El Lago II
¡Hola! De nuevo muchísimas por todos sus comentarios, me alegra muchísimo que estén disfrutando tanto esta historia Noemed89, ElizabetHernande381, RebeFernande5, CandyBlandon, kari890212, MaryPlaza8, vanne-94, MagnusNoizLightwood, MaraGilMartnez, ElGatoDeAlicia, DaianaVelazquez, EugeniaJimenez, 1262004agustina, JennyR-73, Sade_67 BiancaCarrillo1, crisalecbloom, Mkijud, _mffpk_, Stereklovers, CarolinaMedina503, naney7, Rosewood84, laurac0330, 4-HUNDRED, ItzelAralyGarciaGuev, VanyMa3, alba83044, GladysElizabethGrego, SarahiMartin, JessyHdl, ClomyBane, Malec10Stylinson, marumaria1985, ZoeLuzybell 💙💛💙🏞️
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Muchas, muchas gracias también a quienes continúan leyendo y dejan su voto 💜💛💜🏞️
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Ultima parte del tercer capítulo, nos quedan dos actualizaciones más para esta historia 😉
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Resumen. Cita con las estrellas.
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La cena fue ligeramente más consistente de lo que tuvieron para el almuerzo. A Magnus le resultaba cada vez más evidente que a Lydia y John les gustaba alimentar a las personas con mucha comida. Sin embargo, fue muy bien recibido. Con el día tan ocupado y su improvisada clase de equitación, Magnus se moría de hambre. Durante la cena, la charla volvió a estar llena de historias y John compartió algunos consejos sobre el ganado, los caballos, y la vida en el rancho.
Decidieron hacer una pausa antes de tomar el postre. Los tres hombres hicieron la limpieza mientras Lydia se relajaba en el sofá. Cuando ya no quedaba mucho por hacer, Alec y Magnus se desviaron hacia donde Lydia estaba sentada en un triplaza. Tenía ambas piernas levantadas sobre una otomana, y parecía completamente agotada.
-"¿Puedo?"- indicó Magnus, haciendo un gesto con la mano para sentarse junto a los pies de Lydia- "Tus pies se ven hinchados"
Lydia frunció el ceño- "No puedo verlos, pero puedo sentirlo"- dijo ella. Magnus se sentó en la otomana, levantó los pies y los apoyó en su regazo.
-"¿Tienes alguna loción o aceite?"
-"Alec"- dijo ella. Él estaba sentado en el triplaza justo a su lado- "Por favor, ¿puedes agarrar la crema hidratante del cajón a tu lado?"- Alec hizo lo que le dijeron y le entregó la botella a Magnus. Lydia le dio las gracias.
Magnus se frotó la loción en las manos y comenzó a masajear los pies de Lydia, la mujer embarazada soltó un largo gemido desvergonzado.
-"Eso se siente tan bien, Magnus. Eres un ángel. Mis pies y yo te amamos"- dijo Lydia con los ojos cerrados.
-"Escuché eso"- dijo John desde la cocina.
Lydia lo hizo callar- "Vuelve a mí cuando puedas masajear mis pies como él"- le dijo ella a su esposo- "¿Cómo es que tienes manos mágicas, Magnus?"
Magnus se rio entre dientes. Lydia parecía absolutamente eufórica mientras él masajeaba sus pies- "El dolor de pies es parte de bailar"- le explicó- "Todos necesitamos saber algún modo para encargarnos de ello"- Lydia dejó salir otro 'mmmmm' de acuerdo.
Lydia agarró la mano de Alec cuando se levantó para ir a la cocina- "Alec, ¿puedo quedármelo?"
Alec se inclinó para acercar su rostro al de ella y negó con la cabeza- "No. Él es mío. Yo lo encontré"- dijo, la besó en la frente y se enderezó, guiñándole un ojo a Magnus y luego se dirigió a la cocina- "Ve a buscar a tu propio autoestopista"
Magnus se concentró en masajear las pantorrillas de Lydia. Esperaba que ella no se diera cuenta de que su rostro se puso rojo por culpa de Alec marcando su territorio.
-"Eres un egoísta, bastardo"- Lydia hizo un puchero- "Compartir es demostrar interés"- le gritó.
-"Y me preocupo por Magnus. Así que estoy compartiendo buenos consejos"- gritó Alec desde la cocina.
Magnus se centró en los pies de Lydia, esforzándose mucho en controlar su respiración.
-"Lo cual es no someterlo a tus cambios de humor"- escuchó a Alec decir.
-"¿Pero qué hay de mí?"- dijo Lydia dijo haciendo un mohín, cruzando los brazos en un bufido- "Soy tu amiga. Sé amable con la mujer embarazada"- añadió, señalándose a sí misma.
-"Creo que ya tienes un esposo muy cariñoso"- dijo John, bromeando otra vez mientras guardaba los últimos cubiertos en los cajones y luego ayudó a Alec con las bebidas.
Lydia agitó la mano lentamente hacia John- "Tú no cuentas. Ya sé que me amas"
-"No uses tu embarazo para salirte con la tuya"- Alec caminó de regreso y le dio una taza de té- "Además, estoy siendo amable. Te traje té"
-"¿Tú lo hiciste"- preguntó fijando su mirada con él. Él respondió un 'No' por lo bajo. Lydia sonrió triunfalmente mientras Alec dejaba una taza de café en la mesa junto a Magnus.
-"Gracias por el té, cariño"- le dijo a John, soplando la bebida caliente, luego tomó un sorbo y observó a Magnus y Alec.
Magnus le agradeció a Alec por su bebida. Los dos intercambiaron una mirada prolongada. Alec evitó mirar a Lydia, ya sabía lo que estaba pensando. Regresó a la cocina por su bebida antes de volver a su asiento.
Una vez que Magnus terminó de masajear los pies de Lydia, se movió para sentarse junto a Alec en el sofá más grande. John se sentó en el brazo del asiento de Lydia.
-"Entonces, ¿qué tipo de baile haces, Magnus?"- preguntó John después de que estuvieron unos momentos en silencio.
-"Cualquier tipo, en realidad. Hip hop, jazz, swing. Todo tipo"- respondió Magnus- "Pero competí en bailes de salón durante mucho tiempo. Hasta finales del año pasado"- Magnus tomó un sorbo de su café.
-"¿Por qué lo dejaste?"- preguntó John.
Magnus negó con la cabeza- "Una combinación de cosas. Empecé a dar más clases en el estudio y a otros bailarines. Luego mamá se enfermó. Además, mi compañera de baile y yo tuvimos un... desacuerdo. Para ponerlo suavemente"- miró a Alec que ya sabía la historia sobre él y Camille.
Él le había contado todo en una de sus cenas mientras todavía estaban en el norte. Magnus también le dijo a Alec que, más que un simple compañero de baile, ella era la ex a la que aludía cuando jugaron 'qué prefieres'. Le contó que ella lo había engañado y lo dejó por otro tipo. Magnus había estado tan ciego- "Así que, de todos modos, este año me concentré en dirigir el estudio de baile"
-"¿Cómo se llama?"- preguntó Lydia.
-"Pandemonium"- respondió Magnus. Estaba agradecido por el cambio de tema.
-"Oh, Dios mío"- dijo Lydia mientras se movía en su asiento a una posición más cómoda- "Ahí es donde estudiaba Jem Carstairs. Bueno, la compañía para la que bailaba, ¿no? Antes de mudarse a Nueva York"- dijo ella emocionada.
Magnus se rio entre dientes- "Bueno, quizás no estudió, ya que nos graduamos de la misma escuela. Es uno de mis amigos más cercanos. Pero sí, es donde todos comenzamos. Siempre quise tener mi propio estudio, así que lo abrí un año después de graduarnos de la academia de arte"
Lydia y Magnus le contaron a Alec sobre Jem, que fue bailarín y coreógrafo antes de convertirse en actor.
-"¿Entonces, dónde está él ahora?"- preguntó Lydia con curiosidad- "Quiero decir si puedes contarnos"
Magnus se rio de nuevo- "Está en Toronto filmando esta nueva serie de televisión, de la que todavía no se me permite hablar. De hecho, me voy a quedar en su casa cuando llegue a LA"- explicó Magnus- "Todo lo que puedo decir es que está interpretando a un personaje que lleva maquillaje, es elegante, atrevido y con poderes mágicos. La única razón por la que lo sé es porque me pidió consejos sobre el maquillaje y el esmalte de uñas. Han basado ese personaje en mí"- bromeó.
Alec resopló desde su asiento. Magnus entrecerró sus ojos hacia él- "¡Oye! Cubro tres de cuatro"
-"Sería cuatro de cuatro si Alec tuviera algo que decir"- le murmuró John a Lydia, lo que la hizo reír. Alec le lanzó una mirada a la pareja. Magnus no pareció escuchar lo que dijo John. Si lo hizo, eligió no indagar más.
-"No sé de qué va ese programa, pero parece emocionante"- dijo Lydia felizmente, cambiando de tema- "No puedo esperar"
La conversación continuó hasta que decidieron comer el postre. Alec tuvo que admitir que Lydia hizo un buen trabajo con la tarta de durazno.
-"Entonces, Magnus, ¿cuáles son los movimientos que más te piden los principiantes?"- preguntó John. Él y Lydia se habían movido al sofá más grande. Lydia estaba tendida en el sofá y apoyada en John, quien estaba sentado en un extremo.
-"Esos serían las inmersiones, el lanzamiento o el levantamiento"- dijo Magnus. Se había sentado en el suelo cuando todos se movieron, con los codos apoyados en la mesa de café- "Y no es sorprendente que te pidan el movimiento de Patrick Swayze en Dirty Dancing. ¿Conoces esa cargada al final de la película?"
John se rio entre dientes, asintiendo- "Lydia quería que hiciéramos eso para nuestro primer baile en la boda"
Lydia se ajustó a una posición más cómoda en el sofá- "Una chica puede soñar. Estuvo bien hasta que me di cuenta de que tenía que ser capaz de saltar y mantener esa posición. No se trataba solo del levantamiento"- dijo- "¿Puedes mostrarnos un movimiento?"- le preguntó. Magnus se rio, encogiéndose de hombros- "Anda, muéstranos, muéstranos"- pidió Lydia emocionada.
Magnus se puso de pie, cediendo a su pedido- "Necesitaré un compañero de baile"- dijo mientras se acomodaba la ropa.
-"Embarazada, aquí"- Lydia se señaló a sí misma- "Almohada"- señaló a John. Luego miró a Alec y agitó las pestañas- "¿Por favor?"- suplicó.
-"Yo no bailo"- dijo Alec mirándola. Podía ver el brillo travieso en sus ojos.
-"¿Por fa, por fa?"- preguntó de nuevo, esta vez con los ojos en blanco.
Alec cerró los ojos y suspiró. Se paró junto a Magnus con torpeza- "Sólo te advierto, no puedo bailar"
Magnus le sonrió- "No seas ridículo. Todos pueden bailar, Alexander"- dijo y le ofreció su mano. Alec lo miró, humedeciéndose los labios con nerviosismo- "Vamos, la primera lección es gratis. Confía en mí"- habló Magnus de nuevo. Alec miró a Magnus a los ojos y finalmente tomó su mano- "Haremos algo muy simple"
Alec puso los ojos en blanco, pero de todos modos lo siguió- "No me hagas dar vueltas, ni me lances. Y tampoco haremos el levantamiento de Dirty Dancing. No haré nada de eso"- protestó Alec, poniendo su pie en el suelo.
-"No, por supuesto que no. Lo dejaré para tu segunda lección"- Magnus le guiñó un ojo a Alec- "Tendrás que pagarme por esa"- sonrió. Alec rodó los ojos en respuesta- "No tiene que ser dinero. Aceptaré cualquier forma de pago, siempre que sea placentero"- añadió tímidamente antes de darse la vuelta. El corazón de Alec comenzó a correr. No estaba del todo seguro de lo que Magnus quería decir con eso.
Magnus los condujo a un lugar en la sala de estar, lejos de los muebles, pero a la vista de John y Lydia. Alec no estaba fingiendo, realmente se sentía nervioso. Tanto sobre el baile como sobre Magnus, que ahora se había acercado más a él para darle algunas instrucciones. De pie, frente a frente, Magnus puso la mano izquierda de Alec en su hombro, y luego tomó la mano derecha de Alec en la suya.
