❄4❄
Esta canción me inspiró mucho en este capítulo.https://youtu.be/eT5muWj8rKI
En capítulos anteriores dejé alguna que otra sobre esto.
💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜
BOUN🖤
- ¡Huiste de mí sin dar explicaciones! ¡No me llamaste en dos años ni mandaste un mensaje a las doce del fin de año! -me mantuve en silencio. Tenía razón en todo, en enojarse también.
Observé a mis amigos, sus miradas pesaban a mis espaldas, inquisitivas, dudosas sobre lo que sucedía conmigo. No podía darles la menor importancia a ellos, solo podía concentrarme en el esbelto chico que tenía entre mis brazos, todo empapado por la lluvia, con la sangre en las mejillas de la rabia y el estremecimiento que captaban mis manos a través de su ropa.
Cuando uno de los de seguridad entró interrumpiendo mi amena velada con mis amigos, diciendo con su semblante serio que un tal Prem, pelinegro y bajo estaba preguntando, no, exigiendo que me presentara ante él o amenazaba con un escándalo, estaba ahí fuera, no dudé en correr hacia él.
Mi sorpresa estuvo en ver las condiciones en las que se encontraba, no parecía estarse cuidando lo suficiente si había ignorado el agua y había llegado a mi club.
Siguió al no escuchar una excusa de mis labios. - ¡Me dejaste en manos de cualquier compañero!
Silencio. Todo lo que dijese podía y seria usado en mi contra.
Él comenzó a llorar desesperado, sin vergüenza a ser visto por alguien más. lo abracé aún más para reconfortarlo. Me sentía bailando con el diablo, queriendo caer en otras tentaciones que no debía. Este niño estaba prohibido en todo lujurioso sentido.
Llegamos a la parte trasera del lugar. Había mandado a construir junto a este club unas pocas habitaciones por cualquier evento. La mía era tipo pent-house, subiendo por atrás hasta el dormitorio más grande. Era mi lugar seguro. Cuando quería escapar y apagar todos los sonidos ya que la había condicionado para ello. - Y ahora, ¡ahora de seguro estabas con ese chico con falda entre tus manos! ¡Es injusto!
Entramos a la habitación y comencé a quitar su ropa ignorando sus ofensas y reclamos, mi prioridad era mantenerlo cálido. Él se estaba dejando hacer sin protestas.
- ¡No es justo que sea yo quien sufra todo y tu nada, disfrutando la vida de fama en Corea! Lejos, sin dar una mirada hacia atrás.
-Tienes razón, Prem, fui un desconsiderado.
- ¡No me des la razón porque sí!
-Levanta las piernas para que pueda sacarte ese jean, esa jodidamente pegado a tu cuerpo.
-No me des ordenes, no eres mi jefe, bastardo. -suspiré frustrado, por lo bajo para que no rezongara por ello, una vez más. Al parecer no fue lo suficiente bajo porque su cara de molestia decía que estaba a nada de querer arrancarme la cabeza.
-Ni una protesta más, Prem, necesito que te centres en esto primero. Debes bañarte y cambiar tus ropas. Luego, el resto.
Asintió con una mueca en su rostro. Bajó su mirada hacia su cuerpo y mis manos, hacia mí arrodillado intentando deshacerme de su molesto jean. ¿Por qué tenía que usar estas cosas tan ceñidas?
Por otra parte, estaba más que orgulloso de poder apreciar esta vista por primera vez. No había notado lo mucho que ansiaba poder hacerlo hasta que me fui del país.
Me levanté y quedé cerca de su rostro el que parecía haberse tragado todo el carmesí. me alejé dos pasos y le mostré la ducha. Miró a su alrededor dándose cuenta de que estaba en el baño. Salí rápidamente de allí.
El corazón en la boca y las manos picando. ¿En qué estabas pensando Boun? No puedes ser tan tonto y dejarte guiar por un impulso. Luego de dejarme llevar qué haría, disculparme de seguro y pretender que nada había ocurrido. Eso era en lo que me había especializado estos años, pretender indiferencia.
Cuando me fui tomé la decisión por ambos, queríamos lo mismo, triunfar, pero por desgracia no lo lograríamos estando juntos, éramos como demasiado verdes y jóvenes para entender cómo hacer que la adrenalina explotara en los que nos veían.
