Hoy fue mi primera vez.

Primer concierto, en mi primera gira, dónde asistí a mi primera fiesta, tuve mi primera borrachera. Violé por primera vez a alguien y me drogué por primera vez, entre otras cosas locas más.

Sí, todo en UNA sola noche.

Eran cerca de las ocho de la noche. Primer concierto de The Candy Factory. Escogimos un par de nuestras canciones y el resto algunas canciones de Metallica que no tocarían ellos en el concierto.

Como podrían adivinar... sobria al cien por ciento se me iba a hacer imposible presentarme frente a miles de personas.

Botellita de medio litro de cerveza pa'dentro, unos buenos dulces con mucho azúcar para aumentar inducirme a la hiperactividad -ok, no tanto, pero al menos no ando tan tímida-... sobre el escenario me puse como toda una Sebastian Bach o un Kurt Cobain drogado.

El punto es que logré sacar la personalidad suficiente lograr motivar al público, cantar como nunca lo he hecho en mi vida...

Uy, fue muy bueno. El público estuvo de puta madre. 

Por cierto, en ningún momento le deseamos feliz cumpleaños a Alan, ni siquiera lo saludamos. De hecho, hasta lo ignoramos. ¿Las razones?

Queremos que sea una sorpresa así como lo hacen en las películas y porque es gracioso cuando éste anda lloriqueando como pasiva que es.

Al terminar, los chicos de Metallica nos felicitaron. Y, como ya se hizo costumbre, mi corazón se aceleró cuando oí a Lars decirme...

- Estuviste fantástica, ehh... Flemita -sonreí como estúpida al recordar el día en que me puso ese apodo-, veo que ya vas controlando eso de los nervios, ¿no? -asentí, nos quedamos en silencio por un rato-... oh, parece que lo callada no te lo quita nadie.

- ¡Ayy! Lo siento -los bloqueos estúpidos no me los quita nadie, al igual que mi cara de babosa-, no quería...

- No importa -sonrió, oh dios mío, ¡me va a mataar!-, aunque debo admitir que hablo demasiado, ¿lo crees tú así? -negué- ¿Ah? ¿En serio? Todos me piden que cierre mi puta boca de una vez. ¿Te gusta oírme hablar? -asentí, sonrojándome mucho- Aww, qué tierna tú... -me tiró los cachetes y se emocionó- ¡Oww, eres cachetona!

- Uhh... sí, un poquito no más... -sonrió y me soltó.

- ¡Lars! -gritó James desde otro lugar- ¿Dónde mierda estás? ¿Acaso no escuchas la música de Ectacy of Gold? ¡Ven para acá, idiota!

 - ... -Lars rodó los ojos y luego me miró sonriendo súper lindo- de ahí hablamos en la fiesta, ¿sí? -asentí muy emocionada- Ok, nos vemos...

Él se fue y suspiré enamorada.

Alan me miró feo.

¡El pasivo éste andaba detrás de mi escuchando la conversación todo el rato!

- No sé qué es lo que te traigas ahora entre manos, Devvorah, pero no me está gustando.

- Te va a gustar, créeme -sonreí de oreja a oreja, continuó viéndome feo-... ¿tu hermano aún no te dice?

- ¿Qué cosa?

- Anda dónde él, pregúntale qué pasó de su vida y te lo contará todo, ¿sí?

Dejó de mirarme con esa cara ridícula y sonrió.

- Vale.

Mantener alejado a Alan con su hermano toca pelotas. LISTO.

¿Ahora? A comenzar a hacer la fiesta con ayuda de Damien.

Salimos hasta llegar al lugar en dónde haremos la fiesta, no es un lugar taaan privilegiado pero agarramos la sala de eventos del hotel y bueno, al menos nos dejan emborracharnos hasta morir (a ellos, no a mi)... el blacker éste y yo nos pusimos a decorar en tiempo récord con las mierdas que compró Jason.

Dejamos las cosas ahí y regresamos al lugar del concierto para buscar las otras cosas que nos quedaron -comida, alcohol, ya saben-... regresamos a tiempo JUSTO para ver a Metallica en el backstage, semi desnudos y terminando de vestirse.