-"Vamos a comenzar con el paso básico de swing"- instruyó Magnus. Alec se concentró en el movimiento de sus pies para que no se concentrara demasiado en su pareja. Una vez más, fue dolorosamente consciente de lo cerca que Magnus estaba de él. Y realmente no quería ser un desastre bailando frente a Magnus.
-"Y te voy a dar vuelta"- dijo Magnus. Alec asintió y siguió su pauta. Magnus tuvo que ponerse de puntillas para poder girar Alec correctamente- "¿Quieres hacer eso de nuevo?"- Alec asintió- "Relájate un poco. Sólo sígueme"- dijo Magnus sonriéndole de nuevo.
Este era un Magnus muy diferente de aquel con quien había viajado. Este Magnus tenía confianza y equilibrio. Cada movimiento era preciso, pero tenía elegancia. Se movía con gracia y delicadeza, no era torpe ni nervioso.
Toda la incomodidad y aprensión que Alec había sentido, desapareció. Magnus se movía compensando dónde Alec estaba inseguro. Lo guiaba con tanta dulzura que Alec se encontró confiando en sí mismo, en sus movimientos. Se sentía seguro y confiado de que Magnus no lo dejaría fallar. Alec vio el brillo en sus ojos mientras daba instrucciones o cuando dirigía sus movimientos, podía ver el amor que sentía por el baile.
Practicaron la secuencia un poco más antes de que Alec estuviera satisfecho.
-"Vamos. Sólo enséñanos"- dijo Lydia con impaciencia, gritando en voz alta.
-"Relájate"- le dijo Alec- "No quiero estropearlo"
Magnus se rio y tomó el rostro de Alec en sus manos- "Eres un perfeccionista. Eso es tan lindo"- dijo y tomó la mano de Alec- "Vamos, ya lo tienes"- se colocaron en su primera postura.
-"Espera, espera, espera"- dijo John agarrando su teléfono de la mesa auxiliar y buscando música.
Lydia soltó una risita- "Vas a escuchar el gusto de mi esposo por las canciones viejitas"- dijo ella.
-"Este es tu teléfono, cariño. Porque tienes mejor gusto en música"- dijo John mientras continuaba desplazándose por la lista de canciones- "Ah. Lo encontré"- golpeó reproducir.
Now I've had the time of my life/Ahora he tenido el mejor momento de mi vida
No I never felt like this before/No, nunca me sentí así antes
Yes I swear it's the truth/Sí, te juro que es la verdad
and I owe it all to you.../Y te lo debo todo a ti...
Alec rodó sus ojos y negó con la cabeza mientras la letra familiar de 'Time of My Life' de Dirty Dancing comenzaba a sonar- "No vamos hacer ese levantamiento"- protestó nuevamente, el dedo índice apuntando a John y Lydia. Magnus se rio y comenzó a moverse con la música.
-"No voy a bailar eso"- dijo Alec, cruzando sus brazos frente a su pecho, todavía sacudiendo su cabeza. Magnus se acercó, sonriéndole. Estaba balanceando sus caderas al ritmo de la música. Tomó las manos de Alec en las suyas, descruzándolos. Luego entrelazaron sus dedos.
-"Sólo comienza a bailar, Lightwood"- gritó Lydia aplaudiendo y vitoreando nuevamente desde el sofá. John también aplaudió.
Alec negó con la cabeza, lanzándoles una mirada furiosa antes de ponerse frente a Magnus otra vez. Cuando la canción entró en el coro, Magnus lo guio en el primer par de pasos. Eran simples y Alec sólo tenía que seguir las pautas de Magnus en el juego de piernas. Dando un paso adelante cuando Magnus daba un paso atrás, y un paso atrás cuando Magnus hacia lo contrario.
-"Ponle un poco de ritmo, Alec"- escuchó a John decir. Alec sólo se enfocaba en sus pies, por temor a tropezar o pisar a Magnus. Hasta que sintió el dedo de Magnus bajo su barbilla haciendo que levantara la mirada. Magnus le sonrió, sus ojos brillando.
-"Oye, sólo concéntrate en mí"- dijo Magnus mientras continuaban moviéndose al unísono. Alec asintió y se concentró en los ojos de Magnus y su sonrisa. Magnus lo empujó hacia atrás, pero mantuvo su agarre en la mano derecha de Alec. Luego lo jaló y lo hizo girar dos veces. Y luego, lo siguiente que Alec supo era que estaba mirando a Magnus, y podía ver el techo detrás de él. El brazo derecho de Alec estaba alrededor del cuello de Magnus, y podía sentir la rodilla y la mano de Magnus en su espalda. Sus rostros estaban a centímetros de distancia el uno del otro.
-"Inmersión perfecta"- dijo Magnus sonriéndole ampliamente, sus ojos fijos en los del otro.
Alec luchó por recuperar el aliento, estaba seguro de que no era por el baile que su ritmo cardíaco iba a una mil por hora. Estaba perdido en los ojos de Magnus, en los brazos de Magnus. Y se sentía como el cielo.
Magnus le guiñó un ojo antes de tirar de él en posición vertical. John y Lydia estaban animando desde el sofá. John usando sus dedos para silbar. Magnus hizo una reverencia mientras un aturdido Alec trató de calmarse.
Cuando la emoción del baile se calmó, todos decidieron dar por terminada la noche.
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Una vez que se dio un baño y se había acostado, Alec intentó algunas veces quedarse dormido, pero falló miserablemente. Sus pensamientos eran invadidos por el baile y su conversación con Izzy y Lydia sobre Magnus, y la noche que pasaron en el auto. Básicamente, sus pensamientos estaban llenos de Magnus. Después de varios intentos en vano, se levantó y se vistió. Agarró su equipo y una de las mantas de lana que Lydia le había dado.
Se movió silenciosamente por la cocina. Guardó una de las mantas de picnic de Lydia en su mochila y luego llenó una de las tazas de viaje con café recién hecho antes de salir por la puerta.
-"¿A dónde vas?"- escuchó una voz desde el lado del porche. Cuando se dio la vuelta, vio a Magnus sentado en el columpio, envuelto en una manta y con una taza de té en la mano.
-"Magnus"- dijo Alec- "Pensé que ya estabas dormido"- se acercó y apoyó en la barandilla.
Magnus negó con la cabeza- "No podía dormir"- le dijo- "La adrenalina del baile tal vez"- explicó más cuando Alec no dijo nada- "No me había divertido tanto bailando en mucho tiempo"- levantó su taza hacia Alec- "Así que, gracias, Alexander"- dijo antes de darle un trago a su bebida.
-"Feliz de ayudar"- dijo Alec con una sonrisa. Tenía la sensación de que Magnus había vuelto a hablar con su madre. Sabía que lo hacía todas las noches. Durante sus viajes, Alec solía encontrar algún tipo de excusa para dejar solo a su compañero.
-"Entonces, todavía no respondes mi pregunta"- continuó Magnus- "¿A dónde vas en medio de la noche? ¿Irás a encontrarte con tu amante secreto?"- bromeó Magnus.
-"Sí"- respondió Alec- "Con mi amante secreto. Lo haremos como animales salvajes"- agregó riéndose. Magnus se rio con él
-"No, en serio. Tengo una cita con la galaxia"- bromeó Alec, señalando el cielo- "Noche despejada. No hay contaminación lumínica en estas áreas. Es un buen momento para tomar imágenes de la Vía Láctea"- Magnus miró al cielo y se recostó. Alec se rascó la parte posterior de la oreja- "¿Quieres venir conmigo?"- preguntó.
Cuando no consiguió dormir, inicialmente había planeado salir y tomar fotos para aclararse la cabeza, despejarla de los pensamientos de Magnus. Y ahora, aquí estaba, invitándolo. Alec se dio cuenta de lo ridículo que era su situación actual en este momento, pero también de que quería pasar más tiempo con este hombre maravilloso. Y que hablar con él en este momento había detenido los pensamientos turbulentos y molestos.
Magnus se levantó de su asiento con entusiasmo. Bebió lo que quedaba de su té y colocó la taza en la barandilla prometiendo recogerla cuando volvieran. Luego siguió a Alec hacia un grupo de árboles al lado del granero.
-"Hay un lago no lejos de aquí, escondido más allá de esos árboles"- señaló Alec. Magnus caminó a su lado, siguiéndolo de cerca- "Normalmente hago esto cuando vengo de visita. Es un lugar privado, realmente agradable"
Una vez que llegaron al claro, Alec instaló su cámara mientras Magnus miraba a su alrededor. Puso la manta de picnic cerca de donde colocó el trípode para la cámara y se sentó encima. Magnus regresó y se tumbó sobre la manta junto a él mientras Alec volvía a verificar la configuración de la cámara.
-"Podría acostumbrarme a este cielo nocturno"- dijo Magnus, mirando las estrellas- "Nunca había visto tantas estrellas hasta que vine a este viaje contigo"- tenía una sonrisa en su rostro cuando dijo esto.
Alec colocó la cámara en el trípode y la dejó para que tomara las fotos. Luego se acostó junto a Magnus- "Esta es una visión que nunca obtendremos en Nueva York. Al menos no en la ciudad"
Magnus inclinó su cabeza más cerca de la de Alec- "Puedo ver la Osa Mayor"- dijo señalándola- "Ese es todo mi conocimiento en constelaciones"
Alec inclinó la cabeza hacia Magnus y señaló- "Esa es la Osa Menor"- dijo trazando en el aire con su dedo índice, como si estuviera dibujando en el cielo- "Y esa es Casiopea"- dijo repitiendo el movimiento.
-"No la veo"- dijo Magnus, acercando su cabeza para tratar de obtener el mismo ángulo que Alec. Alec tomó su mano y la guio para seguir la constelación.
-"Ahí"- dijo, sosteniendo la mano de Magnus en el sitio, sin poder evitar notar lo cálida que era, y cómo encajaba perfectamente en la suya.
-"Oh, ya la veo"- exclamó Magnus felizmente- "Ella es la dama que se jactó de ser más bonita que los dioses, ¿verdad?"
-"Algo así, si"- respondió Alec.
-"Muéstrame otra"- pidió Magnus. Así que Alec pasó el tiempo señalando constelaciones a él. Al menos los que definitivamente sabía. Con Magnus trazando alegremente cada una, su sonrisa inocente y emocionada como la de un niño. En un momento, Alec estaba más centrado en mirar a Magnus que el cielo.
-"¿Cómo sabes todo esto?"- preguntó Magnus, girando su cabeza para mirar a Alec. Una gran sonrisa todavía fija en su rostro.
Alec tardó un segundo en recomponerse. No esperaba que Magnus se diera la vuelta, justo cuando lo estaba mirando.
Alec se aclaró la garganta y miró hacia arriba- "Por Jace, mi hermano adoptivo. Estaba fascinado con ellas"- respondió Alec- "Creo que fue porque le dijeron que sus padres se fueron a las estrellas cuando fallecieron"- Magnus se movió a un lado, apoyando la cabeza en un brazo, y escuchó a Alec- "En las noches claras, intentábamos mirar las estrellas, él me preguntaba dónde creía que estarían sus padres"- Alec señaló hacia el oeste a un grupo de estrellas. Magnus siguió su mirada- "Inventé esa constelación y dije que eran sus padres, cuidándolo"
-"¿Por qué esas?"- preguntó Magnus.
-"Su habitación daba al lado oeste. Y ese grupo de estrellas era el más visible"- le dijo Ale- "Le ayudaba a dormir saber que lo estarían cuidando"- respiro profundamente- "Y luego simplemente seguimos desde allí, buscando más constelaciones. Y a Izzy le gustaban las historias, así que cuando llegaba le contamos sobre Draco, el Dragón; Orión, el cazador; y la Osa Mayor"- se detuvo cuando miró a Magnus, dándose cuenta que se había quedado dormido.
Alec alcanzó la otra manta que estaba apoyada en el otro lado y cubrió a Magnus con ella- "Buenas noches, Magnus"- susurró. Se inclinó hacia delante y se detuvo, observando su rostro dormido. Su corazón una vez más, revoloteó. Sabía que se estaba enamorando, una sonrisa curvó sus labios, luego dejó un leve beso en su frente.
Alec se acostó de espaldas y observó las estrellas. Magnus a él un poco más, instintivamente, mientras dormía. Alec lo recibió con agrado. No sabía por qué, pero siempre se sentía bien tener a Magnus cerca, abrazándolo así. No era que le faltara algo antes y Magnus lo haya completado. Era más como si su corazón acabara de descubrir algo que nunca supo que necesitaba, o que quería más que nada, hasta que conoció a Magnus.
Unos momentos más tarde, también se durmió.
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Alec se despertó con los ojos legañosos al amanecer por el sonido de pájaros, la manta estaba sobre él. se encontraba solo. Se sentó lentamente, frotándose un ojo, mirando a su alrededor para ver dónde estaba Magnus. Lo vio junto al embarcadero. Estaba sin camisa, sus pantalones rojo brillante contrastan con el verde oscuro de los árboles y el lago. La luz del sol apenas comenzaba a dejarse ver, filtrándose por detrás de los árboles. La luna todavía era parcialmente visible, con algunas manchas de estrellas en el cielo.
Al principio, Alec pensó que sólo estaba mirando el cielo matutino, pero luego Magnus comenzó a girar, dos veces. Tres. Sus brazos se estiraron ampliamente hacia un lado y luego se cerraron alrededor de él antes de descansar. Movió todo su cuerpo con complejidad. Algunos movimientos eran lentos, otros rápidos. Giraba, saltaba, se volteaba y giraba de nuevo. Sus pies siempre aterrizando suavemente en la plataforma de madera. Había secuencias agudas, repentinas y vibrantes, pero también lentas y sensuales. Magnus se movía con tanta gracia y elegancia, pero al mismo tiempo salvaje y apasionado. Estaba bailando con una música que sólo él podía escuchar. Perdido en su propio mundo con sólo la quietud de la mañana.
Alec se levantó rápidamente y agarró su cámara, tomando varias fotos de Magnus. Cada movimiento de sus manos y pies eran hipnóticos. Cada movimiento de sus caderas, cautivador. Alec estaba fascinado.
No estaba seguro de cuánto tiempo había estado mirando, o cuando había apagado su cámara. No se dio cuenta cuando comenzó a caminar hacia el muelle, hacia Magnus.
Magnus ya estaba en el aire en dirección hacia él cuando se dio cuenta, instintivamente estiró los brazos, pero ya era demasiado tarde. Escuchó a Magnus decir palabrotas antes de sentir todo su peso sobre él y ambos cayeron. El ruido sordo de Alec aterrizando en su espalda resonó a través de los árboles.
-"¿Qué demonios, Alec?"- gritó Magnus- "Saliste de la nada. ¿Estás bien?"- Magnus se sentó y lo inspeccionó- "Por favor dime que no..."
Alec se rio entre dientes mientras recuperaba el aliento- "No. No me lastimaste. Estoy bien"- dijo- "Fue mi culpa"
-"No, fue culpa mía"- dijo Magnus pasándose los dedos por el cabello- "A veces cierro los ojos, cuando estoy bailando. Me ayuda a concentrarme"- explicó.
Alec negó con la cabeza- "Bueno, yo tenía los ojos abiertos, así que debí haberme apartado del camino. Supongo que estaba distraído"- dijo Alec. Esperaba que Magnus aceptara esa explicación sin preguntar por qué exactamente no estaba prestando atención.
Magnus abrió la boca, luego la cerró y miró hacia abajo, hacia donde estaban las manos de Alec- "Tienes las manos en mi culo"
-"No lo hice a propósito, tenía que tratar de atraparte"- dijo Alec sonriendo- "Y tengo que decir que es un buen culo"- dijo con valentía.
Magnus se cruzó de brazos, y levantó una ceja- "Vaya, gracias por el cumplido"- dijo- "¿Vas a dejarlas ahí?"
-"¿Te vas a levantar?"- replicó Alec manteniendo sus manos donde estaban, mirando a Magnus con ojos desafiantes. Magnus le devolvió la mirada.
Un fuerte sonido de alguien aclarándose la garganta hizo que los dos levantaran la mirada para encontrar a John en su caballo.
-"Buen día"- dijo con una inclinación de sombrero. Su rostro parecía inocente a excepción del brillo en sus ojos y una sonrisa curvando un lado de sus labios- "Lydia tiene listo el desayuno si ustedes dos tienen hambre"- dijo, entonces tiró de las riendas del caballo para dar vuelta hacia la casa dejándolos solos.
Magnus se puso de pie y ofreció una mano a Alec para levantar. Reunieron sus cosas y siguieron a John. Caminaron lado a lado, en silencio. Sus brazos rozándose al estar tan cerca el uno del otro, incluso si el camino era bastante ancho. A medida que se acercaban a la casa, caminaron con sus meñiques enganchados, incluso si no intercambiaron ninguna palabra.
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-"Buenos días ustedes dos"-. Lydia los saludó tan pronto como entraron a la casa por la puerta de atrás hacia la cocina. Miró rápidamente sus dedos entrelazados antes de que los dos se separaran. Magnus la saludó con un beso en cada mejilla, Alec con un movimiento de su cabeza y se quedó de pie junto a la puerta. Lydia le dirigió una sonrisa cómplice antes de señalar a la mesa- "El desayuno está listo"- dijo.
-"Iré a lavarme"- dijo Magnus- "Ustedes pueden comenzar. No me molestará, podría tardar un poco"- dijo, sonriéndole a Lydia y luego a Alec antes de subir a la habitación de invitados.
Lydia se apoyó en la barra, las manos acariciando su vientre, mientras veía desaparecer a Magnus a la habitación contigua- "¿Pasaste una buena noche bajo las estrellas?"- le preguntó a Alec, apenas conteniendo su sonrisa.
-"Cállate. No pasó nada"- dijo Alec. Aunque no pudo evitar su sonrisa.
-"No dije que pasó algo"- respondió Lydia inocentemente- "Sólo pregunté si tuviste una buena noche"- ella hizo una pausa- "Bajo las estrellas. Con Magnus"
Alec respiró hondo- "En realidad, si. Tuve una gran noche"- dijo finalmente, bajó su equipo y agarró dos tazas para hacer café.
-"Parecía que Magnus también"- bromeó Lydia, mientras le daba a Alec una cucharita de un cajón.
