Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 16: Los caguais tipos de MEGADÉ.

Apenas los de mi banda se enteraron después de desayunar de la visita de Megadeth, fue la siguiente:

 Alan se mega emocionó porque es una banda trach merol que escucha. A Damien no le tomó importancia y tenía mejores cosas qué hacer. Mientras que Zack... pareciera que le dio un ataque de pánico.

Ya estábamos terminando de pagar en la sala de servicio al cliente del hotel, cuando Zack se metió adentro del basurero, no sin antes gritar:

- ¡Avísenme cuando se vayan y se acabe el pleito!

- ¿Qué carajo? -su hermano mayor abrió el basurero y lo cogió del cuello de su camiseta- ¿De qué pleito hablas?

- Metallica  y Megadeth se llevan mal...

- Ah, bueno, si hay pleito, yo me meto -comentó súper orgulloso.

- Si, si, claro -rodé los ojos-. Para sólo al final apalear a Lars.

- OHHHH, TE LA METIEROOON -replicó el hermano menor.

- Bueno, sí, pero termino en la pelea igual -intentó atemorizarme con sus enormes ojos café mierda, trataba de no reírme.

- En la pelea, haciendo el ridículo.

- OHHHH -gritaron ahora Zack, Damien y Pam.

- Cuando venga de visita Megadeth, prometo que será distinto.

- ¡¿MEGADETH?! -gritó Kirk alarmado, que estaba a unos metros de distancia nuestro- A la mierda, ¡ZAACK, HAZME UN ESPACIO AHÍ, MARICA!

Y con eso, el nigga se mete adentro del basurero también.

- ¿Estarán allí todo el santo día? -los dos me asintieron- Oh, bueno, al menos si éste se queda oculto, al tal Dave Mustaine no le va a dar por querer armar pleito. ¿No es así?

- Kirk, ¿no te molesta quedarte con mi hermano allí todo el día? -Alan le miró asqueado.

- Mientras no me viole, todo estará bien.

Parece que lo dejé traumado al pobre cuando le di por detrás.

LOL.

- ... espera, ¿a qué hora vienen? -continuó la pasiva.

- ¿Qué hora es? Venían al medio día.

- Son la una y media, Flema -contestó Damien mirando la hora en un reloj colgado en la pared del lugar.

- ¡Mierda! ¡Ya llegaron! -chillaron los dos que estaban adentro del basurero  unísono, el glamer tomó la tapa del basurero y ambos se cubrieron con ésta.

- ¿Qué? -me alarmé- ¡Y ni me he puesto bien el maquillaje! ¡La puta madre! ¡Pam, acompáñame a arreglarme! Ustedes dos vayan por mientras a saludar o lo que les dé la puta gana.

Una vez en nuestra habitación...

- ¿Por qué te alarmas tanto? -consultó Pam, extrañada por mi desesperación por querer que el delineador se seque rápido- ¿Así te pusiste cuando ibas a conocer a los de Metallica? -asentí- Bueno, a ver quién de las dos agarra suerte y se lía a uno, ¿no es eso lo que insinuas con tanta preocupación en el tema?

- EWWW, no. A mi ya me gusta alguien más, puede que los de Megadeth sean los mayores Adonis que existan pero mi amor va para un solo hombre en la existencia del universo.

- ¿Alan?

- ¡EWWW! ¿Qué mierda? ¡NO!

- Ah, bueno... ¿cómo se llamaban para no quedar como posser y decir que es mi banda favorita EVER?

Pinche Pam.

- Se llaman Megadé, Mecagué, no sé... sólo sé que el pelirrojo se llama Dave Mustaine, los otros ni idea, Lars me habló sobre ellos pero ya lo olvidé.

En realidad, si lo sabía todo. Recuerdo a la perfección cada una de las palabras pronunciadas por los muy finos labios de Lars. El problema era que no sé cómo luce físicamente, excepto por Dave que lo he visto en una que otra foto.

Ya al finalizar, hemos bajado a recepción, si, estaban todos los de Metallica -excepto por Kirk, mierda, creo que el tipo hablaba en serio con quedarse en el basurero con Zack- y de mi banda sólo estaba Alan.

