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Seungmin corría lo más rápido que podía. Ese día el había visto en las noticias que iba a llover mucho pero aún así se le había olvidado su sombrilla. El es así, siempre se le olvidaba todo por andar atrasado a los lugares y en ese momento iba corriendo a casa. Recientemente había salido de su última clase de la Universidad, el problema es que cuando salió no estaba lloviendo y ahora llegaría a casa empapado.

Lo bueno es que ya vivía solo. Hace un par de meses atrás le había dicho a sus padres que le gustaría vivir solo y sus padres se lo permitieron, ya que siempre obtenía buenas notas en la Universidad. Así que al llegar a casa no tendría a nadie regañándolo por haberse mojado.

En ese momento dobló la esquina que daba hacia la cuadra donde estaba su apartamento. Cuando a lo lejos vio una caja con una tela negra por arriba, pero no le prestó mucha atención y siguió corriendo. Al fin, pudo llegar a su edificio así que se dedicó a esperar el ascensor. Una vez en su departamento, sacó todo lo de su mochila en la mesa separado para que se separa. Hoy nada más le habían dejado una tarea, pero esta era un poco larga, así que se dio un baño, puso la ropa mojada en la secadora y se dispuso a hacer la tarea para comer un bocadillo de algo en su frigorífico de vez en cuando hasta la hora de dormir.

Al día siguiente, se levantó como siempre a las 6.30AM. Se arregló para ir a la escuela esta vez si recordó llevar su sombrilla, al llegar a la escuela se encontró con su  mejor amigo Félix.

- ¿Terminaste la tarea de fisiología? - preguntó Félix con el pelo revuelto seguro por venir corriendo. Félix tenía mucho deseo de seguir durmiendo por la mañana por lo cual se levantaba más tarde que Seungmin y al final terminaba corriendo hacia la Universidad.

- Si, la terminé ayer - dijo Seungmin - Estaba un poco difícil de terminar per lo logré - terminó de decir con una sonrisa en los labios.

En ese momento, se escuchó el  timbre para ir a las clases y los dos amigos se despidieron porque a primera hora tenían clases por separados. Después se volvieron a encontrar para la hora del almuerzo.

- ¿Te gustaría ir  a ver una película hoy en mi apartament? - dijo Seungmin - Tengo muchas películas en mente, este me salieron 4 que me gustarían ver -

- Oh, ¿Enserio? Me encantaría, pero mi madre quiere que la ayude a pintar la cocina y no se si me permita. Ya lo he evadido mucho - dijo Félix apenado con la cara un poco roja de la vergüenza.

- Oh esta bien, será la próxima vez entonces - dijo el contrario.

Seungmin Pov: 

Después de eso, fuimos a nuestra siguiente clase. El día estaba muy húmedo para hacer ejercicios, por lo tanto creo que no iré hoy. Cuando se acabaron las clases me despedí de Félix y me dirigí a casa. Es increíble de que ayer estaba lloviendo tan fuerte mientras que hoy está muy caluroso. Pensé  

Otra vez iba caminando por la esquina de ayer y me di cuenta que la caja con la teja negra todavía seguía ahí. Fui a mirar que había ahí para encontrarme con unos ojos cafés mirándome asustados. Era un gatito.

- Hola gatito... No me tengas miedo, ¿Tienes dueño? - le pregunté como si fuera a responderme. El  gatito estaba delgado, parecía como si no hubiera comido en días.

El gatito maulló en respuesta. De seguro que no tenía dueño, estaba desde ayer ahí y probablemente desde antes solo de que yo no lo había notado seguro. Agarré al gatito quien temblaba, de seguro del miedo, y lo lleve a mi apartamento. Al llegar lo puse un momento en el piso para dejar todas mis cosas en la mesa. Lo volví a agarrar y fui a mi habitación.

- Estas un poco sucio, a lo mejor es empezar con un baño - el gatito me miró y sentí sus ojos cafés  eran como un agujero negro que te atrapaban y no te dejaban ir nunca. Me dirigí al baño con el gatito en brazos y lo puse en el lavamanos. Aún se veía asustado.

 Así que lo empecé a bañar. El se quedó quieto por el cual agradecí pero a veces soltaba pequeños sonidos lastimeros. Después lo envolví en una toalla limpia y lo sequé lo mejor que pude. Ahora si podía ver bien su pelaje. Era blanco, muy blanco. Al parecer el gatito se dio cuenta de que lo estaba mirando mucho así que maulló. Qué tierno. Pensé.

- De seguro debes tener hambre... - le dije. Me puse a pensar y me di cuenta de que no tenía comida para gatos en mi apartamento.- Voy a salir un momento para comprarte comida, no te vayas enseguida vuelvo - le dije como si el pudiera entenderme. Me puse mi abrigo y salí.

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Hola a todas/os ¿Cómo están? Aquí les traigo una nueva adaptación, @dalitamillet, la historia original la podrán encontrar en la cuenta de esta bella persona que me dejó escribir su historia     :'3 

¡Bueno, nos vemos en el siguiente capítulo! ¡Adiós!