡Lia, Lia!— Sung Hoon gritó —deja a Huening Kai, quiere estar solo.

Lia frunció el ceño, gateando hacia su hermano —Huening Kai, ven a jugar.

—¡Mm!

—¡Lia!— Sung Hoon volvió a gritar —¡déjalo en paz!

—¡Ami te dijo que no me grites!

—¡Ugh!— Sung Hoon se dirigió a la zona donde se encontraba los adultos —baba, disculpa...— recostó la cabeza sobre el costado de Yeon Jun —baba...

—Si alfa, ¿qué pasa?

—¿Recuerdas cuando hablamos de ser chismoso? No lo estoy siendo... solo intentó ayudar.

—Lo recuerdo— Yeon Jun se levantó, dejando una mano en su espalda —¿qué pasa?

—Lia está molestando a Huening Kai y le dije que lo dejara pero no me hace caso. Quiere estar solo.

—Está bien Sung Hoon— Yeon Jun caminó de regreso con él donde Lia intentaba convencer a su mellizo de salir de un rincón —Lia.

La cabeza de la niña giró hacia su padre —¿si, baba?

—Deja a tu hermano en paz.

—Pero... pero...

—Ahora, alfa.

Lia fue hacia Eun Bi, quejándose —intento ayudar.

—Sung Hoon te dijo que lo dejarás y no le hiciste caso. Cuando Huening Kai quiere estar solo, déjalo. ¿entiendes?

—Sí, baba.

Yeon Jun se puso de cuclillas a un lado de su hijo que abrazaba sus rodillas —¿estás bien, omega?— Huening Kai lloriqueó, alzando los brazos para que lo cargara —¿quieres venir a sentarte conmigo?

—Sí, por favor.

—Bien, cachorro— Yeon Jun lo cargó y miró a sus hijos —Sung Hoon no es tu padre pero es tu hermano mayor, debes escucharlo cuando intenta ayudar.

—Sí baba...lo siento Sung Hoon.

—Está bien, a Huening Kai le gusta estar solo y mamá siempre habla de respetar, así que respétalo.

Lia bajó la cabeza —baba...Sung Hoon está siendo grosero.

—Sung Hoon está diciendo la verdad...ven aquí.

La niña se puso de pie y corrió hacia las piernas de Yeon Jun —¡grosero, grosero!

—Puedes sentirte como desees— dijo mientras se alejaba con los mellizos —pero eso no cambia lo que está bien y lo que está mal.

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Sung Hoon dejó que Sunoo se acurrucara más cerca mientras se acomodaban para ver una película —¿así estás bien, Sunoo?

—Sí, Sung Hoon.

Eun Bi se sentó también —Sunoo...— extendió un recipiente con palomitas hacia él —¿quieres?

—No, gracias Eun Bi.

Eun Bi puso el recipiente delante de Sung Hoon —¿quieres?

—No, gracias.

—¿Por qué pabbi hizo palomitas si nadie quiere?— La niña pequeña suspiró y dejó el recipiente en medio de Lia, Huening Kai y ella —comeremos todas entonces...come, Huening Kai.

—No, gracias...

—Huening Kai...— Sung Hoon llamó su atención —son palomitas, vienen del maíz.

El pequeño omega miró el recipiente y tomó una introduciéndola a su boca masticándola antes de agarrar más —rico.

Lia le dio unas palmadas en la espalda —¡buen trabajo, Huening Kai!

El omega se sonrojó una vez que la película comenzó —gracias...

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—¡Juntos!— Tae Hyun gritó, aplaudiendo hacia Sung Hoon y Sunoo —¡corran, corran!

Sung Hoon corrió a un lado de Sunoo, manteniendo el ritmo con el lobo negro. Saltó sobre un tronco y esquivó algunos arbustos —¡izquierda, Sunoo!

Sunoo corrió hacia la izquierda, viendo al lobo blanco del que Sung Hoon hablaba. Corrió más rápido después de que su tío se desvió, gruñendo al acercarse a la cola de Yeon Jun. Sung Hoon se aferró a su arma afilada, rebasando a Tae Hyun y mirando a su padre. Yeon Jun podía correr más rápido, Sung Hoon sabía que no sería capaz de alcanzarlo si lo hacía —¡Sunoo, arriba del árbol!

El omega disminuyó la velocidad, escalando el árbol con facilidad. Corrió por las ramas, dando un gran salto antes de caer sobre su tío. Mordió al alfa en el cuello, gruñendo. Yeon Jun se dio la vuelta y tiró al lobo. Se movió justo antes de que Sung Hoon saltara encima de él, dejando que su hijo cayera y se deslizara por la nieve.

Sung Hoon y Sunoo se movieron alrededor de Yeon Jun lentamente, mirando esos ojos negros que pasaban de uno al otro. Sunoo se movió primero, siendo derribado como un muñeco. Sung Hoon corrió hacia Yeon Jun después, con el cuchillo firmemente sostenido en su mano. Yeon Jun saltó sobre él, haciendo que quedara sometido sobre el suelo.

Sung Hoon suspiró, exhausto —no es justo...— Yeon Jun lamió su rostro, haciéndolo reír. Sung Hoon abrazó la cabeza de su padre —¡baba!

Yeon Jun lo mimo gentilmente, diciéndole silenciosamente que había hecho un buen trabajo.

El niño rió —te amo, baba.

Yeon Jun lo lamió una última vez antes de moverse.

—¡No, no, no es justo!— Sunoo tembló y su padre lo envolvió en una gruesa manta para cargarlo.

Tae Hyun besó su frente —lo hiciste bien, Sunoo. Tú y Sung Hoon son un buen equipo.

Sunoo hizo un puchero y se acurrucó más entre sus brazos —gracias, faðir— se quejó cuando una ráfaga de viento los golpeó —¡casa!

—Está bien, cachorro— Tae Hyun lamió sus mejillas rojas —iremos a casa y tomaremos un baño caliente.

Sung Hoon subió a la espalda de Yeon Jun y lo abrazó mientras trotaba a un lado de Tae Hyun y Sunoo —¿con chocolate caliente?

—¡Sí!— Sunoo estuvo de acuerdo —¡mucho chocolate caliente!

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—¡Lia!— Soo Bin llamó —¡Ven adentro, por favor!— Un lobo blanco se tambaleó hacia él, sacudiendo la nieve de su cuerpo —es hora de la cena, princesa. Ven.

Lia entró, cayendo sobre su espalda mientras se transformaba —frío, ami.

—Es más frío aquí, alfa— la cargó con una gruesa manta y la acunó —¿te divertiste corriendo?

—Sí, ami— la niña se cubrió mejor con la manta —¿Huening Kai?

—Huening Kai está con baba y Sung Hoon, casi listo para comer— subió las escaleras con ella —vamos a vestirnos para que podamos unirnos a ellos.

—Sí, ami— Lia bostezó —¿Eun Bi?

—Está esperándonos también— Soo Bin la dejó en la cama del cuarto de invitados —estás muy fría, bebé— le dio un beso en los labios y presionó sus narices juntas —por eso se supone que debes venir cuando ami te llama la primera vez.

—Sí, ami— Lia se quejó, abrazándolo —cansada...

—Sé que lo estás, después de la cena...— le puso su ropa con cuidado —iremos directo a la cama, ¿está bien?

—Mm— la pequeña alfa sostuvo la mano de Soo Bin, poniéndose un poco necesitada de atención —ami...

—Entiendo, bebé— la cargó y fue meciéndola mientras bajaban —ami entiende...

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—Hola Huening Kai— Soo Bin se sentó a su lado —¿qué haces, bebé?—

Huening Kai tomó la mano de Soo Bin mientras seguía jugando —rompecabezas...

—Oh, qué lindo— Soo Bin sonrió, besando la pequeña mano —¿es el que te dio tu hermano?

—Sí, ami.

—¿Puedo ayudarte?

Huening Kai asintió rápidamente y subió al regazo de Soo Bin, que comenzó a ayudarle con unas piezas —Huening Kai, ¿crees que te gustaría ir afuera después del rompecabezas?

—No, ami.

—¿No? ¿No quieres jugar con todos como lobo, bebé?

El niño se quejó, presionando la espalda contra Soo Bin —no...

—Ya veo...— besó su cabeza —¿a veces no te gusta ser un lobo?

Huening Kai dejó de jugar y se dio la vuelta, abrazando el torso de Soo Bin mientras se quejaba —no lobo.

—Eres un lobo, mi amor— Soo Bin acarició su espalda —eres un lobo hermoso.

—¡No quiero!

—Está bien— Levantó el rostro de su hijo y secó sus lágrimas —¿no quieres ser un lobo, Huening Kai?

—No ami, no me gusta...asusta.

—Está bien preciso— Soo Bin le sonrió para tranquilizarlo y lamió su pequeña nariz —entonces puedes ser lo que sea que desees.