-"No pasó nada"- repitió Alec- "Simplemente dormimos. Después de hablar sobre las estrellas. Nada especial"
-"Bueno, parece haber que fue una muy buena charla sobre estrellas para que hayan entrado con sus meñiques entrelazados"- dijo Lydia sonriendo. Alec sólo se encogió de hombros ignorando su mirada burlona. Las puntas de sus orejas estaban ardiendo- "Sabes que esta es la primera vez que te veo sonrojar tanto"- susurró, riendo cuando Alec dejó caer la cucharita.
Ella le dio una palmadita en la espalda- "Está bien, Alec. Todos hemos pasado por esto. Sólo eres de muy, muy tardío desarrollo"- dijo y lo dejó para terminar de preparar el café.
Lydia y, por extensión, John, habían dejado de burlarse de Alec para cuando desayunaron.
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Magnus llegó a su habitación y cerró la puerta. Se dirigió directamente a su teléfono que estaba sobre la mesita de noche y marcó el número de Catarina. Tardó tres tonos antes de que contestara con un gruñido medio adormilado a modo de saludo.
-"Cat, estoy jodido"- dijo, pasándose los dedos por el pelo.
-"¿Qué? ¿Ya?"- la voz de Catarina era más clara ahora- "¿Fue bueno?"- preguntó.
-"¡Cat, no me refería a eso!"- gimió Magnus.
-"¿Tan mal lo hizo?"
-"No pasó nada. No hemos tenido relaciones sexuales"- dijo Magnus tímidamente- "Cálmate que necesito ayuda"- dijo con severidad.
Magnus escuchó que se removía- "Está bien. ¿Con qué necesitas ayuda?"- su voz ahora sonaba alarmada y preocupada- "¿Qué te hizo? ¿Estás bien? ¿Te lastimó? Dime dónde estás. Iré a recogerte ahora mismo"- dijo ella con una voz cada vez más asustada.
-"Catarina, cálmate"- dijo Magnus, dándose cuenta de cómo sus palabras podrían haber sido malinterpretadas- "No estoy herido. Estoy bien. Alec no me hizo nada. Ha sido muy amable en realidad"- Él sonrió en la última línea.
-"Uh, está bien"- dijo Catarina confundida- "Entonces, ¿con qué necesitas ayuda exactamente?"- le preguntó.
-"Él me gusta, Cat"- confesó Magnus- "En serio me gusta"- continuó- "Y él me ha estado coqueteando. Y él es sólo... es tan considerado y agradable. Es maravilloso. Y un caballero"
-"¿Y eso es... algo malo?"- preguntó, insegura y todavía confundida.
-"¡Sí!"- exclamó Magnus- "No"- negó con la cabeza- "Es algo muy, muy bueno. Y eso es malo"
-"Um... Tendrás que guiarme a través de esto Magnus. Es demasiado para mis células cerebrales tan temprano en la mañana"- dijo Catarina. Parecía haberse dirigido a la cocina ya que podía oír el tintineo de los platos- "¿Por qué es malo que él sea tan bueno?"
-"Porque realmente me gusta"- gimió Magnus de nuevo- "Y este es un viaje. Esto no es la vida real. Quiero decir que no son circunstancias normales para ninguno de nosotros. ¿Qué pasa si no va más allá de este viaje? ¿O qué pasa si continúa y ambos nos damos cuenta de que no tenemos nada en común en la vida real? Realmente me gusta. Y no sé qué hacer. Cat, ¿qué debo hacer?"- soltó Magnus, quedándose sin aliento al final.
-"Bueno, primero. Necesitas calmarte"- dijo Catarina, su voz tranquila y compuesta, como de costumbre- "En segundo lugar, ha estado mostrando interés, como dijiste. Así que a él también le gustas"- Magnus asintió con cada punto que hacía- "En tercer lugar, ¿le has dicho que te gusta? Porque tal vez si lo haces, y él te corresponde, ambos podrían averiguar qué hacer después de este viaje"- sugirió.
Magnus mordió su pulgar, pensativo.
-"¿Magnus?"- le llamó- "Nunca he escuchado que dudes de ti mismo alrededor de un hombre. O una mujer. ¿Qué está pasando en realidad?"- preguntó. Catarina había sido una de sus mejores amigas desde que se mudó a Nueva York, era como una hermana para él, lo conocía como la palma de su mano. Ella siempre había sido su confidente.
-"No lo sé"- Magnus negó con la cabeza-"Es que... nunca me he sentido así por nadie. Durante mucho tiempo. Ni siquiera con Camille"- suspiró- "No sé si podría soportar el dolor si no funciona"- se frotó el rostro y se sentó en silencio. Catarina no habló, dándole tiempo para pensar sobre las cosas.
Después de unos minutos, la escuchó respirar hondo- "Bueno, tienes varias opciones dices algo y ustedes dos hablan de ello. O mantienes la distancia y dejas que todo termine cuando finalice este viaje"- ella le señaló- "También puedes terminar el viaje en este momento, volver a casa y eso será todo. O puedes continuar con lo que están haciendo y, cuando finalice el viaje, aceptar que es el final. Es tu elección"
Magnus asintió de nuevo, contemplando todo lo que ella había dicho- "Si lo sé"- se mordió el labio mientras pensaba en todo lo que había sucedido con Alec hasta el momento.
Cada conversación, cada roce, cada broma, cada risa. Pensó en cómo se sintió fuera de su zona de confort desde que se conocieron. Pero de alguna manera, Alec lo hizo sentirse seguro y protegido. Estaba experimentando tantas cosas que de otra forma nunca hubiera experimentado de no haberle conocido. Sí, planeaba hacer este viaje incluso antes de conocer al hombre, pero sus planes no estaban ni remotamente cerca de nada de lo que había sucedido hasta ahora.
Y el propio Alec era algo nuevo para Magnus. Él estaba acostumbrado a tener confianza en sus relaciones, no era de ponerse nervioso, siempre estaba tranquilo. Sin embargo, con Alec, fue al revés. Y lo había tomado por sorpresa.
No era que Alec fuera arrogante, aunque podría verse de esa manera, simplemente decía las cosas tal como eran. No usaba palabras rimbombantes, ni se andaba con rodeos. Y a Magnus le gustaba eso de él.
Alec era cariñoso y amable incluso cuando bromeaba mucho sobre su imaginación. Aguantó sus pequeñas peculiaridades y los juegos inventados en el auto. Ninguna de las personas con las que Magnus había salido alguna vez hizo eso. Simplemente lo rechazaban, o en el caso de Camille, le decían abiertamente que los hombres maduros no se comportaban de ese modo y que se detuviera. Magnus siempre había ocultado esa parte de sí mismo a sus amantes. Alec había sido el primero, además de su madre y sus amigos más cercanos, que conocía esa parte de él y a quien no le importaba que Magnus fuera él mismo. Sonrió ante la idea, no, aún no estaba listo para despedirse de Alec.
-"De todos modos, ¿qué van a hacer hoy?"- preguntó Cat, cambiando de tema.
-"Umm"- Magnus se rascó la cabeza- "Creo que conduciremos hasta el Parque Nacional Zion, no está muy lejos de aquí"- Lydia iba a prestarles su coche mientras el Impala todavía estaba en el taller. Magnus y Alec estaban felices de ayudar en la granja, pero ella y John insistieron, ya que, según ellos, Magnus y Alec fueron invitados de vacaciones y no de jornaleros- "El auto todavía está en el taller"
-"Bueno, diviértete, ¿de acuerdo?"- dijo Catarina- "Y sólo avísame si sientes que se vuelve demasiado"
-"Lo haré. Creo que estaré bien"- respondió Magnus- "Escucha, debo irme. Me están esperando. Estamos a punto de desayunar"- dijo. Sabía que no podría estar lejos demasiado tiempo, por lo que ha visto hasta ahora, Lydia no le permitiría saltarse el desayuno ni ninguna otra comida.
-"De acuerdo. ¿Y estarás bien?"- Catarina pidiendo que la tranquilice.
-"Sí. Estaré bien"- dijo Magnus, sonriendo- "De verdad, estaré bien"- repitió para calmarla.
Después de colgar, Magnus se levantó rápidamente y bajó a desayunar.
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Magnus inicialmente estaba callado en su camino hacia el parque, pero finalmente se animó. Dejó sus preocupaciones en el fondo de su mente y decidió disfrutar de su día. Con Alec. Habían caminado la mayor parte del día, siguiendo los senderos que rodeaban el parque. Alec se burló de él por no tocar ningún tipo de planta en caso de que fueran venenosas. No vieron ningún oso, ni tuvieron ningún encuentro cercano con animales silvestres y, sin embargo, lo pasaron muy bien. Lydia incluso les había preparado un buen picnic para su caminata.
Regresaron al rancho justo antes de media tarde.
-"¿Te apetece caminar hasta el lago?"- preguntó Alec mientras estacionaba el auto al lado de la casa- "Puede que haya algunos patos salvajes allí o algo así"
-"Podría necesitar una ducha realmente larga"- dijo Magnus mientras bajaban del auto- "Pero creo que no me matara otra caminata"- se encogió de hombros.
Regresaron al lago. Magnus se dio cuenta de lo diferente que se veía de esa mañana. El sol de la tarde era caliente, y por lo que habían caminado, Magnus se sentía pegajoso en su ropa. El agua parecía tan llamativa que comenzó a caminar hacia ella tan pronto como estuvo a la vista.
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Alec vio como Magnus, con los zapatos en la mano y las piernas de sus pantalones recogidas hasta las rodillas, estaba de pie en la parte poco profunda del lago.
-"El agua está agradable"- dijo Magnus, medio girándose para ver a Alec.
-"¿No está fría?"- preguntó Alec, apoyando los codos sobre sus rodillas.
Magnus negó con la cabeza- "No. Es muy refrescante"- dijo y arrojó sus zapatos hacia Alec. Alec atrapó a uno y alcanzó el par, que no cayó muy lejos de donde estaba sentado. Magnus volvió a jugar en el agua con los pies.
-"Puedes nadar"- sugirió Alec- "Es propiedad privada"- agregó.
Magnus giró todo su cuerpo esta vez, mordiéndose el labio inferior- "¿Nadarías conmigo?"- preguntó con una sonrisa.
Alec apartó la mirada para ocultar una sonrisa. Respiró hondo y se levantó- "Por supuesto"- dijo. Puso la cámara y el resto de sus cosas no lejos de la orilla. Para cuando se dio la vuelta, Magnus ya se había quedado en ropa interior y se metió en el agua. Alec hizo lo mismo y siguió a Magnus al agua deteniéndose a solo medio metro de él.
-"No te muevas demasiado. Despertarás al cocodrilo gigante"- bromeó Alec.
-"Buen intento, Alexander"- lo reprendió Magnus- "No voy a caer en uno de tus trucos otra vez. Y sé de que va esa película".
Alec se rio entre dientes- "Bien"- dijo- "Pero sí hay anguilas aquí. Son nocturnas, aunque podrían despertarse. Así que quédate quieto, trata de no moverte demasiado"- dijo inexpresivo- "Pueden morder grandes trozos de tu pierna"
Magnus frunció el ceño y dejó de moverse- "¿Alec?"- preguntó y se acercó, sus ojos se abrieron cuando Alec no respondió- "Por favor no..."- nunca llegó a terminar ya que de repente dio un sobresalto y se colgó de Alec, con los brazos alrededor de su cuello. Alec instintivamente lo agarró de la cintura bajo el agua- "De acuerdo, algo rozó mi pierna"- dijo mirando alrededor de un lado a otro.
Alec se rio- "Magnus, estaba bromeando"- finalmente admitió- "No habría sugerido nadar si hubiera anguilas aquí"- dijo- "Quiero decir, al menos yo no me habría metido en el agua"
Magnus lo fulminó con la mirada- "¿Por qué sigues haciéndome eso?"- dijo enojado.
-"No puedo evitarlo"- respondió Alec riendo- "Es muy fácil y divertido ver cómo tu imaginación se vuelve loca"
Magnus frunció el ceño- "Me alegra que mi ingenuidad te parezca entretenida"- dijo todavía haciendo pucheros y se apartó de Alec, quien rápidamente lo detuvo.
-"Está bien, lo siento"- se disculpó Alec, tratando de captar la mirada de Magnus. Él había bajado la mirada y la apartó. Alec inclinó su cabeza otra vez hasta que sus ojos se encontraron, pero solo fugazmente- "Vamos. Realmente lo siento"- dijo, acercando más su rostro- "No lo haré de nuevo. Lo prometo"- dijo.
