-Karai...- cerró los ojos unos segundos para pensar bien lo que diría- Cásate conmigo...- volvió a abrirlos

Al instante se dio un palmazo en la frente, no le había gustado para nada como había sonado eso.

-Parece que la quieres obligar- dijo para sí mismo restregandose los ojos con frustración- vamos, tú puedes

Leonardo se acomodó de nuevo frente al espejo para intentarlo otra vez.

-Karai...- respiró hondo antes de seguir- ¿Te gustaría casarte conmigo? Ahg! Que horror!- se cruzó de brazos

Era ya la décima vez que fracasaba en su ensayo.

-Oh vamos... ¿cómo es posible que sea tan complicado?- suspiró- y aún no he pensado en lo que le diré antes... no puedo ser tan directo- formó una mueca mientras trataba de idearse algo

-¿Qué tal si le dices algo lindo?- se escuchó una vocecita

Leo se dio la vuelta y lo primero que vio fue a sus tres hermanos menores bajo el marco de la puerta de su habitación.

-Donnie te podría ayudar en eso, sabes que es bueno con las poesías para Abril- comentó el pecoso con una gran sonrisa ganándose un golpe en la nuca por parte del mencionado- oye!- se quejó sobándose

-¿Cómo es posible que hayas estado ensayando desde la mañana? no creo que preguntarle una cosa tan simple sea tan difícil- dijo el temperamental con incredulidad

-No es tan simple como crees- respondió el de la máscara azul sobre un suspiro dirigiendo su mirada nuevamente al espejo

-No he estado en tu situación...- habló el científico- aún no- añadió un poco nervioso, ganándose así unas miradas llenas de sospecha por parte de sus hermanos- pero apoyo a Rapha...- continuó- tú ves esta situación como la más complicada porque lo estás pensando demasiado

Leo estaba apunto de replicar pero la presencia de una chica pelirroja hizo que se tragara las palabras.

-Hola, chicos- saludó Abril haciéndose espacio entre Donnie y Mikey- ¿por qué todos están aquí?

-Por bobo-nardo... está practicando para pedirle matrimonio a Karai- explicó Rapha- pero...- no pudo terminar de hablar

El grito lleno de emoción que soltó la chica en ese instante, hizo que los cuatro hermanos pagarán un pequeño salto.

-Abril!- se quejó el de rojo encojiéndose de hombros por el grito

-Rapha!- exclamó el mayor queriendo asesinar a su hermano con la mirada

-Qué!? Creí que ya se lo habías dicho- se excusó desviando la mirada y cruzando los brazos

-Estoy tan orgullosa de ti, Leo!- decía Abril super contenta- Es grandioso! Ojalá te acepte- juntó sus manos entrelazando sus dedos para mirar a su amigo con gran ternura

-No te ilusiones demasiado- dijo Donnie sobre una pequeña risa- Leo no sabe ni como pedirselo

-Y ni siquiera tengo un anillo- el mencionado se dejó caer sobre su cama, estaba realmente frustrado

-No creo que eso importe- la chica se adentró en la habitación para sentarse al lado del mutante- sólo dile lo que sientes..

-Es que... no es tan fácil- esa era como la tercera vez que lo decía- sé que tendré planeado lo que le diré y cuando la vea... olvidaré todo!- se cubrió el rostro con una almohada

-Leo, no necesitas preparar lo que le dirás, sólo espera el momento y dile todo, deja que tus palabras salgan del corazón- retiró la almohada del rostro de su amigo para poder sonreirle

-Si! Dile cosas tiernas!- dijo el menor acercándose al par de amigos

-Nop... no creo que eso vaya con Karai- opinó Donnie- sólo dile lo mucho que te gusta y... trata de evitar los clichés- él también entró un poco más a la habitación

-Yo sólo tengo una pregunta- habló el de rojo- ¿puedo acompañarte? Quiero grabar cuando te rechace- dijo en modo de burla ganándose la mirada asesina de todos- Qué!? Es que... ¡sólo piensenlo! Creen que Karai, una humana, aceptaría estar con una enorme tortuga mutante?- preguntó alzando una ceja

-En realidad... Karai es...

-Mitad mutante! Lo sé!- exclamó interrumpiendo a Donnie- pero no lo fue siempre, ustedes saben a lo que me refiero..

El silencio se apoderó del lugar por unos segundos hasta que el pesado suspiro por parte del líder lo rompió.

-Es verdad- dijo con la mirada baja

En ese momento Rapha se dio cuenta de lo que su hermano sentía y que en cierto modo lo había herido a pesar de no haber tenido la mínima intención de querer hacerlo.

-No debería molestarme en hacer esto... es muy probable que su respuesta sea no- el pesar en su voz entristeció a todos los presentes

-No te rindas, hermano- dijo Mikey sentándose a su lado

-Leo, también existe una posibilidad de que su respuesta sea un si- dijo Donnie para darle ánimos

-No pierdes nada con intentar- Abril colocó su mano sobre el hombro de su amigo

-Claro que pierdo... si me rachaza nada volverá a ser lo mismo- respondió cerrando los ojos por unos segundos

Nadie dijo nada... lamentablemente, Leo tenía razón.

~❀~

El líder se encontraba en la sala, estaban pasando su programa favorito en la televisión, sin embargo, él no le prestaba tanta atención, cosa que era bastante extraña, pero esto se debía al celular que se encontraba en su mano...

Estaba esperando la llamada de Karai. Habían acordado que se comunicarían para confirmar la cita, pero Leo sólo pensaba en hablarle para cancelarla, ya que las esperanzas de que ella lo aceptara se habían desvanecido prácticamente.

Minutos después...
Su T-Phone empezó a vibrar y la pantalla se iluminó haciendo que el nombre《Karai》sea visible en letras blancas.

Una gran cantidad de sensaciones empezaron a abrumarlo e inconscientemente tragó saliva al leer el nombre.

Después de pocos segundos, se armó de valor y deslizó su dedo sobre la opción de responder.

*-Buenas tardes ¿habló con sr.Tonto adorable? -se escucha del otro lado de la línea

Leo se queda callado. Tenía un gran nudo en la garganta que no le permitía pronunciar una sola palabra.

*-¿Leo? -esta vez se le escuchó un poco alejada, como si se hubiera apartado del móvil para verificar si la llamada aún seguía

-Jaja que graciosa- se atrevió a hablar con un tono ligeramente sarcástico- ¿Cómo está la señorita "Sólo tengo tiempo para mi clan"?- preguntó llevando una mano a su frente para deshacerse del sudor

*-Ahora mismo algo ocupada, pero bien... -sonó despreocupada- ¿Qué tal tú?

-Bien... esperando tu confirmación- ni siquiera él supo porque había dicho eso

*-Ah, claro, dejémoslo a las 11:30 porque tengo que preparar al Clan, ya sabes -una voz se escuchó en el fondo pidiéndo la atención de la pelinegra
-En un minuto, Shini... - respondió a su amiga

-En realidad no sé ¿De qué se trata ahora?- preguntó con algo de sospecha

*-Nada importante...

-Karai- insistió

*-Es verdad! Sólo me ausentaré por un tiempo, iré de visita a Japón... Como dije... no es nada importante- Leo formó una mueca al oír eso, siempre que Karai se iba a Japón pasaba tanto tiempo allá que en muchas ocasiones dudó si volvería

-Eso es genial- dijo fingiendo estar alegre

*-Si, lo sé -dijo de forma burlona- bueno... ¿Estás disponible a esa hora?

Leo volvió a tragar saliva

-Yo... amm...- empezó algo nervioso- en realidad iba a... ¡hey!- se escuchó un quejido seguido por el sonido de un celular estrellándose contra el suelo

*-Leo... -esperó un poco pero no hubo respuesta -¿Leo?

-¿¡Qué haces!?- preguntó Leo liberandose del agarre de su hermano, quien lo había arrastrado lejos del móvil

-No le dirás lo que sea que estés pensando a Karai- ordenó Raphael mirando de costado el celular de su hermano

-¿De qué rayos hablas? Hazte a un lado- trató de rodearlo pero el de rojo se lo impidió

-Leo, escucha...- soltó un suspiro- me equivoqué...- hizo una pequeña pausa- no debí decirte tales cosas- dijo desviando un poco la mirada

Rapha logró captar la atención de su hermano al decir "me equivoqué" ya que, él no siempre reconocía sus errores.

-No sé a qué te refieres- dijo el de azul alzando una ceja

-A lo de Karai!- exclamó- puede que tengas una oportunidad con ella... si yo pude enamorarme de una alienígena.. ¿quién dice que no existe la posibilidad de que Karai se fije en el baboso de mi hermano?- preguntó sonriendo de lado- yo sólo...- soltó un suspiro- quiero que sepas que te apoyo y... bueno, ya sabes- formó una pequeña mueca

-Yo también te quiero, hermano- dijo formando una sonrisa juguetona- gracias...

-Ahora ve por ella- Leo asintió levemente para luego ir a buscar su T-phone

*-Ammm... Bueno, supongo que te hablaré más tarde...- fue lo último que se escuchó antes de que se cortara la llamada

-No! Karai! Espera, yo...- se da un palmazo en la frente al darse cuenta

-Ups.. creo que fue mi culpa, perdón- dijo Rapha recargándose en la pared mientras miraba divertido a su hermano, quien peleaba con el aparato para volver a llamar a la kunoichi

~❀~

-Pero... dijo Donnie que evitara el cliché- comentó Leo mirando el ramo de flores que le había traído su amiga

-Oye, las flores son un hermoso detalle en una cita y contaría como cliché si fueran rosas pero como podrás ver... estas son margaritas- se las entrega y al de azul no le queda de otra más que agarrarlas

Él no sabía nada de citas, así que cualquier consejo lo anotaba en su cabeza como recordatorio.

-Y para que el moño?- preguntó mirando con rareza lo que tenía puesto sobre la parte delantera de su caparazón

-Es un corbatín- lo corrigió- y te vez bien con esto así que déjatelo- respondió acomodándolo- ok, creo que estás listo- dijo emocionada

Leo se miró a sí mismo y formó una gran mueca.

-Esta cosa hace que me vea ridículo- se quejó provocando que Abril ruede los ojos

-Ya cierra la boca y vete- lo empujó a la salida

-Suerte!- gritaron todos al unísono al ver a al líder alejarse del lugar con un notable sonrojo

-Era necesario lo del corbatín?- preguntó Rapha mirando divertido a la pelirroja

-No pero se veía adorable con el- respondió y todos rieron ante su comentario

~❀~

《Leo primera persona》

Llegué al lugar donde teníamos que vernos... yo había escogido el sitio y que mejor lugar que en la azotea en dónde nos conocimos...

Ella estaba ahí, pude verla a lo lejos... se veía hermosa a pesar de que traer la misma ropa de siempre.
Por un momento me sentí tonto por el moño que tenía casi en el cuello.

Todo lo que había preparado en mi mente se borró cuando estuve cerca de ella, todo por culpa de mis estúpidos nervios, justo como le dije a Abril que pasaría.

Escondí el ramo de flores en mi espalda, quería dárselo en el momento indicado.

Sólo rogaba por dentro que todo saliera bien... de verdad quería casarme con ella y si me aceptaba sería el mutante más feliz sobre la tierra...

《Final primera persona》

Leo se acercó a pasó lento y la chica volteó rápidamente al escuchar las pisadas a su espalda.

-Creí que no llegarías- dijo la pelinegra con una sonrisa ladeada

-Soy incapaz de dejarte plantada- respondió haciendo de lado el nudo en su garganta

-Que considerado- dijo de forma sarcástica, sin borrar su sonrisa- amm... ¿y ese moño?- preguntó aguantando las ganas de sonreír de forma divertida

-Ignoralo, Abril dijo que no me lo quitara, según ella... me veo bien- se encogió de brazos en un gesto despreocupado

-ok?- dijo soltado una pequeña risa- ¿quieres sentarte?- miró de costado el borde de la azotea

-No... así estoy bien- respondió sonriendo un poco- Emm..- se rascó detrás del cuello- entonces.... irás a Japón?

-Se suponía que debía partir en dos días- respondió desviando la mirada- pero ¿sabes? Había estado pensado mucho en la posibilidad de quedarme allá- comentó atenta a la reacción de su amigo

-¿¡Qué!?- preguntó al instante sin poder creerlo- Pero, Karai...- eso casi destruyó sus esperanzas. Le preocupó mucho pensar que tal vez no la volvería a ver.

-Pero finamente me arrepentí, me quedaré en New York- lo interrumpió esbozado una pequeña sonrisa- y la visita también tuve que cancelarla, sólo irá Shini- esto alivió de cierto modo al de azul

-Y ¿por qué cancelaste todo?- preguntó curioso

-Por... amm...- trató de pensar en una escusa que sonara convincente- motivos personales- dijo esperando a que Leo no preguntara más

-Ah... claro..

-¿Puedo preguntarte algo?

-Ya lo hiciste- dijo sonriendo de manera burlesca

-jaja- río de manera sarcástica

-Claro que puedes- dijo sobre una pequeña risa

-¿Por qué escogiste este lugar?- preguntó sin más, mientras miraba el gran cartel que estaba detrás de ellos iluminando el anuncio de una bebida

-Aquí nos conocimos ¿recuerdas?- preguntó con un tono suave

-Si, recuerdo muy bien haberte hecho comer polvo cuando te vencí- sonrió de lado para molestarlo

-En realidad... casi me hiciste comer polvos cegadores- entrecerró los ojos- y si me venciste sólo fue porque hiciste trampa- la acusó señálandola con su dedo índice

-En un combate tienes que estar preparado para cualquier cosa- alzó una ceja sin borrar su sonrisa

-Si pero...- trató de pensar en algo para contraatacar- no creo que.. amm..- finalmente suspiró rendido- Bueno... esta vez no puedo contradecirte- dijo haciendo que la Kunoichi ría un poco

《Wow.. que bella sonrisa tiene.... agh! Vamos Leonardo! Sólo dilo! Este es tu momento!! Ahg!! No te acobardes ahora!》pensó el mismo

-amm... es un lindo día ¿no crees?- preguntó empezando a ser consumido por sus nervios haciendo que el color carmesí en su rostro fuese cada vez más notorio

Karai se percató al instante y no pudo evitar sonreír divertida.

-¿Te sientes bien?- preguntó la chica

-Si.. por supuesto...- su sonrisa hizo más obvio lo nervioso que estaba- ¿por qué la pregunta?

-Es que... si no te has dado cuenta... es de noche- respondió y el de azul se dio un palmazo en la frente al instante, imaginándose lo tonto que debió haberse visto

-Yo sólo... agh!- suspiró- Karai... emm...- llevó su mano detrás de su cuello- me gustaría preguntarte algo...- dirigió su mirada a ella nuevamente

-Te escucho- respondió haciéndo un ademán para que continuara

-Bueno, es que tú... yo... yo quiero que... me gustaría que... ay! No puede ser!- se quejó ya que le costaba decirlo con claridad

Soltó un gran suspiro y bajó la cabeza mirando hacia el suelo, estaba decidido a hablar pero primero quería tomarse un momento para poder hacer a un lado los nervios que aún tenía encima.

La pelinegra estaba algo desconcertada y confundida, por lo que sólo se limitó a mirarlo.

《"Deja que tus palabras salgan del corazón"》 recordó lo que la pelirroja le había dicho

En ese instante, respiró hondo y volvió a dirigir su mirada en dirección de la chica.

Se quedó atrapado por unos segundos, mirando aquellos ojos color ámbar que tanto le fascinaban.

Sus nervios se esfumaron y su corazón empezó a abrirse para permitirle expresar sus sentimientos por primera vez...

-Karai...- se acercó un poco más y con su mano libre tomó la de la kunoichi, acariciándola un par de veces con su "pulgar"- yo... no sé como expresarte lo importante que eres para mí... lo mucho que te aprecio..

-Yo también te aprecio, Leo- dijo a pesar de seguir bastante confundida por el comportamiento de su amigo

-No, escucha...- continuó- Tengo que serte sincero de una vez por todas...- respiró antes de comenzar- Cuando te conocí, me... gustaste en cierto modo y tengo que decir que me alegré en gran manera cuando me enteré que eras parte de la familia.. Pues en ese momento supe que existía la posibilidad de que estuvieras con nosotros...- hizo una pequeña pausa- Mira... sé que fue amor a primera vista- dijo algo avergonzado- pero con el tiempo, se convirtió en algo más... ya que también me enamoré de tu personalidad- la chica estaba realmente sorprendida ante tal declaración- Es cierto, esto no es normal... ¿un mutante enamorado de una humana?- preguntó haciendo que su tono se sonara lleno de confusión- no es nada común, y menos esto..- se señaló a sí mismo- ¡sólo mírame! Estoy usando un estúpido moño y haciendo el papel de tonto en mi intento por expresarte lo que siento- Karai no pudo ocultar más su gran sonrisa- No me importa lo que digan los demás, Karai... Me tienes muy enamorado. Creo que eres una persona estupenda y muy hermosa. Estoy realmente agradecido por tenerte en mi vida...- su mirada se iluminó al decirlo- por eso mismo prometo protegerte, apoyarte y estar siempre a tu lado- una cálida sonrisa se formó en sus labios

El de azul se arrodilló sin soltar la mano de la pelinegra ni quitándole la mirada de encima.

Las mejillas de Karai empezaron a arder con gran fuerza y su corazón comenzó a acelerarse tanto que parecía querer salirse de su lugar.

-Yo... n-no tengo anillo, pero...- mostró el ramo de margaritas alzándolo un poco frente a ella- Karai Hamato... tal vez sea algo pronto, pero creo que te conozco lo suficiente como para saber que quiero estar contigo el resto de mi vida, así que.. ¿Me consederías el honor de llamarme tu esposo? ¿De compartir mi vida contigo?- la miró por unos segundos más antes de seguir- ¿Te casarías conmigo?- preguntó finalmente mirándola con todo el amor que sentía

Los ojos de la kunoichi empezaron a empaparse se lágrimas y no había forma de que pudiera detenerlas.
Una gran sonrisa se dibujó en sus labios y sin pensarlo se arrodilló también y lo agarró del rostro para depositar un beso profundo en los labios del líder.

-Por supuesto que sí, Leonardo- dijo apartándose un poco para poder mirarlo a los ojos- Esto sonará algo cursi pero... tú eres la razón por la que decidí quedarme en New York..

Fue el turno de Leonardo para sonreír...

La sonrisa de ambos era realmente resplandeciente, ambos sabían que estaban sonriendo como nunca antes lo habían hecho...

-Y... que hayas podido expresar tus sentimientos es mucho más valioso para mí que un simple anillo...- añadió, juntando su frente con la de él

Leo no lo aguantó más y la envolvió en sus brazos, para besarla nuevamente, sin necesidad de levantarse del piso, el cual estaba adornado por los bellos pétalos de las margaritas al rededor de la pareja.

Fin...❀