Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 6

La fiesta
🎼🦎🌻📝🍎🍑🍓

Todos desde temprano se encontraban alistando todos, listos para la fiesta de la mayor de las nietas madrigal.

Siendo Camilo el primero en despertar solo para espera su carta desde temprano, ansioso.

Hola Camilo.

Te soy sincera, yo digo que le gustas a tu amiga, pero conociéndote eres un poco ciego para verlo, y quizá por eso está molesta, deberías de hablar con ella.

Es como... Cómo lo que tengo yo, tú me gustas, y lo sabes, pero poco a poco las cosas pueden ser más fáciles, si tú no me miras es más fácil para mí actuar naturalmente, ser yo antes ti.

¿Tu crees que sea dulce como un pastel?.

Espero verte más tarde.

Pdt: mi animal favorito es el camaleón.

Con cariño
🦎__🌻

No era totalmente la respuesta clara que esperaba, pero era una respuesta, respondiendo a la carta con unas simples palabras como las que eran.

«Eres tan dulce como un melocotón y un pastel de chocolate. Te veo más tarde.

Necesitaban dejar descansar a esas aves que hacían el favor de mandar al menos  seis cartas de parte de uno solo al días, es decir mínimo doce veces esas aves volaban sin descanso solo para llevar las cartas de un niño que comenzaba gustarle cómo es que llegaban cartas, una tras otra.

—¡CAMILO BAJA AHORA!—. Grito su madre con furia.

¿Que hacía tan temprano su madre despierta? Y porque ella le regañaba tanto...

Apenas amanecía y ya estaba viendo brutalmente regañado, sin saber motivo o razón.

Pobre la vida del mártir Camilo quien bajaba por las escaleras de mala gana y un ligero dolor sobre sus piernas.

Las flores, las familias corriendo de un lado a otro, su padre sobando el brazo de su esposa quien de una nube sobre su cabeza lanzaba rayos.

—¿¡PORQUE TE HICISTE PASAR POR ANTÓNIO!?—. Grito Pepa.

¿En verdad se enojaba por eso? El todos los días se transforma en alguien, incluso en ella, y solo por esa vez se enojaba.
No entendía ¿se estaban volviendo locos todos o que?.

___ apareció por un momento en su vida y todos se alteraban como cuando eran niños, indignado este le miro, sin responder.

—¡TE PROHÍBO QUE VUELVAS HACER ESO! SI NO FUERA PORQUE ___ VINO A NOCHE HABLAR CON NOSOTROS TU Y TU HERMANA ESTARÍAN CASTIGADOS UN MES POR SALIR SIN DECIR NADA A NADIE!...

—¿___? ¿___ vino a casa? Fantástico ¿ALGUIEN MAS SABE SI ELLA VIENE A CASA? ¿PORQUE NADIE ME DIJO?

—viene dos o tres veces a la semana, suele encerrarse en el cuarto de Luisa para hablar, y ahora que Camilo tiene su habitación también lo visita—. Hablo Isabel dejando aún más flores por todos lados, quería que el cumpleaños de su hermana luciera hermoso.

La desilución de que todo mundo sabía que fueron amigos, que su separación le había afectado meses y un poco más de un año y nadie le dijo nada.

Ella se había pasado por su casa no una ni dos, si no varias veces por muchos años, entendía que el al inicio la ignoro, incluso en el día del gran don de Antonio la había ignorado cuando está había saludado, pero vamos ¿No decirle algo como eso?.

Pepa le miro con una nueva triste.

Pero no importaba, ____ ya era punto y aparte en su vida, ella no quería que el formará parte de su vida entonces el tampoco, y ahora tenía una nueva amiga, una con la que hablaba tanto que no escribir para ella le resultaba raro.

Todos los preparativos estaban casi listos, la comida, la noche especial de su prima, el pueblo poco a poco llegaba, las mejores ropas de Camilo puestas en el, los rizos alocados ligeramente arreglados con una sonrisa saludando a los invitados que llegaban.

Muchas chicas llegaban, muchas de ojos y cabello oscuro, café, muchas de su edad, pero ninguna se notaba nerviosa al saludarlo

¿Es acaso que la chica misteriosa aún no llega? ¿O quizá era que ella ya llegó y no se dió cuenta?

Un suspiro pesado mientras él seguía saludando a los invitados, y como se dió a conocer la noche anterior, ___ llegaba caminando con un porte lleno de gracia.

El vestido en tonos cálidos, realmente fino, ceñido como para poder ver la forma de su cuerpo, capaz suaves en su la falda de este, girasoles por todos lados y discretos camaleones.

Mechones de su cabello callendo por su hombro bajando por la parte delantera dejando demostrar lo largo que su cabello había crecido en ese tiempo.

Y esa sonrisa, necesitaba admitir que extrañaba verla sonreír, trayendo buenos recuerdos, unos lindos y agradables recuerdos.

Quería saludarla, muy internamente quería hacerlo, pero su gran ego se lo impidió, concentrándose en otras personas.

Dentro de la casa madrigal y dentro de la habitación de dolores la fiesta se volvía a lo grande, todo el pueblo se encontraba allí con gusto, con gozo, bailando y comiendo sin parar, tragos y pastelitos.

Los primos gozando de una plática agradable con el tío Bruno que, a pesar de que el tiempo paso aún no terminaba de estar completamente cómodo con las personas que una vez lo habían rechazado.

—Pero miren quien está aquí, es la cumpleañera, y el resto de los Madrigal, buenas noches señor Bruno, chicos... Camilo...—. La voz de ___ aún se escuchaba suave y armoniosa a pesar del que se notaba el enojo, la incomodidad.

No quieran mucha tensión en un lugar así, poco a poco se fueron retirando quedando solo con dos Madrigal, Luisa y Camilo, quien este último no hablaba, pero si quería comprobar la teoría de su ahora amiga a quien buscaba de vez en caminando con miradas vagas por allí.

—Te vez linda Luna mia—. Hablo finalmente Camilo tomando la mano de la chica, no, sus palabras no eran coquetas, no quería que fuera la intención.

—¿Cuando dejaras de ser así Camilo? Un día confundirlas a una chica y todo te saldrá mal—. Respondió ___ mirándolo con reproche.

Cuánta tensión, cuánta incomodidad, ni siquiera Luisa que se consideraba buen amiga de la chica soporto mucho eso, dejando como escusa que necesitaba ir por más barriles, la idea era hacerlos hablar y que se reconciliaran, si es que eso podía ser posible.

—Y.... ¿Cómo estás? Oye... ___ fuiste mi amiga ¿Crees que pueda hacerte una pregunta?

El seño fruncido, los brazos cruzados y la mirada fija en el chico que jugaba con algo que tenía bajo su ruana aceptando sin hablar a la pregunta.

—Hipoteticamente hablando, tu tienes una amigo con el cual te hablas todos los días por cartas, pero no se conocen, ni siquiera saben cómo se escuchan, pero ese chico dice algo como no se... Me gusta tu mirada felina o la manera en que tu cabello cae por tu hombro... ¿Cuenta como coqueteo?, Me imagino que tú has tenido novio ¿No? Y sabes de eso, porque, eres linda, quizá alguien ya se fijó en ti... A lo que voy es... Cómo se que está coqueteando.

Una risa nasal, tenía mucho sin oírla

—Eres un tonto Camilo Madrigal, si yo fuera esa chica misteriosa y te dijera que me gustan tus rizos y la manera en como arrugas la nariz cuando las cosas no salen como quieres podría decir que estoy coqueteando contigo.

—Como sabes que es una chica misteriosa ¿Quien te lo dijo?

—En verdad eres tonto... ¿Bailas?...

Era un gran paso a la reconciliación, pero como siempre la torpeza ganaba a la razón, siendo rechazada por el chico, quien esperaba con ansias a la chica con la que se escribía, tenía la esperanza de verse finalmente, de conocerse y finalmente escuchar su voz.

Buscando desesperadamente con la mirada, y el pequeño peluche de camaleón entre sus manos, algo que llamaba la atención de ____ dando un color rosado en sus mejillas.

—Vamos a bailar, anda, no creo que tu novia se enoje si bailas aunque sea una canción.

No, la respuesta seguía siendo no buscando a esa chica una y otra vez desesperado, estaba claro que no habría reconciliación pronto y que la prioridad de Camilo era ver a esa nueva chica que había aparecido en su vida.

Pero dejando aún más en claro a su familia que podía ser tan torpe.

—Ven—. Dijo ella con un tono suave sin mirarle a los ojos, sujetando su mano con cuidado, escabullendose a la cocina.

Dónde incluso allí el chico no dejaba de protestar por querer volver.

—Sientate—. Pidió con amabilidad.

No había ni una sola burla, ni un golpe, ni nada, solo cuidando ese tono de voz suave —Se que tu tía puede curarlo tan rápido como comes, pero esto también te hara bien.

Continuó sacando hielo y un trapo haciendo una compresa improvisada, inclinándose frente a el pidiendo extendiera sus piernas.

Los tobillos rojos y ligeramente hinchados.

—¿Recuerdas cuando robabas pastelillos?—. Pregunto Camilo en un intento de dispersar la tensión y ese silencio que no le gustaba en lo más mínimo.

—Como olvidarlo, mamá me prohibió verte porque dijo que me meterias en problemas...

—Y aún así me veías por las noches, siempre fuiste tan sigilosa como la Luna, ¿Puedo preguntar algo? ¿Porque esa vez me dijiste que no querías ser mi amiga más y después te fuiste? Yo aún quería ser tu amigo...

Se enfoco en esa cabellera oscura que presionaba suavemente el hielo, sin mirarlo a los ojos, dejando en claro que ese era el problema, y que cuando creciera se daría cuenta de que había hecho mal.

Tanto ella como el.

Todo parecía estar bien, aunque no cruzarán palabras, mientras ____ se veía perdida en su propio pensamiento Camilo se notaba curioso, mirándole desde esa posición, extrañaba a su amiga, de eso no cabía duda, y eso le hacía más difícil mantenerse concentrado en su nueva amiga, que, ahora que lo analizaba, le daban la misma vibra, como si fueran la misma persona, la comodidad que estaba sintiendo era la misma que con la chica con la que se escribía a diario.

—Tengo que irme a casa Camilo, ya es hora.

Hablo después de un momento en pleno silencio de nuevo, levantándose frente a el sin expresión diferente a la de nostalgia, tristeza y decepción —Ve y busca a tu chica...

—Toma—. Contesto dejando la ruana que llevaba puesta sobre la chica, colocándola con cuidado —Siempre enfermaba de niña y puede que haga un poquito de frío durante el camino, se que mi tía puede curarte pero... Es mejor no enfermar desde un inicio, si sabes a lo que me refiero yo... Fue lindo hablar contigo de nuevo, ve con cuidado ¿Si?

—Si.

Respondió mirando la ruana y a Camilo marcharse alegre en búsqueda de su nueva amiga, dejando a una ___ sonrojada y arrepentida de los estaba haciendo.

Lo mejor era decirle la verdad ¿Pero cuando? .

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro