Luego de besos compartidos y varios robados, ambos se recostaron sobre la grama. Summer mantenía su cabeza sobre el pecho de Louis, mientras que éste acariciaba su cabello.

—No sabes lo mucho que me gusta que me hables en francés—confesó.

—¿En serio?—ella asintió escuchando el corazón de Louis bajo su oído. —Dans ce cas, je vais parler en français jusqu'à ce que vous tombez amoureux de moi.

"En ese caso, voy a hablar en francés hasta que te enamores de mí".  

Summer suspiró.

—No sé que dijiste, pero se escuchó tan bonito.

Louis sonrió ampliamente. 

Sin tan solo supiera...  

—¿Por qué dijiste que era una locura el que te besara?—preguntó Louis con interés, pero Summer ahora estaba realmente avergonzada.

—Bueno, si te soy sincera... como que no creía que te cayera muy bien, y mucho menos que te gustara.

—¿Es en serio? —preguntó atónito.

—Sí.

Luego del murmuro de Summer, solo se pudo escuchar la escandalosa carcajada del ojiazul.

—Deja de burlarte de mí—pidió ella levantando su cabeza del pecho de Louis para poder mirarlo.

—Es que... —sin poder evitarlo, volvió a reír con fuerza. Summer rodó los ojos mientras se sentaba y se cruzaba de brazos a la espera de que las carcajadas del chico cesaran. —¿Cómo pensaste que me caías mal? Si prácticamente eres a la única que no le grito.

—Al principio lo hacías.

—Pero no de un tiempo para acá.    

Summer hizo una mueca.

—Tienes un punto ahí.

Él le guiñó el ojo.

—Me gustas mucho—el castaño colocó los brazos cruzados bajo su cabeza sonriendo ante el sonrojo de la chica frente a él. —Ahora me puedo dar cuenta de ello.  

—Todo esto es muy raro. 

Louis frunció el ceño ante la renuencia que aparentaba tener la chica a su lado con respecto a sus sentimientos.

—¿Qué es raro? ¿Lo que siento por ti o solo el hecho de sentirlo?

La castaña lo miró alarmada.

—Louis—pronunció su nombre, pero no supo exactamente que decir.

Suspiró observándolo para luego inclinarse sobre él y dejar un casto beso sobre sus rosados labios. Louis se sorprendió por su arrebato, pero no tardó en apoyarse sobre su codo izquierdo y con la mano derecho, tomó su mejilla y la acercó a él para besarla una vez más.

—Tengo miedo, es todo—musitó la castaña finalmente.

—¿Miedo? —Louis inclinó su cabeza a un lado con curiosidad.

Summer suspiró al sentir las caricias que dejaba el dedo pulgar del chico en su mejilla.

—¿No vas a dejarme cuando te recuperes de todo lo que está pasando verdad? —Louis la miró a los ojos fijamente. —Porque tengo miedo de que ya no te importe ni lo que diga, ni lo que haga, que ya no me quieras junto a ti.

—¿En verdad crees que podría alejarme de ti?

Ella inhaló profundamente.

—Tal vez sólo te sientes solo por ahora y como yo soy la única que quiere estar a tu lado, entonces tu...—su tono de voz fue disminuyendo a medida que hablaba.

Louis asintió lentamente. Decidió, entonces, enderezarse y sentarse frente a ella. Se cruzó de brazos y sonrió.

—Déjame preguntarte algo—ella asintió. —¿Recuerdas cómo era cuando comenzaste a trabajar?

Summer bufó.

—Un caramelo de ajo era más dulce que tu, gruñoncito.

El ojiazul sonrió aún más al escuchar el apodo.

—No pienso olvidar tus bromas, ¿la del polvo pica pica? Tuve que usar talco en todo mi cuerpo como por tres días seguidos.

—Sí, bueno, con respecto a eso...

—La vez que me echaste el café en la cara, el balde de agua fría sobre el ropero de mi camerino, la sal en vez de azúcar, el cachorro destroza camerinos, las frases molestas...

—¡Oye! ¡Eran muy inspiradoras!

—Y aún así—continuó sin prestarle atención. —Una parte de mí se mantenía ante la expectativa de cual sería tu próximo truco bajo la manga.

—¿Cuál es el punto, Louis? Porque lo único que estás ocasionando es hacerme sentir avergonzada y un poco mal, aunque nunca arrepentida eso sí que no.

Louis soltó una sonora carcajada.

—El punto mi pequeña traviesa, es que nunca me había sentido así por nadie, querer verte todas las mañanas, molestarte, reírme a escondidas de tus bromas, recordarte con ese brillo de maldad en tus ojos, incluso tu dedicación por hacer bien tu trabajo... Esas cosas no se olvidan, yo no podría olvidarte, no podría alejarme de todo eso.

Un ridículo puchero se formó en el labio inferior de Summer.

—¿Tienes idea de lo eufórica que me encuentro por dentro después de escucharte decir todo eso, Louis Tomlinson? —la castaña se arrojó sobre él y sinceramente, Louis no se sorprendió por aquel arrebato. Así era ella, directa y extrovertida. —¿Entonces en verdad te gusto?

—Me gustas muchísimo.

Louis mantuvo sus manos sobre la cintura de Summer que se encontraba casi en su totalidad sobre su cuerpo, mientras que ella colocaba un dedo debajo de su barbilla simulando estar pensando.

—¿Sabes qué es lindo?

—¿Tú estando sobre mi?

La chica golpeó el pecho de Louis con una de sus manos.

—¡Louis! —él no pudo evitar reír. 

—Bien, mon petit boxeur, dime, ¿qué es lindo?

—Escucharte decirme este tipo de cosas, porque no eres de los que halagan mucho o le dice cosas dulces a todos.

—Eso es porque desde hace mucho todos dejaron de importarme... hasta ahora.

Los ojos castaños de Summer brillaron con alegría, una pequeña risa nerviosa se escapó de sus labios.

—Eres tan lindo, Louis.

Apartó un mechón castaño que caía sobre el párpado del ojiazul. Él no pudo evitar ampliar su sonrisa.

¿Quién diría que sonreír se convertiría en uno de sus hábitos?

—Tu eres tan...—él negó lentamente subiendo su mano desde la cintura hasta la nuca de Summer. —Seulement.

"Única"

—Eres un tramposo—comentó ella riendo.

Louis sonrió y posteriormente impulsó su cuerpo para ahora ser él quien se mantenía sobre ella.

—Mon seul.

"Mi única"

Pasaron segundos, largos segundos en que lo único que hacían era mirarse a los ojos. Transmitiendo todo aquello, que sin necesidad de usar las palabras, hacían saber al otro.

—Mereces mil besos por hablar tan sexy en francés.

—Que sean mil uno, s'il vous plait

"Por favor"

—Eso sí lo entendí.

Y unieron sus labios una vez más entre risas traviesas y miradas anhelantes.

(...)

La felicidad es fluctuante. Es imposible estar feliz todo el tiempo porque si así fuera, el sentimiento en sí perdería su significado. La felicidad se resume en momentos, en circunstancias que te otorgan una enorme cantidad de alegría convirtiéndola en felicidad. No importa el momento, no importa su duración, lo que importa es el significado que tú le des.

Para Louis, relajarse y reír con Summer, así fuera por unos minutos, era encontrar la felicidad. Así fuera momentánea...

Quería compartir con ella... Estar con ella, pero no sabía cómo. Las revistas no tardarían en especular que tipo de relación mantenía con la castaña, y aún cuando había tratado de llevarla a lugares no tan públicos, estaba seguro que algún paparazzi ya los había cachado.

Esta vez no quería arruinarlo.

Suspiró tratando de disipar sus pensamientos observando a su castaña favorita tomar algunas fotos. Habían pasado tres días desde su último encuentro y la había llamado para verse porque realmente la extrañaba.

—Sunny, ¿Sabes qué recuerdo?

—Dime—murmuró ella intentando fotografiar a un pequeño pájaro sobre la rama del árbol donde Louis se encontraba apoyado.

—Que no me dijiste si también te gustaba.

Louis sintió su rostro arder en cuanto una atónita Summer bajaba la cámara para prestarle atención. 

—Estás bromeando, ¿cierto? 

—Solo me gustaría escucharte decírmelo—refunfuñó cruzándose de brazos y dirigiendo la mirada a otra parte. 

—Pero es que Louis, tú no me gustas—se sintió rígido y más al momento en que Summer colocó una mano sobre su hombro. —Tú me encantas—besó su mejilla y éste botó el aire que no sabía y había estado reteniendo.

El ojiazul gruñó. 

—Vas a matarme un día de estos. 

Summer rió en respuesta. 

En el instante en que la castaña volvió a su tarea. Louis escuchó el tono de llamada que diferenciaba a su madre del resto de las personas. 

Miró la pantalla por unos instantes. 

—¿No piensas contestar? 

—No—respondió luego de colgar la llamada. —No quiero que mi madre me arruine la tarde tan placentera que estamos teniendo.

La castaña observó con curiosidad como Louis soltaba un pesado suspiro mientras apagaba su celular. Se quitó la cámara que colgaba de su cuello y se sentó frente a él en el césped.

—¿Qué sucede entre tu madre y tú, Lou?—preguntó con voz suave acariciando los nudillos del chico. 

—Creo que mi mamá me odia, Sunny—sonrió, pero no fue una sonrisa grata ni mucho menos.

—¿Por qué dices eso?

—No creo, estoy convencido de que me odia desde que murió Sandra—se encogió de hombros. —Realmente cree que fue mi culpa, incluso estoy seguro que prefiere que hubiera sido yo en vez de ella.

—Louis...

—No siempre fue así, ¿sabes? Ella estaba orgullosa de mi y de lo que hacía, del éxito que había obtenido con arduo trabajo, pero luego del accidente ella comenzó a despreciarme—hizo una mueca. —Supongo que con Sarah es diferente ya que no solo no iba con nosotros ese día sino que es mujer, estoy seguro que recuerda a Sandra cada vez que la ve, eran muy parecidas.

—Sé que Sarah siempre insiste en que vayas a visitarlos, a veces solo se aparecía por el canal para pedírtelo.

—Lo sé, ella quiere que mamá y yo hagamos las paces, pero mamá no coopera y yo me desespero muy rápido.

—Entonces sí has intentando hablar con ella.

—Claro que sí, es mi madre y la amo—afirmó sin vacilar. —Pero ella ni siquiera soporta compartir el aire que respira conmigo—intentó bromear. —El abuelo ha considerado que es momento de que vaya al psicólogo, pero cuando le comentó no se lo tomó muy bien que digamos.

Louis levantó la mano que tenía libre de las caricias de Summer y agarró la barbilla de ella. La acercó a su rostro y le dio un corto beso. La castaña suspiró. 

—¿Recuerdas el día que comimos aquel pastel en mi camerino?

—¿El día que me obligaste a acompañarte para comerlo? —ambos sonrieron.

—Bastante que te gustó—la besó nuevamente. —Pues ese día era el cumpleaños de Sandra, mi madre no me permite pasar el día con mi familia—bufó. —Ni siquiera puedo ir al cementerio ya que de alguna manera ella se entera que estuve ahí y luego todo son gritos e insultos—se encogió de hombros. —Así están las cosas en casa ahora, desde hace tres años.

Summer acarició el cabello del ojiazul como tanto le gustaba hacer permitiendo que las palabras se asentaran entre ellos.

—¿Siempre estás solo, Louis?

—Todo el tiempo.

—Pues eso va a cambiar—él sonrió.

—¿Tu vas a hacer que cambie?—preguntó acariciando la nariz de la castaña con la propia.

—Si así lo deseas.

—Siempre—tomó su rostro entre sus tatuadas manos. —Deseo que estés junto a mi.

—Siempre.

Louis asintió y se acercó para besarla.

¿Cómo se había perdido del placer de hacerlo por tanto tiempo? 

—Por cierto—murmuró Summer colocando dos de sus dedos sobre los labios del ojiazul para frenar sus besos por un momento. —¿Recuerdas mi lista de pasos por hacer? 

Louis gimoteó alejándose del toque de la chica.

—¿Ese plan de todo son disculpas?

—Así es—asintió. —¿Te disculpaste a quienes despediste? 

—Hablé por teléfono con cada uno, y aunque algunos me mandaron a la mierda yo cumplí conmigo y mi consciencia. 

—Estoy orgullosa de eso.

—Sí, si, ¿podemos volver a los besos?

—Alto—alejó su rostro del de él. Louis bufó. —¿Qué hay con los accionistas? 

—No pienso ir ahí, y eso no tiene discusión.

Summer suspiró. Aunque no estaba de acuerdo, podía entender su reacción. Ellos no habían creído en él ni un poco, a pesar de los años de servicio y a que ya no era el mismo.

—Bueno, en ese caso solo nos queda algo por hacer.

El castaño frunció el ceño ante la enorme sonrisa que la chica tenía plantada en su rostro.

—¿Y eso sería...?

—Louis Tomlinson...

Lo besó cortamente para después decir: 

—Conseguiremos empleo.     

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Inicio esta nota diciendo que sus amenazas en el capítulo anterior me mataron de la risa, pero como eran demasiados no iba a ponerle a todos "JAJAJAJAJA". Pero sí, me divertí bastante leyéndolos jajajajaja. ¡MÁS DE 400 COMENTARIOS EN EL CAPÍTULO ANTERIOR! Mai Gah. Gracias♥ Ya entendí lo mucho que shippean Loummer y Souis, (ambos nombres de ship son cutes) jajajajajaja.

Bueno, el día de hoy les vengo a recomendar la serie más buena que van a ver en su vida. Se llama "Lucifer". Es una serie de fantasía, policíaca y con mucho humor negro del bueno. Se trata sobre Lucifer, mejor conocido como el diablo, el cual se cansa de trabajar en el infierno y es cuando decide subir a la tierra, mudarse a los ángeles y abrir un bar. No voy a dar más detalles para que la vean, es BUENÍSIMA. Si la ven y les gusta escríbanme al inbox para que fangirleemos juntos jajajaja. Los adoro♥

Ohh, tell me something I don't alredy know♪