Los saludamos a todos y la pasiva nos presentó a la banda, que iba en compañía de una chica, que se veía de mi edad o incluso, un poco menos.

- Bueno, chicos -me señala-, ella es Devvorah, vocalista de mi banda y ella -la señala- es Pamela, amiga de la banda.

- Un gusto, señoritas -ah, bien formal es este Dave, aunque la chica que iba abrazada a él, nos miró con desprecio, sobretodo a Pam- Yo soy Dave Mustaine, él es Junior Ellefson -señaló a uno medio rubio con nariz bien caguai, quien nos sonrió a las dos, saludando gestualmente además-, ese otro es Marty -uno de cabello rizado PERFECTO, él se veía más frío y serio, hizo lo que pareció una sonrisa- y por último, él es Nick -otro de cabello negro liso y con barba, éste sonrió, a diferencia de Junior que lo hizo bien animoso, esta sonrisa era mas... ¿sugestiva?

Creo que Larsito tenía razón, me siento como un pobre corderito. 

Agradezco que Pam sea más bonita y puta que yo.

Y como que con ese simple gesto de Nick, que tal vez no haya significado nada, desató a dos seres del infierno:

A PasivAlan y Larzilla.

Entre los dos me abrazaron por los hombros y cuando notaron que chocaban ambos, se miraron con odio. Lars me soltó y con mucha cordialidad le dijo:

- Abrázala tú, que eres de su banda.

- No, abrázala tú, que eres su favorito en Metallica.

Ahí los de Metallica, Pam y yo en plan: Ayy, ya comenzaron con las mierdas mamonas.

Al final, Alan me abrazó por los hombros y Lars por la cintura.

AY COÑO, ALAN SUÉLTAME MARICÓN, QUE LARS ABRAZA MEJOR. 

UZEEEAH.

- Y yo soy Fernanda -interrumpió la chica-, agradezco lo muy considerado que es  MI novio Dave en presentarme.

- Lo siento,  cariño -besó su frente-. Pensé que querías presentarte tú solita -le dio otra beso y la chica sonrió.

Esperen, detengan motores, plz, paren la máquina, plz. ¡QUE PARE LA IMPRENTA, PLZ! Esa tal Fernanda se ve hasta menor que yo y está de novia con Mustaine, que tiene treinta... ¡¡PEDOFILIAAAAA!!

- Venimos de visita -continuó Dave-, nos quedaríamos hasta tarde pero... todos tenemos algo que hacer, creo yo.

- Yo tengo que ir a ver el asunto de unos instrumentos -comentó Junior.

- Te acompañamos -contestó James-. Los de Metallica y yo. Si es que no te molesta.

- Claro que no es un problema, vengan si quieren -sonrió, ay, que tiernis es el tipo.

- Yo también voy -agregó Alan.

- No pos yo también voy si van todos -sonrió Pam como drogada, Fernanda sonrió también de forma malvada.

Y por su cara era como "YEAAH UNA PUTA MENOS". Sí, se le nota en la cara que es posesiva con su novio.

- Yo... -murmuré- mejor me quedo -fue lo primero que dije sin pensar, ahhh, Devvorah idiota.

- Yo también me quedo -miré a Lars asombrada.

Por primera vez en mi vida, me he asustado DE VERDAD con una mirada asesina de Alan.

- Sí, me voy a quedar, no me apetece ver más instrumentos del que veo diariamente -se excusó.

- Bueno... nosotros vamos a estar aquí -agregó Fer-. Mi maruchan y yo, al menos. No tenemos nada que hacer hoy.

- Yo también voy a salir -interrumpió Marty-. Pero voy a otro lado, más tarde y prefiero ir solo, 

- No pos, yo me quedo también porque estoy aburrido y no tengo nah' que hacer -Nick se encogió de hombros.

- Entonces los que quedamos podemos salir a algún lado juntos, ¿les parece? -propuso Dave.

- Por mi está bien -Lars me soltó, Alan hizo lo mismo, todavía mirándolo con odio-, ¿y ustedes qué opinan?

- Ehh... está bien -dije casi en un susurro.

Los demás que se quedaban aceptaron.

- Entonces -interfirió Junior-, para Devvorah que se queda y recién la vengo conociendo, fue un gusto conocerte -se arrodilló frente a mi y besó mi mano, no pude evitar sonrojarme y reír un poco- A ver si hay otra ocasión y podemos hablar más.

- Claro-

LOS DOS SERES DEL INFIERNO ME MATAN CON LA MIRADA.

Nos despedimos de los que se iban, y...

- ¿Les parece ir a comer a algún restaurant de esos que sirven pura comida chatarra? Se me antoja algo así -otra buena sugerencia de Mustaine, todos aceptamos.

En el lugar, los asientos eran bien grandes, cabían tres personas por cada uno. Habían dos asientos y la mesa.

Entonces, íbamos sentados así: en un asiento Lars, yo y Marty. En el otro: Dave, Fernanda y Nick.

Después de hacer nuestras órdenes, en dónde todos pedimos lo mismo -papas fritas, pollo asado y un huevo revuelto, ay, que suculento, beibi-, no más fue algo vergonzoso ser la única que prefiere beber bebida normal, me refiero a una coca-cola sobre una cerveza.

- ¿No bebes alcohol? -negué, un poco avergonzada, siempre que lo hago, estupideces pasan- Wow, Lars, vaya novia rara que tienes.

Como que los dos nos atragantamos al mismo tiempo con nuestra propia saliva cuando dijo eso.

- ¿Ah? ¿Qué? No, Dave, te confundes, ella no es mi novia.

Aún, beibi, aún no.

- Lo parecen -opinó la chica que estaba más abrazada a su novio que nunca.

- Sí, sobretodo si la andas abrazando a cada rato o cuando Marty se mueve un centímetro más cerca a Devvorah. De hecho, la tienes abrazada ahora mismo.

Mierda, eso era verdad, al pobre Marty lo teníamos sentado en la punta del asiento.

Más encima me he puesto peor que Heidi.

Y Lars forzó una risa, lo sé, soy tan psicópata que noto cuando su risa no tiene el encanto natural de siempre.

- Lo siento, Marty, ponte cómodo como gustes -se disculpó finalmente, soltándome de una vez.

- No importa, brother, estoy bien. Aparte los acompañaré un ratito no más, ya les dije que me voy a ir dentro de poco.

Vaya, el tipo era frío y tierno a la vez. 

- Oye, que lindo cabello tienes -pensé en voz alta, puta madre, ¡Devvorah, idiota!

- Domo arigato gosaimasu -respondió, por fin sonriendo. Me he puesto toda roja de nuevo.

- ¿Ah? -murmuré, sin entenderle nada.

- Marty es un obsesionado con la cultura japonesa -explicó Dave-. Espero, Marty, que cuando salgas, no vayas al local japonés que nos encontramos en el camino.

Marty "cabello perfecto" se sonrojó por cuestión de segundos y negó con la cabeza.

- Saldré por asuntos personales, nada más.

De caguai, a frío de nuevo. 

LOL, eso me gusta, no pude evitar reírme como tonta.

- ¿Cómo cuidas así tu cabello? ¿Puedo tocarlo? -mierda, me estoy poniendo como Pam, no jodan.

De hecho, hasta Lars rodó los ojos cuando dije eso.

- Adelante.

Comencé a deslizar mis dedos entremedio de los rizos más grandes y hacer giros delicados.

- No más aplico mucho cariño y toda una lista de productos japoneses para el cabello.

- Por algo lo llamamos -interceptó Fernanda- Marty "rizos definidos L'oreal Paris" Friedman.

- Sí, pero yo no uso L'oreal.

- No es por presumir -ahí todos miramos a Lars, que estaba sentado con ambos pies sobre la mesa-, pero mi cabello también es muy bonito.

Lars intentando ser arrogante, posiblemente sea el FAIL más grande de la historia. Y vaya que es adorable eso.

- No es bonito, posiblemente algún día te quedes calvo.