Después de un latido, Magnus finalmente lo miró a los ojos- "Está bien. Sé que no serás capaz de evitarlo"- Magnus puso los ojos en blanco y luego se movió para encontrarse cara a cara con Alec, con la nariz a menos de un cabello de distancia del otro. Ambas respiraciones se entrecortaron, las miradas nunca se apartaron del otro- "¿Alguna vez oíste hablar del concepto de espacio personal?"- preguntó Magnus.
-"De hecho, si"- respondió Alec, sonriendo pero sin romper el contacto visual.
-"Estás como invadiendo el mío en este momento- dijo Magnus
Alec se rio entre dientes- "No. Creo que tú estás invadiendo mi espacio personal"- respondió Alec- "Fuiste tú quien salto sobre mí primero"
-"Quise alejarme. Tú fuiste quien me detuvo"- replicó Magnus.
Sus rostros estaban tan cerca ahora, sus narices presionándose contra la del otro, y sus labios se tocaban ligeramente en ciertos sonidos cuando hablaban. Alec estaba respirando en la respiración de Magnus. Ninguno de los dos se alejó. Ninguno de ellos parpadeó, sus ojos buscando en el otro. Qué, Alec no estaba seguro. Quizás que uno de ellos cediera. Ambos respiraban de forma desigual, una sonrisa jugando en sus labios.
-"Creo que esto es lo que se llama hablar muy de cerca"- dijo Alec, todavía sin retroceder- "Puedes apartarte si te hace sentir incómodo"- añadió atrevidamente.
Magnus dio un ligero movimiento de cabeza- "No. Me siento cómodo aquí. Puedes retroceder. Si quieres"- dijo sonriendo. Alec negó con la cabeza con el más mínimo movimiento- "¡Siempre haces esto de hablar muy cerca con otras personas?"- preguntó Magnus.
-"No"- respondió Alec- "Esta es la primera vez para mí. Así que sólo contigo"
-"¿Estás diciendo que nunca besaste a nadie?"- preguntó Magnus, alzando la ceja.
-"Esto no es un beso"- explicó Alec- "Te dije que esto se llama hablar muy de cerca"
-"Por supuesto"- estuvo de acuerdo Magnus- "Mi error"- añadió.
El tiempo parecía moverse rápido y lento al mismo tiempo. Este coqueteo con Magnus había llegado a un nivel completamente nuevo. La cabeza de Alec estaba una vez más llena de pensamientos sobre él. Cómo sus brazos se aferraban a su cuello, sus piernas a cada lado de su cintura. No completamente a su alrededor, pero Alec lo sabía. La sensación de la respiración de Magnus en su rostro, el suave y ligero roce como pluma de los labios de Magnus sobre los suyos, la sensación de la piel de Magnus en las yemas de sus dedos mientras lo abrazaba. Incluso bajo el agua podía sentir lo cálida y suave que era.
-"¿Magnus?"- preguntó Alec, la voz atrapada en su garganta.
-"¿Hm?"- respondió Magnus.
-"Realmente me gustas"- Alec casi le susurró su confesión, consciente de lo cerca que estaban. Contuvo la respiración, esperando que Magnus dijera algo.
Magnus sonrió más ampliamente- "Tú también me gustas mucho"- confesó.
-"Quiero decir que me gustas, me gustas"- Alec explicó más.
-"Suenas como un adolescente"- Magnus se rio entre dientes- "Realmente me gustas, me gustas, también"- añadió.
-"Estoy muy contento de escuchar eso"- dijo Alec dijo- "Yo..."
-"Alexander... cállate"- susurró Magnus y presionó sus labios contra los de Alec.
Alec tardó menos de medio segundo en responder al beso. Fue lento y lánguido. Fue como magia. Alec apretó los brazos para acercar más Magnus y Magnus hizo lo mismo con él. Sus labios se sentían suaves y tiernos, y su boca sabía dulce. Alec no pudo evitar chupar ligeramente el labio inferior de Magnus y luego la parte superior. Levantó la mano para ahuecar su mejilla, el pulgar acariciando su oreja. Sus respiraciones se mezclaban cada vez que sus labios se tocaban.
-"Alexander"- susurró Magnus en su boca. Sus labios nunca se apartaron. Alec gimió una respuesta- "Por favor dime que fue tu mano la que rozó mi muslo izquierdo".
Alec se retiró y levantó su mano derecha. Era con la que sostenía su mejilla. Magnus miró su mano, alarmado- "Estoy seguro de que no es nada"- comenzó a decir Alec y se inclinó para besar a Magnus otra vez, pero se detuvo abruptamente.
-"¿Qué?"- preguntó Magnus.
-"¿Esa fue tu pierna rozando la mía?"- preguntó Alec. Magnus negó con la cabeza. Alec se dio cuenta de que las piernas de Magnus todavía estaban envueltas alrededor de su cintura- "¿Quieres salir del agua?"
-"Creo que es una buena idea"- dijo Magnus, asintiendo con la cabeza y bajó las piernas. Ambos corrieron en el agua, riendo- "Tenías miedo de la cosa en el agua"- bromeó Magnus, acercándose a Alec.
Alec dejó escapar un bufido de negación- "No tenía miedo"- dijo sonriendo- "Aunque no estoy completamente seguro de que era, estoy bastante seguro de que no hay peces en este lago"- explicó mirando a Magnus, quien ahora estaba presionado contra él, ambos sonrieron- "Y no te importa eso ahora mismo, ¿verdad?"
-"No"- dijo Magnus. Envolviendo ambos brazos alrededor del cuello de Alec y jalándolo hacia abajo para otro beso. Alec envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Magnus acercándolo, profundizando el beso. En ese momento decidió, que realmente nunca quisiera dejar ir a Magnus.
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Notas finales del capítulo por crazyellephant:
¿Cómo va este par de tontos?
La película sobre el cocodrilo se llama Lake Placid, es una película de terror estadounidense estrenada en 1999. La cinta gira en torno a un enorme cocodrilo que aterroriza a una localidad ficticia en los Estados Unidos y a un grupo disfuncional que trata de capturar y asesinar a la criatura.
Y las anguilas realmente pueden morder enormes trozos de tu pierna. Pero no lo harán si usan ropa de colores brillantes.
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¡Por fin un beso! Espero les haya el camino hasta aquí, nos leemos en la siguiente actualización y que tengan una excelente semana 😘🤗
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