Mierda, no... ¡Diosito me va a castigar por pensar cosas impuras! iré al infierno si... ¡Ay madre santa mía, pero qué buenote está Lars!

Me di una cachetada por pensar eso.

Todo iba bien hasta que...

El rumor. El rumor de las duchas. 

Era cierto.

Algo que nunca mencioné, es que por mucho tiempo oí... rumores. Sobre los conciertos de Metallica.

En los cuales sacan a fans del público, para bañarse con ellas después.

Mujerzuelas mucho más bonitas que yo.

... vayan a saber qué mierdas harán allí en las duchas.

Cuando llegué, ellos se estaban despidiendo de ellas; dándoles autógrafos y cosas de ese tipo.

Me dieron ganas de arrancar cabezas por la manera cariñosa en que MI Lars se estaba dirigiendo a esas zorras.

Vale, son fans, no hacen nada malo... ¡Excepto bañarse con MI hombre! 

Ok, ya estoy exagerando con mis celos, Lars no es mi hombre, es sólo mi amigo, o tal vez menos... ¡pero es que me muero de envidia por esas tipas!

Todo mi buen ánimo desapareció, me sentía como una tonta. Porque físicamente no soy nada comparada a aquellas mujerzuelas.

A diferencia de mi, que me quedé en el marco de la puerta muy deprimida, Damien entró de la nada y todas las chicas se espantaron con su cara.

Está bien tener amigos feos, pero no mamen.

- Necesitamos su ayuda, chicos -habló, ignorando a las chicas que seguían horrizadas, huyendo de ahí-, en llevar las cosas... ustedes saben, Devvorah y yo... ¿Flema? -volteó a mirar por todas partes, yo seguía dolida y oculta en el marco de la puerta- ¿A dónde te metiste, niña Magnética?

- L-lo siento... -caminé con lentitud hacia ellos, cabizbaja. Además fingí bostezar para que no creyeran que me sentía mal- tengo un poco de sueño y ando media distraída... -otro bostezo.

Al parecer nadie le tomó importancia eso, dejaron que Damien continuara hablando.

- Bueno... ¿vamos o no? -asintieron.

Lo más natural que ellos podrían hacer, sería... dejarme pasar primero, De hecho siempre hacen eso. Ahora no, como que se olvidaron de mi presencia.

Caminé con lentitud detrás de ellos.

Hasta que me aburrí.

Los dejé a mitad de camino al hotel y emprendí rumbo a un lugar que ni yo sé cuál era. Sólo tenía claro una cosa: que soy una tarada al si quiera haber fantaseado una vez con que Lars pudiera sentir algo por mi, digo... ¡Es mayor que yo por doce años! Aparte de que es pedofilia, tiene como a mil tipas detrás suya mil veces más bonitas que yo.

Ya ando con la edad del pavo de nuevo, jodeer...

Choqué con alguien y...

- Oh, Devvorah, qué coincidencia que andes por aquí -puto Alan, cuando más reflexiva estoy se viene a joderme, sólo porque estaba de cumpleaños no reclamé nada.

- Salí a tomar aire -le di un abrazo y me quedé acurrucada en su pecho-, ¿algún problema? -él negó.

- Flema -interrumpió Zack-, ¿los chicos ya están listos?

Hice un facepalm, éste siempre la caga.

- Sí, ya terminaron el concierto, creo que van llegando al hotel... ¿les parece si damos unas vueltas antes de encontrarnos con ellos?

- ¡Yo digo que siii! -Zack me abrazó a mi y a su hermano.

- No sé el porqué de ese gusto, Devvorah, por siempre ver a los chicos de Metallica.

Recordé lo que pasó hace momentos atrás y volví a deprimirme.

- Pero vamos -sonrió y yo forcé una también.

Dimos un par de vueltas por la ciudad.

- Oigan... -dijo el cumpleañero en medio del "tour"- ¿y Damien? 

- Dijo que estaba cansado después del concierto y fue a echarse para una siesta -dije súper rápido sin que casi se me entendiera.

- Ahh... bueno -encogió los hombros y seguimos caminando.

Ya en cosa de media hora más tarde, ya siendo más o menos las doce exactamente... regresamos al hotel. 