Que directa la novia del Mustaine, joder.

- Yo... -dejé de lado el cabello de Marty para admirar la cabellera de Lars- yo si creo que tiene bonito cabello -traté de no ponerme colorada, puta madre, siempre fallo.

- Gracias, espero no quedar calvo -ahora si rió de verdad.

No es por ser pesada con el que me gusta, sin embargo, por la gran frente que Lars tiene, algo me dice que tarde o temprano va a quedar pelon.

Puta madre.

Mierda, que se demoraron un mundo en traernos la comida. Justo cuando íbamos a comenzar a devorar -ggg, ¿entienden? Yo me "llamo" Devvorah, lels-, Marty se levanta y...

- Buen provecho, chicos, ya es hora de irme.

- ¿No vas a quedarte a comer? -Mustaine le miró extrañado.

- No, creí que lo notarían cuando dije que no quería ordenar nada.

- Ohh... buena suerte, nada de ir al Jardín Japonés, ehh.

- No prometo nada -sonrió y la sonrisa se esfumó en cosa de segundos.

Y se fue de allí...

Vaya, que agradable sujeto.

La mirada de Nick me va a matar ahora mismo, no, no es que me mire con cara de pedófilo, pero si es una mirada intensa llena de curiosidad.

¿A dónde está el Lars sobreprotector cuando lo necesito?

- Es mi idea, Devvorah, ¿o te conozco de alguna parte? -preguntó entretanto comíamos.

- Uhh... no sé -hundí los hombros-. Al menos a ti... no te conocía de ninguna parte.

- No te ofendas eh, pero me recuerdas a la que se había acostado con Kirk Hammett, la misma que anda de parranda en topless en las fuentes de plazas públicas.

Por momentos así quiero que me trague la tierra.

- ¿Qué ella hizo, qué? -Dave se atragantó con su cerveza, Fernanda lo ayudó a normalizarse.

- No, no, todo eso fue un malentendido -me defendió Lars- Ella no hizo nada malo, sin embargo una periodista anda tomando fotos e inventa cosas estúpidas para hacerla sentir mal.

- ¿Y de donde se conocen ustedes dos? -continuó Nick.

- Uff, es una historia bien loca, ¿quieren que se las cuente?

- Mejor que la cuente ella porque contigo estaríamos hasta mañana y aún no terminarías -todos menos Lars reímos con el chiste de Dave. Yo con un poquito de culpa.

- Pues... yo apenas comenzaba mi banda The Candy Factory -empecé a relatar-, fuimos a un concierto de Metallica en Texas, nuestra ciudad natal. Como era el cumpleaños de Jason, nos esforzamos en colarnos al backstage para conseguir darle un regalo de cumpleaños... conocimos a toda la banda y salió la idea de que nos fuéramos de gira con ellos, entonces, aceptamos.

- Y ahora ellos van a sacar su primer disco gracias a muah' -se señaló con orgullo, pinche Lars, se me hace bien tierno.

- Oshe que linda historia... ¿Devvorah, puedo ponerte un apodo? -dijo Fernanda, yo acepté- ¿Puedo llamarte Poyo?

- WTF, ¿ y por qué Poyo? -hice una risita imbécil.

- Es que Poyo suena mejor que Devvorah.

- Ah, bueno, adelante... ¿puedo llamarte Fer?

- Obvio, weona.

Ok, es ley. Si te dicen weona, es porque: o eres una idiota, o te consideran su amiga. Como ella dejó de mirarme con odio, y estaba sonriendo en serio, supongo que es lo último.

- Y, Dave, -interrumpió Lars-... ¿de dónde es que conoces a.... Ferñanda, Fernan... Fer?

- De un concierto también, me estaba arrojando sus calzones y el corpiño, y fue como no jodas, amor casi a primera vista cuando terminó la presentación y ella se coló sobre el escenario, con la banda pensamos en echarla abajo, como era buena gente, linda, simpática... la edad me importó una mierda, polvo por aquí y allá, luego le pedí ser mi novia.

- ... ¿edad? -Lars se sobresaltó- ¡¿Qué edad tiene?!

- Dieciséis, señor Larsito -contestó Fer-. ¿Por qué?

Lars casi se atraganta con la cerveza y los miró un poco asqueado.

- Dave, ¿qué edad tenías?

- Más que tú, obviamente.

- ¡QUÉ ALGUIEN LLAME A LA POLICÍA! ¡Pedofiiiiliaaaa!

Todos menos él y yo hicimos un facepalm.

- Si, es mucha diferencia, ¿y qué? Si Devvorah fuera tu novia no te importaría ni en lo más mínimo.

- Ella no es mi novia, la quiero mucho pero no lo es.

Ay, me desmayo, aire, joder. AHHHH.

- Admite que en  el fondo tienen algo, o al menos tú sientes algo, ¿cómo tan celoso por todo?

- Pues... mis compañeros de banda también son así -traté de evadir un poco la incomodidad del momento.

- El tal Alan sí, es comprensible eso, que los de tu banda sean así porque son como tus hermanos de sangre. Pero... ¿Lars? 

-Ehh... bueno... -Lars hizo una mueca, después se rascó la nuca, evitando el contacto conmigo- en los dos meses y medio que llevamos conociéndonos, hemos tenido bastante confianza, ¿no es así? -asentí, intentando disimular mis nervios- Es obvio, yo no quiero que ningún pervertido como los de tu banda o la mía le hagan daño, es algo como una hermanandad, ya saben, es una niña para mi todavía.

Auch, me dio justo en el clítoris ese golpe.

Me dejó en la hermanazone, supongo, aunque...

- Te apuesto a que si ella fuera mayor, demás que te la habrías liado.

El silencio reinaba de la forma más incómoda que pudo haber existido.

Lars me miró, hizo como una mueca en descontento y nerviosismo al mismo tiempo.

- Ahh, en realidad...

- ¡Vergas, miren con quién anda el rizos definidos! 

TE AMO NICK. 

Y a la vez no, digo, ¿qué pudo haber dicho Lars? La curiosidad me mata pero que bueno que existió esa interrupción.

- ¡MAAARTYYY! -gritó Dave por la ventana- ¡Aléjate de ese idiota que te vas a poner negro como él!

Para los que andan dudosos, sí, Marty y Kirk andaban juntos. ¿Qué onda con eso?

- Oye -Lars cruzó los brazos-¡Nadie le llama negro a MI negro!

Ok, eso fue demasiado gay. Más gay que su beso con Alan. Ewww.

Lueeego continuamos comiendo hasta terminar, seguimos charlando de distintos temas. Eran muy simpáticos ellos en realidad.

Regresamos al hotel y la sorpresa no fue muy grata que digamos.

- ¡MAAARTYYY! -volvió a gritar Mustaine- ¿Qué te dije de ir al local del Jardín Japonés?

- Te juro que no fuimos para allá -refiriéndose a Kirk, ambos vestidos con kimono y gorros con la cabeza de Hello Kitty. Me sorprende la calma de este tipo.

- ¿Me ves cara de idiota?

- Si te respondo, me vas a golpear, así que... ¿te dije que les compramos regalos? 

Entre los dos, se pusieron a entregarnos a cada uno, un gorro de Hello Kitty.

- Es el regalo más maricón que pudieron darnos -continuó con sus quejas Dave "Maruchan".

- Lo eligió él -señaló a Kirk-. A mi no me digan nada.

Todos hicimos un facepalm.

Con los gorros, nos vemos más machos que Zack con su pinta  glam diaria.

Y hablando del rey de roma... ¡Justo salió del basurero para regresar y...!

- ¡La tercera guerra mundial! ¡NOOOO! ¡Kirk y Mustaine! ¡AHHHH!

De ahí salió corriendo, Kirk, que se notaba que estaba cagado de miedo, retrocedía lentamente hasta salir corriendo de igual forma.

Bueno, ya sabemos a dónde se van a ir a refugiar estos dos.

- ¿Qué mierdas pasó? -puto Alan que regresaba con los demás chicos- ... ¿Por qué Marty está usando ese vestido raro? ¿Por qué ustedes usan gorros de Hello Kitty?

