04 - 誰の姓だと思うか
de quién crees que es la culpa?...
Cuando Jisung sintió su teléfono vibrar sobre la mesa soltó rápidamente lo que estaba haciendo y lo agarró. Sus manos estaban algo temblorosas por lo que casi deja caer el celular al piso.
Observó la pantalla.
Ah, solo es Felix.
Deslizó el icono de contestar y puso la llamada en altavoz para dejar el teléfono de nuevo sobre la mesa.
— Dime. — no hizo el más mínimo intento por ocultar la decepción en su voz.
— ¡Han Jisung! — se escucharon los gritos de Felix del otro lado de la línea. — ¡Eres un amigo de mierda!
— Yo también te quiero, Felix. — Jisung había vuelto a prestar atención al libro que estaba leyendo.
— ¿Cómo te atreves a estar ahí en tu casa tan fresco?
— Es domingo. ¿Qué más querías que hiciera?
— Preocuparte por tu amigo al que ayer dejaste solo en aquel antro de perdición. Esa es una buena idea. ¿No crees?
—¿Por qué habría de preocuparme por ti? Parecías estar divirtiéndote mucho con Minho...
— ¡No te atrevas a mencionarme ese nombre!
— ¿Que sucedió?
— ¡¿Que sucedió?! ¡¿Quieres saber qué fue lo que sucedió?!
— A ver, Felix. De verdad te noto un poco alterado. ¿En serio sucedió algo?
— Jisung, ese tipo, ese Minho...— Jisung pudo sentir como las sílabas de aquel nombre eran casi escupidas. — ¿Cómo pudiste dejarme a solas con él?
— ¿Minho hyung te hizo algo malo?
—¿Algo? ¡¿Algo?! ¡Mierda Jisung! ¡Espero que algo le haya faltado por hacerme!
— Felix, cálmate de una vez y no me grites más. Solo dime que pasó.
Del otro lado de la línea se escuchaba como Felix mascullaba algo entre dientes mientras parecía buscar las palabras correctas. Jisung le dedicó toda su atención esta vez. Felix no era del tipo de persona que se alteraba sin sentido y mucho menos con él que era su mejor amigo.
— ¿Dónde estabas ayer, Jisung? — le dijo finalmente, ahora sonaba un poco más calmado. — ¿A dónde fuiste cuando me dejaste solo con ese tipo?
— ¿Por qué preguntas eso? No cambies de tema, me tienes preocupado...
—Solo quería saber que era eso tan importante que te retuvo de salvarme.
Jisung entendía cada vez menos.
—¿Salvarte? ¿De qué? No des más vueltas y acaba de decirme...
—¡Salvar mi culo, imbécil!
— Pero ¿qué te pasó, por Dios?
— No, no me has entendido. Estoy hablando literalmente. De alguna forma ayer... yo... con Minho...
—¡No! ¡No te creo...! — Jisung se tapó la boca para ocultar una carcajada emocionada.
— Pues créeme.
— ¡Te acostaste con Lee Minho! ¡No puedo creerlo! ¡Puta madre de Dios!
— ¡La puta madre de Dios no tiene nada que ver con esto! ¡Es tu culpa!
—¿Mía?
— Sí, lo mires por donde lo mires es culpa tuya.
— Bueno... no me molestaría tomar él crédito por esa hazaña. — ya era más que obvio que todo el asunto era demasiado gracioso para Jisung.
—¿Eso es lo que vas a decir? Tu mejor amigo acaba de ser violado por un loco que tú mismo le presentaste y dices que no te molestaría tomar el crédito por la hazaña. ¿Te falta un tornillo?
— A ver, Felix, no fuiste violado. Estoy más que seguro que Minho no te obligó a hacer nada que no quisieras hacer. Además, en el estado en que te encontrabas ayer cualquier cosa te hubiera parecido buena idea. Y admítelo...— Jisung hizo una pausa significativa. —...Minho está bueno. Muy, muy bueno.
—¿Qué demonios te pasa? Está claro que si tu amigo esta borracho no le puedes dejar solo con un desconocido...
— No es un desconocido. Minho hyung es...
— ¡Me importa un carajo quién coño es! ¡Yo no voy por ahí follándome a cualquiera solo porque está "muy, muy bueno"!
— Pues deberías...
—¡No! ¡Yo no soy así!
— ¿Así cómo, Felix? ¿Gay?
Felix hizo una pausa. Sabía que Jisung también era gay. Nunca le había molestado el asunto, pero ahora sentía que debía escoger cuidadosamente sus palabras. El tema siempre es distinto cuando es tu culo el que está en juego.
—Tú me entendiste...
— Sí, lo hice. Lo que no logro entender es tu alteración. ¿Vas a entrar en pánico por algo así? Solo piensa en eso como tu primer rollo de una noche. Es verdad que también fue con un hombre, pero ya eso hoy en día no tiene importancia alguna. Cuenta como experiencia incluso...
— Aun así...
— No te preocupes tanto. Y piensa en lo que realmente importa.
—¿Y eso qué es?
El libro de Jisung ya yacía olvidado a un lado de la mesa, toda la atención del chico se encontraba centrada en aquella pantalla donde el cronómetro iba marcando los segundos.
—¿Cómo fue? ¿La tenía grande? ¿En qué posición lo hicieron? ¿Cómo folla? ¿Es bueno? Tiene que serlo. ¡Es Lee Minho, Felix! ¡Es el puto y jodido Lee Minho!— la emoción que había tratado de contener se desbordaba ahora a borbotones fuera de él. Aquello era simplemente demasiado jugoso. Nunca, ni en sus sueños más salvajes, había pensado que aquella situación que se había dado esa noche en el club, fuera a tener semejante desenlace.
—¡Jódete! — le espetó Felix para acto seguido cortar la llamada.
Bueno, al parecer, tendría que enterarse el lunes.
Jisung volvió a su libro aun con una sonrisa. Era increíble, definitivamente increíble. Le había presentado a Minho porque pensó que una persona así le levantaría los ánimos a Felix. Después de todo, Minho era un tipo divertido, nunca jamás hubiera pensado que las cosas iban a terminar así.
Sintió un poco de lástima por Felix, solo un poco. Su pobre amigo llevaba toda su vida con la misma chica, y ahora, de repente...
Se hecho a reír dejando caer la cabeza sobre la mesa.
Es que le daba demasiada gracia. Mientras se seguía riendo pensó que probablemente iba a arder en el infierno. Cuando dejó a Felix a solas con Minho, para ir a atender "otros asuntos" pensó que a, lo sumo, terminaría haciendo alguna locura en medio de su borrachera, pero definitivamente había subestimado a Minho.
Esto se lo tenía que contar a Jeongin.
Volvió a agarrar el teléfono y justo en ese instante le entró una llamada. Sus dedos se crisparon alrededor del aparato y su ansiedad lo hizo paralizarse por un segundo.
El contacto en la pantalla era lo que realmente había estado esperando: "Amigo sexy de Minho".
—¿Sí? — trató de no sonar impaciente, tal vez incluso un poco distraído, como si no llevara todo el día esperando esa llamada.
—¡Hola! — aquella voz sonaba incluso mejor que en su recuerdo. - ¿No me has olvidado, cierto?
Jisung hizo una leve pausa.
—Claro que no.
—¡Eh! Eso sonó como una gran mentira.
—No es cierto. — Jisung sonreía como un idiota, pero eso, por el teléfono, no se podía notar.
—¿Tan siquiera recuerdas mi nombre?
Jisung se quedó en blanco.
¿Su nombre?
Llamarlo "amigo sexy de Minho" estaba fuera de cuestión.
—Ahí sí me atrapaste. — dejó salir una pequeña carcajada que quiso sonar inocente.
Del otro lado se escuchó una risa mucho más sonora y sensual. Jisung se estremeció de pies a cabeza solo de imaginarse a aquel chico sonriendo así. Recordaba perfectamente que era guapo, muy guapo.
—Es Chan, lindo. Bang Chan.
¡Dios mío! Ya podía morir feliz.
Le había dicho lindo. Definitivamente aquel fin de semana iba a pasar a la historia.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro