Hola se que dije que iba a borrar esto, pero despues de la casi amenaza de varias personas decidi continuarla un poco mas, igual no falta mucho para que termine, espero no arrepentirme de continuarla, aqui les dejo un capitulo que ya tenia listo pero no me habia animado a subir, recen por que mi inseguridad no me gane de nuevo...

Aerin

Escucho una voz al fondo, me zumban los oídos y como puedo me sujeto de la mesa, el aire no llega a mis pulmones y estoy en medio de un colapso nervioso.

—Voy a sujetar tu nariz, no te asustes.

Siento una mano en mis fosas nasales y otra en mi boca, el pánico aumenta intento tomar aire y mis pulmones no seden, vuelvo a quedar respirar y sigo luchando con las manos en mis vías respiratorias, de pronto el me suelta y el aire regresa a mi cuerpo, su mano va a mi espalda y la empieza a sobar de arriba abajo.

—Listo ya podrás respirar normal, tranquila, Yoonie ya viene, vas a necesitar algo de azúcar.

Levantó mi vista y el dueño de la voz me sonríe de manera natural, me extiende una barra de chocolate, se que trabaja aquí, lo he visto en ocasiones.

—Hola, Aerin, mi nombre es Mark Tuan, soy el fotógrafo de la compañía, me asustaste creí que te ibas a desmayar.

Noté su ropa y tenía grandes manchas de café, en el suelo estaba tirada la bebida que ese sujeto me compró, sentí demasiada pena. El notó mi mirada a su vestuario.

—Descuida, se quitará con una buena lavada.

Tenía si camisa entre mis manos apretándola fuertemente, lo solté haciendo una reverencia.

—Perdón, Perdón.

—Tranquila o te hiperventilaras de nuevo.

—¡Rin!

Escuché la voz de Yoon y me gire a verlo, en cuanto se me acercó, lo abrace quería meterme a su pecho.

—¿Nena que tienes estás temblando?

—Solo...solo quiero irme a casa.

—Esta bien —el chico llamado Mark le dio mi mochila a Yoon —¿Le puedes decir a Carter que tuve que irme?

—Si claro sin problemas.

Salimos rápido de la empresa y nos fuimos a casa en todo el camino el no soltaba mi mano para nada, yo seguía con las palabras del sujeto en mi cabeza, si Yoon me llega a preguntar no puedo decir nada, porque no estoy segura del todo.

Al llegar a casa me fui a la habitación y me metí en cama, bajo las cobijas, Yoon se puso a hablar por teléfono en lo que dejaba las cosas en su lugar.

—Si, entiendo que no puedo dejar al Vernom así, pero espero entienda que fue una emergencia, su canción está casi lista, mañana temprano lo veo para mostrársela trabajaré desde casa hoy.

Me sentí mal, no quiero que tenga problemas por mi culpa, siento que es mejor ocultar el porque me dio un ataque de pánico.

Se metió debajo de las cobijas y me atrajo a su cuerpo.

—¿Quieres hablar?

Negué con la cabeza mientras acariciaba su barbilla, comencé besar esta misma.

—¿Tienes ansiedad no es así?

—Sabes que me ayuda.

Se puso encima de mi, y me besó con pasión, amo su aliento caliente, quitó su suéter y camisa al mismo tiempo, para después ir por mi ropa, jalo mis leggins y ropa interior, sus delgadas manos se pelearon un momento con mi camisa y sostén, el solo quedó en bóxer, sus labios me causaban cosquillas cuando besaba la piel interior de mis muslos.

—Eres preciosa.

Subió a mi boca y empezó a moverse simulando embestidas aún con la ropa interior, mientras besaba mi boca de manera salvaje.

—No me hagas rogarte Yoon.

—¿Por qué no? Me gusta escucharte.

—Anda, te necesito dentro de mi.

Lamí su oreja se que esto lo descoloca. Solo gruño antes de bajar su bóxer y entrar en mi, mis piernas se enredaron en su cadera y atraía más su cuerpo al mío como si quisiera que entrara más pero si tamaño ya me abarcaba por completo.

—Te amo demasiado.

—Yo también te amo Yoon.

Puede que no sea delicado al momento del sexo, pero nunca me ha lastimado, y se que nunca lo hará.

En la mañana desperté más relajada y con algo de dolor muscular, tenía las marcas de Yoongi en el cuello y pechos, el estaba dormido aún a mi lado su espalda está a roja las líneas llegaban hasta su lindo trasero abultado, me coloqué solo su camisa y fue directo a la cocina a preparar algo de comer.

Prendí la cafetera, mientras está comenzaba a funcionar, saqué de la nevera todo lo necesario para hacer unos sándwiches de queso y tomate. El olor a tabaco me llegó antes de sentir como Yoon me abrazaba por la cintura.

—¿Quieres que nos quedemos en casa hoy? —su voz ronca por la mañana y el aroma a menta y nicotina son algo que me encanta —puedo quedarme contigo todo el día.

—Tengo un examen más tarde —se separó de mi para dar una calada a su cigarrillo —Iré a la facultad para hacerlo y te veo en tu oficina.

—¿Te llevo?

Lo jalé del elástico de su pantalón hacia mi y le di un pequeño beso en los labios.

—Jk vendrá por mi, no te preocupes.

—Esta bien, iré a ducharme para desayunar juntos.

Después del desayuno Yoon se fue al trabajo yo me aliste para ir a la facultad, no tenía muchas ganas de hacerlo, pero este examen es importante y me he preparo toda la semana para ello. Recibí un mensaje de Jk que ya estaba afuera, tomé las llaves, mi mochila y corrí a la entrada.

—Hola cosa fea —me abrazo —¿Lista para tu examen?

—Si —me dio un casco — pensé que iríamos en tu auto.

—¿Con el tráfico? No llegaríamos a tiempo, mejor ponte eso y sujétate bien.

Me subí sujetándome de su cintura, aunque Jk es de una persona peligrosa a mi no me parece en lo absoluto, conmigo siempre es amable y me trata como una hermana menor, entiendo porque Jimin también lo adoro tanto, se de lo que es capaz pero también conozco su lado bueno.

Llegamos a la universidad rápidamente, cuando me baje de la motocicleta, primero miro a su alrededor antes de ayudarme a quitarme el casco, asegurándose que no hubiera nadie de la prensa descubrió mi cabeza y ayudo a acomodarme el cabello.

—Estas lista, te esperare, iré a comer algo por aquí cercas, se que no tardaras tienes cara de ser muy lista, así que no te diré que tu puedes, porque seguro ya lo sabes.

—Gracias Jk, te marco apenas salga.

En cuanto entre fui a la dirección, vi a una señora sentada detrás de un escritorio se veía algo aburrida, cuando me acerqué me sonrió amablemente.

—Buenos días, soy Park Aerin, soy alumna en línea y vine a presentar unos exámenes.

—Buenos días señorita, creo que el director ya la esperaba, ¿Trae sus credenciales?

—Si, aquí tiene.

Tomo mis credenciales de estudiante, se levanto para ir a una oficina al fondo, espere un poco sujetando mi mochila, escuche que alguien más abrió la puerta, mire hacia la entrada y era un chico pelirrojo de ojos azules que me sonrió de manera tímida.

—¿Disculpa? —hablo en un inglés nativo —¿Sabrás donde esta la secretaria?

—Si, ella esta en la oficina del director —mi mal acento lo hizo sonreír un poco más, pero al menos me entendió.

—No te había visto por la facultad, ¿Eres nueva?

—Puede decirse, soy alumna en línea.

—Ethan Marshall, un placer —me extendió la mano.

—Supongo que debo presentarme como aquí, Aerin Park —estreche su mano.

—Oh espera creo que, si se quien eres, tomaras el examen junto conmigo, se supone que lo tomaría en clases normales, pero me operaron y me dieron oportunidad de presentarlos hoy.

—Señorita Park —el director salió y observo al pelirrojo aun lado mío —señor Marshall que bueno que llego temprano también, el aula ya esta lista —camino —síganme por favor.

El joven Marshall se me quedaba viendo demasiado, me hizo sentir algo incomoda, no parece ser un mal tipo, pero sigo sin acostumbrarme al contacto con otras personas, cuando llegamos al aula nos sentaron algo separados, en lo que llegaba el profesor encargado el estaba mandando mensajes, yo puse en silencio mi teléfono y preparé mis cosas.

—Si eres más bonita en persona.

—¿Disculpa?

—Las fotos con White Snake no te hacen justicia, eres muy bonita.

Antes de que dijera algo entro el profesor, nos comenzó a dar los exámenes y decirnos el tiempo que teníamos para realizarlos, gracias a que no hago otra cosa mas que estudiar en el trabajo de Yoon, me fue muy sencillo realizar los dos primeros, los entregue antes de que se acabara el tiempo y agradecí al profesor saliendo del aula, saque mi teléfono para avisarle a Jungkook que ya había terminado, cuando mire tenia varias llamadas perdidas de él.

Le marque de inmediato.

—Por fin contestas, peque no salgas del edificio, la prensa esta afuera, no se como se enteraron que estas aquí, fui por mi auto para sacarte por atrás, dile al director por favor que te ayudé al acceso del estacionamiento del profesorado.

—Está bien.

Colgué y corrí con el director, que ya estaba al tanto de la situación.

—Quiero pedirle una disculpa, no se como se enteraron que tendría su examen hoy.

—Mi guardaespaldas entrara por el área del estacionamiento —no diría que mi mejor amigo mafioso vendría por mi —¿Puede tener acceso?

—Claro, venga el acompaño.

Íbamos camino a la salida cuando el pelirrojo nos abordó.

—¿Ya te vas? Quería pedirte una foto, en cuanto les dije a mis amigos que estabas aquí no me lo podían creer.

—¿Usted aviso de esto?

—La verdad no creía que la prensa fuera tan rápida.

—La señorita Park, no puedo someterse a situaciones de estrés, ¿Cree que lo hace solo por capricho?

—Lo siento, yo no, yo no sabía.

—Descuide director estoy bien, él no lo hizo con mala intención.

Seguimos con el trayecto, Jungkook ya estaba esperándome dentro del estacionamiento, me ayudo a entrar al auto; me paso un cubrebocas y unos lentes, salimos rápidamente del lugar, apenas nos alejamos me quite el cubrebocas.

—No se como Yoon puede lidiar con esto.

—Mas con lo amigable que siempre ha sido.

Ambos sonreímos sabíamos las caras que siempre hace ante las cámaras, se queja mucho cuando algún paparazzi lo caza, ahora yo debo de tener cuidado también con estas cosas, porque me abrumo demasiado apenas veo una cámara.

Llegamos al edificio donde trabaja Yoon y me quedé un rato observando, en eso vi entrar a Vernon mis ojos se abrieron demasiado y sentí que la boca se me secaba de nuevo.

—¿Rin? ¿Qué sucedes?

Miro en la dirección que yo tenia la vista fija y observo a Vernom, me tomo de la mano atrayendo mi atención.

—¿Lo conoces del pasado?

Agite mi cabeza de manera negativa, pero seguía sin dejar de temblar.

—Puedes contarme.

—Es que no lo recuerdo —mis ojos se aguaron —el conocía a Bosco, y menciono algo...

¿Qué pasara si le cuento a Jk lo que me dijo?