¿Te parece bien que estudiemos después de clase en la biblioteca?

LOUIS:
¿Qué biblioteca?

La del instituto, supongo

LOUIS:
¿Podemos ir a la biblioteca antigua?

¿La biblioteca antigua?

LOUIS:
Espérame después de clase, aula 18.

Así es como el rizado termina fuera del aula 18 un miércoles lluvioso. Todos los alumnos pasan por los pasillos con los paraguas preparados entre sus manos y algunos incluso llevaban las capuchas de sus sudaderas puestas, lo cual hace que Harry sonría al recordar a "A" de pequeñas mentirosas.

Él sin embargo no viste más que su suéter viejo y azulado junto a sus skinny jeans negros. Así que se mentaliza de que va a mojarse en cuanto salga.

Sin embargo Louis no tarda demasiado en salir, dedicándole un movimiento de cabeza como saludo.

—Hola -Lo saluda, jugando con las mangas de su suéter-

—Harry. -Responde, sin detener su paso-

—¿A donde vamos? -Harry pregunta siguiéndolo por los pasillos ya casi vacíos del instituto-

—A la biblioteca antigua, creía que ya lo habíamos hablado.

—Sí, bueno. -Aprieta los labios- Tan solo no entiendo porque tenemos que ir allí mientras está lloviendo cuando tenemos una biblioteca aquí.

Louis no dice nada.

Salen por la puerta trasera, donde el parking para estudiantes se encuentra, dónde prácticamente no hay nadie. Cuando salen del instituto, la lluvia cae suavemente y Harry se siente agradecido por ello. Es entonces que Louis le indica cual es su coche.

Un Jeep negro.

Al entrar en este, el rizado se encoge en el asiento del copiloto, las gotas de lluvia que le habían mojado han causado que su piel se erizara y el frío que siente de repente le hace temblar levemente.

Pero Louis parece darse cuenta de eso porque antes de empezar a conducir enciende el aire acondicionado y lo apunta hacia Harry.

—Gracias -Susurra notando como el calor sube hasta sus mejillas.-

Y realmente quiere golpearse la cabeza contra la ventanilla del coche porque se está sonrojando por algo tan simple como que haya puesto el aire acondicionado para él, para que no tuviera frío

¿Este es el Louis Tomlinson del que todos hablan? ¿Ese del que los rumores dicen que es frío y cortante?

Lo mira disimuladamente mientras conduce, y siente la leve necesidad de descubrir quien es Louis realmente.

—No sabía que había otra biblioteca. -Dice en voz baja, interrumpiendo el sonido de las gotas de lluvia chocando contra la ventanilla.-

—Prácticamente está vacía siempre, está casi a las afueras de la ciudad.

—¿Es por eso que vamos allí? -Pregunta- ¿No quieres que nos vean juntos?

Louis le dedica una rápida mirada antes de volver a centrarse en la carretera.

—No es eso.

Harry esta seguro de que es exactamente eso, pero no dice nada. De todas formas no puede culparlo, si ahora aparecemos juntos en la biblioteca del instituto los rumores solo irán a peor.

Se mantienen en silencio el resto del trayecto, tan solo el sonido de la lluvia y la leve música que sonaba en la radio. Y cuando finalmente llegan y el Jeep se detiene enfrente de un enorme edificio de ladrillos rojos, Louis lo mira con una mueca.

—Espera. -Dice antes de salir del coche-

Segundos después, Louis le abre la puerta mientras sujeta un paraguas negro. Y para ser sinceros, Harry tarda más tiempo del que le gustaría admitir en salir del Jeep.

Porque lo estaba procesando, el hecho de que realmente acababa de abrirle la puerta y estaba sujetando un paraguas para que no se moje.

—Gracias. -Dice, escondiendo sus manos en las mangas largas de su suéter y frunciendo levemente el ceño.-

¿Esto realmente estaba pasando?

—No hay de qué.

Comienzan a caminar hasta la biblioteca, mientras Louis mantiene el paraguas sobre sobre Harry.

Únicamente sobre Harry.

Aprieta los labios y con una pequeña sonrisa nerviosa dice;

—Hey, te vas a mojar.

Louis lo mira, encogiéndose de hombros.

—Estoy bien, prefiero que no tengas frío.

Esta tan malditamente confundido que no sabe qué decir. Las palabras le causan una sensación que realmente no sabe cómo describir. Pero si algo sabe, es que el sentimiento en su pecho es agradable.

—Gracias -Vuelve a decir en voz baja-

Y cuando levanta la cabeza para mirar al castaño, su corazón se detiene cuando ve una media sonrisa en sus labios.

—No hay de qué, Harry.

***

Una hora después, se encuentran sentados en una mesa al fondo de la biblioteca.

Para ser sincero, nada más entrar, Harry ha podido entender porque Louis prefiere venir aquí. El alto techo de madera y las enormes estanterías repletas de libros casi le dejan sin aliento, sintiéndose un tanto pequeño en un lugar tan inmenso.

El castaño suelta un bufido que llama la atención del rizado, mientras Louis pasa una de sus manos anilladas por su cabello.

—Hey, no te agobies. -Harry le dice suavemente-

Louis lo mira con una pequeña mueca.

—Para ti es fácil, se te da genial.

El rizado le sonríe.

—Bueno, por lo que me ha dicho el profesor Harper, a ti se te daba igual de bien antes.

Louis aparta la mirada entonces, comenzando a jugar con los anillos en sus dedos mientras se encoge de hombros.

—Supongo que después del verano estoy algo desconectado. -Murmura-

Por su lado, Harry aprieta los labios mientras asiente suavemente.

—Bueno, con un poco de ayuda terminará saliendo, no te agobies.

Louis lo mira, y el rizado puede notar como la expresión en su rostro se suaviza.

—Eres adorable. -Le dice dulcemente, y Harry siente que podría morir ahí mismo-

Nota el calor subiendo por sus mejillas y quiere salir corriendo porque ahora Louis lo estaba viendo sonrojarse. El castaño solo estaba siendo amable con él y Harry se estaba sonrojando como un idiota.

Pero para su suerte, el teléfono de Louis comienza a sonar, captando la atención del castaño.

—¿Te importa si salgo fuera un momento? Tengo que coger la llamada. -Louis dice, a lo que Harry asiente rápidamente.-

—Para nada, no te preocupes. -Le dice de forma nerviosa, intentado que los colores rojizos en sus mejillas no sean tan notables.-

Louis ni siquiera lo mira cuando se levanta de la silla y comienza a caminar entre las estanterías repletas de libros. Cuando Harry lo ve salir por la puerta, saca su teléfono del bolsillo de su pantalón, entrando rápidamente al grupo que tiene con sus amigos.

Louis me ha aguantado el paraguas mientras caminábamos para que no me mojara.

Y me ha dicho que soy adorable

¿En una escala del 1 al 10 que tan gay es eso?

LIAM:
Gay no sé, pero en amabilidad se lleva un 10.

NIALL:
7

TAYLOR:
8

:)

Admitiré que no esta siendo tan horrible como pensaba.

Va a leer la respuesta de sus amigos cuando Louis vuelve con una expresión seria en su rostro.

—Harry lo siento pero tengo que irme. -Es lo que dice, tomando su material para guardarlo dentro de su mochila.-

—¿Qué? ¿Por qué?

Louis lo mira, aparentado los labios en una mueca.

—Una pequeña emergencia, te acompañare hasta tu casa

Frunce el ceño y siente la necesidad de insistir y recibir más información al respecto, sin embargo lo retengo y asiento.

—Esta bien.

Cuando salen, la lluvia se ha calmado, pero aún así, Louis abre el paraguas y lo pone de nuevo sobre Harry.

—No llueve casi, Louis.

El castaño lo mira y se encoge de hombros.

—No importa, no queremos que te mojes ni tengas frío si podemos evitarlo ¿Verdad?

Esa sensación agradable se expande de nuevo por el pecho del rizado, haciéndole sentir confundido y reconfortante a la vez. No estaba acostumbrado a ser tratado de aquella manera, así que tampoco sabe como reaccionar.

—Gracias. -Harry susurra, porque no sabe que otra cosa decir-

Louis asiente, y Harry se pregunta cuando llegan al coche si Louis realmente era así de amable y encantador con todo el mundo, si siempre era así y todo el mundo tiene la imagen equivocada del castaño.

Mientras el castaño conduce para dejarlo en su casa, Harry no puede evitar preguntarse si podrá sobrevivir con esta nueva versión de Louis que acababa de conocer.