- Es un kimono, baka -bufó Marty, y continuó entregando gorros-. Y los gorros son un regalo que Kirku Hammettsu y yo compramos para ustedes en el Jardín Japonés.

- Qué marica -concordaron en decir la pasiva y James al mismo tiempo, con el ceño fruncido.

- No pos, ¿qué hora es? -típicas preguntas inoportunas me he dado cuenta que hace Nick.

Fer vio la hora y se alarmó.

- Ay, mierda, chicos, van llegando a la conferencia de prensa que tenían programada pa' media hora atrás.

- Bueno, entonces nos vamos despidiendo -prosiguió su novio.

Ahí nos fuimos despidiendo de Megadeth hasta que...

- Deberíamos salir más seguido con Devvorah -opinó Fer-. Me caíste bien, weona.

- Ay, tú también me caíste bien, weona -respondí algo  insegura.

- Sí, cómo yo no pude conocerla bien, deberíamos invitarla otro día para que podamos conocerla mejor -continuó Junior-. Sólo tú y nosotros.

PasivAlan y Larzilla en 3, 2, 1...

Me abrazaron igual que antes de salir, uno por los hombros y otro por la cintura.

Jodeeer.

- Claro, ¿por qué no? Si Fer también va nos la pasaremos bien -contesté, consciente que éstos dos me aniquilarían.

Alan vayan a saber porqué.

Y Lars porque dijo que no iba a dejarme sola con pervertidos.

- ¿Cuándo podría ser? -continué.

- ¿Les parece el día siguiente de cuando tu banda saque disco? -ofreció Fer, aceptamos.

Ahí volvimos a despedirnos, fuimos a buscar a los dos idiotas que -efectivamente- estaba ocultos en el tacho de la basura en el servicio al cliente del hotel.

James regañó a Kirk por usar "vestido floreados" y gastar dinero en gorros afeminados, repartimos los últimos gorros para Zack y mas tarde el restante para Damien. 

Joder, no hablé de nuevo con Lars hasta ya cuando era la hora de irnos del hotel para dirigirse al Jet de Metallica.

- ¿Puedo hablar contigo un segundo? -ya lo estaba haciendo, asentí de todas maneras- Yo... quiero pedirte disculpas por actuar de esa manera. Sé que eso te molesta, no te hagas la que no. Se te nota en la cara, ahh, creo que la he estado cagando mucho últimamente. ¿Quieres que te deje en paz de una vez? -negué- ¿Ah? Pero... ando igual que Pam, como una mierda en el zapato, ¿por qué no quieres que me separe de ti? 

- Porque... -comenzaba a sentir escaso el aire- eres un amigo al que quiero mucho. Y entiendo que quieras cuidarme.

Uy, bien, mentí de puta madre.

- ¿De verdad? Porque aveces te miro y estás media aburrida que sea sobreprotector y cosas así.

- En realidad, es más... vergüenza... -desvié la vista de sus hermosos ojos verdes hacia el suelo y poder hablar decorrido tranquila- no de ti. Sino, porque sueles actuar así frente a mucha gente y ellos piensan cosas, entonces me dan ataques de pánico, y no sé qué hacer, entonces, yo... ¡Ahh!

Cubrí mi rostro ruborizado con mis manos.

- Vale te entiendo -se acercó más a mi y besó mi frente-. No te fuerces, si te sientes enferma, como siempre te ocurre cuando me hablas... creo que es mejor que no lo hagas, deberé acostumbrarme a tu silencio de cierta forma -sonrió con dulzura.

AY CASI ME MUERO.

De todas formas, negué.

- Yo... -respiré hondo- trataré de evitar "enfermarme".

- Que así sea -extendió sus brazos hacia los lados y ambos nos abrazamos.

Falta tan poquito para junio y que salga mi disco, qué emoción.

Espero que las cosas con Lars cambien y... uf, ¿cuánto falta para que cumpla 18 y Lars deje de verme como una niña y follem... y seamos una pareja feliz por siempre?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro