Desperté, enferma. Me dolía todo, sobre todo la cabeza. Me alarmé al notar que NO era mi habitación. Traté de pensar bien las cosas que sucedieron anoche. Uff, ¿qué no pasó?

No puedo recordar,  todo lo que ocurrió después de aspirar... ¿harina? Oh, pero qué idiota soy, no era harina. ¡Era cocaína! Me cago en...

Giré la cabeza unos noventa grados y me dieron ganas de lanzarme por la línea del tren al ver que estaba durmiendo en la cama de Kirk.

Es decir que él y yo... ¡Oh dios mío! No, si ya con violar a Lars ayer fue algo que contradecía todos mis principios morales, ¡ésto lo empeoraba todo!

 Me daba un ataque de pánico saber las cosas estúpidas que hice... ¡y todo porque Lars no me quiere y para consolarme me puse a beber! 

Miré para el otro lado, en la mesita de noche, había una boleta de compra. La cogí y era de... ¿un sexshop? ¿Qué mierda? Según la fecha de la boleta, decía que la compra fue efectuada en la madrugada de hoy. Es decir, mientras andaba drogada...

Al levantarme, noté que no estaba cien por ciento desnuda. En realidad, seguía en la cama, pero sentada. Había un extraño bulto entremedio de mis piernas que estaba siendo tapado por una manta. Al moverla hacia atrás, me traumaticé porque era verdad eso de que no estaba al cien por ciento desnuda, estaba usando ropa interior, sí, ¡pero no era la mía! Osea... ¡Tenía adelante un enorme pene de plástico!

A un costado, había como un contenedor de baterías pequeñas y un interruptor que estaba en "off". Al presionar la opción "on", ¡la cosa de plástico se ponía a vibrar!

Me asusté tanto que lo apagué de inmediato... traté de razonar un poco al respecto con ésto. No podía recordar absolutamente nada sobre un sexshop o haber tenido relaciones con Kirk.

Eché un vistazo a Kirk, que estaba completamente desnudo y durmiendo boca abajo. No más por curiosidad, lo destapé para darme cuenta de que... 

¡Ésto me da impotencia sexual! ¡Kirk tiene más culo que yo! Y para rematar, lo tenía todo rojo y MIS manos estaban marcadas ahí.

¡Mierda! Seguro andábamos tan drogados que nos confundimos y... ¡él creyó que era mujer y yo hombre!  No más lo miro a él y me doy cuenta de que fue una noche loca.

Me cuestioné muchísimas veces si es que él recordaría algo de lo que ocurrió. 

Mejor me levanto y me voy para que nadie más se entere de ésto. Sí, que sea un secreto.

Retiré aquella extraña ropa interior y me puse lo que traía puesto ayer.

Entretanto me vestía, observaba el entorno... me fuí a la mierda.  A un costado de la cama, había un estante, con algunas cosas de Kirk acomodadas de forma desordenada, excepto por UNA cosa.

Era un simple oso de peluche que cargaba un corazón bordado que decía "te quiero, mejor amigo". Ok, nada malo con ésto. Hasta que, al notar que era el único objeto ordenado. Lo examiné un poco superficialmente y...

Había una pequeña luz en un ojo del peluche. Me acerqué al mueble en dónde se encontraba y mi descubrimiento fue mayor...

¡Era una puta cámara!

En momentos como éstos es cuando me da un ataque de ira -de esos que te dan cuando te llega la regla-, y una vez ya estando vestida... desperté a Kirk con un enorme golpe en la cabeza.

- Ahhhh -rezongó él, despertando, me miró y continuó, a su vez que me miraba con cara de culo-, ¿qué pasó, mami?

- ¿"Mami"? ¿Cómo que "mami"? ¡Hijo de puta! ¿Crees que no me entero de nada?

- ¿Ah? -abrió los ojos como platos cuando me vio bien- ¿Devvorah? ¿Qué haces aquí? -trató de sentarse en la cama y gimió de dolor, optó por quedarse acostado- ¿Qué mierda pasó anoche?

- ¡No te hagas el tonto! Tú lo sabes muy bien.

- ¿Acaso tú y yo...?

- ¡Te follé, joder, te follé! -él se asustó cuando le enseñé el objeto bizarro ese.

- Con razón me duele tanto el...

- ¡Kirk! -continué gritando.

- Uhh... no me grites que me duele todo.

Rodé los ojos.

- Deja de cambiarme de tema y dame explicaciones.

- ¿Explicaciones de qué? -bostezó, se sentó con lentitud en la cama y la cara de adolorido no se la quitaba nadie- No era mi intención que ocurriera todo ésto, lo siento.

- ¿No lo era, ah? -sonreí de manera cínica- ¡La cámara, hijo de puta! ¿Crees que no me dí cuenta? -la señalé.

- Ahh... ¿qué? -se levantó y caminó hasta la repisa, tomó el oso de peluche y dijo- ¿Ésto? Es un osito, ¿te gusta? -sonrió, así como haciéndose el tierno.

- ¡Tiene una cámara, idiota! Si es el único objeto de la puta habitación que esté ordenado JUSTO para que nos grabara haciendo ESA cosa que hicimos, ¡es obvio que lo planeaste!

- ¿Cámara? Hmm... nah, es solo un osito -insitió, luego me lo puso en la cara- ¿A qué no es lindo? -negué- ¡Me lo regaló Gary cuando salí de Exodus! Vamos, admítelo, es un osito muy lindo.

- ¡Métete el oso por el culo! 

- ¡No me cabe!

- ¡Si te cupo el consolador ese, demás que te cabe esta mierda! -lo tomé y se lo lancé en la cara, era un peluche, el golpe de todas formas iba a ser suave- ¡Lo planeaste todo! ¡Y acomodaste el oso ahí para que nos grabara! ¡Ya lo sé todo!

- Ehh... insisto, es solo un osito que me regaló un amigo llamado Gary. Te juro que yo no he planeado hacer nada.

- ¡Mis pelotas! -crucé los brazos y caminé por la habitación de hotel hasta que llegar a la puerta, él me siguió- ¡Cómo me entere de que te la andas jalando con ese vídeo juro molerte a golpes!

- Pero... -salí de allí y di un portazo.

Y para rematar, me encontré con Alan, al igual que yo, con resaca.

- ¿Qué haces saliendo de la habitación de Kirk? -qué pregunta más idiota.

- ¿En serio quieres saber qué pasó? -asintió, yo suspiré y lo abracé buscando consuelo- él y yo...

- Dejaste que te la metiera, ¿cierto? -susurró para que nadie más escuchara.

- Él no, yo a él, sí.

Me soltó y me miró traumado.

- ¿QUÉ? -eso fue ya casi un grito.

- Shhh... no tan fuerte, idiota... -suspiré-, no preguntes cómo fue que pasó porque ni yo lo sé.

- Oh, bueno... me lo imaginé y estoy traumado de por vida.

- ¿Prometes guardar el secreto? No quiero manchar mi nombre como artista con una cosa así de bizarra, ni pensar que... Ewww, solo promete guardar el secreto, please.

- Claro, puedo mantener lo de que eres ilegal, podré mantener que... Eww, fuchi. Sí, es algo bien asqueroso.

- Bueno... ¿qué haces levantado a estas horas? -traté de cambiar de tema.

- Devvorah... ¡Son las dos de la tarde! -exclamó- ¿Por qué crees que estoy hasta cambiado de ropa? Aparte... ¿no te acuerdas de la propuesta de James?

- ¿Ah? ¿Qué?

- Ah, claro, fue cuando te fuiste a darle el besito de las buenas noches a... ¿Lars? 

- No, no pasó nada ahí, relájate -mentí.

- Bueno, resulta que en tu ausencia, James, propuso que fuéramos a almorzar todos juntos a un restaurante a las tres... y bueno, me levanté porque oía gritos de una discusión... aunque los demás también estaban levantados, deben andar por ahí... excepto ustedes dos. Joder, ¿ a qué puta hora se fueron a dormir? -me encogí de hombros.

 - ¡Qué no sé que mierdas pasó!

- Oh, lo siento... -se sonrojó un poco, se rascó la cabeza y su vista se dirigió al suelo, observando sus zapatillas sucias mejor dicho- a las tres nos juntamos todos a la entrada del hotel para ir al restaurante, ¿sí?

- Bueno... -hice una mueca- allí estaré...

- Oye -me tomó del brazo con delicadeza-, tranquila, sé que debes sentirte terrible por todo lo que pasó... pero no te preocupes, nadie más se enterará. Tú... te recomiendo que te des un baño si anduviste haciendo cosas, ya sabes, fluídos y otras cosas deben estar en tu cuerpo.

- ¡Eww! -grité más fuerte de lo que creí que iba a ser- Me va a entrar alergia si no me quito los... "hijitos" de ese nigga, vaya a saber a dónde se habrá corrido este hijo de... ¡Eww!

- Ok -rió-, recuerda, a las tres en la entrada del hotel.

- Allí estaré -forcé una sonrisa sobre toda mi preocupación.

Gracias a dios que no perdí la llave de mi habitación, la había dejado adentro de uno de los bolsillos de mis pantalones. Entré y apenas cerré la puerta, lancé la peluca a la mierda al igual que mi ropa.

 Una vez adentro de la ducha, terminó de salirse mi maquillaje y otras cosas que no quiero nombrar que estaban en mi cuerpo... me sentía terrible, varias razones existían:

No existe oportunidad de que Lars me ame, me acosté con él y con uno de sus amigos. ¡Ewww! Es decir, yo siempre he sido el tipo de persona que piensa: "virgen hasta el matrimonio", con cosas como éstas, ni modo, mejor ni me caso.

Es decir, recién es el primer concierto y ocurre todo ésto. Y tenemos conciertos hasta el próximo año. Dios mío, ¿qué más puede pasar?

El tema de la cámara, tal vez, sea lo que más me preocupa. No confío para nada en la palabra de Kirk, no. Es decir, estoy segura por completo de que estaba ahí puesta la cámara para grabar. Él lo había planeado todo... me hizo pensar aún más lo que Gary dijo sobre regresar... no es que yo esté rebuscando demasiado el caso, sin embargo, que Gary le haya regalado ese peluche con cámara a Kirk para ponerlo en ese lugar JUSTO para grabar una escena como esa... algo no me huele bien aquí.

Al salir de la ducha, al ser un clima más templado, opté por vestir unos pantalones acampanados, una camiseta del grupo L7 y evité usar camisas de franela hoy. Preferí una chaqueta de cuero y la dejé abierta... haber si alguien notaba un repentino cambio de mi estilo. Y con "alguien", me refiero exclusivamente a Lars. 

Oh, por favor, ¡que se fije en mi hoy!

Estoy remotamente obligada a llenarme la cara de maquillaje sobretodo ahora que estaré siempre cerca de Metallica, ya saben... paparazzis y otras mierdas.

Una vez terminado de arreglarme, vi la hora y ya quedan diez minutos paras las tres.

Guardé las llaves de la habitación en uno de los bolsillos delanteros y salí de la habitación, teniendo TAN "buena" suerte que choqué con Lars apenas salí.

- Uh, l-lo siento... -musité demasiado nerviosa- no te vi...

- ¿Devvorah? -me miró y sonrió, haciendo que de inmediato todo el calor se me subiera a las mejillas-, no esperaba verte por aquí, creí que ya estabas abajo con los de tu banda.

- Ehh... me quedé dormida -dije súper rápido-, recién he terminado de... eh... -comencé a bloquearme y no sabía de qué mierdas estaba hablando- yo... ah...

- Entiendo -interrumpió-, yo llevo despierto de hace muucho rato. Por cierto, lo de anoche...

¡Mierda! ¡Me descubrió!

Sentí de inmediato la falta de aire, comencé a hiper ventilarme. Desesperada por obtener oxígeno, él continuaba con el suspenso, y mis ganas por querer morirme aumentaban.

- S-s... -ni siquiera es eso una palabra o algo, era como si imitara a una serpiente, la voz no quería salir- s...s...

- ... me contaron que eres... lesbiana.

¡Mierda, que casi me cago!

- Oh, ¿e-eso? Es... ¡es mentira! Sí, mentira, a... a mi me gusta... me gusta un chico -forcé una sonrisa y terminé riendo como estúpida.

- Ah... -frunció el ceño, a su vez que apretaba el puño- Puto Jason, él andaba diciendo que lo eras. Que bueno que he preferido primero preguntarte antes de mandarme alguna otra cagada... no es que si lo fueras te odiaría ni nada. No es que... -se quedó en silencio, yo le observé maravillada- Olvídalo, soy un idiota, no quería cagarla pero terminé cagándola igual. Ah... Devv... Flemita, si te quedas tan callada y te enfermas cada vez que te veo, juro que comenzaré a desesperarme. 

No supe cómo reaccionar ante tales palabras. Ni cómo interpretarlas, Oh, dios mío. ¿Qué hago?

- Lo mejor será que... -prosiguió, mi corazón se aceleraba cada vez más, y sonrió de la manera más encantadora que he visto en toda mi puta vida- yo te acompañe hasta encontrarte con los de tu banda, sí, no vaya a ser que te desmayes o algo.

Sólo me limité a sonreí en aprobación.

Caminamos juntos hasta el elevador, él presionó el botón del primer piso, yo le miré extrañada por todo lo que ocurrió ayer. Me sorprendía que no se acordara de nada.

Inhalé todo el oxígeno que pude, él me miraba extrañado también por mi actitud. Cuando mis pulmones se llenaron, cerré los ojos por unos segundos y lo solté.

- Lars... ¿no recuerdas nada de anoche?

Me mantuve con los ojos cerrado por los nervios.

- Ehh... no me vas a creer pero no. Lo último que recuerdo fue haberme jalado unas dos o tres líneas de cocaína. ¿Por qué? ¿Hice algo malo?

Uy, qué no me hiciste.

- ¿Ah? ¿Tú? Uhh... no -mierda, ahora no sé mentir. ¡Justo cuando lo necesito!- solo ehh... bueno...

Continué balbuceando cosas sin sentido  hasta que me digné a abrir los ojos y me di cuenta que me estaba mirando fijamente, con esa sonrisa preciosa que me hace delirar.

- Tranquila, entiendo a que te refieres... -¡pero si no dije nada!- no te fuerces a nada. Si te sientes tan enferma, y curiosamente siempre lo haces cuando hablo contigo -puso su mano en su barbilla-. Uhmm... ¿por qué será?

¡Mierda! ¿Por qué pedimos hospedarnos en un piso tan alto? ¡Elevador, baja la puta madre que te parió!

- Ehhh... no lo sé -encogí los hombros, sonriéndole como subnormal.

Nos quedamos en silencio. Ahhh, cinco pisos más y llegamos.

- ...¿y esa chaqueta? ¿cambiaste el estilo grunge?

¡VAAMOOOS! ¡SI SE FIJÓ EN MI EL HIJO 'E PUTA! FUUUCK YEAAAH.

- Ehh, es que... hoy hacía un poco de viento, ¿lo notaste? No tenía camisas lo suficientemente abrigadoras y bueno, me puse esta chaqueta -otra sonrisa de subnormal, joder, así nunca lo voy a conquistar.

- Ah, pues... -me miró de pies a cabeza- se te ve bien.

Me dieron ganas de bailar por la emoción, me sentía como una fangirl loca en este mismo momento. ¡Lars me hizo un cumplido! Qué feliz estoy.

- Gr-gracias...

La puerta del elevador se abrió, por fin habíamos llegado, joder.

Salimos de allí, y pude divisar dos cosas. A lo lejos, estaban los de mi banda, y justo frente a nosotros estaba Kirk.

Más incómodo el momento no podía ser, sobretodo con la pregunta que hizo Lars al ver a su compañero de banda:

- ¿Qué onda? La cara de culo que tienes por dios, Kirk, ¿te violaron en el barrio bajo?

- Uy, si supieras -Kirk lanzó una mirada acusadora en mi contra y se refregó los ojos, se le notaba cansado.

- Ehhh -ambos me miraron cuando comencé a emitir sonidos sin sentido-, creo que... iré con los de mi banda -hice una risa fingida.

Salí corriendo y me fui a refugiar con el pasivo de Alan.

- ¡AALAAAN! -grité, tirándome encima de él.

- ¿Ah? ¿Qué mierda te pasa, Devvorah? 

- Nada -por fin mentí bien-, ¿llego tarde? -negaron los tres- Ay, qué bien.

- Ahora esperamos a que lleguen James y Jason, vienen en cualquier segundo.

Me dí cuenta que desde que me tiré encima de Alan, Damien no ha parado de mirarme como si no me conociera. Suspiré y le pregunté:

- ¿Se te perdió algo?

- No, sólo que creo que hay que prohibirte el alcohol y las drogas, señorita.

- ¿Por qué?

Me enseñó un periódico local en la sección de espectáculos... ¡Mi puta madre en triciclo! Había una foto de Kirk y yo saliendo de un sexshop... ¡Y el titular decía que él y yo éramos novios!

Eww.

- ¿Qué carajos pasó ahí, eh? -él no solía ser TAN sobreprotector conmigo como lo hace Alan, aunque en casos especiales como éste, la furia se le empieza a acumular y es el fin del mundo.

- Créeme que no recuerdo mucho que pasó, pero te juro que no hicimos nada malo... ni puta idea porqué fuimos a un lugar tan raro como ese, sólo recuerdo que amanecí lo más pura y santa en mi cama. Sin ningún daño.

El blacker alzó una ceja, hicimos una competencia de miradas para ver si mentía o no. Ahh, tranquila, tranquila...

- Te creo. No obstante... estás manchando tu identidad con cosas como ésta. Joder, ¡un sexshop!

- Además -interrumpió Zack, que estaba bien entretenido leyendo el artículo-, aquí dice que compraron  varios consoladores, mierda, Devvorah, si tu no usas eso... ¿para qué Kirk va a querer uno?

- Creo que ya sabemos porqué cierta persona anda caminando un poco... cojo -Alan señaló a Kirk a lo lejos, que seguía conversando con Lars, ambos caminando y mierda, me daba pena el pobre Kirk porque cojeaba y caminaba con las piernas abiertas, de la manera más obvia posible.

- Uyyy, parece que le tocó anoche -bromeó el glamer, yo me sentía avergonzada.

- Ah... ¡miren! -exclamé, señalando a quiénes eran ahora mi salvación- ¡Ya llegaron James y Jason!

Ok, eso fue demasiado hermoso. Evitar temas incómodos para ir todos a una hermosa Van de la banda y dirigirnos a un restaurante.

No era una cosa tan fina, pero tenían buena comida y una ENOORME mesa para que cupiéramos los ocho.

Ah, estoy muy agradecida porque, para ser mi primera resaca. Sólo me duele la cabeza ahora, me refiero a que esperaba a estar como mis compañeros que suelen amanecer todos enfermos por lo general. No me puse a vomitar como esperaba... tal vez sí debí hacerlo, mientras andaba drogada o qué sé yo... no quiero recordar -o imaginar en este caso- lo que ocurrió mientras estuve bajo el efecto de las drogas y el alcohol.

Todos ahí, almorzando de lo más bien. Teniendo una agradable conversación sobre nada interesante a mi parecer, pero bueno, no se tomaba ningún tema incómodo, por tanto, nada malo pasa.

Hoy como a las ocho nos vamos en el Jet para otra ciudad, por tanto, luego de esta junta, quedamos libres para hacer lo que sea.

Preferí quedarme con los de mi banda, echando una vuelta por la ciudad a ver si nos encontrábamos algo bueno como un recuerdito o no sé.

Milagrosamente, la pulga de Zack no anduvo hinchándonos las pelotas como siempre, estuvo todo el rato calladito, leyendo el periódico ese en dónde estaba el reportaje de yo y... Eww.

Incluso, estuvo tan pero tan concentrado leyendo, que si no fuera por su hermano sobreprotector, de más que se lo robaba un pedófilo que lo confundiría con una niña prostituta -sí, Zack ahora usa extensiones todos los días, eww-.

- Devvorah... he estado pensando con mucha sabiduría algo.

- ¿Qué cosa, Zack?

- Creo que Gary está detrás de todo ésto de las fotos... -sí, el reportaje tenía más de una foto. Eran VARIAS.

- ¿Cuál Gary? -me hice la tonta, recordando el incidente de la cámara.

- El de Exodus, creo que él fue quién tomó las fotos.

- ¿Por qué lo dices?

- Mira -señaló a un costado de las fotografías, había un pie de foto que daba créditos a una fotógrafa llamada Nayara Holt, quién envió las fotos al periódico y posiblemente haya dado con toda la mierda que estaba escrita- no sólo eso de que tengan el mismo apellido, es como si tuviera la intención de arruinarte, me refiero, a que en la noticia habla muy bien de Metallica y de nosotros como banda, sin embargo, a ti pareciera como si te denigraran... se me hace sospechoso.

Y vaya que sospechaba bien, ese pequeño detalle no lo noté, cuando lo hice, de inmediato sospeché de un nombre falso que podría haber dado Gary para redactar una noticia falsa con las fotos.

- ¿Qué mierda hablas, pulga? -regañó su hermano mayor- No creo que Gary tenga que ver con ésto, sólo coinciden en el apellido. Cualquier persona puede apellidarse así. Aparte... ¿por qué él tendría que estar en contra de Devvorah?

- ¿Pero no es sospechoso? -Alan y Damien negaron, yo hundí los hombros, haciéndome la desinformada- Ah, bueno, entonces me voy a la mierda -arrojó el periódico a la mierda.

Ya cuando terminamos nuestro recorrido por la ciudad, visitando lugares MUY interesantes. Decidimos volver al hotel, quedaba una hora apróximadamente para irnos.

Como yo soy MUY puntual, los obligué a que también se alistaran conmigo.

Ordené bien mis cosas, ya saben, con lo enojada y frustrada que estaba luego de discutir con Kirk, no tuve tiempo de ordenar la ropa sucia que quedó tirada sobre el suelo.

Ok, ya cuando era el momento de ir para que nos fuéramos en el Jet, ocurrió un "pequeño" problema.

Estando a apenas unos metros del lugar para irnos, me distraje mirando a Lars que estaba cerca, los de mi banda se me adelantaron, no noté que cerca mío, además, estaba Kirk casi atrás... ambos nos miramos por un segundo, incómodos...

¡Mierda! ¿Y de dónde salieron éstos? Una montonera de paparazzis se nos tiraron encima con miles de preguntas, fotos y otras cosas.

Comencé a desesperarme porque no sabía qué hacer ni qué decir, lo malo es que los dos nos encontrábamos en la misma situación.

Sólo ignorábamos la presencia de estos idiotas, entre nosotros tampoco nos dirigíamos la mirada ni la palabra. Tal cual no nos conociéramos.

Lo más incómodo, creo yo, era soportar preguntas imbéciles de ellos que creen de que tenemos una relación. Preguntaban cosas que como manejábamos todo, que como podíamos "estar juntos" por la diferencia de edad entre otras mierdas...

¡Nuestro héroe ha llegado! ¿Adivinen quién? Sí, ¡era Lars! Me mega emocioné cuando lo vi golpeando periodistas y aclarándoles que no existe ningún tipo de relación amorosa... ni idea de dónde él habrá salido también, es decir... ¡qué raro todo!

Me daba tanta vergüenza que logré escaparme y llegar con mis compañeros hasta el Jet, subirme, tomar asiento y abrir la ventana a fondo para no ahogarme.

Ya cuando estábamos a mitad de vuelo, me dio un susto tremendo cuando entre dos o más personas me taparon los ojos y la boca, a su vez que me tiraron del brazo y meterme en no sé qué lugar.

Cuando pude estar en la normalidad, noté que Kirk y Lars se encerraron conmigo en el baño... ¿qué mierda me van a hacer?

- Tranquila, no te vamos a hacer nada -uh, seguro Lars demás que notó mi cara de "me cago hasta por las patas del susto"-, sólo... vamos a conversar en privados los tres, ¿sí? -asentí, demasiado incómoda era la situación.

- Pues... -murmuró Kirk, ya casi susurrando- ehh... Devvorah, me gustaría disculparme, por TODO lo que ocurrió, te juro que nunca me hubiera imaginado que... ya sabes. Bueno, eso, por favor, perdóname, te lo juro por... ¡por todo! que nunca más pienso en darte droga de nuevo, en serio, nunca te haría algo ni dejaría que me hicieras algo como lo que pasó estando sobrio. Por favor, en serio, perdóname -me puso ojos de cachorrito, así bien tierno. Se notaba que de verdad estaba arrepentido.

- Ahh... bueno, te perdono -dije-, pero, el asunto de la cámara...

- Ehh... te juro que eso no es una cámara, por favor, olvida eso, te lo juro, no pasa nada malo con eso. Es solo un peluche, y si es que fuera una cámara, nunca la encendería para grabar ESO.

- Ok, ok, te creo -sonreí con nerviosismo.

Nos quedamos en silencio, ambos miramos a Lars... esperen... ¡¿él sabe lo que pasó?!

- Devvorah, tranquila, yo no diré nada -comentó Lars, por fin sentí que respiraba-, solo estoy aquí porque sé que si no lo acompaño, no se atrevería a pedirte disculpas... no más yo soy un adorno, no me tomen en cuenta, eh... ¿y si es mejor hacer como si nada pasó y todos amigos de nuevo? -con timidez, ambos asentimos- ¡Abraazoo! -nos apretujó a los dos, en mi caso, dejé de respirar al instante, sonrojada como nunca... oh, ¿por qué a mi?

Ok, luego de toda esta mierda... ¡ha sido uno de los días más horribles de mi vida! Nunca he tenido más miedo que hoy, ahhh, créanme que sigo convencida por lo de la cámara en el peluche, en serio.

Para colmo, ¿por qué mierdas Kirk le contó a Lars? ¡Ahora él va a pensar que soy una pervertida! Oh, más encima con lo que Lars y yo hicimos... él no sabe nada, mierda, tengo miedo. ¡DEMASIADO!

Primer concierto, ya pasó de todo. Se viene el segundo concierto... ¿qué mierdas va a pasar AHORA?