❝He poisoned
   the well❞

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Los piratas soltaron a la ojiverde para tomar sus espadas, pero antes de que pudieran ir por sus enemigos, Carlos usó su resortera para arrojarles la primera bomba de humo. Luego cargó otra y la tiró hacia los piratas que estaban vigilando desde las alturas, mientras Evie atrapaba la espada.

— ¡Ben! ¡No hagas que me arrepienta de hacer esto! —Gritó la princesa de Auroria, tomando otra espada y arrojándosela, quien afortunadamente logró agarrarla. Ella respiró aliviada. — ¡Sepárense!

— ¡A la orden! —Accedió el rey, esquivando a la chica de cabello azul para correr hacia el puente.

— ¡Ben! —Lo llamaron las princesas, frustradas.

— ¡Yo voy por él, tú ve con Mal! —Dijo Evie, su novia asintió, tomando una bomba de humo de la mochila para guardarla en su bolsillo y sacando la última espada para ir tras su mejor amigo; quien esquivaba a los piratas que se columpiaban en las sogas para literalmente intentar arrancarle la cabeza cuando pasaban cerca de él. La VK se agachó para que ninguno le arruinara el peinado y lo tomó por la oreja, ya que no quería dañar el cuero de la chaqueta que le había hecho—. ¿¡Qué parte de “nos tenemos que ir” no entendiste!? —Le recriminó, empujándolo.

  Audrey pasó a un lado de ellos, esquivándolos y empujando a cualquier enemigo que se interpusiera en su camino, hasta que llegó al barco; en donde la capitana estaba acorralando a Mal.

—Oigan, lamento interrumpir, entiendo que ella te traicionó primero pero una pelea de espadas en donde tú tienes la ventaja porque estás armada… no me parece muy justo. —Habló la castaño/rubia, caminando lentamente hacia ellas.

—Esta no es tu lucha, princesa. —Le recordó la pirata, sin quitarle los ojos de encima a su amante—. Y nada en este lugar es justo, ¡ni siquiera ella! —Dijo, apuntándole con la espada a la ojiverde.

—Ya estoy aquí, así que yo creo que sí lo es… —Replicó la descendiente de Aurora, deteniéndose detrás de la morena y colocando su espada cerca del cuello de la contraria, quien se tensó—. Bueno, es hora de que las cosas empiecen a serlo… así que bájala.

Uma no se movió.

—Audrey, no le hagas daño… —Susurró la chica de cabello morado, nerviosa.

—No es capaz, viene del reino de los débiles. —Mencionó la hija de Úrsula, pero la princesa de Auroria solo acercó la espada a la piel ajena, presionando el arma contra ella.

—No me conoces, no sabes de lo que soy capaz, no creo que quieras arriesgarte a descubrirlo pero si lo haces... Ella será lo último que verás. —Murmuró Audrey en su oído, la VK meditó sus opciones y finalmente la obedeció, entonces la chica de Auradon miró a la enemiga de su madre; quien no se creía lo que acababa de ver—. ¿Qué? ¿No esperabas que te viniera a salvar? Me lo agradecerás después.

—Gracias… —Dijo la ojiverde, tomando la espada extra que la princesa de Auroria había traído para ella, entonces salió corriendo hacia el puente; mientras la AK aún sostenía a Uma.

— ¡No! —Se quejó la capitana, sintiendo que la estaba perdiendo otra vez, hasta que unos instantes más tarde Audrey la soltó; arrojándola contra el borde del barco. —Ahora sí te conseguiste una pelea. —Le advirtió, poniéndose en posición.

—Genial, tendré tiempo de presentarme apropiadamente. —Mencionó la chica de Auradon, sonriendo victoriosa y comenzando a pelear contra ella, no tenía intenciones de lastimarla; solo quería que Mal ganara un poco de tiempo—. Audrey Rose, princesa de Auroria, soy la novia de Evie.

  Mientras tanto, la hija de Regina corrió por el muelle, donde un pirata se subió a las escaleras para cortarle la cabeza; pero la VK fue lo suficientemente rápida como para agacharse y colocarse delante de él para comenzar a atacarlo.