Mis pensamientos se vieron interrumpidos por los toques en la puerta. Eran leves así que supe de quien se trataba. -Entra, Earth.
El chico buscó por todos lados señal de intruso o invitado por la habitación. Sonreí ante su cautela. -Está en la ducha.
-Uf, mejor, creía que iba a... -hizo el gesto de cortar su cabeza con las manos. -Como sea, traje esto pensando que sería calentito y agradable de llevar porque no es tan grande.
-No necesitabas molestarte, no les quitaré más tiempo a solas, me iré en unos instantes. -un igual o más rabioso Prem salió usando una bata de baño. Quería detenerme primero a analizar sus palabras, pero podía más la lujuria. Las gotas de agua escurriendo de su cabello y perdiéndose en la afelpada prenda, sus mejillas tenían un color saludable al igual que sus labios y su prepotente actitud...
Desvié la mirada hacia Earth, quien dejó las prendas sobre la cama. -Si necesitas algo más estaré abajo entreteniendo a Sammy y a Pin para que no suban a husmear.
-Tranquilo, lo devolveré enseguida, no queremos que el idol coreano pierda fama en su círculo íntimo. -Earth me dio una última mirada, entre compasiva y de reproche. Lo sé, debía decir muchas cosas, pero era más fácil mostrarlo con hechos. Y me daba miedo ser enviado a la misma friendzone de hace dos años.
-Gracias, pequeño, despídeme de los chicos. Di que tuve un asunto... -miré a Prem con semblante neutro. -urgente que atender.
Earth me dio un intento de golpe en el brazo refutando por mi mote y se marchó no sin antes señalarme con sus ojos al pelinegro. Debía resolver esto y ya.
Fui hacia la puerta y coloqué el seguro. Caminé con total seguridad y el porte que había ensayado arduamente hasta quedar frente a mi ex compañero, rozando nuestras narices. Estaba asegurándome de que no pudiera escapar de mí, había practicado la seducción física y gestual por mucho. Solo por si acaso, este día llegaba.
-Ahora, tu y yo tenemos un asunto pendiente. -dije intentando proyectar la voz más profunda y fría que podía. Porque por dentro mis entrañas vibraban y se vacilaban en su ansiedad.
.
.
.
Había logrado, luego de unas cuantas contestas de ida y vuelta, que Prem se colocara ropa. No podía pensar con claridad tan solo por tenerlo cerca, nadie quiera saber qué sentía por dentro cuando imaginaba que su cuerpo solo lo cubría un pedazo de algodón y que podía deshacerme de él con un tirón rápido.
- ¿Vas a hablar o no? Sé que tienes personas más importantes esperando por ti allá abajo.
Suspiré frustrado. Esa boca mordaz. ''paso, paso, paso''. Cayó sentado en la cama, me arrodillé entre sus piernas para así poder hablarle sin que se sintiera presionado por mi altura. No había creció tanto, pero él era un niño, o parecías menor o igual, sino sería un desafío cada frase que dijese.
-Primero que nada, no me gustó como trataste a mi amigo, lo hiciste sentir mal y ya tiene bastante con todo lo que ha pasado por sus gustos y estilos de vida. Te creía más inteligente que eso.
Volteó a verme con tristeza en sus ojos. Parecía un cachorro apaleado ante su primer regaño. -Más... más tarde, antes de irme me disculparé.
-Bien, eso está bien, niño. -pasé un pulgar por su mejilla y lo deslicé hasta su barbilla, pero me picaban las manos así que me limité a tocar sus muslos. -Segundo, lo que insinuaste, todas esas cosas, descártalas. Nadie es más o menos importante, y dejé claro algo cuando le dije a Earth que no volvería con ellos hoy.
-Ahora vamos a lo que realmente vinimos a hablar. -now or never, pensé. -Me gustabas hace dos años.
Sus ojos marrones abiertos de par en par, brillosos, esperanzados, me daban indicios y curiosidad a la vez. -Iban a terminar nuestro contrato como pareja en las series, pero el CEO T-All Dream sabía que, si lo decía él, entonces tomarías la postura de siempre, no tendrías otra ship. Y yo tampoco tomaría a otro compañero, no importaría el género. Así que decidí tomar la oferta de mi familia de ir a Corea a tratar mi problema cardiovascular, solo que no sabía que podría conseguir otro contrato allí. Duró un tiempo hasta que pude volver, pero me sirvió para madurar. En realidad, a ambos.
-Tú tomaste a otra compañera y tuve que hacer lo mismo, no podía dejarme ver decaído por nadie, era mi carrera en juego. -dijo, y sabía que así sería. Irremediablemente, el mundo de los negocios y el entretenimiento era sí. Nunca se sabía lo que tendrías que hacer para mantener a flote tu imagen.
-Exacto. Tuvimos que tomar las mismas decisiones por motivos diferentes. Yo estaba perdiendo apoyo de mis fans, no ganaba seguidores en las redes, ni patrocinios, y para completar, la gente comenzó a apoyarte a ti sobre mí. Dejé de servirle a la agencia como tu pareja, no quería hacerlo también como actor. Y suena egoísta, pero había trabajado por años en hacer que los fans me notaran, no quería perder ese ''buenas noches'' de muchos, ni ese ''HBD'' masivo. Así que decidí por mí.
Me levanté del suelo para sentarme a su lado, tomé su mano y la apresé en una de las mías. -Además, ese día dijiste que éramos amigos, así que entendí, no me considerarías como nada más y yo había empezado a quererte como algo distinto a un compañero de trabajo. Quería ser tu amante noche y día, dormir contigo, llegar a casa y que estuvieras ahí, invitarte a una comida que no fuera solo por una historia de IG. Con tus palabras, habías dicho lo suficiente como para hacerme querer huir de lo que sentía.
Aspiró aire por la nariz, cerró sus ojos y cuando los volvió a abrir, expulso el aire lentamente. Se giró para verme directamente. -Ese día que fui verte estaba dolido, habías decidido por mí, por nosotros y me molestó. Entonces estas allí igual que hace un momento cuando me viste después de dos años, frio, vacío e indiferente, ante todo. Me enojé más contigo porque parecía que te daba igual el separarnos, no pude controlar mi boca y me metí en aquel enredo de frases que no quería decir.
Sonreí. -Sí, esa boca te mete siempre en problemas. -empujó mi brazo riendo. Su cabeza descansó sobre mi hombro lanzando un suspiro desganado.
-¿Te das cuenta? Pudimos haber solucionado estas confusiones hace mucho, sin embargo, necesitamos dos años para darnos las palabras correctas.
-Absurdo, pero a veces necesario. Ahora sabemos que hablar es imprescindible para cualquier tipo de relación, incluso si es de ami...
-Me gustabas, también me gustabas en ese entonces. Solo que no lo sabía, tenía el temor de que, si empezábamos a vernos de esa forma y alguien de la agencia se enteraba, nos afectaría a ambos.
-No interesa, ya está solucionado. Volvía a Tailandia y estamos en la misma agencia, así que nos veremos por ahí.
-NO quiero. -me soltó tomándome por sorpresa cuando gritó. -Quiero que nos veamos fuera también.
Su tartamudeo me dejó anonadado, seguía siendo lindo. -Está bien, supongo que de vez en cuando podría invitarte a una comida.
-Tampoco quiero que sea a veces, que sea a menudo.
-Eh, Prem, aunque lo parezca, no tengo tanto dinero para ir a restaurantes todos los días. Podemos dejarlo en una o dos veces por semana, ¿Quizás?
Me empujó más fuerte, haciendo casi caer de la cama. Estaba enojado, sus mejillas me lo decían y su ceño fruncido, y sus manos en puños, y sus dientes mordiendo su labio inferior. -Eres tan tonto que no lo entendiste en aquel entonces y no lo haces ahora.
-Sí, sí, lo siento. ¿podrías explicarle a este estúpido lo que quieres, niño?
-Me gustabas antes, y aun lo haces, pero entenderé que para ti no sea lo mismo. Digo, he visto tus escándalos con hermosas chicas de ese lugar, sería normal que olvidaras todo.
Tomé su barbilla y lo giré hacia mí, hablé acariciando nuestros labios, unos sobre los otros, pero sin llegar a darle un beso real. -Ninguna de ellas interesa, no pudieron suplantarte a ti, todo tú es especial para mí en una magnitud que no tienes la menos idea. De hecho, siempre terminamos por los mismo, yo no podía entregarme por completo porque mi mente estaba en otra persona y nadie quería arriesgarse a ser herido o quedar de segundo plato.
-Lo siento.
-No lo hagas, me alegra decir que mi corazón se quedó en Tailandia.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro