Loveland, Ohio.

— Auch, Lizzie cuidado— Eddie se quejó mientras la chica cepillaba su cabello.

— Eddie tu cabello es un desastre, deja de usar ese gel espantoso— Comentó la chica volviendo a mojar su cabellera.

— Es mi estilo— Eddie comentó entre el dolor por el cepillo.

— Carajo... Creo que terminé— La chica habló volviendo a mojar el cabello del rubio teñido.

— Recuérdame por qué hacemos esto— Dijo Eddie mientras sentía el peine pasar por su cabello, tirando cualquier rastro de gel.

— Es para probar nuevos estilos en ti, loco punk— Lizzie sonrió dejando el peine de lado— Y usaremos está preciosura de aquí—

La chica dejo una caja de cartón en colores rosados sobre el regazo de Eddie, el chico punk observó la caja, quitándose el cabello que cubría sus ojos.

— ¿Tubos para el cabello?— Preguntó levantando una ceja.

— Rizadores calientes— Corrigió la chica conectando una pequeña máquina al enchufe.

— Esto va a tardar— Susurró Eddie.

Hawkins, Indiana.

— Bien, ahora sí nadie interrumpe— Dijo Will mirando a todos en la habitación— Seguiré contando todo—

Los demás se mantuvieron en silencio, dejando que Will pudiera hablar.

— Buen, entonces Tony nos empezó a guiar por el vecindario para mostrarnos el lugar...

1985.

— Entonces ¿Qué los trajo a este rincón horrendo del mundo?— Preguntó Tony una vez que los 3 estuvieron los suficientemente lejos de sus casas.

Will y El compartieron una mirada algo en pánico hasta que Will pudo contestar.

— Malas experiencias en nuestro antiguo hogar— Will dijo mirando al latino que guardaba los cigarrillos en el interior de su chaqueta.

— Hmmm ¿Y de dónde vienen exactamente?— Preguntó Tony exhalando el humo de su cigarro.

— Hawkins, en Indiana— Respondió Will.

— Lejos, pero a la vez cerca— Tony mencionó— Son estados vecinos, digo pudiendo alejarse más, Pensilvania, Nueva York, Massachusetts, Vermont incluso Maine, dicen que es interesante durante el verano, tal parece que dejaron algunas cosas ahí ¿No?—

— Amigos— La chica habló por primera vez en la conversación.

— Amigos por supuesto— Tony habló— Oh, hablando de amigos, debo presentarles a los míos—

Will se alivió de que Tony dejara de insistir en su lugar de origen para distraerse con algo y girar en una calle.

— Primero a la tienda de la señora Brown— El latino habló con el cigarro en la boca— Solo pido los encargos de mi madre y de ahí vamos al parque, ya deben estar los tontos ahí—

— ¿Tontos?— Preguntó El.

— Si, son unos tontos, cargo con el peso de ser el único ser funcional de ese grupo— Tony bromeó haciendo que Will riera un poco— Les apuesto que en su grupo también hay tontos—

— Oh sí, hay un gran tonto— Comentó Will mirando a un lado.

— ¡Si se les ocurre interrumpirme de nuevo juro que saldré de aquí!— Gritó Will al ver los rostros de sus amigos que claramente iban a preguntar— Y no, no responderé esa pregunta—

Will dijo mirando de reojo a Mike, quien claramente no se dió cuenta.

— Bien... Tony nos llevó a esa tienda y entonces...—

1985.

— Y aquí estamos— Tony se detuvo en la banqueta y tiró su cigarrillo a la calle, frente a ellos en la acera de enfrente había una tienda, era, a ojos de Will, un local estando a un paso de ser un mini super.

— Si alguna vez necesitan surtir un poco su alacena, la tienda de la señora Brown es la mejor opción— Mencionó el más alto de los 3 mientras empezaba a avanzar por la calle, siendo seguido por Will y El— Además quiero saber si el tonto mayor sigue en casa—

Will frunció el ceño un poco al no entender aquello pero aún así se detuvieron al estar fuera de la tienda.

— Si quieren esperen aquí— Tony mencionó entrando con rapidez, los otros 2 se quedaron fuera.

— Es raro— Dijo El en voz baja— Me agrada— Entonces sonrió un poco.

— Si, es raro pero... ¿Nosotros no?— Preguntó Will encogiéndose un poco en hombros, su comentario hizo reír a la chica.

Poco después Tony salió de la tienda, sosteniendo 3 paletas.

— Miren, las robe— Dijo Tony riendo ante la expresión de los otros 2— Es broma, la señora Brown me las regalo, seguramente están a punto de caducar así que comanlas o dejenlas pudrirse—

Will tomó la paleta azul y El la rosa, mientras Tony se quedaba con la amarilla.

— ¿Entonces ya iremos al parque?— Preguntó El llevándose la paleta a la boca.

— Solo esperen, quiero presentarles a mi amigo— Tony comentó lamiendo su paleta.

El chico con peinado de tazón se encogió en hombros, mirando su paleta, levantando una ceja al ver el envoltorio.

"Destiny", que curioso nombre para un dulce.

Will entonces dió media vuelta, dió medio vuelta en un mal momento, antes de que todo ocurriera, Will logró ver a un chico corriendo cargando varias cosas desde la acera de enfrente, segundos después el chico tropezó y las cosas que cargaba salieron volando por la banqueta.

Y para la mala suerte de Will, una de esas cosas era una bolsa de harina que terminó por romperse al estrellarse en su cara, ensuciandolo con todo el contenido.

— ¿Estás bien, Will?— Preguntó El con su voz monótona habitual.

— Mierda Eddie, que desastre hiciste tonto— Dijo Tony observando las cosas en el suelo y la harina cubriendo a Will.

El castaño tosió un poco del polvo blanco y lurgo se limpió la harina de los ojos, los abrió bien y vaya...

El chico frente a él era una de las personas más hermosas que había visto en su vida.

— Wow...—

— ¡Es él!— Gritó Dustin de pronto interrumpiendo la historia.

— Me estoy empezando a cansar de estás interrupciones— Susurró Lucas.

— ¿De qué hablas Dustin?— Preguntó Mike.

— El chico que le tiró la harina encima, ese es tu novio ¿No es así?— Preguntó Dustin.

Will no respondió, solo sonrió un poco mientras miraba a otro lado y un sonrojo brillaba en sus mejillas.

— Si es él— Dijo Max sonriendo— Ow tu primer encuentro con él fue cuando te tiro harina encima—

— Wow, que romántico— Lucas bromeó mientras veía a Will avergonzarse en su lugar.

— ¿Y como es él?— Preguntó Max mirando a Will.

— Bueno— Will sonrió un poco mientras se rascaba la nuca— Es rubio, teñido con peinado en puntas, ama la ropa negra—

— Es un punk— Dijo Lucas— Oh por Dios Will ¿Sales con un punk?—

— No es tan malo— Dijo Will siguiendo el juego.

— ¿Qué sigue? ¿Robar autos? ¿Nadar con vagabundos?— Max dijo haciendo reír a todos.

— De hecho Will si hizo lo primero— Dijo El de la nada.

— ¡Jane!— Will gritó mirando a la chica.

— ¿¡Qué!?— Gritó Lucas— Mierda me está empezando a gustar bastante el nuevo Will—

Las risas continuaron un momento, hasta que Mike abrió la boca pero fue interrumpido por otra voz, un tanto ajena al grupo.

— Con que ahí están—

Todos los jóvenes voltearon a las escaleras para ver a Steve y Robin bajar.

Will cerró su boca y abrazó sus piernas de inmediato, cosa que Dustin notó.

— Apesta a pubertad aquí abajo— Dijo Robin.

— ¿Qué hacen aquí?— Preguntó Mike frunciendo el ceño.

— Dustin dijo que ustedes irían a devolver las películas que se llevaron cuando empezó el verano hoy— Comentó Steve mirando al mencionado.

— Si, tal vez no sea hoy— Dustin sonrió.

— Además creímos que sería buena idea llevarlos al nuevo centro comercial— Mencionó el chico— Libre de rusos y criaturas aterradoras—

— Bueno... Will nos estaba contando algo sobre su vida en Ohio— Dustin dijo evitando la mención de lo que los 2 mayores sabían, pero les guiñó el ojo.

— Bueno, si quieren podemos dejarlos— Dijo Robin entendiendo.

— Oh pueden ir con nosotros y gozar de los privilegios de estar con adultos y conseguir entradas para April's Fools Day— Dijo Steve.

— ¿April's Fools Day?— Preguntó Will con emoción— Llevo semanas queriendo verla—

Mike levantó las cejas bastante al oír eso ¿Desde cuándo Will disfrutaba las películas de terror?

— Entonces ¿Vamos?— Preguntó Robin sonriendo.

— La historia puede continuar después— Dijo Will— En serio quiero ver esa película—

— Bueno, no estaría mal una salida, tal vez podamos volver a ver a Troy para Will termine de romperle la cara— Dijo Lucas poniéndose de pie.

— ¿Qué opinas de eso Steve?— Preguntó Dustin poniéndose de pie también— Will es más joven y ya ganó más peleas que tú—

Ese comentario hizo reír a los más jóvenes y a Robin mientras Steve solo ponía los ojos en blanco, dándole un pequeño golpe en la cabeza a Dustin.

— Solo vámonos antes de que cambie de opinión— Dijo Steve.

Pronto todos los jóvenes empezaron a subir las escaleras, anunciando a las adultas de la casa que saldrían al centro comercial y llegarían en la noche.

Una vez que todos iban en el camino fuera de la casa de Mike, Robin puso una mano en el hombro de Will.

— Will ¿Podemos hablar?—  Preguntó la chica.

— Claro— Will frunció un poco el ceño viendo cómo Steve también se quedó ahí.

— Se que pudiste sentirte algo incómodo allá atrás— Dijo Robin mirándolo— Pero quiero que sepas que si alguna vez tienes problemas sobre ya sabes que y no tienes idea de a dónde ir, nosotros estaremos ahí si necesitas—

Will miró a la chica para después observar a Steve, ambos le veían con una sonrisa.

— ¿Por qué?— Fue la única pregunta que pudo salir de la boca del menor.

— Porque somos como tú— Respondió la chica— Y sabemos que es bastante mierda ir a un lugar y no tener a alguien que entienda por lo que estás pasando—

— Pero ten por seguro que nosotros sabemos cómo te sientes— Dijo Steve hablando por primera vez.

— Ustedes...— Will quiso hablar pero no supo que podía responder.

— Lesbiana— Dijo Robin, Will asintió un poco para luego ver a Steve.

— Cualquiera de los 2, no me importa mucho— Steve respondió encogiéndose en hombros.

Will tomó unos segundos para pensar y poco a poco una sonrisa apareció en sus labios.

— Gracias— Dijo en voz algo baja— Pero ¿Cómo lo supieron?... ¿Acaso Dustin les dijo?—

— No, Henderson no nos dijo nada— Steve comentó viendo el pánico en la cara de Will— Cuando te dejamos el día que llegaste, las radios se mezclaron y accidentalmente oímos tu conversación con... Tu novio—

— Oh...— Will dijo, ciertamente más aliviado, pero a la vez asustado de que su secreto saliera así a la luz.

— Pero no te preocupes, como dije, si necesitas algo, puedes hablar con nosotros— Dijo Robin.

Los 2 mayores empezaron a caminar para unirse al resto del grupo, Will llevo las manos a su pecho y soltó un suspiro, no solo sentía un alivio al sentir un peso menos, si no que también sintió una calidez en su interior.

Ahora sabía que había gente en Hawkins que era igual a él.

Y se sentía muy bien.

Continuará...