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—Mami — Sung Hoon se apoyó en su mano mientras Soo Bin le ponía un vendaje en su pie —no puedo transformarme como Huening Kai y Lia, pero aun así puedo correr muy rápido...Baba dice que eso me hace incluso más lobo.

—Tu baba tiene razón, precioso— Soo Bin le dio un beso en el pie lastimado —te hace diez veces mejor.

Sung Hoon sonrió —Hum...a Huening Kai no le gusta transformarse, ¿eso aún lo hace un lobo?

Soo Bin lo pensó por un momento —creo que eso lo hace más lobo también.

—¿Por qué?

—Porque sabe exactamente lo que quiere...es su lobo interior, tal como contigo. Eso no cambiará quién es.

Sung Hoon asintió —A Huening Kai le gusta el agua— sonrió de lado —¿podría ser un pez?

Soo Bin imitó su sonrisa —quizás se suponía que fuera uno.

—Pescadito Huening Kai— Sung Hoon suspiró, jugando con sus pies —Huening Kai es dulce, Lia es...— hizo una mueca —ruidosa.

—Lo es, ¿hay algo malo con eso?

—A veces...cuando entra a mi cuarto y comienza a gritar.

Soo Bin rió entre dientes —pero... sigue siendo tu hermana, ruidosa o no.

—Lo sé mami, los amo mucho...intento enseñarles cosas.

—Bien podrían ser trillizos porque son muy similares.

Sung Hoon mordió su labio inferior, asintiendo —baba dice que somos tres partes de un todo— se sentó y besó la frente de su madre —yo creo que somos cinco partes de un todo... tú y baba también.

Soo Bin lo abrazó fuerte —eres un niño tan bueno, Sung Hoon— lo apretó, haciéndolo reír —estoy orgulloso de ti, Sung Hoon.

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—Debes correr más rápido.

Sung Hoon estaba encorvado, respirando fuerte —sí, baba.

—Si quieres escalar ese árbol debes tomar mayor velocidad al comenzar.

—Sí, baba.

Yeon Jun cargó al niño y palmeó su espalda —estas cansado, tomaremos un descanso.

—¡Baba!— Lia levantó la mano desde donde Huening Kai y ella los miraban, sentados en la escalera —¿puedo intentar?

—No, porque sí caes morirás.

Lia frunció el ceño y volvió a sentarse —sí, baba.

Yeon Jun dejó a Sung Hoon a un lado de su hermano —les traeré algo de comer.

—Gracias baba— Sung Hoon se recostó sobre su espalda —¡es muy difícil!

Huening Kai bajó la mirada, con un muñeco en su mano —¿subir árbol?

—Sí— Sung Hoon bostezó —es muy alto...— sostuvo sus manos frente a su rostro —necesito patas y garras, como Sunoo.

Lia gateó hasta estar a la altura de su rostro, con sus narices rozándose —ami dice que no hables así, Sung Hoon.

—Lo sé— Sung Hoon acarició su cabeza —pero sería más fácil.

Huening Kai se acercó más —me gustas así.

—¡Sí!— Lia concordó —te amamos así...¡baba dice que eres un fuerte, fuerte lobo!

—Lo digo porque es cierto— Yeon Jun volvió con un charola en la mano, que dejó en el suelo antes de sentarse —¿de qué hablaban?

Huening Kai miró los palitos de pretzel y se acercó más a la charola. Lia se sentó en el regazo de su padre —Sung Hoon quiere patas y garras.

—Sung Hoon.

—Solo dije que sería más fácil, baba, no que quiero ser un lobo.

—Bueno, ya eres un lobo. No veo porque querrías ser algo que ya eres.

—Baba...— Huening Kai se acercó a su rodilla —quiero pretzel.

—Adelante, cachorro.

—Gracias— Huening Kai tomó uno y lo partió en diferentes tamaños, dándole uno a Lia, Sung Hoon y Yeon Jun antes de tomar el pedazo más pequeño para él.

—Huening Kai— Yeon Jun acarició su rostro —traje muchos, no tenías que compartir.

El niño soltó un quejido y ocultó su rostro cuando la atención se posó en él —¡Mmm!

—Relájate, omega— lo cargó con un brazo para acomodarlo en su regazo, a un lado de su hermana —gracias por compartir.

Sung Hoon comió su pretzel y se estiró para alcanzar un trozo de manzana —baba, ¿cuándo se sentirá cómodo Huening Kai? Y dejara de ser tan tímido...

Yeon Jun besó la frente de su hijo —todo toma su tiempo...cuando esté listo se sentirá cómodo, ¿verdad?— El pequeño omega asintió contra el pecho de Yeon Jun mientras mordisqueaba su pedazo de pretzel —y si no lo hace completamente, aun así estamos aquí para él, ¿no es así?

—¡Lo estamos!— Lia levantó su pretzel —¡mi mellizo!— le hizo cosquillas, haciéndolo reír —¡mi omega con un ojo café claro y el otro gris obscuro! ¡Bonito!

—Eso es cierto— el exmilitar le dio un beso —muy bien, Lia.

Sung Hoon levantó su mano —¿y yo?

Lia sonrió de lado —¡hermano mayor lobo!

Sung Hoon negó, intentando deshacerse de su sonrojo —Lia boba.

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—Y entonces casi muero.

—¡Casi mueres!— Lia soltó un quejido —no...

—Casi, bebé... Ami sigue aquí.

Huening Kai secó sus lágrimas —¿y después, ami?

Soo Bin sonrió con dulzura —entonces nacieron...y baba y yo fuimos los seres más felices en el mundo.

Lia le dio un beso a su madre y luego uno a Huening Kai —te amo, ami.

—Y yo te amo a ti, princesa— acostó a la niña en su propia cama antes de hacer lo mismo con Huening Kai —Huening Kai, ¿quieres un poco de té, bebé?

El niño sacudió la cabeza, aferrándose a su manta (la que antes perteneció a Sung Hoon) y a su muñeco —estoy bien, ami.

—Está bien, niño grande— Soo Bin besó su frente —ami te ama mucho, ¿sí?

—Te amo.

Soo Bin sonrió, acariciando su mejilla antes de ir con Lia —Lia...— tomó asiento al borde de la cama —¿quieres té?

—Un poquito, mami— Lia se hizo un ovillo y dejó un beso en la pierna de Soo Bin —solo poquito.

—Está bien bebé, iré por un poco, ¿sí?

—Sí... oh, pero... solo por si me duermo antes, ¿puedes darme mis besos ahora?

—Por supuesto— el omega rió, besando su frente —te amo.

—¡Te amo!

Soo Bin dejó su lámpara encendida, caminando hacia la puerta —¿le dijeron buenas noches a Sung Hoon y baba?

—Sí, ami— respondieron al unísono.

—Bueno bien, ahora vuelvo...dulces sueños.

—¡Buenas noches, ami!

Soo Bin caminó hacia la habitación de Sung Hoon, encontrando al niño leyendo —¿puedo pasar?

Sung Hoon levantó la mirada —hola, mami.

—Hola precioso— respondió y miró el libro —¿estás leyendo?

—Sí, un libro que baba me trajo de Barrow— le mostró la portada con una sonrisa —es de acertijos.

—Muy bien, bebé— el omega se sentó al borde de la cama —estoy dando besos de buenas noches, ¿está bien?

—¡Sip!— Sung Hoon extendió sus brazos —besos, por favor.

Soo Bin empujó al niño sobre la cama, dándole varios besos en el rostro —mi niño grande, como un adulto... cada vez que pienso que no puedes volverte más sabio, lo haces.

Sung Hoon sonrió —gracias, mami.

—Te amo muchísimo, Sung Hoon— Soo Bin estiró su mano hacia él —¿mejores amigos?

—Mejores amigos, mami.

Soo Bin le dio otro beso —gracias por siempre cuidar de tus hermanos aunque a veces te molesten.

Sung Hoon se encogió de hombros y acarició la mejilla de Soo Bin —los amo mucho.

—Lo sé bebé, lo sé...¿le dijiste buenas noches a baba?

—Aún no— el niño bostezó —¿puedo hacerlo cuando termine?

—Claro— lentamente Soo Bin se puso de pie —estaré abajo, le iba a preparar un poco de té a tu hermana— hizo un gesto restándole importancia —pero está muy cansada, ya debe estar dormida.

Sung Hoon sacudió la cabeza —ella siempre se duerme.

Soo Bin le guiñó el ojo —ven cuando estés listo— salió de la habitación y caminó por ese piso de la casa, recogiendo muñecos y papeles. Se aseguró de que las luces estuvieran apagadas antes de bajar las escaleras de madera —¿alfa?

Yeon Jun salió de la cocina con un trapo sobre su hombro —¿si, Camelia?

Una sonrisa apareció en el rostro de Soo Bin, que se acercó a él —solo te estaba buscando— le dio un pequeño beso, dejando las manos sobre sus caderas —¿estás lavando los trastes?

—Sí— Yeon Jun asintió y rozó sus narices —estás frío.

—Solo un poco— se separaron y Soo Bin caminó al fregadero —¿la mujer que está escribiendo el libro sobre nosotros vendrá mañana?

—Sí, omega— Yeon Jun respondió mientras secaba una olla —quiere hacer más preguntas... Ye Jin dice que no ha parado de hablarle sobre el proceso del parto.

Soo Bin sonrió, jugando con una taza limpia —es un poco extraño...me siento como una celebridad.

Yeon Jun dejó la olla —mientras estés feliz puedes sentirte como quieras.

El omega mordió su labio inferior —¿te ducharás conmigo esta noche?

—Lo haré, mi amor, cada noche— el exmilitar se posicionó frente a él, con los brazos cruzados —Huening Kai se transformó hoy mientras lo bañaba.

—Oh...eso es lindo.

—Sí, lo bañé como siempre y lo volví a bañar cuando se transformó— Yeon Jun sonrió para sí mismo —es muy dulce.

—Mucho— Soo Bin cerró los ojos —mi bebé...

—Tu celo se acerca.

El mitad lobo asintió con un ligero sonrojo —sí...

—¿Qué te parece...— Yeon Jun sujetó sus manos —si nos quedamos en la casa de vacacionar de Tae Hyun y Beom Gyu mientras los niños se quedan en casa con Eun Ji?

—Suena mejor que el año pasado— los ojos de Soo Bin se agrandaron —la nieve estaba realmente fría.

—Lo sé, omega— Yeon Jun lo besó, sosteniéndolo cerca de su pecho —la nieve oculta los olores, lo siento.

Soo Bin bostezó —está bien... creo que tu idea estará bien— levantó la mirada para verlo a los ojos —te amo.

Yeon Jun acarició el cuello de Soo Bin, recorriendo con sus dedos los bordes del collar que llevaba —y yo te amo a ti, omega.

—¿Me seguirás amando mañana?

—Sí, omega.

—¿Y el día siguiente?

—No.

—¡Yeon Jun!

El lobo sonrió de lado, mostrando un hoyuelo —te voy a adorar.

—Alfa bobo.

—¿Baba?— Sung Hoon caminó hacia ellos —vine a decir buenas noches.

Yeon Jun se arrodilló, acariciando su barbilla —¿cómo te sientes?

—Bien— el niño sonrió —cansado pero bien.

—Eso es bueno, alfa— respondió Yeon Jun, picando su estómago —hiciste un buen trabajo hoy...como siempre lo haces.

Sung Hoon inclinó la cabeza —gracias, baba— dijo mientras le devolvía el gesto —tú también hiciste un buen trabajo.

Yeon Jun sonrió de lado —siempre lo hago.

Sung Hoon rió, abrazando a su padre —baba bobo.

Yeon Jun lo cargó y con su mano libre sujetó la mano de Soo Bin —bobo, bobo, siempre soy bobo.

Sung Hoon recostó la cabeza sobre el hombro de su padre —bobo...pero calientito— el niño cerró los ojos —baba calientito.

Y si ver a Yeon Jun metiendo a Sung Hoon en la cama no derritió el resto de su pequeño corazón frío, entonces despertar y ver a su alfa, su esposo, preparando el desayuno con tres niños corriendo detrás de él, sí lo hizo.

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—... Quiero estabilidad y felicidad para mí, para mi pasado, para mi futuro... Quiero sostener a mi omega cerca y nunca dejarle ir. Quiero que mis hijos sonrían al verme y que deseen estar cerca de mí. Quiero amor...

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Holi, ¿cómo han estado?

Les cuento que he estado un poco cansada, mi semana ha sido cansada, ayer tuve un día muy cansado, más de lo común, se acerca el cumpleaños de una de mis mejores amigas y junto a uno de mis amigos hicimos un regalo para ella, los dos y aunque el hizo la mayoría ayude en ciertas cosas y quedo muy bonita junto con mi carta, la verdad no sé si fue porque no dormí muy bien pero si que me sentí drenada de energía ayer, aún así me siento feliz :), los resultados de mis pruebas aún no salen y debo seguir esperando, así que todavía no sé si pase :"), gracias por su amor y comprensión, realmente gracias por todo este cariño que recibo, a veces siento que no lo merezco, realmente gracias!!! ❤❤ Espero les guste este capitulo!! 💖💖 Quedan 2 cspitulos más y se termina, lloro porque no creía que terminaría rápido :")

Tomen agua, cuidensen mucho!! ❤ Hagan stream y recolecten votos!! Los(as) amooo ❤❤