Yo me les adelanté un poco para preguntar si ya estaba todo listo... y vaya que estaba muy bien hecho el lugar para la ocasión.

Sorprendimos al thrasher este cantándole la del cumpleaños feliz. Hicimos que mordiera el pastel a fondo -enterrándole la cara en éste-... aprovechamos de tomarle una fotografía muy buena.

La cosa no podía ponerse peor cuando trajeron a un montón de mujerzuelas a bailar aquí a la sala de eventos... Bandas de Thrash Metal sonando, género musical que no me gusta.

Todos bebiendo alcohol y riéndose de la vida, conversando/ligando con esas chicas. Y hablo especifícamente de Lars, que he notado que se pone re borracho con facilidad; se vuelve más idiota de lo normal y amoroso de manera que asusta.

Pero claaro, amoroso con TODOS y TODAS menos yo.

 Opté por alejarme de todos. Como ya andaban todas embriagándose y ligando... yo me quedé sentada en un rincón, bebiendo para pasar las penas.

Y era como torturarme más, porque cada sorbo de alcohol se me hacía de lo más asqueroso, sin embargo, por algún bizarro motivo: no podía parar de beber.

- Oye -dijo alguien, alcé la vista y era... creo que era Jason, no podía ver bien, tenía su rostro desfigurado-... tienes todo el maquillaje corrido, ¿pasó algo?

- ¿Ehh...? ¿Yoo...? ¡Cómo she te ocurre, putaaa! -solté una risa sarcástica- Ai em fain, and yu?

- Bien, aunque los chicos siempre me dejan de lado... ¿no te pasa lo mismo?

- ¡Esa puta de allá no me amaaa! -grité, señalando a Lars pero como lo veía en todas partes, ni modo, acabé señalando todo el lugar.

- ... ¿eres lesbiana? No lo sabía -me quitó la cerveza y dio un sorbo- Creo que estás un poquito ebria.

- ¡Ebria mis cojones, Niuquid!

- ... -hizo un puchero- Solo Amo James puede llamarme así.

- ¡La puta esa es bien golosaaa! -continué gritando.

- ¿Quién? No te ofendas, pero te veo y juraría que estabas llorando.

- No lloro, sudo por los ojos, Gaysonn... -sonreí de forma cínica, soltando más lágrimas.

- Oh, bueno... ¿te rompieron el corazón? -asentí- ¿Quién?

- Una putaaa que parece vieja, cara de vieja, cabello de vieja, viste como modelo y tiene un culo enoormeee...

- Wow, de verdad no esperaba que salieras del clóset de esa forma, aunque es bueno, significa que no vas a permitir que los hombres se líen contigo ahora... seguro te descuidas y te violan.

- ¡No si yo me violo a la puuutaaa!

- ¿Está ella aquí?

- ¡En todas parteess!

- Oh, bueno, ¿y si vamos y  te lías a otra?

- ¡O es mi puta, o no es nadie!

- Ah... ¿vamos a vengarnos de James meando en su cerveza? -asentí.

Me levanté del suelo y lo seguí... Jason se robó un vaso que contenía... no sé que mierda tenía adentro. Jason y yo salimos de allí, estando tomados de la mano. Pero no mal piensen, ehh... ¡No podíamos ni caminar bien los dos! Uno se tambaleaba y el otro era el soporte, luego era al revés.

Llegamos hasta un baño público que tenía el hotel, no importó que Jason y yo fuéramos al mismo baño. Los otros tipos miraban ahí todos babosos, pero da igual.

- Toma -me entregó el vaso-, tu mea ahí y luego me lo entregas pa' mear también.

- No quero meear... quero a mi puta -me frunció el ceño.

- Aunque sea escúpelo pa' que el Amo James se enoje.

- Ah, weno...

Hice que toda la flema que tenía acumulada en mi garganta subiera y la escupí adentro del vaso.

- Bakán -dijo, levantando el pulgar- ahora mi turno.

Y con eso se bajó los pantalones para mear adentro del recipiente plástico.

Regresamos a la fiesta y...

- ¿Y a'onde se fueron a foshar éstos? -supe que ese era Zack por toda la tinta que le chorreaba de la boca.

- Fuimos a mear a un vaso -contesté-, ¿te apetece?

- ¡Uyy! Qué rikochet.

- No, no... -me agarró del brazo Jason- los mea'os son pa' Amo James.

Cuando por fin encontramos el rubito éste, Jason se le acercó y le entregó el vaso.

- ¡Tome mi Amo! Le ofrezco toda mi sabuduría con esta cerveza mágica del infierno.

- Cállate, Newkid -James se bebió el vaso de una y escupió totalmente asqueado- ¡Waacaalaa! ¡¡Ésto sabe a mea'os!! ¡¡NEEWKIDDD TE VOY A AZOTAR POR ESTA WEA!

- Ayy, Flema Magnética, ¡ayúdame! -gritó de manera chillona mientras corría por todo el lugar.

Yo sólo me quedé con cara de culo mirando la pelea que se formaba entre estos dos.

Me dirigí hasta Alan y lo abracé como nunca antes.

- Uuuyy putita -como no alcanzaba a darle un beso en la mejilla, se lo dí en el pecho-, veintiséis, jo'er, todavía me acuerdo cuando te cambiado los pañales...

- Pero si sho soy mashor... -no sé quién de los dos tenía más cara de culo ahora.

- Calla, y 'éjame darte amorshh... ¿no ves que la puta me rompió el corazón?

- ¿Cuál puta?

- La que te la metió en el taxi.

- ¿No que ese era Maxi?

- ¡Uyyy, y todavía te acuerdas, ehh, puto!

- ¡Aleeerta roja! -comenzaron a gritar Kirk y Damien a diferentes tiempos- ¡Enano cashondoo al ataquee!

- ¡Cashondas mis pelotas, negrata! -resopló Lars, mierda, ¡era al verdadero! que estaba tirado en el piso, con la camisa abierta y en una pose de calentario... sí, CALENTArio.

- ¡Aiish, mi puta que cashonda es! -exclamé soltando a Alan.

- ¡LA FLEMA HACE UN RATO SALIÓ DEL CLOOOOOSET! -gritó Jason- ¡LE GUSTA LA CONCHIIITAA!

- ¡La vidaaa es un sueñoo! -cantaba Damien, también tirado en el piso, sólo que éste se había ido de culo hace un rato atrás- ¡LAAH BIDAH ME HODIAAAHH! ¡Bibah satán!

- Ayyy, negra -dijo Lars acercándose a Kirk- con ese culo, te juro que te parto al medio.

- ¡Queee no zoyy negraa! -Kirk le dio una cachetada a Lars.

- Aiish, ando cashondo jeje -Lars se estiró y caminó hasta la puerta, se detuvo a mirarnos- si alguna cashonda como sho quere cosa sucias, que me siga jeje.

 Él se fue y yo iba por detrás de él hasta que la pasiva de Alan me jode la onda.

- Devvorahh, ¿pa'onde te vas?

- Voy a darle el besito de las wenas noches a mi putita preferida y a contarle cuentos pa' que se duerma -reí como tonta.

- ¡Pero si estás siguiendo al enano con cara de vieja! ¿Te lo vas a foshar?

- ¡Besito de las buenas noches, dije! ... -me quedé en silencio, luego proseguí- voy pa' ver que no se muera, no má' si no le voy a hacer nada, anda medio drogado parece y voy a ver si anda bien. Eso solamente... sha vuelvo -guiñé el ojo y me fui.

Corrí como puta hasta llegar al elevador, metí la mano antes de que se cerrara y entré para quedar al lado de Lars.

- ¿Me vas a acompañar? -me di cuenta de que tenía algo blanco que le caía de la nariz, creo que era harina.

- Sipi, mai lof -guiñé el ojo.

Cuando llegamos, no le permití cerrar la puerta. Le di un abrazo de oso, así como que ya ni respiraba.

- Te quiero dar, puta -susurré con una sonrisa de oreja a oreja.

- Oshe no, es alrevés, osea, ubícate, ehh... -ambos nos separamos, él me miraba a los ojos sin decir nada, totalmente atontado- ¿quién eres?

Esperen... ¿me quiere follar y no sabe quién soy?

Tengo dos opciones: correr y esperar a un día para confesar mi amor como persona civilizada que soy... O, un rapidín por aquí y me voy a la mierda.

Nos miramos los dos con cara de culo y sin saber qué hacer.

...

Cuando por fin logré razonar un poco más, noté que ya estaba desnuda, sin la peluca y con la puerta de la habitación abierta.

- ¿Qué mierda pasó, Lars? -boztecé, no me dijo nada- oshe, puta, respon...

- ZzzZZZzzzz -lo miré y se había quedado dormido al lado mío.

¡Mieeerda! ¡Violé a Lars!

Me levanté de la cama y fui buscando mi ropa, estando a medio vestir, escuché a Jason asomarse por la puerta:

- James, mira, Lars se tiró a una tipa que viste y maquilla igual que Devvorah, ¿se tiró a Devvorah?

Me dieron ganas de tirarme por la ventana ahora mismo.

- Newkid idiota, anda acostarte, yu ar drunkk... -James sólo pasó de largo.

Suspiré en alivio, me puse la peluca de cualquier forma y ya estando de nuevo con ropa, salí de allí, di un portazo y corrí hasta llegar al elevador, dónde choqué con Kirk.

- Ay, perdón, mija, no la vi.

- Negrata, creo que violé a alguien que no me ama -dije de la manera más seria que pude.

- Uy, pero que mal, yo te tengo un pequeño secretito... pero shh, es secreto.

- Ok, cuénteme, puta.

- Vamos a mi habitación y ahí te digo, darling...

Él cargaba varias bolsas, una con harina y otra con lechuga. ¿Para qué carajo va a usar harina y lechuga?

Cerró la puerta con seguro y me dijo...

- Oí que eras lesbiana así que te presto a mi novia.

- No, o es mi puta, o no es nada.

- Shh, nadie rechaza a María Juana de mis amores.

- ¿Y a'ónde e'tá? -señaló una de las bolsas- ¿Tú novia es una lushuga?

- Y ésta otra es mi amante, señorita Cocaína de mis amores también, pero ésta es mía y de Lars, pero shhhhh. Secreto, ¿sí?

- ¿Y pa' qué quero leshuga yo?

- Gayson me contó que andas... ay darling, me contaron que te rompieron el kokoro.

- ¿Y que shusha es un cocoro?

- Algo magic, así bien jarcors... -sonrió- deja de shorar mija, y ríe conmigo y mi novia.

- ¿La leshuga?

- Sí, mija, está que aardee...

- AH, weno, ya que insistes...

Me entregó un trozo de lechuga envuelto en papel.

- ¿Y esta cosa lushugosa?

- Fúmatela, plis.

Me entregó un encendedor y lo miré sin saber qué hacer.

- Enciendes esa parte y te lo fumas.

- ¿Cómo mierdas se fuma?

- Inhala, exhala.

- Ah, ¿igual que respirar? -asentió- Ah, weno...

Le di una primera jalada y comencé a atragantarme, tocí atragantándome por mucho rato. Hasta que comencé a reír como tarada.

Otra jalada y ocurrió lo  mismo.

Hasta que dejé de atragantarme y sólo me cagaba de la risa.

Cuando terminé de fumárme el papel con lechuga, tenía la vista aún más borrosa. Todo se movía y todavía riendo, noté que Kirk tenía harina que le caía desde la nariz hasta toda su camiseta.

- Ayy, darlingg... me diste penita, mija, a ver... le presento a señorita Cocaína, mi amante, se la presto por su mal de amores.

- Ay, graciah' mijito... ¿qué se hace con la harina?

- Jala pa'entro.

- Uyy, que rikolino.

Señaló una mesa que tenía varias líneas de harina puestas, me arrodillé para aspirar un poquito.

Uy, los ojos se me abrieron como plato y me puse hiperactiva. No veía nada, osea, lo veía todo menos lo real. Miles de luces, a Kirk más negro, a Lars por todas partes.

- ¡Mierda, lo violé! -grité- ¡Violé a mi putaa!

- ¿Quién es tu puta?

- ¡Lo violeeee! -continué gritando.

Hasta que no recuerdo nada más de lo que pasó.

Dejé de tener el control completo de mi cuerpo y no recuerdo absolutamente nada de lo que ocurrió el resto de la noche.