La hija de Mulán corrió hacia uno que intentaba ayudar a otro a levantarse, por lo tanto ella no perdió la oportunidad para darle un par de espadazos.

  Finalmente, Mal estaba luchando con un pirata, al cual arrojó al agua; mientras que Ben peleaba con otro y corría hasta quedar detrás de él y empujarlo lejos, entonces rio con satisfacción.

Más miembros de la tripulación fueron por la descendiente de Maléfica, pero ella los esquivó a todos velozmente, poniéndose en posición de pelea y viendo como Audrey seguía luchando con Uma.

— ¿Quieres ir con tu novia? Permíteme ayudarte. —Habló la princesa de Auroria con diversión antes de empujarla hacia el puente, le guiñó un ojo—. ¡Ahora tú también me debes un agradecimiento, pero acepto que no la mates! —Aclaró antes de pasar corriendo a un lado de ambas, lista para buscar otro contrincante, mientras las VKs se ponían en posición y Mal le hacía un gesto con la mano para alentarla a ir por ella.

  Carlos bloqueó el ataque de una pirata, contraatacando rápidamente tal y como había aprendido en los entrenamientos de R.O.A.R, pero su enemiga era bastante hábil con la espada.

Harry saltó una baranda y se encontró con el descendiente de Jafar, quien le sonrió.

—Hola, Jay… —Lo saludó el pirata, quitándose el sombrero y arrojándolo al suelo mientras se acercaba a él—. Bueno, bueno, bueno.

  Uma atacó primero, con furia, mientras que la contraria solo bloqueaba sus ataques. La espada de la morena se dirigió hacia el estómago de su amante, quien dio un salto hacia atrás para evitar salir herida.

El primer oficial y el antiguo ladrón dieron varias vueltas antes de que el primero sacara su espada velozmente, pero su enemigo retrocedió, entonces el pirata se giró para atacarlo, sin embargo Jay bloqueó el ataque.

  Gil gritó de emoción mientras se balanceaba en una soga hasta aterrizar detrás del rey, quien se dio la vuelta.

—Hey, Ben. —Habló el rubio, soltando la soga y sacando su espada para comenzar a luchar contra él.

Uma siguió intentando atacar a la ojiverde, quien retrocedió y aprovechó cuando la capitana quiso volver a hacerlo para tomar su muñeca y hacerla girar, cambiando sus posiciones.

—No hay beso esta vez por intentar cortarme en dos. —Replicó Mal, bloqueando los ataques de la contraria.

  La princesa malvada siguió luchando contra uno de los piratas, quien se impulsó con fuerza hacia ella, pero la diseñadora bloqueó el ataque con algo de esfuerzo y antes de que pudiera contraatacar; le pisó el pie con fuerza, haciéndolo gritar. Evie soltó una dulce risa mientras lo empujaba hacia atrás, lo vio caer y se giró.

Lonnie peleaba con tanta fuerza que logró que uno de los piratas soltara al otro, haciéndolo caer al agua. Bloqueó el ataque del primero con tanta destreza que lo tiró al suelo, haciéndolo soltar su espada. Cuando él se levantó, la AK le ofreció la suya.

—Aquí, ten la mía. —Dijo la joven guerrera de forma cortés, su enemigo la tomó e intentó golpearla, pero ella se giró hacia un lado; luego hacia el otro cuando volvió a tratar de ir por ella. Se sostuvo de las barandas y se arrodilló al prevenir que él quiso ir por su cabeza. Luego el pirata intentó atacar sus pies y la AK saltó, sosteniéndose de la baranda para darle una patada que lo derribó, entonces tomó su espada.

— ¡Maravilloso! —La halagó Dude, impresionado, antes de irse.

  Las ex novias seguían luchando, Uma se arrodilló para tratar de atacar uno de sus pies pero Mal levantó la pierna, yendo hacia atrás y aprovechando que la contraria dio una vuelta para tomarla del brazo; arrodillándose hasta quedar a su altura.

— ¡Hey! ¿Me extrañaste? —Se burló la ojiverde, feliz—. Comienzo a creer que no quieres matarme, solo quieres darme una excusa para que te toque. —Dijo, levantándose con ella y cambiando de lugar, la empujó.

Harry se apresuró a alzar su espada, pero Jay bloqueó el ataque con su brazo, dándose vuelta para hacerlo girar. El pirata quiso usar su garfio para dañarlo pero el hijo de Jafar volvió a evitarlo al colocar su brazo, entonces el primero recurrió a su espada, pero el otro VK lo detuvo con su propia arma. Fue Jay quien ahora intentó atacarlo pero el contrario lo bloqueó, dándole la ventaja al chico de cabello largo para girar y dejar a Hook de espaldas a él.

  El chico del abrigo rojo volvió a atacarlo, pero el capitán del R.O.A.R sostuvo su gorro mientras se agachaba, el primero colocó su brazo con el garfio delante de él y Jay aprovechó la oportunidad para darle una patada en la rodilla que lo hizo perder el equilibrio y caer al suelo mientras el chico de cabello largo se movía lejos de él.

Mientras tanto, Audrey luchaba con otra pirata, solo que ella era quien atacaba con precisión y elegancia; mientras que la contraria apenas podía bloquear sus ataques. Pronto logró desarmarla, haciéndola huir, mientras la princesa de Auroria tiró lejos la otra espada y siguió su camino; buscando a su novia.

  La diseñadora ya estaba en posición contra otro pirata.

—Bailemos. —Propuso la chica de cabello azul, dejando que su enemigo sea el primero en atacar para poder bloquear el ataque y estirar su espada hacia él, quien retrocedió. Sus espadas volvieron a chocar, atacando y bloqueándose mutuamente, la VK ahora era quien atacaba. El contrario quiso ir por sus pies, pero la joven retrocedió antes de que la espada tocara sus preciosas botas, entonces clavó su arma para bloquear otro ataque.

El hijo de Gastón ya tenía la ventaja sobre el chico Bestia, pues el pirata había hecho que su enemigo se tropezara contra un escalón.

  Carlos saltó  la baranda para llegar hacia ellos.

— ¡Hey, Gil! —Llamó el pecoso, haciendo que el rubio se diera la vuelta para comenzar a luchar con él mientras el rey se sentaba en el escalón—. ¡Sal de aquí, Ben! —Ordenó, el muchacho le obedeció, dando una vuelta carnero por el suelo, entonces De Vil soltó a su contrincante, haciéndolo caer en el escalón.

Evie volvió a bloquear otro ataque, logrando que su enemigo cayera de rodillas ante ella, entonces se aproximó a él.

—Linda bufanda. —Dijo la villana, tomando el accesorio y haciendo girar al pirata, la levantó victoriosa—. Es mía ahora. —Presumió, caminando hacia él para pisarle la espalda.

—Quédate ahí. —Habló Audrey, quitándole el sombrero y saltando la baranda para quedar junto a ella—. Linda bufanda, amor.

—Es tuya ahora. —Mencionó la princesa malvada, colocándosela alrededor del cuello y sonriéndole.

— ¡Chicas, cuidado! —Les advirtió el descendiente de Bella, viendo que tenían compañía de ambos lados, las dos se giraron para seguir luchando mientras él se subió para pelear con el tercer pirata que estaba del lado de la castaño/rubia.

  Harry lanzó una patada a Jay, quien la esquivó y saltó antes de que el pirata tratara de hacerlo caer con su espada, el chico de abrigo rojo volvió a atacarlo mientras él bloqueaba sus ataques; hasta que el pirata logró acorralarlo contra una de las barandas y usó su garfio para hacerlo bajar su espada, manteniéndolo a su disposición por unos instantes hasta que el ladrón usó toda su fuerza para mover su brazo hacia abajo. Harry trató de golpearlo con su espada, pero él se agachó y volvió a levantarse. El pirata repitió el movimiento, pero su enemigo se agachó y la espada del primero quedó atrapada en la baranda.

El descendiente de Jafar lo golpeó y le dio otra patada en la rodilla, sostuvo su garfio con ambas manos y saltó antes de patear su pecho, haciéndolo caer y apoderándose de su garfio; el cual quedó enganchado en su arma.

  Hook se incorporó, mientras Jay se reía, pues ahora tenía la ventaja. El pirata comenzó a aproximarse a él, pero el otro VK fue más rápido y caminó hacia la otra baranda, estirando la espada hacia el agua.

El primer oficial retrocedió y arrojó al suelo su arma, estirando su brazo y moviendo sus dedos, pero el ladrón dejó caer el garfio al agua y giró su espada para irse de allí mientras Harry tomaba su arma y se arrojaba al agua para buscar su propiedad.

  Uma todavía estaba atacando a Mal, quien ya se estaba cansando, así que retrocedió cuando la primera giró y luego intentó ir por sus pies pero la ojiverde bloqueó el ataque con su espada y pisó la de la contraria; quien gruñó, frustrada.

La descendiente de Maléfica giró la cabeza, viendo que Audrey, Ben y Evie estaban rodeados; defendiéndose como podían. Sabía que tenía que lograr que se fueran, así que golpeó la mano de la bruja con su espada, haciéndola soltarla y aprovechando la distracción para correr hacia los demás; sin embargo la morena no tardó en recuperar su arma e ir tras ella.

— ¡Uma! —Llamó Harry desde el borde del muelle, logrando que su mejor amiga se girara para ir a ayudarlo.

  Carlos corrió hacia donde estaban Lonnie, Evie y Audrey, quienes ya se habían librado de los piratas. El pecoso se giró, llevaba la mochila de Mal abierta en su hombro, vio como el hijo de Jafar se les acercaba.

— ¡Jay! ¡Enciende el auto! —Dijo el menor de los VKs, mientras la hija de Mulán seguía luchando tras ellos.

—Okay, los veremos allá. —Les prometió la princesa malvada, entonces el ladrón corrió hacia la joven guerrera, tomándola de la mano y llevándosela hacia el puente; pero fueron ella y De Vil quienes se apresuraron a seguir luchando con los piratas que trataban de evitar que se fueran mientras que la pareja de princesas había ido a buscar a Ben.

Una vez que la descendiente de Mulán arrojó al suelo a su enemiga, se giró hacia el chico de cabello largo, quien le hizo un gesto con la cabeza. Ella lo siguió, y mientras él se iba por el túnel, la muchacha se dio la vuelta para ver a sus amigos.

  Mal acababa de subir las escaleras hacia la parte del muelle en donde las chicas estaban distrayendo a los piratas.

— ¡Ben! ¡En serio, debes irte! —Gritó la ojiverde, el rey la tomó por la cintura.

— ¡No me voy a ir sin ti! —Replicó el castaño—. Si lo hago, nunca me lo voy a perdonar.

La chica de cabello turquesa terminó de ayudar a su primer oficial a subir al muelle y observó la escena, muerta de celos.

— ¡Te van a matar, estúpido! —Se quejó la descendiente de Maléfica, frustrada, separándose de él. —Si no te vas, yo jamás te lo voy a perdonar. —Sentenció.

  La morena colocó una mano en el estómago de Harry antes de que diera un paso.

— ¡Mal es mía! —Gritó Uma, entonces corrió hacia ella, mientras el chico de abrigo rojo sacaba su espada y la seguía. 

—Mal, el reino te necesita. —Insistió Ben, tratando de volver a acercarse a ella.

—No, tú me necesitas, que es distinto. El reino te necesita, no puedes dejarlo por mí. —Replicó la ojiverde, quien había oído a la pirata. —Ella me necesita. Y no la voy a dejar otra vez.

Justo en ese momento, la hija de Úrsula subió las escaleras, gritando y haciendo que los dos tomaran más distancia. Ben retrocedió, sosteniéndose de una escalera y deteniéndose justo cuando la espada de Harry estuvo a punto de cortarle el cuello.

— ¡Hey! —Lo saludó el pirata, comenzando a luchar contra él quien no tuvo más opción que comenzar a subir la escalera.

  Evie también estaba subida contra una escalera , junto a su novia, mientras la última intentaba desarmar a Gil y Carlos atacaba a otro pirata.

El chico de abrigo rojo usó su garfio para mover la espada de su contrincante, forzándolo a saltar de la escalera, entonces saltó la baranda para tratar de clavarle la espada; enganchando su brazo en la escalera. El castaño se aproximó a él y le hizo un gesto con la mano.

—Cochi, cochi, coo. —Se burló, acariciando su mentón, el pirata quiso golpearlo con el garfio pero el rey rápidamente se movió.

  Carlos bloqueó el ataque de su enemigo y le pateó el pecho, derribándolo.

—Let's go, bring it on, bring it on, it's going down.

Audrey atacaba al hijo de Gastón velozmente, sin piedad.

—Time is running out, bring it on, it's going down.

  Evie seguía luchando desde su posición, sin perder la elegancia, justo cuando notó que Ben acababa de tomar el brazo de Harry.

— ¡Amor! ¡No vamos a tener otra oportunidad! —Dijo Audrey, quien también había notado eso, su pareja rápidamente asintió y se giró hacia su mejor amigo.

— ¡Carlos! —Lo llamo Evie y estiró su brazo—. ¡Bomba de humo! —Pidió, él se la arrojó y ella la atrapó.

—Let's go, pound for pound, we're prepared to stand our ground.

Mal y Uma giraron, pero la pirata tomó su muñeca, haciéndola agacharse junto a ella.

  ¿Qué se supone que iba a hacer, no tomarla de la muñeca? Esa no era una opción. La presionó con fuerza, con un objetivo en claro: que soltara su espalda, se rindiera y se quedara en la Isla.

Harry vio a Ben, impulsándose para hacerlo girar hacia el lado contrario, mientras el castaño retrocedía.

— ¡Mal! —Gritaron el rey y la princesa de Auroria al mismo tiempo, pero antes de que el chico Bestia hiciera la milésima estupidez del día, sucedió algo.

  La hija de Maléfica sabía cuáles eran los deseos de Uma: que cediera, que la eligiera, que se rindiera ante ella; pero en lugar de eso, la ojiverde aprovechó la oportunidad para volver a besarla.

Pero no fue un beso común y corriente, fue uno cargado de pasión y deseo, lleno de anhelo y desesperación; en el que Mal tuvo el control, haciendo que la pirata se inclinara hacia atrás, posicionando ambas rodillas en el suelo y cerrando los ojos para disfrutarlo más, tanto que volvió a bajar la guardia y soltó su espada.

—Put your swords up, put 'em up, it's going down.

  Esa era la señal que las chicas estaban esperando, Audrey sacó la bomba de humo de su bolsillo.

Velozmente, cruelmente, la hija de Maléfica se apartó; retrocediendo unos pasos.

  Las princesas arrojaron las bombas de humo en dirección a Gil, Uma y Harry, antes de saltar de las escaleras y comenzar a correr.

  Carlos cruzó el puente.

— ¡Ben, vete! —Exigió Mal, notando que se había quedado inmóvil, presenciando el humo.

— ¡No! —Gritó Uma, destrozando el corazón de su amor al oírla, fue el rubio quien tuvo que ayudarla a levantarse.

— ¡Lo siento, pero no hay tiempo para los corazones rotos! —Se disculpó Audrey, viendo a la ojiverde, quien realmente no podía moverse.

— ¡Ben, vámonos ahora! —Ordenó la diseñadora, tomándolo de la mano y obligándolo a correr con ella hacia el puente—. ¡Vamos! —Le gritó, atravesando el túnel con él.

—Yo, whoa, whoa, whoa, yo, oh, whoa, woa, oh, yo, whoa, whoa, whoa, yo, oh, whoa, woa, oh.

— ¡Tal vez ella no te mate, pero los demás sí! —Trató de hacerla entrar en razón la castaño/rubia, pero la VK no reaccionaba, parecía estar perdida en sus propios pensamientos y el humo estaba comenzando a dispersarse—. Por Dios, desde que te conocí he querido que vuelvas aquí y ahora que regresaste, soy incapaz de dejarte.

La hija de Aurora bufó, pero tomó a su archienemiga de la mano y la hizo cruzar el puente delante de ella para ir tras la VK, entonces se detuvo al ver que el trío de piratas estaba llegando al final del muelle.

—Yo, whoa, whoa, whoa, yo, oh, whoa, whoa, oh, yo, whoa, whoa, whoa, yo, oh, whoa, whoa, oh.

—Por favor, no me odies más de lo que ya lo haces. —Murmuró la princesa de Auroria, entonces pateó el puente que conectaba el muelle con el túnel.

  Las VKs observaron como la estructura caía, con lágrimas en los ojos, porque aquello significaba que ese era el final de todo lo que habían intentado tener juntas.  

—What's my name? —Sollozó la capitana, mirándolas con dolor, luego se giró hacia Hook para golpear su pecho con furia—. What's my name? What's my name?

No recibió respuesta y se dio la vuelta para ver a las chicas que permanecían en el puente.

—Say it now! —Demandó la descendiente de Úrsula con la voz quebrada, señalándolas con su espada hasta que sus piernas la traicionaron y volvió a caer de rodillas al suelo.

⊱🜲⊰

  Carlos salió del túnel, en donde la joven guerrera los esperaba.

— ¿Estás bien? —Preguntó el pecoso, mientras corría.

—Sí, estoy bien. —Confirmó la chica de Auradon.

—Buen trabajo, Lonnie. —La felicitó el chico, dejando la espada y corriendo hacia la limusina—. ¡Vamos, Dude, sube! —Le dijo a su mascota, sosteniendo la puerta trasera.

Vio como el cachorro entraba al vehículo.

— ¡Ahora me estás escuchando! —Le recriminó el menor, frustrado, luego miró hacia el túnel.

  La princesa malvada llegó corriendo, saltando para bajar del mismo y tomando la mano de Lonnie, después observó hacia el interior del túnel y respiró aliviada al ver que Ben iba tras ella.

— ¡Vamos! —Exclamó la VK, trotando hacia el vehículo.

— ¡Vamos, Evie, entra! —Le dijo Carlos, ella dejó la espada dentro del maletero.

— ¡Sube! —Dijo Lonnie, el VK espero a que su mejor amiga subiera al auto y tomó la mochila de Mal para ingresar tras ella, mientras la hija de Mulán rodeaba el transporte y tiraba su arma dentro del baúl.

Ben salió corriendo del túnel y se detuvo al ver que las chicas no se habían movido del otro extremo.

— ¡Mal! ¡Audrey! —Las llamó, preocupado.

⊱🜲⊰

  Ambas oyeron el eco a través del túnel y la castaño/rubia se dio la vuelta, arrastrando a la contraria.

— ¡Uma! —Gritó Mal, destrozada.

— ¡No! —Reaccionó la pirata, levantándose y dándose la vuelta para abrirse paso entre el resto de su tripulación, corriendo hacia la otra salida del muelle—. ¡Muévanse! ¡Fuera de mi camino! ¡Apártense o los tiro a los tiburones! ¡No puedo perderla de nuevo!

⊱🜲⊰

Audrey sacó a Mal del túnel, donde Ben le ofreció una mano a la ojiverde.

— ¡Mueve el trasero o te clavo la espada en donde no te va a llegar el sol! —Le gritó la descendiente de Aurora, el castaño alzó sus manos en señal de autodefensa y los tres corrieron hacia la limusina, pero la princesa jamás soltó la mano de la villana—. ¡Vamos, vamos, vamos!

— ¡Espadas! —Les recordó la hija de Mulán, los tres tiraron sus armas dentro del maletero que la joven guerrera cerró mientras la princesa de Auroria dejaba que la ojiverde entrara al vehículo, luego imitó su acción mientras que Lonnie y Ben eran los últimos en subir a la limusina, cerrando las puertas.

  Los cinco que se encontraban en los asientos traseros observaron hacia atrás, mientras intentaban normalizar sus respiraciones, Jay comenzó a conducir; dejando el libro de hechizos de Mal en el suelo.

Al verificar que nadie los seguía, los cuatro adolescentes giraron sus cabezas e intercambiaron miradas. 

—Realmente lamento que las cosas no salieran como tú querías. —Se disculpó el rey, haciendo que la chica de cabello morado se volteara lentamente para observarlo, incrédula.

— ¿Realmente lo lamentas? ¿En serio? Hace cinco minutos estabas, literalmente, tratando de convencerme para volver contigo. —Replicó Mal, acomodándose en el asiento de mala gana, llevó una mano a su frente por unos instantes; luego se cruzó de brazos.

—Sí, en serio. Hace cinco minutos estaba intentando salvarte la vida, podrías agradecerme, al menos. —Dijo el castaño.

—No te pedí que lo hicieras. —Masculló la VK, frustrada, se secó las lágrimas que aún descendían por sus mejillas—. Les pedí que se fueran, ¡pero al menos ya estarán felices, ustedes van a poder volver a sus vidas de cuentos de hadas mientras yo volveré a ser miserablemente infeliz!

—Sé que ahora nos tienes tanto rencor que probablemente estás pensando en tirarte del auto en movimiento, lo cual no recomiendo que hagas, pero… nosotros hicimos todo esto para ayudarte. Lo estamos intentando, ¿está bien? Y tal vez la forma no fue la correcta pero fue la única que encontramos, no podemos hacer mucho si nos alejas, Mal. —Habló la princesa de Auroria, su enemiga solo desvió la mirada hacia la ventana.

—Lo único que necesitaba es que ustedes regresaran a salvo. —Susurró la descendiente de Maléfica, quien estaba agotada.

—Al menos pude conocer la Isla. —Siguió hablando el chico Bestia, intentando aliviar la tensión del ambiente, luego vio a los demás—. Ellos también son mi gente… Uma me ayudó a ver eso.

  Evie le dio una patada para que cerrara la boca.

—Ben, Uma te capturó. —Le recordó la ojiverde, volviendo a verlo.

—Ella es una chica enojada con un mal plan. —La defendió el castaño, la ojiverde ladeó la cabeza y apretó los puños—. No es tan diferente a ti cuando viniste a Auradon, Mal. —Añadió.

—Está enojada porque la perdí por tu culpa, de nuevo. —Gruñó la VK, recordando la propuesta de la pirata, el plan que había compartido con ella no era para nada malo. Quería liberar a la Isla, por su propia cuenta, con la chica que amaba.

Dicho esto, ambos miraron a través de sus respectivas ventanas.

—Incómodo… —Habló el cachorro que estaba en los brazos de su dueño, causando que las princesas lo miraran boquiabiertas, pero ninguna se atrevió a comentar algo más.

—Dude, sé que tú puedes hablar, pero eso no significa que siempre deberías hacerlo. —Dijo Carlos, mientras que la hija de Maléfica negaba suavemente con la cabeza.

—Aquí vamos. —Informó el ex ladrón cuando la limusina estaba cerca de cruzar el puente roto, presionó el botón del control remoto para abrir la barrera y el vehículo la atravesó, él dejó el objeto mientras la magia formaba el camino dorado por el que el auto siguió transitando por encima del agua, Lonnie y Jay observaron el paisaje para posteriormente intercambiar miradas antes de volver a ver al frente—. ¿Por qué no pasas por la práctica más tarde?

  La joven guerrera lo miró con una sonrisa.

— ¿Qué? ¿Estás de humor para romper algunas reglas? —Dudó ella, curiosa, él también la observó y luego dejó escapar una pequeña risa; volvió a concentrarse en el camino.

—No. —Replicó el VK, quien ya tenía un plan en su mente, la oyó reír.

Ella no era la única persona en aquella limusina a la que Jay estaba dispuesto a ayudar, aunque aquello le costara un poco, sabía que era lo correcto.

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